viernes, 8 de agosto de 2008

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martes, 5 de agosto de 2008

Ferenixe... Solo para mayores.

“UTOPÍA”

Por: Alberto Galindo Jr.
Tomado en paráfrasis, del libro: “La Rebelión de las Masas”; de José Ortega y Gasset. Ed. Altaya 1993.
Mayo de 2010.

Dedicatoria:
- A la memoria de mi padre… Senador: † ALBERTO GALINDO, humanista, y fiel “carguero-mensajero” del pueblo; guía y luz de mi existencia; y, ejemplo de tenacidad y lucha. –

Nota:
- Soñamos, con un mundo unido: en lo ético, económico y social; en el cual reine la paz y el amor. Un mundo sin - necesidades básicas insatisfechas - ; que solo, demande equilibrio: en fraternidad, igualdad y correspondencia colaboracionista. En el cual, el “Estado”, sea únicamente emisor y administrador; planificando (en el nivel mundial, mediante la “Cibernética Inteligente”) y advirtiendo, las posibles penurias de su pueblo; con el único afán de evitarlas al máximo. Por ejemplo: obviando a lo grande, la concentración de tierras en pocas manos (y en todo.) En fin, un “Estado-nación-mundial”; cuyos representantes sean democráticamente elegidos; un pueblo, bien encarnado e interpretado; viviendo en un eterno - nosotros – ; donde el - yo – no enrede más; para así poder estar juntos; orar juntos; jugar juntos; vivir juntos, trabajar juntos: comer juntos y por que no, hasta gozar juntos. -
-
- En un fiel, acercamiento y acatamiento; “Aristotélico”. Como reza este “libro”; que en el fondo es una “lección”, comparativa, de la voluntad, de vencer y manejar nuestras vidas. Coloca a los pueblos (Naciones-estados) en el nivel de las personas, con el fin de recordar; que en el fondo… todo… es lo mismo; y que tenemos el mismo origen; idioma y pensamiento ético-filosófico. -
-
- ¡Utopía cumplida; o, revolución manifiesta!
-
- Finalmente: Un mundo en el que todo… “político”, que no cumpla, lo que prometió; al balance, de la mitad de su “período constitucional”; deba ser destituido, en forma fulminante y automática; con el fin… de llamar nuevamente a elecciones; para reemplazarlo; o, que lo sea, por su correspondiente suplente. -

¿Quién manda en el mundo?
-
- “La civilización “europea” - madre de la cultura; de la unión económica de las naciones: La – UE - ; supremo, ejemplar, juez y guía, ético-político-econo-social; digno de seguir y conocer - ; Ya, el viejo continente, ha producido automáticamente: “La Rebelión de las Masas”, que por su anverso, el solo hecho de presentarse… esta rebelión, nos mostró, desde ese instante… su cariz óptimo”. -

Se ha anunciado que: “La Rebelión de las Masas”, es una misma cosa, con el crecimiento fabuloso, que la vida humana ha experimentado, en nuestro tiempo; pero, el reverso, del mismo fenómeno, es tremebundo. Mirado, por ese haz: la “Rebelión de las Masas”, es una misma cosa, con la “desmoralización radical de la humanidad”.
- Miremos, esto, ahora, desde nuevos puntos de vista: La sustancia o, índole, de una nueva época histórica, es la resultante de variaciones internas del hombre y su espíritu; o, son – externas - formales; y, mecánicas. Entre estas últimas, la más importante, casi sin duda, es el desplazamiento del poder; pero, también es cierto, que este trae consigo, un desplazamiento del espíritu. - El hombre, ha caído, en la fatal desobediencia, del primer mandamiento, de la “Ley de Moisés”, inspirada por Dios, en el Sinaí. -
Por eso, al asomarnos (y otear) a un tiempo, con ánimo de comprenderlo; una de nuestras primeras preguntas, debe ser principalmente, esta: «¿Quién manda hoy en el mundo?» ; podrá ocurrir, que a la sazón, la humanidad, esté – aparentemente - dispersa, en varios trozos, sin comunicación – espiritual - entre sí; que forma mundos interiores; e, independientes.
En el tiempo de Milcíades: el “mundo mediterráneo”, ignoraba la existencia, del “mundo externo oriental”. En tales casos, tendríamos, que referir nuestra pregunta, a cada grupo de convivencia: «¿Quién manda hoy en el mundo?»
Pero, solo desde el Siglo XXI (el mismo, de la “Red Internet”; el de la “era” de la mente); se ha entrado, en la humanidad, todo en un proceso gigantesco de “unificación”; que en nuestros días, ha llegado a su término insuperable.

Pues, ya casi, no hay trozo de humanidad, que viva aparte – no hay islas de humanidad - . Por tanto, desde aquel… Siglo de antaño, puede decirse: que quien mandaba en el mundo, ejercía, en efecto, su influjo… autoritario, sobre todo él. Tal ha sido el papel del grupo homogéneo; formado, por los “pueblos europeos”; durante más de tres Siglos. Europa, mandaba; y, bajo su unidad de mando, el mundo vivía, con un estilo unitario; o, al menos, progresivamente unitario. Este estilo de vida, hoy, suele denominarse: «Edad Moderna» ; nombre gris, e inexpresivo, bajo el cual, ésta realidad; o, “época”, de la hegemonía europea… solía convivir.
Pero, no obstante, que por, “mando”; no se entiende primordialmente, el ejercicio del poder material; y, de coacción física. Porque, aquí, se aspira, a evitar estupideces; por lo menos, las más gruesas y palmarias. Ahora bien, en una relación estable y normal, entre los hombres; que se llama: “mando”. No se descansa nunca, en la fuerza; sino, al revés. Porque un hombre; o, grupo de hombres (camarilla); que ejerce el mando, tiene a su disposición, ese aparato; o, máquina social, que se llama… “fuerza”. Los casos, en los que a primera vista, parece ser la fuerza, o, el fundamento del “mando”; se revelan, ante una inspección ulterior, como los mejores ejemplos, para confirmar aquella “tesis”.

Nota:
- Por ejemplo: Antaño, Napoleón I, de Francia; dirigió a España una fuerte agresión; y sostuvo esta agresión, durante algún tiempo; pero, realmente, no mandó en España, ni siquiera, un solo día. Y esto, a pesar, de que tenía la fuerza; y, precisamente, porque tenía solo la fuerza, conviene, distinguir, entre un hecho; o, proceso de agresión; y, una situación de mando.
-
- El mando, es el ejercicio normal de la autoridad; el cual, se funda siempre: en la “opinión pública” – siempre, hoy como hace diez mil años - ; entre los ingleses, como entre los “botocudos”; jamás… (a la larga) ha mandado nadie en la tierra, nutriendo su mando; esencialmente, de otra cosa, que no sea, la “opinión pública”.

¿O, se cree, pues, que la soberanía, de la “opinión pública”; fue un invento hecho por Dantón, en 1789; o, por Santo Tomas de Aquino, en el Siglo XIII? La noción, de esa soberanía, habría sido descubierta aquí; o, allá; en esta o, en otra fecha; pero el hecho, de que, la “opinión pública”; es, la “fuerza radical”, que en las sociedades humanas; produce el fenómeno de “mandar”; es una cosa tan antigua y perenne, como el hombre mismo.
Así, como en la física de Newton: la “gravitación”, es la fuerza universal, que produce el movimiento; y, como la “Ley” de la “opinión pública”; es, la “gravitación mundial”, de la historia política. Sin ella, ni la ciencia histórica, sería posible. Por eso, agudamente: D. Hume (1711-1776); en su “Tratado de la Naturaleza Humana”; insinuó… que la opinión, que él tenía de la historia; consistía, en demostrar, como la soberanía de la “opinión pública”; lejos, de ser una aspiración “utópica”; es lo que ha pesado siempre; y a toda hora, en las “sociedades humanas”. Pues, hasta quien pretende gobernar con los “jenízaros”; depende de la “opinión” de estos; y de la que, tenga, sobre estos, los demás habitantes. Pero, la verdad, sin embargo, es que no se manda, con los “jenízaros”.



Nota:
- Por ejemplo: Así, fue… como una vez (durante una discusión, por el dominio de los países europeos; y el cambio, de las testas coronadas; y la sospecha de traición): M. de Talleyrand, decía… al Emperador de Francia Napoleón I: «Con las bayonetas “Sire”, se puede hacer todo… menos una sola cosa: sentarse en ellas» ; y el Emperador le replicara… violentamente… resentido… «Usted… solo es, un elegante - forrado en seda - saco de estiércol»; a lo que el canciller francés, retirándose (de para atrás… con una debida venia circunspecta) dijera para sí… «lástima, que un hombre tan inteligente, sea tan mal educado. Pero, en fin… el que manda… manda». Pensó este… “Canciller”; de todos los tiempos; o, sea, de antes de Napoleón; con Napoleón y después de él. –

Mandar… no es, el gesto de arrebatar el “poder”; sino, el tranquilo ejercicio de él; en suma: mandar, es sentarse en un trono; silla; cómoda y mullida curul; banco azul; poltrona ministerial; o, silla presidencial; etc. Contra, lo que una óptica e, inocente folletinesca supone… el “mando”, no es tanto, una cuestión de “puños y bayonetas”; como, sí lo es de “posaderas”, acostumbradas, al plácido y meditativo, sueño en ellas.
“El Estado”, es en definitiva: “Un Estado de Unión”, como una verdadera situación de equilibrio… de estática. Lo que realmente pasa, es que a veces… “la opinión pública”, (aparentemente) no existe. Pues, una sociedad, dividida en diversos grupos altamente discrepantes; cuya fuerza de opinión, queda recíprocamente anulada; no da lugar, a que se constituya… un mando serio. Y como a la naturaleza, le horripila el vacío; ese hueco que deja la (supuesta) fuerza ausente de “la opinión pública”; se llena con la fuerza bruta. A lo sumo; pues, se adelanta ésta, como sustituto de aquella. Por eso, si se quiere expresarlo con toda precisión; es la “ley de la gravitación histórica”.
Conviene, tener en cuenta, estos casos de (imaginaria) ausencia; y entonces… se llega a una fórmula: que es el conocido venerable y, verídico lugar común. Definitivamente… no se puede mandar, contra la “opinión pública”. A la larga, se puede hacer todo, menos el hecho de desconocer, de plano, a la (dormida) “opinión pública”. Puesto, que más temprano que, tarde; esto se paga y con creces. ¡El pueblo… siempre se lo cobra! Definitivamente, no se puede nadar contra la corriente.

Nota:
- Esto, nos lleva, a caer en la cuenta… de que el “mando”… es (la mayoría de las veces) el resultado de un “manojo de promesas” que no se pueden cumplir; o, es el resultado de la fuerza de las armas; o, de la sugestiva imaginación… del poder sin control. Como reza, aquella célebre frase del candidato: «Yo solo, dije lo que dije; y lo que dije: fue que… ¿si se puede?; no, que… ¡sí se puede!» ; Significa, esto, la prepotencia de una “opinión”; por lo tanto, de un espíritu; de que el “mando”… no es, a la postre, otra cosa: que el poder espiritual (reflejado, en el quinto poder: “La Prensa”.) Los hechos históricos, confirman esto; de manera escrupulosa. –

Todo mando primitivo, tiene un carácter “sacro”; porque (en el fondo) su cubierta en lo religioso, es la forma primaria, bajo la cual aparece siempre, lo que luego, va a ser espíritu, idea; opinión; en suma… lo inmaterial y ultra físico. En la “edad media”; se reproducía, con un formato mayor, el mismo fenómeno: El “Estado” o, el “Poder Público”; que primero se formó en Europa: fue la “Iglesia”; con todo, su carácter específico y (desde ya) nominativo del “poder espiritual”.
Luego, de la “Iglesia”; se aprendió, que el poder político; que tampoco es originariamente; sino, que es netamente, el poder espiritual (rito-mando); vigencia de ciertas “ideas”; que, sin embargo, crearon: “El Sacro Imperio Romano”. De este modo, desde entonces, lucharon dos poderes, igualmente espirituales, que no pudiendo diferenciarse, en la sustancia; pues, - ambos eran “espíritu”. – Y que finalmente vienen, a acordar, la instalación de cada uno, en un “modo”, de lapso… o sea, el “temporal y el eterno”. Luego, poder temporal; y, poder religioso; son idénticamente espirituales; pero el uno, es espiritual del tiempo – opinión pública intramundana y cambiante - mientras el otro es, “espíritu de eternidad” – como la opinión de Dios - ; o sea, la que Dios tiene, sobre el hombre y su destino (en el campo físico, económico y social.)
La mayor parte de los hombres, no tiene “opinión” (concreta y propia, solo heredada); y es preciso que ésta venga de afuera; a presión, como entra el lubricante, en las máquinas. Por eso, es preciso, que el espíritu – sea el que sea – tenga poder y lo ejerza; para que la gente, que no opina – y es la mayoría – opine. Sin opiniones, la convivencia humana, sería el caos; menos aún, la nada histórica. Sin opiniones, la vida de los hombres carecería de arquitectura, de originalidad. Por eso, sin poder espiritual; sin alguien que mande; y en la medida que ello falte; reina en la humanidad el caos; y parejamente, todo desplazamiento de poder; todo cambio de imperantes; que es a la vez, un cambio de opiniones personales; y, consecuentemente, es a la vez, también un cambio de opiniones comunes; y por lo tanto, manda menos, que un cambio de “gravitación histórica”.
Durante, varios Siglos, ha mandado en el mundo: “Europa”, o sea, un gran conglomerado de pueblos con espíritu afín. En la “Edad Media”, no mandaba nadie, en el mundo temporal. Es lo que ha pasado, en todas las “edades medias” de la “historia total”. Por eso representan siempre un relativo “caos”, y por ende, una relativa, barbarie; un déficit de “opinión”. Son tiempos, en los que se “ama y se odia”; se “ansía y se repudia”; y por todo ello, se forja, la “anarquía”, en gran medida; pero, en cambio, se “opina poco”. No carecen de delicia, los tiempos así; pero en los “grandes tiempos”; es la “opinión”, de lo que vive la humanidad; y por eso, hay orden. Del otro lado, de la “Edad Media”, hallamos nuevamente, una época en la que, como en la “era moderna”; manda alguien, bien que sobre una porción acotada, del mundo: Entonces, fue como Roma, la gran “mandona”; ella sola, puso orden en el Mediterráneo y aledaños.
En estas jornadas, de pos-guerra; comienza a decirse que Europa, no manda ya, en el mundo. ¿Se advierte toda la gravedad de este diagnóstico? Con él, se anuncia un desplazamiento del poder… ¿Hacia donde se dirige? ; ¿Quién va a suceder a Europa, en el mando del mundo? Pero, ¿Se está seguro, de que la va a sucederle alguien? Y, si no fuera nadie... ¿Qué pasaría?
La pura verdad… es que en el mundo, pasan infinidad de cosas, en todo instante, y por lo tanto… ahora. La pretensión, de decir, que es lo que, pasa ahora, en el mundo; ha de entenderse; pues, como ironizándose, así misma. Mas, por lo mismo, que es imposible, conocer directamente, la plenitud de lo real; no tenemos más remedio que construir arbitrariamente, una realidad; suponer que las cosas son de una cierta manera.
Esto, nos proporciona un esquema; es decir, un concepto; o, enrejado de conceptos. Con él, como a través de una cuadrícula, miramos luego, la efectiva realidad; y entonces, y solo entonces… conseguimos, una visión aproximada de ella. En esto, consiste el método científico. Más aún, en esto, consiste, todo uso del intelecto; cuando, al ver llegar, por la vereda del jardín, a nuestro amigo: decimos, «Este… Pedro»; luego, cometemos deliberadamente; irónicamente; un gran error. Porque “Pedro”, significa para nosotros, un esquemático repertorio de “modos” de comportarse, física y moralmente – lo que se llama “carácter” – y la pura verdad, es que nuestro amigo “Pedro”; no se parece, a ratos, en casi nada; sino, a la idea, que tenemos de «nuestro amigo Pedro».
Pero, todo concepto: puede ser el más vulgar, como el más técnico; va montado, en la “ironía” de sí mismo; en los dientecillos de una sonrisa lacónica. Como, el geométrico diamante, que va montado, en la dentadura de oro, de su engaste. Por ejemplo: él dice seriamente, «esa cosa, es –A- ; y esa otra es –B- » ; pero es suya; la seriedad de un “pince-sans-rise”. Es la seriedad inestable, de quien se ha tragado, una carcajada; y que si no aprieta bien los labios, la vomita. Él sabe muy bien, que ni esta, es –A- ; así, a rajatablas; ni la otra es –B-; y así, sin reservas; lo que el concepto piensa en rigor, es un poco, otra cosa que lo dice; y en ésta duplicidad, consiste, la “ironía”. Lo que verdaderamente, piensa, es esto: Yo sé que hablando con todo rigor, esta cosa, no es –A-; ni aquella es –B-; pero admitiendo que son –A- y –B- Uno se entiende consigo mismo, para los efectos del comportamiento vital; frente a una y otra cosa.
Esta, teoría del conocimiento, de la razón, hubiera irritado a cierto sabio griego. Porque, el griego… creyó, haber descubierto, en la razón, en el concepto, de la realidad misma. Nosotros, en cambio, creemos que la razón, y el concepto, son un instrumento doméstico del hombre; que éste necesita y usa, para aclarar su propia situación, en medio de la infinita y archi-problemática realidad; que es su propia vida. Y vida, es lucha con las cosas, para sostenerse entre ellas. Los conceptos, son el “plan” estratégico, que nos formamos, para responder a su ataque. Por eso, si se escruta bien, la entraña última de cualquier concepto; se halla, que no nos dice nada, de la cosa misma; sino que resume, lo que un hombre, puede hacer, con esa cosa; o, padecer de ella.
Ésta, “opinión” taxativa, según la cual, el contenido de todo concepto; es siempre vital; es siempre una acción posible; o, el padecimiento posible, de un hombre; no ha sido hasta ahora, que se sepa; sustentada por nadie; pero, es el término, no indefectible, del proceso filosófico; que se inicia con E. Kant; Por esto; si, revisamos a su luz; todo el pasado de la filosofía, hasta Kant; nos parecerá, que en el fondo, todos los filósofos, han dicho lo mismo. Ahora bien, todo descubrimiento filosófico; no es más que un descubrimiento; y un traer, a la superficie, lo que estaba en el fondo.

Nota:
- Lo que ahora pasa en el “mundo histórico”; es exclusivamente, esto: Durante tres siglos, Europa, ha mandado en el mundo, y ahora, Europa, ya no está segura de mandar; ni siquiera de seguir mandando. Pero, reducir a una fórmula simple, ésta infinitud de cosas, que hoy integran la “realidad histórica”; es sin duda, una exageración, que no necesita, por eso, recordar… que pensar. Es, quiérase o no, exagerar. Quien prefiera no exagerar, tiene que callar; más aún, tiene que paralizar su intelecto; y, ver la manera de idiotizarse. En efecto, creo, que es aquello, lo que verdaderamente, está pasando en el mundo; y, que todo lo demás, es consecuencia; condición; síntoma; o, anécdota; de todo esto.

No se dicho, que Europa, haya dejado de mandar, sino, estrictamente que en estos años en Europa, se siente, graves dudas; sobre si, manda o no; sobre si, mañana mandará o no. A esto corresponde, en los demás pueblos de la Tierra; un estado de “espíritu congruente”: dudar, de si ahora son mandados por alguien; tampoco, estarán seguros de ello. Se ha hablado mucho, en estos años, de la decadencia de Europa. Pero, es de esperar, que no se siga cometiendo la ingenuidad de pensar… en O. Spengler (1880-1936); en su libro: “Decadencia de Occidente”; simplemente, porque se hable de la decadencia de Europa; o, de Occidente. Antes de que su libro apareciera, todo el mundo hablaba de ello, y el éxito de su libro, se debió, como es notorio, a que tal sospecha: o, preocupación, preexistía, en todas las cabezas con los sentidos buenos; y por las razones más heterogéneas.

Nota:
- “Hoy, vemos con cierta nostalgia, la falta de autoridad y de conocimiento que observamos antaño (en nuestros padres, cuando niños); en lo que quizás, se volviese una costumbre, que a falta de ello, dejó que los lobos; abusivamente, se adueñaran de algunos sectores del planeta. Y sobretodo, cuán duro es y será, sacarlos de tal situación. Es que, de plano, hasta ya han indicado, a sus sucesores. Horror de horrores; cuando, otros… los imitan y la práctica cunde; las “camarillas” se acomodan; y, la gente se acostumbra, al “palo”, que de ellos reciben. Luego… como diría un amigo: «Apague y vámonos».
-
- Más hoy, cuando el colapso final (en todo…) se está acercando a pasos agigantados. Por esto y por todo… de lo que se trata, es de recapacitar, y de los “errores”, advertir… las soluciones, acatarlas y practicarlas; no solamente en el viejo continente; sino, en el nuevo. O, en todos los rincones del planeta; cuyos habitantes… estén de acuerdo, con aunar pensamientos y voluntades”. –
-
- “Se ha hablado tanto… de la decadencia europea, que muchos han llegado a darla por hecho. No, que crean en serio y con evidencia en él; sino, que se han habituado, a darlo por cierto; aunque, no recuerdan sinceramente, haberse convencido resueltamente, de ello; en ninguna fecha determinada. El libro, de Waldo Frank, “Redescubrimiento de América”; se apoya íntegramente, en el supuesto de que Europa (ya) agoniza. No obstante… Frank, ni analiza, ni discute, ni se cuestiona por tan enorme hecho, que le va a servir de formidable premisa, Sin más averiguación; parte de él, como algo inconcluso. Y esta ingenuidad, en el punto de partida, basta para pensar que Frank; no está convencido de la decadencia de Europa; lejos de eso, ni siquiera, se ha planteado tal cuestionamiento. Lo toma como en un tranvía; donde los lugares comunes, son los tranvías del transporte intelectual. Y donde, los puestos del pensamiento, están para escogerlos. Tal, como lo hace mucha gente. Sobretodo, pueblos enteros”. –

Se ha intentado aquí, filiar un nuevo tipo de hombre, que (dolorosamente) hoy predomina en el mundo (tanto… que ya es mayoría): le podríamos llamar: “hombre-masa”; siendo su principal característica, la de que, sintiéndose “vulgar” (a fuerza de la costumbre) proclama su derecho a la vulgaridad; y, se niega a reconocer (por desconocimiento); instancias superiores a él. Y así, es como resulta natural (y desde luego absurdo); que si este modo de ser predomina dentro de cada pueblo; el fenómeno, se produzca también, cuando miramos el conjunto de las naciones.
También, encontramos dentro de ellas, a los “hombres masa”, (naturalmente) resueltos a rebelarse contra los grandes pueblos creadores (cultos); minorías de estirpes humanas, que han organizado (a su acomodo) la historia. Es verdaderamente risible (o paradójicamente triste); contemplar, como esta o, la otra república (generalmente pequeña); desde la lontananza, se pone sobre la punta de sus pies (y otea); e increpa a Europa (sus derechos) y además declara sus enhiestos cesantes (a fuerza de permanecer en la oscuridad) en la historia universal.

Nota:
- Que ironía, Dios, creó a todos los hombres iguales; y por el cumplimiento de esto, envió a Jesucristo (su hijo); además a confirmarlo. Pero no, los poderosos, que se hicieron así; a costa, de subyugar a los demás, sin darles tiempo, solo para producir para ellos (esclavizándolos); hoy arrogantemente, se suponen más que los demás. Si no, repasemos la historia y lo confirmamos. Cultos, los unos; a fuerza de estudiar, pues no teniendo otra cosa que hacer, gastaban su tiempo escarbando y devorando (libros) adquiriendo una cultura que los mareó. -
-
- Circunstancia, que con estulticia, precisamente, hoy tiene al planeta patas arriba; y a punto de colapsar, tanto económica, física como moralmente; y, que hoy a fuerza de costumbre – se hizo “Ley” – colocando a la humanidad al borde de la guerra total. La no observancia, de las “Tablas de la Ley de Moisés” (inspiradas por Dios, en la cima del monte Sinaí); es la principal culpable, de tal circunstancia.
-
- Ante, el gran colapso financiero. Hoy, por ejemplo, vemos al mandatario, de la mayor “civilización” del planeta; casi que suplicando; pidiendo al “Parlamento” más “ecuanimidad” para con los “hombres-masa” de su pueblo; con mejores “Leyes”, que lo favorezcan. Pero, el mundo de los poderosos arrogantemente, todavía… les niega tal derecho. ¿Que se creerán… estos… hijos del mal; venidos de otro planeta? ; Ilusos, es lo que son… esos… hijos del averno; pero ya lo pagarán; y será más temprano que tarde. Ya… que las mayorías, aprenderán a votar; y así… dejarán de botar… a la basura, su sufragio; y, con él sus reclamados derechos (pedidos hasta la saciedad.)
-
- De ahí, que además, los grandes sabios y pensadores griegos; desde la antigüedad, ya los reclamaron (los derechos) inútilmente; pidiendo además y con razón: un… “gobierno de sabios”; grandes “hombres-humanistas”; y desinteresados, de todos los tiempos; que, solo quieren servir al débil; sin llenar sus bolcillos; y, que por su grandeza; se apenan de traicionar: a sus ancestros; a sus ideales; y además se cuidan de no dejar esa… estela de traición; y, desconfianza, a sus herederos. Saben, que les dejan, por lo menos, un “nombre” limpio; del cual no tengan que avergonzarse jamás. –

Y (siguiendo con la muy interesante… lectura comparativa); entonces… corre el run-run… de que ya no rigen los “edictos europeos”; y que, en vista de ello, las gentes – hombres y pueblos – aprovechan la ocasión, para vivir sin imperativos. Porque existían, solo los europeos (principalmente… Francia, Inglaterra y Alemania.) No se trata, de que otras veces, haya acontecido. Que una germinación de normas nuevas desplace las antiguas; y un fervor novísimo, absorba en su fuego, los viejos entusiasmos de menguante temperatura. Eso, sería lo corriente. - Es más, lo viejo, resulta… eso… viejo; no por su propia senectud; sino, porque, ya está ahí… un principio nuevo, que solo por ser nuevo, aventaja, de pronto, al preexistente. - Es que, si no tuviésemos hijos, no seríamos viejos; o, tardaríamos mucho más en serlo. Lo propio pasa con los pueblos.
La función de mandar y obedecer, es decisiva, en todas las sociedades; e influye, hasta en lo más íntimo, en cada individuo; salvo geniales excepciones, ésta quedará perturbada y falsificada. Si el hombre, fuese un ser solitario, quien accidentalmente se halle “trabado”, en convivencia con otros; acaso permaneciese intacto, de tales repercusiones, originadas en los desplazamientos y crisis, del imperar, del poder. Pero, como él, es social, en su más elemental textura, queda trastornado en su índole privada por mutaciones, que en rigor, solo afectan inmediatamente a la colectividad. De aquí, que si un individuo, se toma aparte, y se le analiza, cabe colegir sin más datos, como anda en su país la conciencia de mando y obediencia.

Nota:
- Como sucedió, cuando Dios, hubo dispuesto, la primera dinastía: Adán y Eva. Quienes debieron “sojuzgar” en la tierra… o sea, “mandar” en ella (Génesis 1:28); dicha función, se entendía, que debía ser ejercida, mediante algún “sistema”; que le permitiese funcionar con certeza en tal sentido. (Lo vemos hasta en los animales… siempre hay una figura dominante entre ellos.) Luego… más tarde… Dios, designa a uno de los descendientes, de los hijos de Adán. (Seres, entonces, de un promedio de vida de mil años.) Lamec (nieto de Adán); fue el padre de Noé: Quién hallo “gracia” (o, don natural) a los ojos de Dios, y fue escogido para prolongar la humanidad, salvándola (junto con su esposa y sus hijos; y, las esposas de estos) del “Diluvio Universal”. Propuesto, por la divinidad, al arrepentirse, de haber creado a la humanidad, debido a la vida pecaminosa que adquirió; y, sobre todo por su subordinación a Él; al poner otros dioses, por encima de Él; principal, ofensa al creador. (Algo parecido a lo que sucede hoy.) ; (Ver en: Génesis 6:1-8.) Luego… Dios, pactó con Noé, la no repetición de los hechos; y (simbólicamente: el “Arco Iris”) puso su señal en el cielo, para que fuese recordada, por toda la descendencia humana, hasta nuestros días y los que vinieren. Luego… los descendientes de Noé, fueron repartidos (como mandatarios de región); por toda la faz de la Tierra. –

La vida humana, por naturaleza propia, tiene que estar sujeta a algo: a una empresa gloriosa o, humilde; a un destino ilustre o, trivial. Se trata, de una condición extraña, pero inexorable; e inscrita en nuestra existencia. Por un lado vivir, es algo, que cada cual hace, por sí y para sí.
Por otro lado, si esta vida (mía) que solo a mi importa, no es entregada por (mi) a algo; caminará desvencijada; sin tensión y sin “forma”. Estos años, asistimos, al gigantesco espectáculo, de presenciar innumerables vidas humanas que marchan perdidas, en el laberinto de sí mismas; por no tener a que entregarse. Entonces… todos los imperativos; todas las órdenes; han quedado en suspenso. Parece, que la situación debía ser ideal; pues, cada vida queda en absoluta franquía, para hacer lo que le venga en gana; para dedicarse así misma. Lo mismo, cada pueblo (Europa) ha aflojado su presión sobre el mundo. Pero, el resultado ha sido, lo contrario.
Librada a sí misma, cada vida, se queda sin sí misma; vacía, sin tener que hacer. Y como ha de llenarse con algo, se “inventa” o, finge frívolamente; así, propia, se dedica a falsas ocupaciones, que nada íntimo, sincero, impone. Hoy, es una cosa; mañana es otra; opuesta, a la primera. Está perdida al encontrarse sola, consigo misma. El egoísmo, es laberíntico. Se comprende. Vivir, es ir disparando hacia algo; es caminar hacia una meta. La meta, no es mi caminar; no es mi vida; es algo, a que pongo ésta; y que por lo mismo, está fuera de ella, más allá. Si me resuelvo a andar solo dentro de mi vida, en forma egoísta, no avanzo; no voy a ninguna parte. Doy vuelas y revueltas, en un mismo lugar. Esto es el laberinto; un camino que no lleva a nada; que se pierde en sí misma; de puro no ser, más que caminar dentro sí.

Nota:
- Terrible destino, que a lo mejor, le esté destinado a una Nación, que por alguna razón sea (aparentemente) “auto-suficiente”; pero que no obstante, necesita del contacto con las demás. Por lo menos, con las que le rodean y visiten.
-
- Por ejemplo: en los comienzos del Japón, cuando el Emperador (inocentemente) le declaró la guerra a Inglaterra; y enfrentó, a una marina acorazada; sus “juncos de guerra”; igual el caso, de La China, contra el Japón. Y Apropósito, después de estos hechos, el Emperador mandó a su juventud… a estudiar a los E.U. –

Después de la guerra, el “europeo”, se encerró en su interior, y se quedó sin empresas, para sí y para los demás. Permaneciendo así por un largo tiempo. Por lo tanto, no es conveniente, embarcarse en la opinión trivial, que cree ver en la actuación de los grandes pueblos – como de los hombres – una inspiración puramente egoísta. No es tan fácil, como se cree; ser “puro- egoísta”; y nadie… siéndolo, ha triunfado jamás. El egoísmo, aparente, de los grandes pueblos y de los grandes hombres… es la fuerza inevitable, con la que tiene que comportarse, quien tiene su vida puesta en una empresa.
La ciencia, el arte, la técnica y todo lo demás; viven de la atmósfera tónica, que crea la conciencia de “mando”. Si ésta faltare, el ser, se irá envileciendo. Ya no tendría mentas, esa fe radical, en sí misma, que lanzan, enérgicas, audaces, tenaces, a la captura de las grandes ideas nuevas, en todo orden. Se hará definitivamente, cotidiano, incapaz del esfuerzo creador y lujoso; recaerá siempre, en el ayer, en el hábito, en la ruina. Se hará “chabacano”, formalista, huero, y decadente.
El “Estado-ciudad”, por la relativa parvedad de sus ingredientes; permite ver claramente, lo específico del principio estatal. Por una parte, la palabra “Estado”, indica que las fuerzas históricas, consiguen una combinación de equilibrio de asiento. En este sentido, significa lo contrario del movimiento histórico: el “Estado”, es convivencia estabilizada; constituida; estática. Pero, este carácter, de inmovilidad de forma quieta y definida; oculta, como todo equilibrio, el mismo que produjo y sostiene el “Estado”. Hace olvidar en suma, que el “Estado” constituido, es solo el resultado, de un movimiento anterior de lucha, de esfuerzo, que a él tendían. Al “Estado”, constituido, precede el “Estado” constituyente; y éste… es un principio del movimiento.
La salud, de las democracias, cualesquiera que sea su tipo, y su grado; depende, de un “mísero” detalle técnico: el procedimiento “electoral”. Todo lo demás, es secundario: Si el régimen de comicios, es acertado; si se ajusta a la realidad, todo va bien; si no, aunque el resto marche óptimamente; todo irá mal.
Por ejemplo: Roma al comenzar el Siglo I a.C., era omnipotente, rica, no tenía enemigos delante. Sin embargo, estaba a punto de fenecer; porque, se obstinaba en conservar un régimen electoral “estúpido”, cuando era falso. Había que “votar” en la ciudad; y los ciudadanos del campo, no podían asistir a los comicios. Pero mucho menos, los que vivían repartidos por todo el “mundo” romano. Como las elecciones eran imposibles; hubo que falsificarlas; y, los candidatos (titiriteros) organizaban partidas de porra - con veteranos del ejército; o, con atletas de Circo – que se encargaban de romper la “urnas”.
Y sin el apoyo del auténtico “sufragio”, las instituciones, estaban en el aire. Y en el aire, estaban las palabras. «La República, no era más que una palabra». La expresión era del Cesar. Ninguna magistratura, gozaba de autoridad. Los generales de la izquierda y de la derecha – Mario y Sila – se insolentaban en vacuas dictaduras, que no llevaban a nada. Constituían el “poder”, los “republicanos”; es decir, los “conservadores”; los fieles al “Estado-ciudad”; su política, puede resumirse en dos cláusulas: 1. Los trastornos de la vida pública romana que provenían de su excesiva expansión, La ciudad no podía gobernar a tantas naciones. Toda nueva conquista, era un delito de “lesa” república. 2. Para evitar la disolución de las instituciones, era preciso, un: “Príncipe Gobernante”.

Nota:
- Repito: Una vez más, la realidad que llamamos “Estado”; no es la espontanea convivencia de los hombres, que la consanguinidad ha unido. El “Estado”, empieza, cuando, se manda a convivir, a grupos nativamente separados. Está obligación, no es desnuda vivencia; sino, que supone un proyecto iniciativo; una tarea común de planificación; que se propone a los grupos dispersos. Antes que nada, es el “Estado”; o, receptor de proyectos, por los cuales se definen y evalúan acciones; y, programas de colaboración. Se convoca a las gentes (líderes); para que juntas hagan algo.
-
- El nuevo, verdadero “Estado”; no es consanguinidad, ni unidad lingüística, ni unidad territorial, ni contigüidad de habitación. Es un puro dinamismo, voluntad de hacer algo en común y merced a ello, la “idea estatal”, no está limitada, por un término físico. (Hoy, facilitado… en el nivel mundial; por la acción de la “Cibernética Inteligente” y la “Red Internet”.)
-
- Curiosamente, esto pasa… cuando hoy, grupos de trabajadores claman en todo el “Planeta” por mejores salarios, en múltiples manifestaciones, millonarias en trabajadores. Que como niños, piden lo que en justicia… les corresponde. Pero, ante tan relativa pasividad, las “oligarquías”; ciegamente, les responden, irónicamente; enfrentándoles, su fuerza policial: reclamándoles un “orden”, que solo puede otorgar la ecuanimidad, en la retribución salarial, que por tanto tiempo se les ha negado. Pues, las masas, al fin aprendieron a exigir; y saber, que tienen derecho, a tener derechos. -

Nota:
- Entonces, la necesidad de ser oídos (no engañados) los diferentes grupos de trabajadores, que justamente demandan mejores oportunidades salariales; hoy cuando convergen múltiples tecnologías, “certificadas”, por diferentes centros educativos (donde, salen anualmente, miles de técnicos y tecnólogos, ya prácticos.) Parecen, de una paciencia increíble, de parte de los trabajadores, cuando sus reclamos, no son oídos; o, si lo hacen, es a medias (pero, paradójicamente, las utilidades del capitalismo, que son gigantescas; y siendo una obligación social, el repartirlas; así como el establecimiento de subsidios de trabajo, decentes.)
-
- Esto, mientras el trabajador permanezca dormido; y, no acate, los súper-lujos que tienen los poderosos; como si poseyesen más de una delicada posadera, para tantos y tan costosos vehículos, en su haber; consistente en automóviles, aviones y barcos. Uno, de esos… tiene un automóvil, tan largo, que tiene que pedir permiso, para sacarlo a la calle. Y esto, no hablando de la ropa que se ponen, lo que se comen; y, las edificaciones que poseen: para trabajar, dormir y recrearse; cuando no viajan, pagando habitaciones hoteleras de miles de dólares por noche; sin derecho, a nada más que dormir; o, si piden más; pues… pagan más. Para eso, tiene miles de esclavos financieros; a quienes les pagan, salarios de hambre, en la mayoría de los casos.
-
- Luego, no se trata de subir impuestos a los productos; se trata, de llegar por “Ley” a la “repartición” justa y equilibrada, de las “utilidades” del “Capital”. Cuyas fórmulas matemáticas, no cuadran (ni lo harán nunca, bajo las actuales varianzas económicas); pero, con una “economía justa”, y necesaria; que hará pasar de un extremo a otro; al mundo (de la actual “ciencia económica” y sus grandes – vendidos - y equivocados expertos-estudiosos economistas y analistas); con el fin de lograr, que por lo menos bajen, los índices de las gentes, con necesidades básicas insatisfechas (NBI.)
-
- Entonces, ya que siendo tanta, la ceguera, de los poderosos; dormidos sobre sus haberes; a la sazón: ¡Que sean despertados! en todo el planeta; por pitos y clarines de grandes y pacíficas “manifestaciones de la equidad”. Insistimos… no se trata de pedir limosna… se trata de reivindicar por “Ley”, unos “derechos”; que solo en contados países (petroleros, entre ellos Omán); han sido resueltos favorablemente.
-
- Antes, de que facinerosos descastados, desastrados, astutos y ambiciosos, sin límite; aprovechen la situación; y, se asignen el poder, para desestabilizar continentes enteros; con su falsa política de engaño; que solo, sus bolcillos llena; lo mismo, que los de su camarilla de turno; y, los de sus esbirros, con cuentas a reventar en los Bancos Suizos. Esto, sin importarles nada; pues ni siquiera por estirpe; tienen, a quien dar cuenta (y así… menos a Dios.) Y todo… con la complacencia soterrada, de oligarquías corruptas; curas, milicos, banqueros y economistas vendidos. O, definitivamente, hijos de la obscuridad; y, escatológicos adoradores de Belial; que pronto, solo la parusía… les derrotará en lo ético; y nuestra juventud, en lo físico. -

En una agudísima empresa política: Saavedra Fajardo, en su penetrante obra: “O, sube; o, baja”; recuerda al “Estado”; que éste, es sobre todo, un movimiento; que en todo instante… algo que vive dentro de él; como un movimiento, que tiene un “términus a quo” y, un “términus ad quen”; que se le mire por donde sea, se hallará, siempre, una unidad de convivencia, que parece fundada en tal o, cual atributo material: Sangre, idioma, fronteras naturales, lo que sea, que (“humanamente”) lo establezca o, lo haga establecer (por “Ley”). Entonces y solo entonces, advertiremos, que eso, precisamente eso (como interpretación estática) es el “Estado”. Pero, pronto también advertimos, que esa agrupación humana, está haciendo algo comunal: conquistando pueblos; es decir, que en toda hora, se está superando, lo que parecía: el principio material de su unidad. «Equidad física, económica y social».
Sólo, dentro de ésta duplicidad, de momento, en el “Estado”; la unidad que es; y, debe ser; permite comprender la esencia del “Estado Nacional”. Pero, primero, debemos comprender el significado de “Nación”; y que si damos a esto un vocablo; su acepción se modernizará en forma automática. Así, que el “Estado-ciudad”; que antes fue, una idea muy clara que se veía, a los ojos de la cara, de las gentes; en todo tipo de unidad pública, que germinaba en Galos y Germanos; sin embargo, la inspiración política de Occidentes, fue cosa vaga y huidiza.

Nota:
- Los filólogos, se llamaban así, por que pretendían denominarse “historiadores” – practicaban la más deliciosa, ambición, cuando partían de lo que ahora se pretende fugaz; pero, que en el transcurso de dos o, tres siglos, serían las “Naciones de Occidente”; que el mismo “Cid Campeador”; mirara con orgullo; que después, en el futuro se visualizarán (a continuación de años de faena); que simple y naturalmente, fueron cosas que hubo que forjar. -
-
- Ahora, impuesto como manifestación de un principio natural (ni de sangre, ni de idioma) variable, condenado a una perpetua superación. Es el efecto, y no la causa, de la unificación estatal, que actualmente se considera como la frontera natural. «El principio, de la equidad: en lo físico, económico y social»; aplicado dentro de un “Estado Nacional Mundial”. Dentro de una nueva “Era”: «La “Era” de la mente». O sea, el verdadero fin de una “Era”; para entrar en otra. (Recordemos, que cada “Era”; puede llegar a tener: Diez mil años; y que un “Tiempo”: Mil años.)
-
- Además, recordemos la promesa de Cristo: a sus Apóstoles: «De volver, después un tiempo; más un tiempo; más la mitad de un tiempo»; o, sea, en los próximos 2.500 años; y que, casualmente, la llegada del “Mesías” judío, se espera para el año: seis mil; que corresponde, al año 2239; en otras palabras; la Parusía será… en el próximo año de 2239. Curiosamente, hoy la “NASA”; ha pronosticado, que un “Asteroide” de 10 Klmtrs., chocará con la Tierra; precisamente, en esa fecha. Además recordemos la profecía, del sabio, astrónomo, físico y matemático: I. Newton; quien dijo, que los hechos finales, ocurrirán en Diciembre del año 2240 «Época, de la regeneración; y, de la “Nueva Civilización”» ; Esto, con todas las consecuencias; o sea, con la imposición de la razón, sobre la fuerza de las armas; sobre lo absurdo de las pasiones y del orgullo mal enfocado; sobre la angustia del no tener; a la tranquilidad, del sostén, aportado por todos; dentro de la luz y la oscuridad, aunada infaliblemente, a la historia; con el único fin, de enmendar nuestros errores: (Apo. 21:1-27.)
-
- Como, la hermandad, apoyada en el “amor”; y en las doctrinas enseñadas por Jesucristo; el hijo del Padre; y, por causa y efecto… viajero, en el “Espacio-tiempo” (junto con los Ángeles); quien dijo, que: «Solo basta, con creer en mí, para ir al Padre»; y quien (la verdad, Dios; eterno presente) no puede venir, por la divinidad de su invisibilidad; y, la grandiosidad de su naturaleza, “escencia y substancia” prístinas; principal cohesionadora y animadora de la “bastedad” Universal; y quien (Dios, trascendiendo al futuro) lo inició… (Génesis 1:1-31.) Junto, con las principales fuerzas, que reinan en el Cosmos; desde el primer… nano-instante, de la creación. Durante, los seis días; de esos… sus días… (Ver 2⁰ de Pedro 3:8.)

Pero, los pueblos “nuevos”, traen una interpretación del “Estado”, menos material. Si es un proyecto de empresa común; su realidad, es puramente dinámica; es un deber, de la comunidad, tal actuación. Según esto, forma parte activa, el “Estado”, es sujeto político, todo el que preste adhesión a la empresa – raza, sangre, adscripción geográfica, clase social - ; queda en segundo término. No es la comunidad anterior; pretérita; tradicionalmente inmemorial – en suma fatal e irreformable – la que proporciona título para la convivencia política; sino, la comunidad futura, en hacerlo efectivo.
No lo que fuimos ayer, sino lo que vamos a hacer mañana juntos; lo que nos reúne en el “Estado”. De aquí la facilidad con que la unidad política brinda en Occidente; sobre todos los límites que aprisionaron al “Estado” antiguo, Y es que, el “Europeo” relativamente el “homo antiguos”; se comporta como hombre abierto al futuro; que vive conscientemente instalado en él; y desde él; decide, su conducta presente.
Quiérase o, no; la vida humana, es constante ocupación con algo futuro. Desde el instante actual, nos ocupamos del que sobreviene. Por eso, “vivir”, es siempre, sin pausa ni descanso: Un invariable hacer. ¿Por qué, no se ha preparado, en que hacer; todo… hacer: significa realizar un futuro? Inclusive, cuando nos entregamos a recordar; hacemos memoria, en ese segundo; para lograr algo, en el inmediato, aunque, no sea más que, el placer de revivir el pasado. En este modesto, placer solitario, se nos presentó, hace un momento, como un futuro deseable; por eso lo hacemos. Conste, pues, que nada tiene sentido, para el hombre; sino es, en función del porvenir. (Lo que denota, en el ser humano, una constitución - futurista – o sea, que vive, ante todo, en el futuro, y del futuro; contrapuesto, al hombre antiguo.) Vive pues, en un constate esperar.
Por tanto, el “Estado Nacional”, representaría un principio estatal, más próximo, a la pura idea, de “Estado”, que la antigua “polis”; o, que la “tribu”, de los árabes, circunscrita por la sangre. De hecho, la idea nacional, conserva, no poco lastre, de adscripción al pasado; al territorio; a la raza; más por lo mismo, es que sorprende notar, cómo en ella, triunfa siempre el puro principio de unificación humana, en torno a un incitante programa de vida. Es más: se diría, que este lastre del pretérito, y esa, relativa, limitación, dentro de principios materiales, no han sido, ni son por completo, espontáneos, en las almas de Occidente; sino, que proceden, de la interpretación erudita, dada por el romanticismo, a la idea de “Nación”.
De haber existido, en la ”Edad Media”, ese concepto, de nacionalidad; Inglaterra; Francia; España; y Alemania… habrían quedado no-natas. Porque, esa interpretación, confunde lo que impulsa y constituye verdaderamente a una “Nación”; con lo que generalmente, la consolida y conserva. No es el patriotismo – dígase de una vez – quien ha hecho a las naciones. Creer, lo contrario, es la bobada; a que ya se ha hecho alusión; y que el propio Renan, admite en su famosa definición: - Si para que exista una Nación… es preciso, que un grupo de hombres, cuente con su pasado común; yo me pregunto: ¿cómo llamaremos a ese mismo grupo de hombres? - Mientras vivía en presente, eso, visto desde hoy, es un pasado. Por lo visto era forzoso, que esa existencia común feneciese; pasase, para que pudiesen decir: ¡Somos una Nación!
Con los pueblos del centro y sur de América, tienen con España, un pasado común; raza común; lengua común; y sin embargo, no forma con ellos (hoy) una Nación. ¿Por qué? Falta solo una cosa, que por lo visto es esencial: El futuro común. España, no supo inventar, un programa de porvenir colectivo, que atrajese a esos grupos zoológicamente afines. El plebiscito futuro, fue adverso a España; y, nada valieron entonces los archivos; las memorias; los antepasados; la patria. Cuando hay aquello, todo esto sirve, como fuerza de consolidación, pero nada más.

PROCESO CREADOR DE NACIONES.
En Europa, se ha llevado siempre éste ritmo: 1º Momento: El peculiar instinto occidental que hace sentir el “Estado”, como función de varios pueblos, en una unidad de convivencia política; o, moral. Comienza a actuar, sobre los grupos más próximos: geográfica, étnica, y lingüísticamente. No porque, esta proximidad, funde la “Nación”; sino, porque, la diversidad entre próximos, es más fácil de dominar.
2º Momento: Período de consolidación, en que siente a los otros pueblos más allá del Nuevo Estado; como extraños y más o menos, enemigos. Es el período, en que el proceso nacional, toma un aspecto de exclusivismo, de cerrarse hacia dentro del “Estado”; en suma, lo que hoy llamamos… “Nacionalismo”. Pero, el hecho, es que mientras se siente, políticamente, a los otros, como extraños; y, contrincantes; se convive, económica, intelectual y moralmente, con ellos. Las guerras nacionalistas, sirven para nivelar, las diferencias, de técnica y de espíritu. Los enemigos habituales, se van haciendo históricamente homogéneos. Poco a poco, se va destacando, en el horizonte. La conciencia de que esos pueblos enemigos, pertenecen al mismo círculo humano; que el “Estado” nuestro. No obstante, se les sigue considerando… como extraños y hostiles.
3º Momento: El “Estado” goza de plena consolidación; a la sazón, surge la nueva empresa: Unirse a los pueblos que hasta ayer eran sus enemigos. Entonces, crece la convicción de que son afines con el nuestro; en moral, e intereses; y, que juntos, formados en un círculo nacional, frente a otros grupos más distantes; y aún más extranjeros. Luego, he aquí, ya madura la nueva idea nacional. Un ejemplo: Suele afirmarse, que en el tiempo del “Cid Campeador”; era ya España = Spania; o sea, un “ideal nacional”; y para sustentar la tesis; se añade… que Siglos antes, ya San Isidro, hablaba de: «La Madre España».
En resumen: Ahora, la tesis de este… escrito… sufre en el mundo de hoy; una grave desmoralización; que entre otros síntomas, se manifiesta, por una desaforada rebelión de las “masas”; y tiene su origen, en la desmoralización de Europa. Las causas de esta última, son muchas. Una de las principales, es el desplazamiento del poder, que antes ejercía sobre el resto del mundo; y, sobre sí mismo, nuestro continente. Europa, no está segura de mandar; ni el resto del mundo; de ser mandado. La soberanía histórica, se halla en dispersión.
Ya no hay “plenitud de los tiempos”; por que esto supone un porvenir claro, prefijado, inequívoco; como era el del Siglo XIX. Entonces, se creía saber lo que iba a pasar mañana. Pero, ahora, se abre otra vez el horizonte, hacia nuevas líneas incógnitas; puesto que no se sabe quién va a mandar; cómo se va a articular el poder sobre la Tierra. Quién, es decir qué, pueblo o, grupo de pueblos; por lo tanto, que tipo étnico, qué ideología; qué sistema de preferencias, de formas de resortes vitales.
No, se sabe, hacia qué centro de gravitación van a ponderar, en un próximo porvenir, las cosas humanas; y por ello, la vida del mundo, se entrega a una escalonada provisoria. Todo, lo que hoy se hace en público y en lo privado – hasta en lo íntimo – sin más excepción que algunas partes de algunas ciencias; es provisional. Acertará, quien no se fie de cuanto se pregona; se ostenta; se ensaya; y se encomia, Todo eso, va a irse con la mayor celeridad de la que vino. Todo desde la manía del deporte físico; hasta la violencia en la política; desde el arte nuevo; hasta los baños de sol, en las ridículas playas a la moda del destape. Nada de eso tiene raíces; por que todo ello, es pura invención, en el mal sentido de la palabra; que la hace equivaler al capricho liviano. No es creación desde el fondo sustancial de la vida; no es afán ni menester auténtico.






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“UTOPÍA II”
Por: Alberto Galindo Jr.
Tomado en paráfrasis, del libro: “La Rebelión de las Masas”; de José Ortega y Gasset. Ed. Altaya 1993.
Mayo de 2010.

Dedicatoria:
- A la memoria de mi padre… Senador: † ALBERTO GALINDO, humanista, y fiel “carguero-mensajero” del pueblo; guía y luz de mi existencia; y, ejemplo de tenacidad y lucha. –

- - En Suma:

- - “Todo… hoy, es vitalmente falso (a la luz de la verdad experimental); Se da, pues, el caso contradictorio, de un estilo de vida, que cultiva la sinceridad y, a la vez, es una falsificación. Sólo, hay verdad, en la existencia, cuando sentimos sus actos, como irrevocablemente necesarios. No hay (hoy) un político, que en verdad, sienta la inevitabilidad de su política; y cuanto más extremo… es su gesto, es más frívolo, y es menos exigido por el destino. No hay más vida, con raíces propias; no hay más vida autónoma, que la que componen las escenas ineludibles. Lo demás, lo que está en nuestras manos tomar; o, dejar; o, sustituir; es precisamente “falsificación” de la vida”. -
La actualidad, es el fruto de un interregno; de un vacío, entre dos organizaciones del mundo histórico ínter-dimensional: Pues, lo que fue… fue; y lo que va a ser… será. Por esto, todo… se trata de algo provisional. Y ni los hombres… saben a ciencia cierta, a que instituciones, de verdad, servir; ni las mujeres, que tipo de hombre prefieren; precisamente por falta de femineidad.
Suponen, que los “europeos”, no saben vivir, si no van lanzados en una gran empresa nativa; y cuando ésta es falsa, se envilecen; se aflojan, se les descoyunta el alma. Un comienzo de esto, se ofrece hoy a nuestros ojos. Los círculos que hasta ahora, se han llamado “Naciones”; llegaron hace un Siglo; o poco menos, a su máxima expansión. Ya no puede hacerse nada con ellos, si no es “trascenderlos”. Ya no son sino “pasado”; que se acumula en torno y bajo del “europeo”: aprisionándolo, lastrándolo.
Con más libertad vital que nunca; sentimos que el aire es irrespirable, dentro de cada pueblo; porque es un aire confinado. Cada Nación… que antes era la gran atmósfera abierta, oreada; se ha vuelto providencial e interior. En la “súper-nación europea” que imaginamos; la pluralidad actual, no puede, ni debe, desaparecer. Mientras, el “Estado” antiguo aniquilaba lo “diferencial” de los pueblos; o, lo dejaba inactivo, fuera; o, a lo sumo, lo conservaba modificado. La idea nacional, más puramente dinámica, exige la permanencia activa, de ese plural, que ha sido siempre la vida de Occidente.
Entonces, todo el mundo, percibe, la urgencia de un nuevo “principio de vida”. Mas – como siempre acontece, en las crisis parejas – algunos ensayan “salvar” el momento; por una intensificación extremada y artificial; precisamente del principio “caduco”. Este es, el sentido de la erupción “nacionalista”, en los años que corren. Y siempre – repito – ha pasado así. La última llama; la más larga; el postrer suspiro; el más profundo; la víspera de desaparecer las fronteras se hiperestesian – las fronteras militares y la económicas. –
Pero, todos… estos “nacionalismos”, son callejones sin salida. Inténtese proyectarlos hacia el mañana; y, se sentirá el tope; pues por ahí, no se sale a ninguna parte. El “nacionalismo”, es siempre, un impulso de dirección opuesta, al puro principio de “nacionalizar”. El primero es exclusivista, mientras, el segundo es incluyente; en épocas de consolidación. Tiene, sin embargo, un valor positivo; y, es una alta “norma”. Pero, en Europa, todo está consolidado de sobra; y, el nacionalismo, no es más que una manía; el pretexto, que se ofrece, para eludir el deber de invención, de grandes empresas.

Nota:
- “La simplicidad de medios, con que opera; y, la categoría de los hombres que exalta, el revelar sobradamente, que es lo contrario, de una creación histórica. - Esto, por lo menos, en cuanto a las tendencias políticas del partido “conservador”; pues, las del partido “liberal”; siempre han sido favorables, a una completa “europeización continental”. (Por lo menos, en cuanto a Inglaterra, se refiere.) – Recordemos, que los principales países son: Inglaterra; Francia y Alemania. - Luego siguen: España; Italia; Los Países Bajos; Portugal; Polonia; Suiza; Austria; Hungría; Yugoslavia; Rumania; Noruega: Suecia; Irlanda; Grecia; Ucrania y Turquía, entre otros. Pues, paradójicamente, hoy vemos a los E.U., ayudando (por fuera, de la misma U.E.) – económicamente - a Grecia, para salvarla del “colapso” financiero total; que además, no se sabe, a donde va a parar, la caída de las “bolsas” del planeta. Con las consecuencias fatales que esto ocasiona… el desempleo y las revueltas callejeras; lo cual además, pone en peligro a las democracias. Esto, dentro de una “contagiosa” situación económica mundial: del “sálvese quien pueda”; y cuando, las coaliciones partidistas, se esfuerzan y se ponen de moda”. -

Sólo, la decisión de construir una gran “Nación”, con el grupo de los pueblos continentales, volvería a encontrar la pulsación de “Europa”. Tornaría ésta, a creer en sí misma; y automáticamente, a exigirse mucho y a disciplinarse. Pero, la situación, es mucho más peligrosa, de lo que se suele ser. Van pasando, los años y se corre el riesgo, de que el europeo, se habitúe a este tono a no mandar ni mandarse. En tal caso, se irán volatilizando todas sus virtudes y capacidades superiores. Pero, a la – completa – unidad de “Europa”… se han opuesto, casi siempre (en el proceso de nacionalización); las “clases” conservadoras dominantes. Esto, parece traer para ellas; la catástrofe; pues, al peligro genérico de que “Europa”, se desmoralice definitivamente; y, pierda su energía histórica (y su liderazgo mundial); agréguese, otro, muy concreto, e inminente: “La sombra comunista”.
- Los – baurgeois – de Occidente, saben de sobra; que aún, sin “Comunismo” (la sola palabra, aterra, en el mundo); el hombre que vive, en forma exclusiva, de su “renta”; y sobretodo que las puede transmitir a sus herederos; dentro de tal sistema; ésta (la renta) tendría los días contados. Pero, a pesar de todo, no es esto, lo que “inmuniza” a “Europa”; contra en “Comunismo”… todavía, lo es más el “bolchevismo”… que apoyara primero a V. I. Lenin; y luego de su muerte, a J. Stalin; y sus purgas; a nombre del obrerismo ruso. Solo basta pues, para convencerse, de una vez por todas, de que el movimiento “socialista de Lenin y el bolchevismo”; son fenómenos históricos que a pesar de suministrar una dimensión general… en el planeta (o sea, el derecho común, a ser “pobres”; y a ver en su disciplina para perros; alguna esperanza; siendo aún, tanta… su esclavitud-eslava de siglos): en Rusia; China; y, demás países de la orbita soviético-socialista-comunista-militarista: que aterran y sofocan a las mentes democráticas y altamente humanistas; como también pasa hoy, con la sola presencia bélica… que está atormentando… por su influencia y supuesta dimensión: en Cuba; Venezuela; Ecuador; Bolivia; Nicaragua y otros; cuyos gobernantes al parecer se van a eternizar en el poder. Que lo han confundido todo… haciendo un caldo de bollos; en la política imperante… así: liberalismo con comunismo; conservadurismo con monarquismo; socialismo con comunismo; humanismo y ateísmo con la mazonería. Pero, los verdaderos oligarcas-opresores (curas, militares y banqueros); aparecen entre bambalinas y siguen escurridizamente gobernando, en esas secciones del planeta.

EL DESVOQUE…
- Esta es la verdadera cuestión: Europa, se ha quedado sin “moral” (política.) No es que el “hombre-masa”; menosprecie una moral anticuada; en beneficio de otra… emergente; sino, que el centro de su régimen vital; consiste principalmente, en la aspiración a vivir… sin superarse, a “moral” alguna. La nueva moral… que niega rotundamente que exista hoy… en ningún rincón del mundo… un nuevo “ethos”; que tenga visos de poseer una “moral”, pasable. Pues, hoy, cuando se habla… de “nuevo”… se comete una nueva “inmoralidad”… al buscar un medio más cómodo, para mentir. Por lo cual, será una “inmoralidad” por demás, una verdadera ingenuidad: echar en cara, al hombre de hoy, su falta de “moral”. Pues, la imputación, le traería sin cuidado; o, más bien de pronto, hasta le halagaría. El “inmoralismo” (principalmente después de la 2ª Guerra Mundial); ha llegado a ser una baratura externa y cualquiera… alardea de ejercitarlo; de ello dan cuenta los neo-filósofos… y poetas como: F. Nietzsche; J. L. Borges (1899-1986); y tantos otros… hasta músicos (anti-poetas y anti-músicos); que creen tener todos los derechos; y, ninguna obligación.

Hoy, es indiferente, que se enmarque a alguien: como reaccionario; revolucionario; activista; o, aún pacifista. Pues, al fin y al cabo, después una poco de vueltas; y, revueltas, su estado de ánimo, consistirá decididamente, en ignorar toda obligación (toda estirpe); para sentirse, sin que él mismo, siguiera, lo sospeche; como un sujeto “limitado” por el hecho de poseer derechos. Cualquier sustancia que caiga dentro de un alma así; dará, un mismo resultado; y se convertirá en pretexto, para no supeditarse a nada concreto. Si se presenta como reaccionario; o, como anti-liberal; será para poder afirmar, que la salvación de la Patria; del Estado; de la Nación; le da derecho a allanar todas… la otras normas; y, a machacar al prójimo; sobre todo… si ese prójimo, posee una personalidad valiosa.
Pero él mismo, acontece, si le da por ser “revolucionario”: entonces, su aparente entusiasmo, por el obrero manual; el pobre y miserable; le sirve de disfraz, para poder… desentenderse de toda obligación – como la cortesía; la veracidad; sobre todo el respeto; y la estimación. Así… aunque duela… muchos que han ingresado a partidos obreristas; solo lo han hecho, para conquistar (por lo menos dentro de sí mismos) el derecho a despreciar la inteligencia (y la cultura) y así… ahorrarse las zalamerías ante lo visto… cuando se halaga al “hombre-masa”; solo para conseguir votos. Luego vemos a Dictadores “pateando”… a la cultura; y, a todo… lo que les pareciere eminente.
Esta esquividad, para toda obligación, explica en parte, el fenómeno, entre ridículo y escandaloso; de que se ha hecho en nuestros días una plataforma de la “juventud” como tal. Las gentes, cómicamente, se declaran “jóvenes”; porque ha oído, que el joven, tiene más derechos que obligaciones; ya que puede demorar el cumplimiento de éstas… hasta las “calendas griegas” de la madurez. Siempre el joven, como tal (despreocupado), se ha convertido, en un eximido del hacer; del haber; inclusive del tener; son de hecho hazañas, que al parecer no le corresponden (se niega a ser; a experimentar; a pensar); deja todo al político de turno. Siempre ha vivido del crédito a los demás; y piensa erróneamente, que esto le corresponde al viejos como un “derecho efectivo” (siendo, lo peor, que esto pase… de generación en generación.) Se ha vuelto, una especie de “chantaje”; y en la realidad, eso es lo que vivimos… en un físico y puro “chantaje universal”… así, se escuda en el humorismo… en la vulgaridad… que hasta… le hace sentir eximido de toda supeditación.
Por eso, cabe ennoblecer la “crisis” presente, mostrándola, como el conflicto entre dos “morales”; o, ya, dos “civilizaciones”; la una caduca; la otra en el albor. El “hombre-masa”, moderno, carece simple y llanamente de “moral”; que es siempre (aunado con la droga); por esencia, un sentimiento de sumisión a algo; que la conciencia, no halla… por estar fuera del servicio y de la obligación. Pero, acaso, es un error, decir “simplemente”: ¿Porqué, no se trata sólo de que este tipo de “criatura”, y se desentienda de la moral? Pero, no; no le debemos hacer tan fácil la faena; pues de la moral, no es fácil desentenderse; lo que sí, pasa es que: un vocablo falta aquí; y es el de la “amoralidad”; ya que negar, lo “moral”; es apreciar, lo “inmoral”; que en el fondo, es lo “amoral”.
Pero… ¿Cómo, se ha podido creer, en la amoralidad de la vida? Sin duda, porque, toda la cultura y la civilización modernas; llevan a ese convencimiento. Hoy recoge “Europa”, las penosas consecuencias, de su conducta (sobre todo) espiritual… yo diría que hasta de su estulticia; Se ha embalado, sin reserva, por la pendiente, de una cultura única; pero, sin raíces. Así, se analiza al “europeo”; pero, sobre todo, a su comportamiento; de frente, a la civilización misma; la que ha nacido en los últimos tiempos. Esto no, teniendo en cuenta una civilización que luche con la antigua, sino una nueva negación que por encima de todo… oculta un efectivo “parasitismo”.
El “hombre-masa”; está aún viviendo, precisamente, de lo que, en el fondo, niega; y, que es consiente, de que otros construyeron; o, acumularon. Por esto, conviene mezclar su “psico-grama”; con esta gran cuestión: ¿Qué insuficiencia radical, padece la cultura europea moderna? Pues, es evidente que en última instancia, de ella (la insuficiencia) proviene la forma humana hoy dominante. Y es… indudablemente; que se trata, de la falta de humanismo; de igualdad; y de ecuanimidad; que para bien de la humanidad, es esto lo que debe ser corregido a tiempo; o será el acabose… en la locura colectiva.

Epílogo:
- - “Comienza, para Inglaterra, una de las etapas más problemáticas de su historia; y hay muy pocas personas en Europa, que confíen en sus virtudes latentes. Durante los últimos años, han fallado tantas cosas, que por inercia mental, se tiende dudar de todo; hasta de la misma Inglaterra. Se decía que era un pueblo decadente e insolente – que solo con su figura, ostentaba en el primer acto; lo mismo, que en el último. Nos aparecen, como meros inconscientes – que se atrevían confianzudamente, a mojarles la oreja a los demás. No obstante, y aún arrostrando ciertos riesgos; se señalaba, que la misión europea del pueblo inglés; es la que ha tenido por Siglos; y que en forma superlativa, estaba llamado a ejercerla. Lo que no se imaginaban entonces; fue, que tan rápidamente, viniesen los hechos, a confirmar; y a incorporar; una esperanza creadora; y mucho menos, que se complaciesen; con tal precisión; en ajustarse a un papel determinado; que usando un símil humorístico, se atribuía a una Inglaterra, frente al resto del Continente”. -
Pero, con una maniobra de saneamiento histórico, que intenta (Inglaterra); por lo pronto en su interior, es portentosa. En medio de la más atroz tormenta, el navío inglés, cambia todas sus velas; vira dos cuadrantes; se ciñe al viento; y el con guiño de su timonel; modifica el destino del mundo. Todo… ello, sin una sola gesticulación; y, más allá de todas la frases, incluso, de las ya proferidas. Es evidente, que hay muchas maneras de hacer historia, casi tantas como para deshacerla. Desde hace varias centurias, acontece que en forma periódica, los pueblos continentales se despiertan, en una mañana soleada; y rascándose la cabeza… exclaman: ¡Esta Inglaterra! Dentro de una expresión de sorpresa; de azoramiento. Y con la conciencia, de tener delante, algo admirable, pero incomprensible. El pueblo inglés, en efecto, por el hecho más extraño, que hubo en el planeta; se para, de entre las ruinas de la 2ª Guerra Mundial, y sale avante. Igualmente, como pasó con las demás Naciones del Continente Europeo.

EL SIGLO XXI.
Por: ALBERTO GALINDO Jr.
Texto, sacado en paráfrasis, de “El Maravilloso Siglo XXI”. Y los cambios que traerá. De José Cruz Ramírez. Ed. Iberoamérica. 1998.
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- - “El nuevo paradigma del mundo y los cambios de poder, provocados por las nuevas tecnologías: en la comunicación y el transporte. – La sociedad de Mercado del Siglo XXI como modelo global, de la “era neo-liberal”; y “neo-socialista”; tendrá que demostrar con hechos sus supuestas bondades. – El nuevo poder; la revolución de la información, en la “era del conocimiento y el capital intelectual”. El nuevo paradigma de “La Tierra”, el planeta que se sobrecalienta globalmente (especialmente su mar); dando lugar a fenómenos como “El Niño”. – La vida y sus orígenes, demostrados a la luz de las ciencias biológicas del tercer milenio. – El hombre, criatura viviente y maquinaria increíble, de la evolución de las especies, y la inteligencia comercial. – La energía en el mundo futuro, las fuentes alternativas para el “nuevo mundo”. – La población global, su carrera increíble (de hoy, con casi seis mil quinientos millones de habitantes; con crecimiento exponencial de 1.8%; para llegar a los 10 mil millones de habitantes, en el Siglo XXII); los Países gigantes, de cientos de millones de seres humanos: China; India: E.U.; Rusia; Filipinas; Tailandia; Indonesia; Brasil; Japón; y en menor escala Vietnam; Inglaterra; Alemania; Francia; España; Italia; México”. -
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- - “La xenofobia global, un cáncer para la paz global, que esta subiendo de color, en forma tristemente cruel. – Una nueva productividad, con calidad y competitividad global; que hace del cero errores, una necesidad de sobrevivencia económica. – El nuevo paradigma de Asia, el súper-continente: del futuro, y nuevo amo y señor del futuro, a pesar del “Efecto Dragón”. –
- La paradoja global; países ricos y países pobres; el cáncer de la mala distribución de la riqueza, entre “El Norte y el Sur”. El poder de la inteligencia del Siglo XXI; y la medicina del futuro; el triunfo del individuo entre las masas; clave para los movimientos democráticos. Nuestra visión del pasado en el tercer milenio; las ciencias históricas encontrarán, las más grandes revelaciones sobre nuestro origen. El nuevo paradigma del universo y las ciudades, en el espacio exterior; la conquista de la Luna y de Marte como próximos eslabones. El nuevo paradigma de la espiritualidad y religiosidad global; nos acerca al nacimiento de una gran fusión de las religiones; y el dominio democrático del “hombre-masa”; y la profunda prosperidad de las “economías abiertas”; y el poder democrático del “sindicalismo” (con amplio reparto de utilidades); y la calidad total; y el avance tecnológico; y la globalización; y el poder de la informática, le abrieron las puertas, al tercer milenio, con la primera década del Siglo XXI; en el mundo”. -

















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EL FIN DE LA HISTORIA Y EL ÚLTIMO HOMBRE.
Texto, tomado en paráfrasis: De Francis Fukuyama. Ed. Planeta. 1992.
Por: ALBERTO GALINDO Jr.
Medellín. Mayo, de 2010

- - “El signo general de la edad moderna: El hombre ha perdido dignidad, en una medida increíble, a sus propios ojos. Durante largo tiempo, fue el centro y el héroe trágico de la existencia; luego, por lo menos, se esforzó en mostrarse estrechamente relacionado con el aspecto decisivo y esencialmente valioso de su existencia… como todos los metafísicos que desean aferrarse a dignidad del hombre, con su fe en que los valores morales, son valores cardinales. Quienes han abandonado a Dos, se aferran con tanta mayor firmeza, a la fe en la moral”. - F. Nietzsche. -

HOMBRES SIN PECHO.
- - “Es imposible contemplar nuestra discusión, sin referirnos a la criatura que se supone que ha de surgir, al fin de la historia, al último hombre. Según Hegel: - El Estado universal y homogéneo, reconcilia plenamente, las contradicciones existentes en la relación de señorío y servidumbre, al hacer de los antiguos esclavos, sus propios señores. - Al señor, ya no lo reconocen sólo seres que son meros humanos y ya no se niega a los esclavos, el reconocimiento de su humanidad. En cambio, cada individuo, libre y consciente de su propio valer, reconoce a cada individuo, esas mismas cualidades. Al abolirse la contradicción, el señor-siervo; se conservó algo, de cada uno de los términos: La libertad del señor y el trabajo del siervo”. -

Karl Marx, personificó un gran polo en su crítica a Hegel: al negar que - el reconocimiento, fuese universal. - Pues, lo impedía la existencia de las diversas clases económicas. - Pero, el otro polo de su crítica, fue el de Nietzsche: pues, - si su pensamiento nunca se encarnó en movimientos de masas: o, partidos políticos, - como el de Marx; las cuestiones que planteó, acerca de la dirección del proceso histórico humano, siguen sin resolverse, y no es probable: - que se resuelvan, después de que el último régimen marxista, haya desaparecido - de la faz de la Tierra. Pues, además, par él (Nietzsche) había poca diferencia entre Hegel y Marx (solo, que el uno creía en Dios, y el otro no.) Pero la meta de ambos, aparentemente, era la misma: O, sea una sociedad: que encarnara su propio reconocimiento universal. O, que por lo menos, éste sea universalizado, con su propia calidad y objetivo.
Sin embargo, el “último hombre”… de Nietzsche, seguía siendo en esencia, un esclavo victorioso. Pues, estaba de acuerdo con Hegel, en que el “cristianismo”, era una ideología (para esclavos) antes, que lo representara, una democracia secularizada de cristianismo. La libertad, de los hombres ante la “Ley”, pertenecía a una idealización del mismo Jesucristo, ya que para esto vino al Planeta Tierra. Que además, de donde el venía (Cristo); ya existía tal “igualdad”, en forma universal. Pero (según Nietzsche); tal igualdad era el resultado del resentimiento de los débiles contra los fuertes. De ahí que la rebelión… como presentimiento hoy surge como una gran verdad; por demás impuesta (en las urnas) por las mayorías.
El “Estado” democrático… liberal, no constituye una síntesis de la moral de uno y otro (señor y esclavo); según Hegel. Para Nietzsche, representa una victoria del esclavo (ya como sociedad); pues la libertad (del señor); no se conservan en ninguna parte; ya que se supone, que en la democracia, no existe el soberano (por lo menos en teoría); el ciudadano debe ser un personaje educado, a favor de una cómoda auto-conservación. Para Nietzsche, el hombre democrático, se compone de un deseo y acción, en contubernio, con sus necesidades. Además, carece de “megalothymia” (amor propio); esta satisfecho con su felicidad; y, es incapaz de avergonzarse de sí; y, de elevarse por encima de sus propias necesidades. Hegel, sostiene que el hombre moderno lucha por el reconocimiento, tanto como por la satisfacción del deseo que se le atribuye; mediante un “Estado” universal y homogéneo, que le dé tales derechos.
Pero, hoy, el hombre moderno, lucha por conseguir sus derechos, tanto en la China; como en la misma Rusia, y otros países satélites. Por humilde que parezca, éstos van desde poder pertenecer a “clubes” de alta esfera, hasta poder entrar a otros de menor categoría, aptos para obreros. O inclusive para todos; sin otro requisito, que el de pertenecer a la misma sociedad democráticamente elegida. Vemos, por la calle, hasta “reinas” (camufladas); de pañoleta y traje común. Ya que todo depende del punto de vista por donde se le mire. El ser humano es libre (con amor, dignidad, respeto y sensatez) de escoger su comportamiento, siempre que éste se encuentre encuadrado dentro de las (raíces y tradiciones) costumbres generales de cada “Estado-Nación”.
Nietzsche, creía imposible que ninguna verdadera grandeza, excelencia o, nobleza humanas; excepto, en la sociedades aristocráticas (hoy casi desaparecidas); e, inclusive de nacimiento “igual”; o, viviendo dentro de una verdadera “libertad”; se pudiese desconoce la existencia de la “megalothymia” (amor propio o, deseo de reconocimiento); que impulsa a poseer, por poseer; que si es verdad que no todos la tienen; por lo menos sufren del deseo de satisfacerse, con el propio reconocimiento, de que no se es meramente, igual a todos (de la raigambre natural, algo queda.) Curiosamente, al poner la propia conservación, por encima de todo… el último hombre, se parece al esclavo, en el sangriento combate de Hegel; con que empezó la historia. Que, por paradójico que parezca, la historia también nos enseña. No obstante, ha muchas sociedades democráticas, en las que la juventud, no se contenta, con solo felicitarse; sino, que quieren vivir dentro de su propio “horizonte”; o sea, que ambicionan escoger libremente una creencia y un compromiso con “valores” más profundos; que el simple “Liberalismo”; quieren completa libertad para escoger, por ejemplo su propia religión (si es que de verdad la desean.) Hoy, ya nadie, se va a mortificar, y menos a sufrir suplicio, así por que sí.
- “La desaparición del hombre, al final de la historia; no es una catástrofe cósmica; el mundo natural, sigue siendo, lo que ha sido desde toda la eternidad. Y por consiguiente, no es tampoco una catástrofe biológica: es el hombre, el que sigue vivo y en armonía con la naturaleza; o, con el – Ser - dado. Lo que realmente desaparece, es el hombre, llamado propiamente así; es decir, la acción negando, lo dado; y el – error - ; o, en general, el sujeto, opuesto al objeto. O, sea, el fin de las guerras y de las sangrientas revoluciones; pues, al coincidir (con equidad) sus objetivos, los hombres ya no tendrían grandes causas por las cuales, luchar. Se sentirían, en una escala superior; como los animales, satisfechos de todo (por la alta tecnología) y se habría extinguido toda brizna de injusticia. ”. -

LIBRES Y DESIGUALES.
- “Es difícil, para quienes creemos en la democracia liberal, seguir a Nietzsche, mucho trecho, por el camino que tomó. Era, un enemigo declarado de la democracia y de la racionalidad, en que ésta descansa. Confiaba en el nacimiento de una “nueva moral” que favoreciera al fuerte, frente al débil; que elevara la “desigualdad social”; y, hasta fomentara una especie de crueldad. Para ser verdaderos “nietzscheanos”; deberíamos, endurecer el cuerpo y el alma. Nietzsche – cuyos dedos se agarrotaban en invierno, porque se negaba a calentar su habitación; y que, incluso, en los años anteriores, al inciso de su locura; apenas, si pasaba día sin terribles jaquecas – ; señalaba el camino, hacia un modo de vida sin comodidad y sin paz. –

Pero, no por esto, podemos dejar de aceptar algunas de sus acertadas observaciones psicológicas (las de Nietzsche); al mismo tiempo que rechazamos su moral. Pues, el hecho de ser diferente, no debe impulsarnos a su incredulidad. Son fieles reflejos del como superarse en sí mismo; todas estas consideraciones, pueden aceptarse sin tener que romper por ello, con las tradiciones “cristiano-liberales”; en las que vivimos en la actualidad. Del mismo modo, que su filosofía, puede verse a grandes rasgos, como una radicalización del historicismo de Hegel; su psicología, puede verse como una radicalización de la insistencia de Hegel, en el reconocimiento.
- - “La “megalothymia”, es como siempre fue, un fenómeno moralmente ambiguo; tanto, las cosas buenas, como las cosas malas de la vida; fluyen, de ella, simultáneamente y necesariamente. Si la democracia liberal, se ve alguna vez subvertida por la “megalothymia”; será porque la democracia liberal la necesita, pues nunca podrá sobrevivir a base únicamente de un reconocimiento universal e igual; como ocurre abiertamente en los E.U.” –
Aparte del terreno económico, y el de la vida política; la “megalothymia”, encuentra ocasiones de manifestarse en actividades puramente formales, como los deportes, el alpinismo, las carreras de coches y similares. Una competición atlética, no tiene otro sentido, ni objeto, que el de hacer ganadores a unos y perdedores a otros; o sea, de satisfacer el deseo de ser reconocido como superior. El nivel o, el tipo de la competición, es completamente arbitrario, como lo son las reglas de todos los deportes. Fijémonos en el alpinismo, cuyos practicantes son casi siempre personas de prósperos países pos-históricos. Para ponerse en condiciones físicas, han de entrenarse incesantemente; el tronco del cuerpo de los escaladores, en solitario, está tan desarrollado que si no van con cuidado, sus músculos, pueden despegarles los tendones de los huesos. Y así sucesivamente…
Kojève, sugirió, medio en broma, que en vez de que el Japón se occidentalizara; Occidente (incluyendo Rusia) se japonizara; proceso que curiosamente, hoy está en marcha. En otras palabras, en un mundo, en el cual, se ha resuelto, en gran medida, la lucha por todas las cuestiones importantes, un esnobismo, puramente formal, se convertiría en la principal forma de expresión de la “megalothymia” (o, deseo, de ser reconocido.) En los E.U., por ejemplo, la tradición utilitaria hace que sea feliz, incluso para las bellas artes; convertirse en puramente formales. A los “artistas”, les gusta convencerse, de que son socialmente responsables, además de estar comprometidos con valores puramente estéticos. Pero, el fin de la historia, no significa, el fin, entre otras cosas, de todo “arte”; que pueda considerarse socialmente útil; y, de ahí, el descenso de la actividad artística, hacia el vacío formalismo, de las artes tradicionales japonesas.

DERECHOS PERFECTOS Y DEBERES IMPERFECTOS.
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- - “SI, bien, presentarse como candidato a la presidencia o, escalar el Everest, puede atraer, cierta naturaleza ambiciosa; hay otra extensa zona de la vida contemporánea, que proporciona una satisfacción más ordinaria del deseo de reconocimiento. Esta zona, es la “comunidad”; o sea, la vida asociativa, por debajo del nivel de la nación”. –
En el “Estado” moderno, la importancia de la “vida asociativa” como foco espiritual, obtiene máxima importancia. En las modernas “Naciones-estado”; la ciudadanía, se limita a votar, cada cinco años; por los representantes que le atraigan electoralmente. Y los periodistas (con sus preguntas y repreguntas) han llegado a hacer de la política, su especialidad, para subir o bajar las encuestas de intención. Lo cual hace un fuerte contraste con los procedimientos de otras regiones del Planeta. Sin embargo, en los tiempos modernos, la ciudadanía, se ejerce mejor a través de… las “instituciones mediadoras”: partidos políticos; corporaciones; sindicatos obreros; asociaciones cívicas; organizaciones profesionales; iglesias; asociaciones de padres de familia; consejos de escuelas; sociedades literarias y similares. Así en una democracia moderna, la vida asociativa privada, es mucho más satisfactoria, de modo inmediato, que la mera ciudadanía. El reconocimiento por el “Estado”, es necesario e impersonal. Fue así, como se forjaron grandes figuras de la política… empezando por aglomeraciones de poca intensidad; para ir, aumentando la concurrencia en cada semana de campaña… así, el conferencista se movía pues, de tribuna en tribuna.
Pero, aunque es duro decirlo, la familia no funciona con solo principios liberales. Criar hijos; o, hacer que un matrimonio dure toda la vida, requiere sacrificios personales que son irracionales; si se miran en términos: cálculo… costo beneficio. Los verdaderos bienes de una familia no redundan, en el provecho de quienes soportan las cargas; sino que se transmiten a las generaciones venideras. A nivel de la asociación más amplia, o sea, el País mismo, los principios Liberales pueden ser (también) destructores de las formas más altas de patriotismo; necesarias para la supervivencia de la comunidad. Así, que promesas de sacrificio de la vida; y, los bienes; en el fondo, puede resultar una mentira (por ejemplo: eludir el servicio militar obligatorio y otras.) Las exigencias de la movilidad por trabajo, estudio etc. Las orientaciones culturales; aparte, de sus religiones o, creencias en materia de Fe… son difíciles de cumplir, cuando estas se tornan obligatorias; e inclusive, las de carácter político.

GUERRAS DEL ESPÍRITU.
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- - “La decadencia de la vida comunitaria, sugiere que en el futuro, correremos el riesgo de convertirnos en “últimos hombres”; seguros y absortos en nosotros mismos, en busca de comodidades privadas y carentes de anhelos “thymóticos”; por objetivos más altos. Pero existe también el peligro opuesto, o sea, que volvamos a ser primeros hombres, enfrascados en combates sangrientos, por un prestigio sin sentido, más ahora con armas modernas. En realidad, los dos problemas, están relacionados entre sí; pues la ausencia de ocasiones constructivas y habituales, para manifestar la “megalothymia”; puede conducir simplemente, a su resurgimiento en una forma extrema y patológica”. –
Supongamos, que el mundo se ha llenado, por decirlo, así… de democracias liberales… de modo que no queden ya tiranías, en ningún rincón del Planeta. Ni opresiones dignas de obtener, tan infame nombre. La experiencia, nos dice, que si no existen las causas justas; por las que combatir; entonces, el hombre, se inventará algo contra que luchar, así sea, contra esas misma causas “justas”. Luchará entonces por luchar. El aburrimiento de la “Paz”; y el de la prosperidad, ha tenido, en el pasado, consecuencias muy graves. Por ejemplo las Guerra mas intensas que ha sufrido la humanidad; la verdad sus verdaderas causa profundas no están claras aún hoy. Se habla de Militarismo; Nacionalismo; Equilibrio de Fuerzas; Alianzas; Doctrinas Militares y Políticas; Tecnologías… que a la larga han sido verdaderas estupideces… y que hasta el momento no han tenido suficiente explicación… solo, la de que se fue a la guerra, por que si; y esto conllevó a los demás Países del Planeta; que despertaron a la pesadilla; y, se fueron a ella… ya por que no tenían más remedio. Agravado lo anterior, por la locura colectiva, a que fue arrastrado el pueblo alemán, al creer que de verdad era, primero: la mayor potencia económica, que el mundo hubo conocido; y, luego 25 años después: la raza especial (según Nietzsche); y el gobierno mundial (con maqueta y todo) de los mil años.
En otras palabras el mundo, antiguo… moderno… y nuevo… ha permanecido… de loco en loco (hoy llamados “grandes”); a las órdenes del populacho embriagado de emoción baladí; y, superflua lontananza… del triunfo: de los unos, sobre los otros. Mirando para atrás, quienes vivimos ya en la vejez; y en la de la misma humanidad; podemos llegar a la conclusión de que ningún régimen; ningún sistema socio-económico; puede satisfacer a todos… en todas partes… Y esto incluye a la “democracia liberal”. Y, para el colmo las principal insatisfacción, surge en los sitios en los cuales más ha imperado la libertad y el “Liberalismo Democrático”; o sea donde la bienestar ha alcanzado niveles nunca soñados. Así el comportamiento personal y grupal, no ha despertado… a la verdadera causa de la felicidad, que es: la paz en el amor; y en la equidad; así para ello se tenga que intervenir clínicamente, el mismo cerebro, de tendencia criminal; pues, al parecer, las causas son más de terapia “pos-operatoria”, que otra cosa. En otras palabras: aplicar la “Eugenesia”; seguramente, tenemos que acabar por “extirpar”, lo animal que haya prevalecido en nuestro – yo - ; para que finalmente; obedeciendo, a una bella definición del “cielo”: ¡Sitio… en el cual, cada uno, solo tiene, todo… lo que puede recibir!

EUGENESIA.
- - “La eugenesia, es un antiguo sueño de la raza humana. Sabemos que hemos podido mejorar, con éxito, las razas de animales. Entonces, ¿Por qué no mejorar, también al ser humano? Un programa de eugenesia, cuyos detalles se mantenían en secreto, para el público, estaba en la base de la República que proponía Platón. Formaba parte de la “Mentira Real”. El científico inglés, Francis Galton (1822-1911); fue un de los primeros hombres modernos, en presentar un programa de eugenesia, cuidadosamente diseñado. Allí se proponía matrimonios concentrados, entre hombres y mujeres “ricas” que, en su opinión, acabarían produciendo una raza de “superdotados”. -
Se pueden usar muchos argumentos, para defender la eugenesia. Las cárceles, están abarrotadas de criminales reincidentes. Puesto que el carácter criminal, probablemente, sea hereditario, ¿debería esterilizarse a esos hombres y mujeres, para librar a la siguiente generación de su descendencia? Mejor todavía, si fuera posible manipular los genes de los criminales, de modo que se corrigiera su tendencia a delinquir, ¿por qué la sociedad debería abstenerse de hacerlo? El coste de mantener a un criminal de por vida, en la cárcel, es muy elevado. Al prisionero, la experiencia, tampoco le resulta satisfactoria. Sus victimas, también sufren. Hacer que los delitos sean menos probables, parece que beneficia a todo el mundo. Se pueden elaborar argumentos similares, para borrar unas cuatro mil enfermedades genéticas que causan dolor a quienes las sufren, a sus familias y a sus amigos; y que cuestan miles de millones; a la sociedad, en cuidados y atención. Esto, se podría hacer, estableciendo controles de ADN. ¿Por qué no hacerlo, si podemos?

MITO DEL LIBRE COMERCIO.
Por: Ravi Batra. Ed. Vergara 1994. Texto, tomado en paráfrasis, por Alberto Galindo Jr.
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- - “La experiencia, de la mayoría de las naciones, muestra que la prosperidad, estriba en el crecimiento de la industria, antes que en la agricultura, y los servicios. Esto es así, porque la industria tiene una productividad laboral, mucho más alta, que la de otros sectores; por lo cual, sus salarios, suelen ser un 150; o, un 200 por ciento, más elevados. Cuando la liberalización del comercio, promueve la industria, eleva la productividad, en su conjunto, así como el nivel de vida; pero, cuando promueve los servicios a expensas de la industria, la productividad y los ingresos reales, disminuyen”. –
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- - “La industria, y no el comercio, es la principal fuente de prosperidad. La historia reciente y pasada, lo confirma de manera terminante. Es evidente que desde la década de los setenta, los servicios han sobrepasado a la industria, dentro de los E.U. Como consecuencia de ello, el panorama económico, en su conjunto, ha sufrido una profunda transformación. La liberalización del comercio, ha resultado ser la causa principal de esta transformación, que no tiene precedentes en la historia norteamericana”. –

Se dijo en 1990; Que de persistir la tendencia, a fin de esa década, la industria norteamericana del automóvil, estaría casi extinguida; las industrias farmacéuticas; las de la computación y de máquinas herramientas; podrían seguir el mismo destino. La razón principal, fue que no se podría competir con los productos importados; con independencia de la superioridad tecnológica norteamericana; y la liberalización del comercio, logró lo que nadie. Aquí se plantea pues, una argumentación sistemática y conveniente, a favor del proteccionismo. No sólo, se pretende aquí, demostrar el daño irreversible, causado por la liberalización del comercio; también, se propone una política proteccionista, adecuada, para hacer frente a los potenciales efectos nocivos de esta última. Igualmente queda demostrado, que los frutos del aumento de la productividad de E.U., fueron cosechados por mano de obra extranjera y las multinacionales.

La desigualdad, había comenzado a aumentar lenta pero firmemente; reduciendo la clase media; las crecientes importaciones diezmaban industrias; y millones de norteamericanos, quedaban sin asistencia, ni seguros médicos; el medio ambiente, soportaba un creciente abuso y contaminación; los puentes y las calles urbanas, estaban llenas de baches; las familias, se separaban; las drogas y la violencia, invadían las escuelas y las calles. Para colmo de males, el gobierno, estaba casi paralizado, incapaz de sacar al País, de semejante estado de confusión. A nadie, le importaba, que la propiedad, se hubiera adquirido a expensas de una deuda récord; o, que la repentina inclinación de los extranjeros por los E.U., resultara sospechosa; o, que los multimillonarios, junto con los desamparados, se hubieran multiplicado rápidamente; o, que los bancos y las entidades de chorro y préstamo, estuvieran atravesando dificultades; o, que el sistema industrial, estuviera reculando a grandes pasos. Nada de eso importaba.

Pero, Alemania y Japón, habían llegado a ser sumamente competitivos, en los mercados mundiales, y muchos temieron que los E.U., pudieran perder su otrora tremenda ventaja competitiva; o. que estuviese a punto de perderla, para siempre. Otros prefirieron reconocer que efectivamente, estaban perdiendo la guerra de la competitividad. Luego, las únicas explicaciones que resultaron válidas; fueron, el gran déficit público y la desindustrialización. Pues como se advirtió, el déficit público, constituyó sólo la explicación parcial de la caída de la productividad; mientras, que la hipótesis de a desindustrialización, no había logrado dar con el verdadero origen del problema. La desindustrialización de los E.U., fue atribuida, a la competencia de Alemania y Japón; pero la presencia de competidores extranjeros no fue ingrata. Durante el Siglo XIX; los productos norteamericanos, se enfrentaron a la dura competencia de la Gran Bretaña, Francia y Alemania; y en los años anteriores a la 2ª Guerra Mundial; a la competencia de éstos Países, se vino a sumar la del Japón. Por eso, el hecho de que los E.U., hubieron hacer frente a una fuerte competencia extranjera, en realidad no fue novedad. Lo nuevo, fueron las reglas de juego. O, sea, la facilidad con que se les permitió a los extranjeros, competir en el mercado local desde la década de los 50ª. Lo nuevo fue la política comercial de los E.U., y el culpable… pues, el “Libre Comercio”.

Y naturalmente, que en la medida que las familias norteamericanas, para satisfacer sus aspiraciones y mantener el nivel de vida, al cual estaban acostumbrados; tuvieron que trabajar más; y lógicamente, comenzaron a surgir los conflictos sociales. Se dedicó menos tiempo a los hijos; a la intimidad personal; a los padres ancianos y en general; a los esparcimientos necesarios para la salud. Aumentó el porcentaje de divorcios, pero sin embargo el sueño americano… perduró. Así la productividad continuara declinando, tanto que hubo que acudir a prestar plata. El monto de las deudas aumentó, como nunca. Si bien, se detuvo la caída de la productividad, el deterioro del nivel de vida, no se logró frenar.

Sin embargo, frente a los productos no agrícolas, la conducta de la gente fue diferente. En el caso de la alimentación, existieron límites biológicos, para el consumo; pero, tales limitaciones no rigieron para los servicios; o, para la industria de la construcción. En las industrias agrícolas, un aumento de la oferta, no produce necesariamente una caída brusca de los precios. Por ejemplo: En los 80ª; los precios de los inmuebles, aumentaron de modo sustancial, aun cuando las nuevas viviendas inundaban el mercado. Y fue así, porque mientras aumentaba la oferta de viviendas; su demanda crecía aún más. Jamás podría ocurrir, algo semejante, en el mercado del trigo; la soja, o, los alimentos envasados; porque, existían (como siempre) límites biológicos, para el consumo de estos productos. En tal caso, los precios deben caer, como sucede con el precio de cualquier producto, con una sobreoferta. Pero como los productos del agro, tienen una demanda inelástica, los consumidores, gastan menos en los mismos; cuando los precios bajan. De esta manera, los agricultores, terminan haciendo menos dinero, aun cuando hayan aumentado su productividad y producción. En realidad, el crecimiento de la productividad, fue la causa de la disminución de sus riesgos.

No obstante, cuando los precios de los productos agrícolas aumentan más rápidamente que los demás bienes, los agricultores ganaban; de lo contrario, perdían. Por eso, es importante el precio relativo, es decir, el precio de los productos agrícolas, en comparación con el de los productos no agrícolas. La historia nos demuestra, que los a los precios relativos del campo, son más importantes para la prosperidad de la agricultura, que la misma productividad. Los agricultores, medraron durante las guerras; y los períodos de inflación, por que los precios de los bienes que vendían, superaban los de los bienes que adquirían.

Ahora, que la competencia, es un proceso dinámico, que incluye un cambio permanente. No existe, nada parecido a una ventaja competitiva exclusiva y constante. El conocimiento no tiene límites, y la rivalidad activa entre las empresas, las impulsa a mejorar e innovar en forma permanente. Sin embargo, la competencia puede ser nacional, tanto como extranjera, y las dos tienen efectos absolutamente diferentes, sobre la economía, Una es puramente benéfica, mientras que la otra, puede ser nociva, y depredadora. En ambos casos, existe un desafío, al cual las empresas tienen que responder, para sobrevivir; pero, el origen de ese desafío, es tan importante, como su fuerza coactiva.

Esto es, lo que ha causado la competencia extranjera excesiva. El comercio libre indudablemente, hace más productivo al mundo; pero, no mejora el nivel de vida, de todas las naciones. Algunos países, se benefician, pero otros se perjudican. Naciones ricas en recursos, como Australia y E.U., han estado últimamente del lado de los perjudicados. En poco tiempo, a medida que se incremente la productividad nacional, como consecuencia de la especialización provocada por el comercio, los salarios reales de todos los trabajadores crecerán, aunque no sea en forma inmediata. En este caso, el comercio libre, resulta evidentemente beneficioso, para todas las naciones. Sin embargo, en la realidad, los salarios son notoriamente diferentes; de un sector, al otro. Los trabajadores de la industria manufacturera, ganan mucho más que los del comercio minorista; los restaurantes, y la mayor parte de los otros servicios. Cuando la competencia extranjera se lleva al extremo, genera pérdidas de empleo, en los sectores de altas remuneraciones; y eso, representa una caída general en los salarios. En general, los salarios de la industria han disminuido, como consecuencia de la brusca caída del precio industrial relativo, inducida por la competencia extranjera, mientras que el salario nacional total, debe su constante disminución, a la caída de los índices de ocupación, en el sector de altos salarios.

EN SINTESIS.

1. Desde 1973, cuando los E.U., pasó a ser una economía de comercio libre, por primera vez, en su historia; las relaciones positivas habituales, entre el salario real y la productividad, se desbarataron. Los ingresos reales de los trabajadores, no superiores, que constituyen casi el 80 %; de la fuerza laboral, experimentaron una ininterrumpida disminución; a pesar de la creciente productividad. Los salarios de la industria, bajaron a sus niveles de 1950; de hecho, los ingresos netos de impuestos del sector minorista, están hoy cerca de los abismales salarios vigentes en la década de la Gran Depresión. Tal ha sido el perjuicio causado por el comercio libre.
2. Todo esto ocurrió simultáneamente con un módico crecimiento del PNB y del ingreso nacional per-cápita; de modo que la brusca disminución de los ingresos, ha permanecido oculta para la opinión pública; unos pocos economistas han reconocido el problema, pero los analistas de las principales tendencias, no ven en ello, ningún motivo de alarma.
3. El comercio libre, ha conducido a una intensa competencia extranjera, en las industria con altos salarios; lo cual, inicialmente detuvo la incorporación de principiantes a la fuerza laboral; y, luego, a fines de los 80ª; produjo, una migración de trabajadores, quienes a su vez tuvieron que buscar empleo, en el sector menos remunerado de los servicios; de ahí, la disminución de los ingresos reales, en el orden nacional.
4. Los salarios reales, declinaron incluso en la industria de alta productividad – a pesar del aumento del volumen de producción horario – porque el comercio libre, provocó una brusca caída de los precios relativos de los bienes manufacturados. Esto, condujo al nefasto fenómeno de la “agriculturización”; que en el pasado, sólo afectaba al campo, donde la productividad creciente estaba asociada con a disminución de los ingresos y las ganancias. En consecuencia, el comercio libre, es el responsable de la “agriculturización” de los E.U.
5. Al hacer crecer a los sectores de baja productividad, a expensas de los de alta productividad, el comercio libre, también causó una disminución en el aumento de la productividad nacional, aun cuando la formación de capital, haya estado cerca de su récord histórico.
6. De las 12; naciones analizadas… - E.U.; Gran Bretaña; Australia; India; Italia; Canadá; México; Francia; Japón; Corea; Alemania; y Taiwán – sólo Alemania, ha seguido una política de comercio libre, durante gran parte de su historia. Todas las demás, con excepción de la India y México, llegaron a ser ricas, mediante la adopción del proteccionismo competitivo, al menos, durante los dos primeros Siglos de su desarrollo. La economía de la India, nunca se abrió, porque siguió la peor política comercial posible: la del proteccionismo monopólico. Cuando México, abrió sus fronteras a la influencia extranjera, a través de los préstamos externos, prosperó durante años, en la década del 60ª; pero, entró en un período de depresión desde 1982.
7. Todas las naciones prósperas en el período de posguerra, salvo Alemania, deben su prosperidad al proteccionismo competitivo. Dentro de esta categoría, figuran Japón; Corea; Taiwán; Hong Kong y Singapur. Otros países que liberalizaron su comercio, como los E.U., y Australia, y hasta cierto punto el Canadá; han experimentado una disminución de los ingresos reales, a pesar de la creciente productividad. Han sido alcanzados por el síndrome de la “agriculturización”.
8. El proteccionismo competitivo, es por lo tanto, un método comprobado, con altas posibilidades de éxito; el comercio libre; es, desde un punto de vista histórico; una idea relativamente nueva, con altas probabilidades de fracaso.
9. La historia, muestra que las naciones, con una gran abundancia de recursos naturales, no necesitan un crecimiento significativo en la productividad de la mano de obra, para llegar a ser prósperas; sólo las naciones con pocos recursos lo necesitan. Por eso, la disminución de la productividad en los E.U., Canadá, y Australia, con relación a Japón, Corea y Alemania, no es motivo de alarma. Mucho más alarmante, es la política liberal, en materia comercial, seguida por las naciones rezagadas. De hecho, casi todos los países, excepto E.U., se han beneficiado con la política norteamericana del comercio libre.
10. Las más recientes víctimas del comercio libre, son los ciudadanos; de lo que antes se denominaba Alemania del Esta; que se unió con Alemania Occidental, en Octubre de 1990. El canciller alemán Helmut Kohl, se apresuró a exponer, a la antes protegida economía del Este; a una intensa competencia internacional; en la errónea creencia de que la liberalización comercial; pronto, traería prosperidad a la región. En lugar de eso, sucedió lo contrario. La industria del área, tambaleante, pero manejable, derrumbó los salarios reales, declinaron y el desempleo se elevó, a un alarmante nivel del 17%; Incluso después de invertir cientos de miles de millones de dólares en el Este; el gobierno, ha sido incapaz de detener los efectos nocivos de su descaminada política. Si se tuvieran en cuenta los trabajadores empleados en los programas oficiales, tendientes meramente a dar trabajo a los desocupados, el índice de desempleo, se elevaría al 40%. La gran depresión de Alemania del Este, que está hoy en su peor momento, es un testimonio de cómo el comercio libre puede diezmar una industria y destruir con eso una economía protegida pero viable.

RESUMEN.
El resurgimiento de la economía norteamericana, debe salir del siguiente “plan quinquenal”, propuesto:
1. La tasa arancelaria promedio, debe elevarse en 5 años; del 5%; actual al 40%; a fin de proteger de las importaciones, a las principales industrias manufactureras.
2. Todas la compañías protegidas, deberían ser fraccionadas en empresas independientes más reducidas; para generar una intensa competencia local, sustituyendo así, la competencia extranjera por la rivalidad interna.
3. Se deberían prohibir las fusiones entre las grandes compañías.
4. Habría que estimular la inversión extranjera en actividades nuevas. Y no en operaciones existentes ya consolidadas.
5. El Estado, debería invertir grandes sumas en investigación y desarrollo; financiando dicha actividad, con una parte del aumento en la recaudación arancelaria.

Para complementar lo anterior… se requiere urgentemente… una teoría adecuada, para el buen desarrollo económico y el comercio. El cambio, siempre ha sido, la esencia de la vida. Según lo han proclamado grandes cerebros progresistas de cada generación. Ya que con este cambio, viene la adaptación, y con ésta, el esfuerzo y la evolución. Las viejas ideas, se vuelven obsoletas, y eso crea la necesidad de un nuevo tipo de pensamiento, un nuevo paradigma, más apropiado que su predecesor. Hoy, es claro, que las viejas ideas de A. Smith; necesitan, urgentemente, ser modificadas. Hay una apremiante necesidad de un nuevo paradigma, una nueva concepción del desarrollo económico y el comercio; que sea coherente con los requerimientos de nuestra época. Luego, se impone un máximo aprovechamiento de los “recursos humanos” (bien pagos.)

CONCLUSIÓN.
El aprovechamiento óptimo de los recursos mundiales para satisfacerlas necesidades humanas, hace necesario, reducir al mínimo el derroche y los contaminantes. Después de la caída del Comunismo Soviético, el presidente Bush I, proclamó la necesidad de un nuevo orden internacional, con una economía mundial, asociada al “comercio libre”. Esto, es justamente lo menos indicado, ya que sólo va a añadir contaminación, sin elevar demasiado la producción.
1. En todos los países, deberían ser fraccionadas las compañías monopólicas, a fin de generar una intensa competencia interna y sortear la necesidad de la competencia extranjera.
2. El comercio intra-industrial, tendría que ser reducido al mínimo. En la medida de lo posible, las compañías multinacionales deberían producir y vender bienes en la misma nación. Otra posibilidad es que las empresas multinacionales, canjeen sus plantas de producción en los diferentes países. Por ejemplo, General Motors, exporta automóviles a Europa, pero también los trae a E.U., desde sus plantas europeas. Esto es evidentemente innecesario. No debería exportar, si se puede fabricar el producto, en la misma Europa. A la inversa, no debería importar, si también se producen automóviles en E.U. ¿Cuál es el motivo para generar un transporte innecesario de bienes, provocando contaminación en el proceso? Si las plantas General Motors en Alemania, resultaran antieconómicas, en caso de eliminar sus exportaciones a E.U., la compañía simplemente debería venderlas a un fabricante alemán, y utilizar el dinero, con otros fines más productivos y menos contaminantes.
3. Debería incrementarse, la transferencia internacional de capital y tecnología, en lugar de acrecentar al máximo el comercio mundial. Por ejemplo, en la actualidad el Japón, se concentra principalmente, en los bienes de exportación, generando contaminación en el proceso. Si en lugar de ello, las compañías japonesas instalarán fábricas en todo el mundo, podrían satisfacer las necesidades de la nación, mediante la producción local, controlada desde el extranjero y sin demasiado comercio. De esta manera, el Japón, no tendría necesidad de importar gran cantidad de materias primas, a cambio de sus exportaciones. Las necesidades humanas, se satisfarían tanto como antes, pero el comercio de vienes y materias primas sería mínimo. Japón importaría algunas materias primas para la producción local, y pagaría por ellas con sus ganancias del exterior. Con esto, no solo se reduciría al mínimo el comercio, sino que los países del Tercer Mundo, que exportan principalmente, materias primas, podrían industrializarse. Alemania, otro gran exportador y contaminador, debería incrementar su transferencia de tecnología, no el comercio.
4. Lo anterior quiere decir, que las naciones ricas en tecnología y capital, deberían exportarlos, a cambio de materias primas, para su producción local. El Tercer Mundo, no debería exportar, tanta materia prima, sino importar, tecnología, o invitar a las empresas extranjeras a que utilicen sus materias primas, en la producción local. A fin de reducir al mínimo, el comercio internacional, las fábricas deberían estar ubicadas cerca de las áreas de producción de materias primas, así como en las proximidades de los centros de población.
5. Todas las economías ricas en recursos, pero industrialmente no desarrolladas, tendrían que imponer altos aranceles sobre las importaciones de manufacturas, al par que promueven vigorosamente la competencia en los mercados locales. Esto, induciría a los países industrializados, a instalar sus fábricas en dichas naciones. La India, Australia, Canadá, México, y los países de Latinoamérica y África, ricos en recursos, podrían adoptar esta política, complementada por la competencia interna. Este tipo de competencia, reduciría significativamente, la desigualdad, estimulando así la demanda interna de bienes, lo cual a su vez, disminuiría la dependencia del comercio.
6. Los gobiernos deberían orientar sus inversiones en investigación y desarrollo, hacia los descubrimientos potenciales, capaces de reducir la contaminación, así como la dimensión de las fábricas, rediciendo, de ese modo la necesidad de las economías de escala. Algunas empresas entran en el sector exportador, sólo para aprovechar tales economías. En este sentido, deberían desarrollarse nuevas tecnologías que lo hagan innecesario. Hay que tener en cuenta que a menudo se exagera la importancia de dichas economías. Después de todo, las empresas, sumamente competitivas del Japón, empezaron siendo pequeñas. Si las economías de escala, son tan importantes, ¿por qué las empresas tienen tantas fábricas, en un mismo país, para producir el mismo producto?

La migración de las fábricas, hacia las áreas ricas en minerales, puede reducir el comercio internacional, hasta en un 25%; sin afectar el nivel de vida mundial. Lo mismo es válido para el comercio industrial, que se podría eliminar completamente, sin demasiadas consecuencias, para la producción mundial. En otras palabras, el comercio mundial, se podría reducir al menos en un 75%; sin afectar demasiado la producción total, Pero, si bien los efectos de la disminución del comercio sobre la producción, serían limitados y hasta insignificantes; su efecto beneficioso sobre el medio ambiente sería enorme. El uso de energía podría disminuir drásticamente, el precio del petróleo caería, los mares estarían más a salvo de los derrames de petróleo; y productos químicos, la atmósfera menos contaminada con gases tóxicos; el riesgo de accidentes, sería menor y nuestros oídos estarían menos expuestos a los ruidos ensordecedores. Estas, entre otras, serían las ventajas de reducir al mínimo el comercio internacional y de aplicar el proteccionismo competitivo.




Re-despertar_1

¿Sueño o realidad?

Un sueño llamado:

“Ferenixe”

(Los Akpalus)

Por Alberto Galindo Jr.

Figura del cielo bajada,
Es tu imagen una bella melodía,
Ríes con fuerza y tonada,
Eres, un ángel del cielo y del día,
Nunca nadie te olvida, eres un hada,
Ilusión de amor y de alegría,
Xilema dulzura y nobleza mi amada,
Eres así... cómo no adorarte, mi vida.

Medellín, Junio de 2008


Un sueño llamadoFerenixe...

Dedicatoria :

Dedico este trabajo literario de ficción a mi hijo Jhon Alexander, quien ha sido mi fiel amigo y finalmente... el báculo de mí vejes; sin él, ésta labor no hubiese sido posible. Gracias por su compañía y su apoyo. A.G.


Ferenixe :

De catorce años tu fragilidad,
y el fabuloso brillo de tus ojos.
Hacen juego con tu virginidad,
que hoy delata tus abrojos.

Porque aunque eres una niña,
tienes la capacidad de herir.
Y solo, aunque tú me riñas,
por ti, siempre he de morir.

Cuerpo de sirena, me enloqueces,
son tus pétalos en flor silvestre.
Los que hacen de mí, como cipreses,
hoy, deshojarte quisiera... tú me dejes.

Naciste mi vida... para ser amada,
mi amor, para ser servida... atendida.
Seré pues, tu señor... mi bien amada,
Solo, para satisfacerte... mi consentida.

Mi dueña, te amaré así... mientras viva,
para ofrecerte... Ferenixe... mi existencia.
Seré para ti... mi amada, mientras viva,
y te amaré... mi niña con toda mi paciencia. A.G.


INTRODUCCIÓN
“Re-despertar”


Ferenixe:

- “Del griego Ferenixe, y/o, portadora de la victoria. Mujer de rostro puro.” -

- “Amar, es encontrar en la felicidad de otro, la propia felicidad”. - (Gottfried W. Von Leibniz)


Aquel lugar (Faetón); seguramente, más que soñado; parece una reproducción exacta de la Tierra. Yo, había aparecido (o, trascendido en el “espacio-tiempo”) en aquel planeta (el V planeta según su lejanía al Sol – hoy el “Cinturón de asteroides”. - ) en esa “era”, está muy desarrollado; y con una inmensa población (cerca de un trillón de Habs.) súper-adelantada de faetonitas (los antiguos Atlantes y/o, los Akpalus.)

Dentro de la trama de esta novela de ficción, entramos (trascendemos) en una época, en el “Espacio-tiempo”; viviendo en el mundo del futuro (no lejano); o, en una época ya olvidada; sin embargo, en el cual, se desarrollan las cosas tan rápido como hoy, pero más ordenadas y concretas. Será la época, en la cual, las conquistas científicas, logradas, se manifestarán por doquier; y, en la que los androides, pulularán y circularán por todas partes; como máximos ayudantes del género humano. Viviendo en un mundo electrónico nuevo, múltiple; conectado a la sociedad de ese entonces, con un flujo de información e imágenes; en un océano digital, circulando a través de las redes; que es el verdadero sistema nervioso de la sociedad del espectáculo. La convergencia de la informática y de las telecomunicaciones, los computadores portátiles, los teléfonos modulares, las autopistas de fibra óptica, las bases de datos y los satélites gigantescos, que dieron lugar a la era de la “Tele-vida”; o, ser a distancia; o, sea, poder estar presente (electrónicamente); en cualquier punto del globo y aún de la Galaxia (La Vía Lactea.) Mantener y registrar una conversación con cualquier ser humano, computador o, robot; es pues, el ambiente, para una desconocida forma de vida y de trabajo, con nuevas costumbres y espacios inmensos para descansar, hacer deporte, estudiar culturizarse y estar con Dios; para ellos la “Fuerza del Bien”; para nosotros la “Energía Primeva”; o, sencillamente “Dios”; que es lo mismo, en todo el Universo; y para la ciencia de hoy, la “Energía Oscura”; la cual está en todas partes y contiene el 70% del Universo: Principio y fin, animador del “Todo”. “El alfa y el Omega”. (Tomado en paráfrasis, de la revista “Muy Interesante”. Núm. 195.)

La medicina, ha alcanzado en esa época a la que trascendí; máximos avances, para retardar los efectos de las enfermedades y de la vejez; la “Medicina Preventiva”, se encuentra en su furor; pero, siempre, se materializan los efectos del avance de los años; que desde luego, ya no serán los 120 años “bíblicos”. Entonces, los efectos del paso de los años, sobre el cuerpo humano, ya no son tan nefastos; sin embargo, se manifiestan inevitablemente; pero, son más prolongados pues, el ciclo vital ha sido alargado por la ciencia. Aquí, en esta novela de ficción, los queremos trabajar, con el fin de mezclarlos, con las costumbres y sobretodo con el “amor”; eterna temática, por la cual se sabe que existimos. “Re-despertar”; o, “Verónica II”, en griego “Ferenixe” (título de la obra.) Será pues, un intento novelado, por vivir, la imagen onírica del amor (amor... platónico, ideal, soñado; o, con estilo Shakespeareano) en todas sus manifestaciones; dentro del marco humano, con una importancia irremplazable, en la escala mortal y además, dentro del desarrollo de la “civilización”; ya que además, el amor, tiene todas las características sociales, religiosas, étnicas y culturales.

El tiempo, estipulado, en el cual se desarrollan los acontecimientos, soñados; o, trascendidos; o, mejor imaginados, es pues, el año 2020; de nuestra “era”; correspondiente, según su historia cíclica: El año 6021 de la era de ellos; ya viviendo en otra dimensión; lo cual indica de paso, que se estarían aproximado a su término como “era”. O sea, dentro de menos de 12 años; para nosotros. Y de hace más seis mil millones de años de nuestro tiempo. Los personajes (ficticios) se ubicarán dentro de la clase única, de una zona cualquiera, de una moderna “súper-ciudad nueva y nuclearia”; lejos de los centros fabriles; con las características urbanas del futuro en La Tierra. O sea, con grandes espacios verdes (de hasta ± 5.000 Mtrs., C/u.; entre los grandes núcleos; o, torres.) Con construcciones concentradas muy altas (torres) para vivienda, de más de 1.000 pisos, separadas c/u; por 1.500 Mtrs; de verdor y de follaje. (Alejadas de los grandes centros robotizados de agricultura y ganadería extensiva.) Destinados para el funcionamiento de las pequeñas actividades del agro y de “pan coger”; dentro de las cuales los robots se encargarán del trabajo pesado, repetitivo, sucio o, peligroso. En los (100) primeros pisos (o, plataformas de doble altura, con mezaninos) de cada una las torres; se desarrolla: el comercio, los servicios administrativos (públicos y privados.) informatizados; y los servicios comunales; destinando, una de las torres del súper-complejo; de generalmente entre 50 y 100 de ellas; solo al gobierno central y otra, al ministerio de guerra justicia y orden público de cada “Ciudad-Estado Faetonita”.

Igualmente, los pisos superiores (desde, el piso 20-50-100 – según la altura de la torre - para arriba) de las torres componentes del “Súper Sistema Nucleario”; son destinados, únicamente, para vivienda. Para descansar y dormir; para la familia en general (concepto muy desarrollado en Faetón.) Ya que las grandes y extensas plataformas de las torres; con varios pisos (20-50-100 – de doble altura - por lo menos) están dedicados, al comercio: a zonas administrativas, tales como bancos, colegios, universidades; y zonas de trabajo de oficina en general. Además, para zonas dedicadas al culto a Dios; salones de estar y de juego; cafeterías, hoteles, teatros, restaurantes y lavanderías comunales, atendidos por androides; además, para bibliotecas; deportes cubiertos; juegos de salón: gimnasios y piscinas.

Como ya dijimos, la trama de esta novela, se desarrolla, dentro del marco, de la reunión, de varias familias provenientes de clases económicamente pobres; pero, que para ese entonces, debido a los grandes cambios Económico-sociales de comienzos del siglo XXI de nuestra era (Siglo MVIXXI; de la época faetonita; o sea, en un “ciclo” parecido, por el que hoy pasa “La Tierra”); han subido de estatus y viven (algunas subsidiadas) sin afanes económicos; como todas las familias de su nueva clase. Pero, sin embargo, en la que no faltan los problemas humanos, desprendidos de características Socio-culturales heredadas; y por las que no perciben culpabilidad alguna.

El sistema principal de transporte de la “época” es el “Autoing”; o, autos sin ruedas; cuya tecnología, se basa en la electricidad y el magnetismo; por cuyos conocimientos (en “Electro-dinámica”); ya se ha vencido a la fuerza de gravedad. Su flujo, como sistema transportador, es controlado por computadora; estos flujos, son de tres clases: Unos individuales, para cortas distancias y otros: Flotas colectivas, para grandes distancias. Los más, son vagones de carga; descargando sobre cintas transportadoras o, en estaciones, para el transporte colectivo, respectivamente. Los “Autoing” individuales y colectivos; viajarán por diferentes niveles; que se multiplican a medida que se acercan a los grandes centros urbanos. Los unos, descargan en las entradas de los ascensores exteriores de las “Súper-torres”; y los otros en terminales de ruta. Que comunican directamente a las estaciones ferroviarias y los aeropuertos; puertos marítimos; o, fluviales; si se trata de “Ciudades-estado”, cercanos, a grandes ríos o, al mar faetonita.



Así que tenemos:

Que para entender la trama de la novela de ficción; primero, realicemos un recuento de los principales personajes que intervienen en ella y en el ambiente que los rodea e incursionemos un poco, en su pasado, y en su presente:

Ferenixe : una quinceañera, muy bella que se enamora o, mejor, que se deja enamorar; o, que se acostumbra, al cariño de un hombre mayor, debido, a la constancia y a la persistencia del solitario Alberto; en el momento separado con dos hijos universitarios ya casados y viviendo en “La Tierra”. Además, de los otros 8 hijos que había tenido de tres matrimonios anteriores y sus 14 nietos, también en “La Tierra”. Sin embargo Al, a pesar de todo (de ser un hombre solitario.) Para hacer posible, semejante, osadía, los enamorados, cuentan con el apoyo de las primas de Fere, otras adolescentes que suspiran (como siempre) por los jóvenes de su época. Tenemos además, a los vecinos del “Súper-conjunto Habitacional y Administrativo”. Gente buena, trabajadora, servicial y muy cordial por raza; que mira asombrada, la audacia, para ellos, de la extraña pareja de novios, al principio en secreto y que luego, solo antes de su “Matrimonio Civil”; hacen público su amor.

Los faetonitas: (Los Akpalus) Son gente liberada, de todo concepto auto-destructivo. Como personajes de ficción, con una completa salud mental. Son auténticos y creativos en todo, a cada instante. Con cualidades muy particulares que por ejemplo: Les impide ser raciales, socio-económicos discriminantes; o, íntegramente sexuales. Así que no encajan en ningún trabajo específico; o, rol geográfico, nivel educativo; o, estrato económico. Disfrutan de todo lo que les brinda la vida; se sienten cómodos haciendo cualquier cosa y nunca pierden el tiempo quejándose o, deseando que las cosas sean de otra forma. Tiene entusiasmo por la vida y aman todo lo que de ella pueden conseguir. Les fascina el contacto constante con la naturaleza. En fin, a la mayoría de ellos, les gusta vivir y dejar vivir con plena libertad. Se deleitan con la realidad, disfrutándola intensamente, haciendo el bien y ayudando a los demás. Gente buena, sana y realizada que permanece libre de sentimientos de culpa y por lo tanto de ansiedad. Nunca manipulan ni se enfadan con los demás; no se atormentan con inocuas preocupaciones viviendo su eterno presente. Les encanta la ambigüedad y disfrutan solo del ahora, sacando el goce máximo de su vida diaria.

Para estos seres altamente desarrollados e independientes, como niños, el futuro es su presente y el pasado no existe para ellos. Enseñan amorosamente a sus hijos, un modelo de personas afectuosas y alientan su confianza en sí mismos. Son interiormente dirigidos por ellos mismos, sin importarles la opinión ajena; realmente no la necesitan, ni tampoco, su aprobación ya que funcionan como ellos mismos y no como quisiesen los demás; despreciando todos los convencionalismos. Saben reír y descubren el humor en casi todos los acontecimientos; sobre todo, son muy naturales y les encanta ayudar a los demás. Permanecen en paz aceptándose a sí mismos y a su único Dios. Trabajan en los asuntos que hacen la vida más agradable y tolerante a los demás. Se quieren así mismos con energía y cuidan sus cuerpos con auto-disciplina, comiendo y durmiendo bien; son honestos y son creativos por excelencia. No saben aburrirse, ya que todos los acontecimientos de la vida, les ofrecen oportunidades para vivir bien y curiosamente de una manera productiva que asombra. Son buscadores de la verdad y así, tienen un amor especial por la lectura; siendo eternos estudiantes que aprenden, nunca profesores que enseñan. (Tomado de apartes de “Tus zonas erróneas” de Wayne W. Dyer. Ed. Grijalbo. Pág. 305.)

Pero, no obstante, la pareja, no deja de despertar la envidia, entre los hombres, tanto jóvenes como en los mayores y suministran material, para burlas y charlatanerías, especialmente, entre las mujeres del súper-conjunto. Finalmente, la pareja en cierne, se defiende y sale abante con sus planes; gracias a la concepción religiosa y a la tenacidad del amor de Al; por un lado, y, por el otro, a la inteligencia despierta; al carácter fuerte y decidido de Ferenixe. Demarcando, un ejemplo, a las generaciones venideras, por este triunfo idílico, debido a la constancia y a la tenacidad; sobre los malos entendidos y la codicia de la gente. Conformando, además, y principalmente, por ende, un testimonio de la fe, sobre la razón. Hasta aquí la trama de ésta novela de ficción; veamos, durante su lectura, si ésta se cumple; o, no. Luego, dentro del desarrollo de la novela, veremos, entonces, si Fere y Alber, después de tanto tire y afloje... e incertidumbre, al fin se casan; culminando así, un amor extraño; sentido y luchado como pocos.

La electro-dinámica:

Nota:

Supuesta energía que mueve a los autoing; tanto terrestres como aéreos.

Se trata principalmente, de un “vuelo”; o, movimiento controlado; que aplica fuerzas magnéticas, conectadas en todo el planeta Faetón. Son producidas principalmente, por giros a altísima velocidad; que combinados con impulsos eléctricos; negativos y positivos: “Mueven la nave”. (La Inter.-dimensionan) Usando el principio básico de la gravitación; o, la interconexión de fuerzas de energía controlada por la Central de Operación Planetaria; que las repele y las atrae, en forma concertada, utilizado los siguientes principios:

1.- Combinación de fuerzas. (Eléctrica y magnética.)
2.- Utilización continua de la electricidad.
3.- Utilización continua del magnetismo.
4.- Producción interna, de giros a altísima velocidad.
5.- Acción continua de la atracción y la repulsión.
6.- Utilización (por la Central Planetaria) del campo de magnético del planeta Faetón.

Nos encontramos, pues, inmersos en un mundo (Faetón) al parecer irreal y a la vez onírico. En el cual, los mismos personajes, por instantes, trascienden en el “espacio-tiempo”; del pasado al futuro y a la inversa. Igual, que se Ínter-dimensionan; cambian de lugar; – y de planeta - constantemente. Encontramos además, situaciones de sorpresa, ante, nuevas y maravillosas formas de vida y de trabajo; según las cuales nuestros personajes se desenvuelven, a partir de los componentes culturales de la vida, como son: noticias, películas, TV-novelas, y la educación en general; vía “Red Internet Digitalizada y Tridimensional” (RIDT.) Aplicada, en algunos espacios de los muros (paneles) divisorios ambientales, de las pequeñas zonas sociales privadas (salas de estar) de las viviendas; o, con pantallas gigantes; empotradas en los grandes espacios comunales, de las plataformas de las torres habitacionales y administrativas. En donde, unidas por un gran vacío central, habrá además, grandes zonas de estar, de trabajo y comercio, en las partes bajas; o, en las plataformas de las “torres” componentes de la “Gran Ciudadela”, en cuestión. Integrada por Súper-multifamiliares, circundados, por anillos viales de cinco a diez carriles por dirección, interconectados por grandes puentes, tréboles (o, puntos redondos de varios pisos.) Y circunvaladas por altas mallas y garitas de control magnético (20-40-50 Mtrs.) Veremos pues, nuevas costumbres y formas de vida y de trabajo, brillar dentro de la trama de esta novela.

Será como, el mundo nuevo (Faetón) y la tierra nueva, de “La Biblia?” - O por lo menos el escenario que lo anuncie. Cuando ya se ha vencido el terrorismo, el bandolerismo, la delincuencia en general; y el afán de la juventud por la droga; gracias a los constantes planes de la autoridad mundial para combatirla. Faetón, al igual que *Nuestro Planeta “La Tierra,” como lo veremos; en esa época, muy moderno y en el cual, la gente ordenada y justa, se ubicará del lado físico que más la proteja; para dejar, el otro sector de ese mundo faetoniano, en manos de los “Des-adaptados”, los no justos y los imposibles; con su propia economía de consumo, sus leyes y sus “creencias”. Miraremos pues, con una óptica nueva, los diferentes escenarios en los cuales se dividirá y polarizará el planeta Faetón; ya Globalizado económicamente, e Integrado social y físicamente. No obstante, el amor, como lo veremos más adelante, no ha cambiado, en ese planeta; pues, sigue y seguirá por siempre su itinerario cíclico, de sufrir y de gozar.

Nota:

- *El súper-hombre Akpalus, conforma sus instrumentos; o, partes y les da utilización. - Le "enseña" (transmite) a conjugar; a funcionar, solo con el verbo “to be”; - con, un lenguaje (el Binario) unos programas, de su comprensión como máquina. Paradójicamente, con un “Ente” material (o estructura) cambiante y - fáustico - (ordenado a lo anhelante de infinito) dotado de una dinámica muy activa, pero, condenado a solo contemplar programas incesantes de “esencia” material y permanente; en forma de un devenir sin descanso, en la creación de espacios, puros y serenos; y desde luego, que delatadores. Ya que, de pronto, sea lo único que revele (en el Espacio-tiempo) tan siquiera, algo, sobre su existencia como civilización. -

Entonces, en ese planeta (Faetón); ya no hay enfermedades graves y el hombre Akpalus, está muy próximo a volar solo (flotar) pues, há vencido (o, dominado) a la fuerza de gravedad. Es pues, en una (o, en una gran serie de ciudades) “Ciudad-estado” nueva; dentro de una tierra, nueva; o, mejor, dentro de un planeta nuevo (Faetón.) Domina en ese mundo, la reciente e imperante filosofía del “Integralismo e Integrismo Mundial”. En el cual, la igualdad y la democracia, se imponen por medio de la asociación y la integración, en el ámbito mundial. Ya para ese momento, la libertad, la igualdad y la fraternidad; ideales que fueron en su época, ahora equilibrados con la integración, la asociación y la democracia cooperativista; para formar un “Estado Mundial Faetonita” nuevo; con parámetros económicos de distribución, administración y desarrollo; con planeación en el nivel general. Que, gracias, a la “Cibernética Inteligente” como instrumento primordial, fueron permitidas y hecho posible, en la globalización del Capital y del Trabajo; con una producción en masa y una distribución equitativa general. El dinero plastificado, conforma además, la distribución de la riqueza en forma global y equitativa, dando al trabajador, una muy buena (50%) participación en las ganancias (o, utilidades) dejando la plusvalía (100%); al capital. Filtros y sistemas de alarmas económicos, dejan al Estado Faetoniano, total responsabilidad en el manejo de la rentabilidad mundial de Faetón; en cuanto a los “bienes del primer orden” se refiere. Así, la oferta y la demanda, esta neutralizada por sistemas de computo mundiales, que permiten, una justa distribución, ante un consumo controlado; por lo menos, en cuanto a los “bienes y servicios básicos”, estipulados en la economía moderna de la época.

Por último: En cuanto a la parte sociológica y psicológica, la mayoría de sus habitantes (los Akpalus) ya han vencido enfermedades como la “neurosis”, por medio de descubrir a tiempo sus zonas “erróneas”; asumiendo responsabilidades y sosteniendo intactas sus zonas “erróneas”; ya que sus sistemas de mantenimiento funcionan perseverando ajena, la culpabilidad y neutralizando oportunidades de cambio. El solo hecho de mantener anulados los comportamientos de * “auto-derrota”; por tales circunstancias, ha hecho que el crecimiento total sea posible; al eliminarse las razones que destruyen las zonas “erróneas”. Hay dos razones poderosas; la primera tiene que ver con la capacidad de decisión; acerca de las propias emociones. Examinando sus vidas a la luz de las decisiones tomadas; o, no. Lo que hace responsable, de lo que se es; o, de lo que se siente. Tomando conciencia al instante, de las posibilidades de opción, que se encuentren al alcance. (Tomado de “Tus zonas erróneas” de Wayne W. Dyer. Ed. Grijalbo.)

Nota:

*Se le echa la culpa a las circunstancias por lo que se es. Las circunstancias no existen. Se debe ir en busca de las circunstancias que se quieren; y si no se las encuentra, se las hace, se las fabrica.


Capítulo I

La medida del amor, es amar sin medida. (San Agustín.)


Alberto y Ferenixe :

Situamos, a nuestros principales protagonistas en esta novela de ficción: Alber y Fere, en los últimos pisos de una de las torres que conforma el Súper-sistema “Nucleario” de vivienda, denominado “La Playa.” Súper-torre C., (de 1200 pisos; o sea, de las más pequeñas; pues, hay otras de cinco mil pisos); del sector central de anillo principal de la Súper-ciudad de Mellín; del País: Colbia un importante integrante del Grupo de Estados del “Súper-continente suramericano” (G.S.A.) de Faetón.

Cuando, Al (de 57 años); recién llegado al complejo habitacional nucleario; pensionado por el Estado, al cual le dedicó casi 40 años de su vida en “La Tierra”. (Su padre, lo hizo trabajar desde muy joven.) Sin embargo muy conservado, alto, atlético, fibroso, musculoso y bien desarrollado con pectoral amplio, fuertes brazos y piernas; y nada de panza; esto, hacía que su edad, no se notara mucho. Alber, últimamente, para disimular, decía que solo tenía 47 años. Su cuerpo musculoso y tremendamente velludo; lo cultivaba en el gimnasio; sitio en el que además alzaba pesas.

Alber, se encuentra muy feliz porque después de tres meses de constante y tenaz insistencia por el amor de Fere (niña, de solo 14 años; pero que con sus 1m.80 Cmtrs. de estatura y sus medidas 60:80:95 Cmtrs; aparenta tener casi 20 años); quien conoció en un “Bingo”, realizado por las tardes, en la plataforma de la torre “C”; en la que vivían; y quien además (Fere); poco a poco, se le fue insinuando a Alber; en el sentido, de que los dos podrían tener algo; pues, la verdad, fue ella, quien le dio esperanza; y lo animó a la relación entre ellos. Ya que Alberto, se sentía ya retirado de esos avatares de la vida; pues, éstos, le habían proporcionado muchos desengaños; ya que había entregado todo, a cambio de nada; pero nada de nada; solo pérdidas; hasta llegar precisamente a eso, a no tener nada. O sí, ahora... a su Ferenixe del alma.


Una unidad urbana típica en Faetón.

Integrada, en una zona industrial, la región agrícola, es en el concepto de reagrupamiento económico Faetoniano, de participar de las ventajas, de las que aquella se beneficia. Así, llegaron a la noción de unidades urbanas extremadamente diferenciadas; en las que se fusiona, la aldea tradicional; el parcelamiento residencial, tal como existía en los arrabales de las grandes ciudades (de sus comienzos, ya muy lejanos en su tiempo); y el centro administrativo, comercial y cultural. Estas unidades, se volvieron así: subdivisiones de la estructura rural, e industrial en la que se integran. Llegaron pues, también, al hecho mismo de que se puede interesar diversos aspectos del equipo nacional, en el interior del marco agrandado; que desde ahora es el suyo; de hecho; especie de pequeñas capitales locales; o, mejor aún, de barrios separados (Ciudad-estado); en el seno de una entidad más amplia, que puede bastarse a sí misma; al mismo tiempo, que se insertan en la evolución global de la región, a la que se han asociado.

Entonces, la ciudad y la aldea, desapareció en Faetón; para dar lugar a una aglomeración de un tipo mixto que, al revitalizar la vida rural, la revalorizó, con el contacto del modo de vida urbano e industrial. Pudieron pues, imaginar, a partir de ahí, la creación de una red completa (integrada) de localidades perfectamente estructuradas entre sí; para responder a las necesidades y adaptarse a la nueva repartición geográfica y demográfica de la región. Entonces, las grandes ciudades sobre-pobladas; se auto-desarrollaron estratégicamente con autarquía, dentro del campo; como las pequeñas aldeas aisladas, su letárgica. El campesino (de corbata, lo llamarían en “La Tierra”) goza ahora, de las comodidades de la ciudad; y el obrero escapa del hacinamiento de los grandes centros. Una realización como ésta, solo fue posible en Faetón; evidentemente, si las distancias entre las explotaciones agrícolas, por una parte; y las de las industrias, por la otra; y los lugares de habitación fueron reducidos; así, al unísono, se pudo poner en marcha todo un sistema de concentración gigante; pero a la vez, con grandes espacios para su desarrollo.

Por ejemplo: Eso, fue posible, principalmente, por desarrollar nuevos sistemas de construcción, con base en materiales muy livianos, a la vez que muy fuertes: primordialmente de “acero carbonado”; lo que les permitió, la obtención de tejidos de alta fortaleza y resistencia a la tensión; lo cual, combinado con otros materiales (plásticos, con base de asbesto, muy resistentes al fuego) y con otros tejidos igualmente livianos resistentes a la compresión; les resultó, lo que denominaron: “Sistema texturizado de construcción en bulbo” – STCB - ; o, Mega-ciudad, construida en contexto alveolar; que al igual que las telarañas; o, los panales; son muy fuertes y livianos (para su tamaño.) Con ello lograron alturas en un promedio; entre: los 2.500; a los cinco mil Mtrs.; por “Mega Pto”; anclado, además, en bases de concreto reforzado; en las cuales, funciona la parte administrativa, gubernamental, sanitaria y comercial. Dejando la parte alta para localizar la vivienda. Ubicando, en las plataformas de unión: Sitios para recreación y deporte; logrando así, una distribución entre las “torres” resultantes; que va, desde los 5 mil Mtrs; a los 10 mil Mtrs; con totales, de hasta los 25.000 Mtrs; de radio, por Mega Pto. Lo que cambió para siempre, en Faetón; los conceptos constructivos de la arquitectura; que ya no es portante, sino, colgante.

El súper-proyecto alveolar; verdaderamente, constituyó, un urbanismo: Ciudad-campo; Campo-ciudad; pensado para el hombre faetoniano (el Akpalus); del quinto milenio (el superhombre, del ciclo de su tiempo); Con nuevas formas de cultivar (mecanizando el campo); y de explotación pecuaria (verdaderos centros de crianza, levante y carne en canal; ya como materia prima; pues, su alimentación se basa, en productos resultantes de la deshidratación y la consecuente pastilla); donde los “robots”; hacen la parte peligrosa, dura, sucia y tediosa; de la actividad total agropecuaria; realizada en los alrededores (parques) de los “Mega proyectos” de torres. Así fue como el concepto de “vivir, trabajar y descansar en el cielo”, fue ciertamente... eso; pero dentro de estructuras inmóviles, en las que la apariencia de inestabilidad, es solo apariencia; combinando la parte estética, con variedad de diseños, para evitar la monotonía y el tedio; integrando concentraciones de “Torres” altas con bajas (de 5 mil Mtrs., de altura; con Torres de dos mil quinientos Mtrs., y aún de mil Mtrs., de altura; desarrolladas, con diferentes distancias entre ellas; y unidas, por cintas – carrilera - para la circulación de “autoings”; o sea, autos eléctricos elevados, e impulsados con una energía que combina la electricidad con la fuerza magnética. En otras palabras: como gigantescos “panales”; con arquitectura y urbanismo alveolar. Portal, de la revolución, de finales de su sexto milenio, realizada por ellos; para posteriormente: Vivir en gigantescos anillos – sintéticos - que más tarde rodearon al planeta – como los de Saturno, pero éstos, sintéticos y funcionales, para los Akpalus de Faetón. -


El premio a la insistencia.

Ferenixe... al fin le ha dado el Sí... en sus relaciones amorosas; pero, con la condición de que el supuesto “noviazgo” fuese oculto, a la gente y en el secreto (compartido) de los familiares; seguramente, que para protegerlo. Se conformó, entonces, lo que puede llamarse un amor “Platónico”; o, una especie de cuento idealizado, al estilo de Shakespeare; digno de encuadrar, en un idilio extraño como pocos (o, amor espiritual.) En el que se ama por amar; y en el que se da todo, a cambio de nada; al principio, solo con miradas, de lejos. Resulta que: Se ha hecho una costumbre que Al, espere a Fere cerca de la Torre C., donde viven (Fere y Al) para acompañarla un tramo (hasta el “puente”) en su ruta al (Liceo) “Colegio Campestre”. Al, la aborda, le hace comentarios y le cuenta historias, fábulas, adivinanzas y por último... chistes; además, aprovecha, en ese momento, la oportunidad ofrecida, para preguntarle (nerviosamente) sobre su decisión de aceptarle el noviazgo. Alber, ya ama a Fere; quien, en una de sus charlas; le ha comunicado por ejemplo: Fere, - “En una relación, lo que importa, no es lo que ocurre a nuestro alrededor; ni lo que nos llega de afuera; sino lo que sucede en nuestro interior”. - Expresión que dejó estupefacto a Alber. Además que Fere, no conoce, ni maneja palabras negativas, como por ejemplo: Peligro, daño, mentira y sobretodo: Ferenixe, no conoce la ansiedad. Por lo tanto, su naturalidad, raya con su inocencia; que hace un fuerte contraste, con su muy desarrollado cuerpo de sirena. La verdad, Fere (por su cuerpo y por su mente; que era capaz de manejar, más de 500 dialectos, de los Akpalus) aparenta tener una edad cercana a los 20 años; Ferenixe, es pues, una mujer fuera de serie.

Alberto: – Ferenixe... muñeca, hablando de otra cosa: Que más me cuentas... amor... ya te decidiste a aceptarme como tu novio o, en el caso contrario, hasta cuando me vas a aceptar... mira que estoy locamente enamorado de ti; y ya no aguanto más tu indiferencia a esta situación. –

A lo cual, Ferenixe, le manifiesta, tener paciencia, que pronto le dará el sí. Al, suda frío cuando se acerca a su Fere del alma; se traba y no puede hablarle claro, sobre cuestiones de amor; por temor a ser rechazado. Hasta que una tarde, paseando juntos por los jardines del “Súper-conjunto Habitacional Nucleario”; Ferenixe aceptó por fin el noviazgo; pero, con la condición, de que esta relación, sea en secreto. La siguiente charla entre ellos lo dice todo:

Alberto: – Mi amor, pasando a hablar de otra cosa... que contestas a esta incertidumbre en la que me encuentro sin ti. Son casi tres meses de insistencia. Me haces falta y mi vida no la hallo sin tu amor. -

Fere: - Ten paciencia Alberto, que yo solo espero solucionar algunas cosas y te doy mi respuesta. Por ahora te adelanto que ya siento algo por ti; mucho... mucho y que tú también me gustas bastante; desde el primer día en el que te vi; pero, para mi no es fácil aceptarte... tu sabes... pero sin embargo... no importa... yo ya te quiero, y tú puedes estar tranquilo Alberto, que yo sí te quiero... y mucho... mucho de verdad. Bueno, chao... que se me hace tarde. -

A lo cual, Ferenixe notando la tremenda preocupación de Al, con elegante coquetería, dando una pequeña vuelta sobre sí misma (que hacía ver su falda plisada a cuadros rojos y azules, de colegiala, como una campana, que al repicar, anuncia la buena nueva y que resalta con su blusa, sus medias blancas y zapatos azules; además, con su gran capa roja) Fere, le dijo... ya casi corriendo para el Liceo:

– Fere: Bueno... chao... mi amor... y sí Alber, ya lo he decidido, que sí quiero ser tu novia... pero en secreto... y chao... chaíto... que ya voy a llegar tarde... te quiero... –

A lo cual Al, muy contento, trotando de para atrás, al lado de ella, le manifiesta estar de acuerdo con la determinación tomada por su Fere adorada; ya que la esperaba afirmativa, y con locura. Y se regresa a la “Torre C”. Trotando al brinco, ahora, de para adelante; como un adolescente, pletórico de la dicha. Fere, es franca; sincera; no conoce la ansiedad; e inspira absoluta confianza. Significa pues, la persona perfecta, para que le explique muchas de sus dudas, sobre la realidad que estaba viviendo en aquel planeta (de otra dimensión.)

Resumiendo: Esta relación, comenzó cuando Al, acostumbraba, suspender su trabajo (era escritor); para salir a tomar aire natural (a tomar el fresco; y hacer un rato deporte) a la plataforma de la “Torre” donde vivía recientemente. Una tarde viendo jugar “Bingo”; aunque no le gustaba el juego, al ver una muchacha muy bella jugando entusiasmada; se le acercó (animado... por que creyó ver que ella le hizo señas para que se acercara... Y así fue, ella al verlo... automáticamente alzó la mano para llamarlo; pues lo vio como buscando algo y además para adelantarse a sus primas que la codeaban) disimulando... Alber, le preguntó si era posible sentarse junto a ella, para jugar. A lo cual ella, muy coquetamente... aceptó (codeando a su prima que jugaba al otro lado; como quien dice .. te gané. .Mi musculoso hombre, en pantaloneta corta y franela blancas; viene hacia acá - Alber, pretendía, también, esa tarde, jugar un rato su deporte preferido el “Tenis”, pero, como no encontró con quien jugar, se dedicó a pasear.) Alberto depositó su equipo de juego, debajo de su silla, y se sentó; arrimando bien su silla a la de Fere. Prácticamente no ponía atención a los movimientos del juego, y ella, era quien supervisaba las tablas del juego, de ambos. Entre tanto Al, muy arrimadito a ella, la miraba extasiado; y contemplaba con suma admiración, el bamboleo de sus piernas al tenerlas cruzadas; y el rítmico apretar sus muslos; debido la roce del cuerpo velludo de Alber, en sus piernas y muslos; hombros, y brazos (desnudos); Ferenixe, lucía esa tarde un escote y una blusa muy generosa, vaporosa y transparente; y unos shorts; que dejaban ver aún más la maravilla de sus piernas y la majestuosidad de sus muslos; junto al contraste de su cintura de avispa. Era concluyente, que la cercanía y el roce del cuerpo velludo de Alber, excitaba a Fere; y así duraron mucho rato, hasta el anochecer.

Pero, resulta, que cuando ganaba el uno o, el otro, saltaban y se abrazaban de la dicha. Así, comenzó aquel idilio. Se preguntaron los nombres, los teléfonos y las respectivas direcciones y se hicieron amigos. Entonces... Al, resolvió pegársele del todo a Fere, y así, muy pegaditos, continuaron su juego por un largo espacio de tiempo. Alber, le proporcionaba a Fere, furtivos piquitos en los tersos hombros desnudos de la muchacha; quien, picándole el ojo, ya los aceptaba gustosa. Hasta, que el “novio” de la joven, repentinamente... llegó; y al verlos muy juntos y pegaditos; como dos tortolitos; tomó bruscamente el brazo de su “novia”; y la sacó del recinto comunal. Al se contuvo, pues no sabía lo que pasaba; y solo dijo para sus adentros (jusnn, pobre alfeñique.) Pues era muy flaco y bajito, el tal novio de Fere; dizque de toda la vida, según se lo manifestaron las primas de Ferenixe.

Transcurrieron varias tardes... pero nada que Fere, bajaba de su apartamento a jugar. Entonces Alber, cansado de esperarla... cuando se acabó el juego, resolvió ir a buscarla. Recibiéndole la misma Fere (estaba sola; sus familiares habían viajado para la finca de la abuela de Fere; y ella por algunos compromisos de estudio, se uniría a ellos, al otro día muy temprano) quien muy coquetamente, le puso la mejilla a Alber; y este se la besó con suma ternura. Ferenixe, vestía esa noche, una pijama, y una levantadora blancas, vaporosas que traslucían sus espectaculares formas femeninas; las cuales dejaron a Al, nuevamente extasiado; tal como si nunca hubiera visto nada igual. Se sentaron muy juntos, un rato, en el sofá de la sala (plástico, abollonado y muy amplio) del apartamento de Fere; junto a la chimenea (sintética.) Charlaron largo tiempo; y de pronto, Fere, invitó a Alber, a tomar un refresco; el cual se bebieron, esta vez, sentados (a lo Buda) sobre unos cojines de vivos colores, puestos al azar sobre la alfombra; junto a la chimenea. Luego Fere, puso música y lo invitó a bailar... bailaron (bien macizados, Alber al apretarla contra él y le sacaba el aire a Fere, el cual le salía por partes, como anhelos de algo... al rato, y al unísono... ya con miradas complacientes de pasión; los dos pegaron sus sexos y los restregaron mutuamente, hasta sentir ya el calor excitante de la pasión sexual; Fere, sintió el abultado miembro de Al, casi erecto, contra su pelvis... acción que también la exitó; lo tomó con sus manos de los hombros para apoyarse; y ella colaboró, apretando aún más y empujando ya directamente con su bulba, el miembro ya erecto de Alber; todo... al ritmo de la música, mientras Alber, hacía lo mismo, tomándola directamente de las nalgas; hasta sentir un leve jadeo, lo cual fue ya... como un preámbulo, al acto sexual); con miradas amorosas; apretaron y rozaron rítmicamente (sus sexos) por otro largo rato, aún después de terminar la música y volvieron a sentarse (después de sentirse aliviados del calor sexual, pues por el roce constante y rítmico, creyeron desfogar sus instintos, ya que duraron en esas, más de una hora solo frotándose, ya sin música.) sobre unos cojines de brillantes colores, que resaltaba con la blancura de la alfombra.

Sucedió, que Alberto, al quedar frente de la muchacha; observó que por entre el ancho pantalón de la pijama de Fere; ésta en forma descuidada, dejaba ver algo de la parte sexual vaginal... dejando con la boca abierta a Al. Viendo Fere, tal situación, con disimulo, separó lentamente los pies, arqueó las piernas y abrió más los muslos, para que Al, pudiera ver mejor, lo que tanto lo tenia extasiado. Tal espectáculo, lo lleno de lujuria; ese imprevisto, duró un largo rato; hasta que Alber, después de una animada charla sobre natación (curiosamente, el deporte favorito de ambos) se paró... y se dispuso a despedirse de su adorable amiga. Pero ésta le rogó que todavía no se fuera; a lo cual Al, la recostó en el sofá; se abrió la bragueta, se sacó el miembro y directamente le hizo el violín a Fere, por un lado del ancho calzón de la pijama de Fere; hasta sentir nuevamente los jadeos y los estertores de Ferenixe; y el rápidamente, tomar un pañuelo de su pantalón, envolverse el miembro y derramarse entre el pañuelo. Luego, de descansar por un rato bien abrazaditos; Al, se paró y se dispuso a salir; entonces Fere, entre dormida lo acompañó hasta la puerta; sitio en el cual, Alber, le estampó, un muy demorado beso en la mejilla de Fere, después de otro igualmente demorado apretón de manos; y seguidamente un largo abrazo muy acunadito (Al, se fue para su apartamento muy contento por tal visita; y por el avance ya directamente sexual de la relación.); no sin antes, quedarse de ver otro día, en la piscina de la base de la “Torre C”, de la residencia de los dos amigos.

Efectivamente, a la semana siguiente, sin falta, cumplieron su cita los enamorados. El cuerpo de Fere, era espectacular en su mini vestido de baño. Alber, calculó que sus espectaculares y voluptuosas medidas de súper-reina: eran entre los 90:60:95. Las cuales con sus 1.80 de estatura; la encuadraban como para concursar, especialmente, por la gran belleza de su rostro angelical. Fere, le pidió a Al, que le untara protector solar. Y Al, gustosamente, no solamente, se lo untó, sino que muy despaciosamente, le masajeó parte por parte (sin excluir nada) todo ese despampanante cuerpo de reina. Luego nadaron, toda la tarde, sincronizadamente, uno junto al otro. Y al rato descansaron en el borde de la piscina; Fere, recostada sobre el piso junto, a la alberca; al reírse, dejaba traslucir toda su blanca y fantástica dentadura; entonces, muy pegados; la una recostada y el otro casi encima de ella... (tapándole el Sol, a pedido de ella) charlaron de todo; como dos viejos amigos. Hasta que Fere, le propuso a Alber, que jugaran un movimiento que consiste el servir de trampolín alternadamente el uno con el otro. Se subían en el hombro de cada uno y desde allí se botaban. Muy complacido Al, aceptó. Juego que aprovecho para acariciarle nuevamente a su amiga, todo ese súper-cuerpo, de súper-reina. Caricias que Fere, aceptó muy coquetamente, con picaditas de ojo. Luego jugaron con una pelota de plástico dentro de la piscina, hasta que el cansancio los agotó; nadaron un rato por debajo del agua, dándose piquitos y Al, acariciando resbalosamente (debido a el agua) a Fere por todo ese cuerpo de reina. Al, hasta le tocó y masajeó con insistencia el sexo de Fere. A lo cual ella aportó tomando la mano de Al y aprendo aún más su ya... ansiosa vulva. Salieron del estanque y se despidieron con un fuerte apretón de manos y dos besos alternados, muy demorados, fuertes pero, tiernos de Al, en las mejillas, ya muy... muy cerca de la boca de Fere; y se dieron un fuerte abrazo acunadito. Esta fue una despedida ya que Fere se iba al otro día a la finca de su abuelita. -

Resulta, que en lo del “novio” de Fere; Alber, no se metió para nada, ni siquiera se lo insinuó. Solo supo por sus primas (como sabemos, Fere, se las presentó durante un “Bingo”) que desde la tarde, en la que él (novio de Fere) los vio en el “Bingo” tan pegaditos, le terminó el noviazgo. Sin embargo, a pesar de que Al, sospechaba que Fere, no había peleado del todo con su “novio” (el de siempre); lo encontramos encerrado en su biblioteca, desarrollando una carta para su amada (en la cual, le trata sus intimidades con suma franqueza y disimulo; pues, teme que seas leída por otras personas; sobretodo, por su hermanita) en estos términos:


Ferenixe :

Vida mía, novia mía (en el secreto compartido.) Amor de mis amores, hoy yo quiero contarte y comentarte muchas cosas; y son mis pensamientos, los cuales, espero que te gusten: Una niña se encuentra en un (para ella) laberinto. Y lucha por salir de él, hasta que lo consigue a través de la sinceridad consigo misma. Una vez que aprendió a amar de verdad y lo escrutó; descubrió que los seres son iguales ante Dios y muy bellos todos, sin ninguna distinción de edad y sexo. Que el interior de las personas es muy hermoso y dúctil, a las cosas del Creador. Niña de mis ojos, mujer de mi alma, también hoy quiero comentarte que creo saber él porque tú cambias de un momento a otro, sin aparente causa: ¿Es, por el temor a perder, para ti lo más preciado, que es tu libertad? Pero mi bella, hermosa y sincera niña, dime: ¿Quién sino Dios, puede coartar tan preciado Don? Sé también, que todo lo soportas, menos el hecho perder tu independencia. Mas, te digo, que en el mundo, no existe nadie, con el poder (divino) de quitarte eso que tanto amas (tu libertad e independencia.) Por esto, aunque sé que por ello, hoy sufres; mañana gracias a tu esfuerzo personal y al estudio; gozarás de libertad (espiritual, intelectual y moral) por ti y solo por ti, así conquistada:


“Buenos días tristeza.”

Es que temo, no poder sacarla de tus ojos,
Como quisiera yo sufrir, lo que ayer sufrías,
Si quitar pudiera la tristeza de tus ojos,
¡OH! tristeza, sin embargo, buenos días,
Al conocer, la angustia que vi en tus ojos.

Cuanto deseo, mi vida, en tu nombre perder,
Quiero sufrir, en un corazón como el tuyo,
Yo pienso que puedo y lo quiero aprender,
Y saber cómo es que se sufre por algo tuyo,
Evitarte el sufrimiento, pasándolo a mi ser.

Pues, así, sería mejor que yo sufriera,
Aunque solo por ello yo me muriera,
Y reemplazarte a ti mi vida, si pudiera,
En vez de ser tú mi amor la que sufriera,
Pero el sufrimiento es tuyo, aunque pudiera,

En esos ojitos, no se debe anidar el llanto,
Eres tan bella y tan buena, que se sufre,
Al ver solo a veces, en tus ojos el llanto,
Que sería mejor que fuese yo el que sufre,
Para evitarte la gran agonía por ese llanto.

Hay veces en la vida que es mejor ser otro,
Y ayer, fue un día en el que quiso ser otro,
Ese al que amas, y por el que sufres... ese otro,
Pero, nada vale una de tus lágrimas, por otro,
Las debes guardar sin derramar... por otro.

Eres tú tan bella, tan dulce y tan hermosa,
Así como una gran y muy fina piedra preciosa,
Para guardar y resguardar bien por valiosa,
Con sentimientos... mejores mujer grandiosa,
Que no podría ya vivir sin ti mi niña hermosa.

Pero, cómo me asusta y cómo me azora,
Tu sola presencia, por ser hermosa y bella,
Nunca dejar pudiera eso que en mi atesora,
Y es tu presencia de niña preciosa y bella,
Con un cuerpo de mujer que mi alma añora. A.G.


Mi Fere, luego piensa, que por mí, si de mí depende, libre siempre serás y con justicia; que esta característica, no te la pienso nunca arrebatar. ¿Quién soy yo para hacerlo? Es tuya y solo tuyo, por ella luchas, por ella sufres, por ella lloras y las haces respetar a toda costa. Por esto, hoy quiero serte franco, tan franco que espero me perdones. Yo no deseo, en el futuro amarrarte, ni siquiera a través de los hijos. La verdad, es que no te separaré de tus amistades, ni menos de tus familiares; los que por mí parte, conservarás hasta cuando tú así lo quieras; ellos ocuparán en tu corazón, el sitio preferencial que tú le des. Solo pide de ti fidelidad, amor, compañía y sobre todo comprensión y colaboración sincera. Te pido además, que los días soleados, sean para tus estudios y para ellos (tus familiares.) Solo, las noches (frías) para este ser que te adora. Porque todo será para ti, con tal de nunca, pero nunca, perderte. Porque esto, hoy yo lo sé (perderte) sería mi destrucción y mi aniquilamiento total. Entonces, nunca, ya más intentaría volver a amar. Por último, mi Fere adorada, quiero manifestarte: Que sí, que estoy muy feliz por que lo nuestro ya cumplió varias semanas; pero, mi Fere, es muy duro saber que tú todavía tienes a tu novio. Porque yo lo sé. Que de pronto has confundido amor secreto con amor compartido, lo cual no es lo mismo (es antinatural.) No, de verdad, eso, no lo puedo soportar ( me hace mucho daño.) La cuestión es ¿Qué hacer? ; ¿Perderte? ¡Eso nunca! Luego la respuesta, tú y solo tú, la tienes. Mientras tanto, lo nuestro (creo) debe entrar en una etapa de espera; y solo, cuando tú hayas definido tu relación, tanto con el uno, como con el otro; volver a reiniciar, no digo el amor entre los dos, porque este ya nació y no morirá tan fácilmente (yo, por mi parte, creo que nunca.) Reiniciaremos, algo que es vital para el amor, nuestros encuentros personales, que lógicamente deben ser llenos de intensas caricias y besos.

Tuyo, tu “novio” (secreto) que te amará eternamente: Alberto Mellín, Marzo 11 de 2020


Trasciende de esta muy sentida carta, una percepción de culpabilidad y deseo de sacrificio, por parte de Alber, cuando prefiere ser él quien sufra por una causa... casi que perdida; pues, Al, descubre que Fere, todavía ama a su antiguo novio. O, por lo menos éste con tanta insistencia, lo hace aparecer así. (La verdad... es que los familiares de Fere le tenían escogido... futuro esposo, como en los tiempos antiguos; al parecer una vieja costumbre faetonita.) En cuanto Ferenixe llegó de la finca de su abuelita; desesperadamente, a la madrugada del día siguiente (de ver a Fere una tarde y al novio muy juntos tomados de la mano) Alber, vuela por el corredor que conduce al Súper-ascensor, del piso 900 a 920 para entrar furtivamente a la alcoba de Fere, (Al, se ingenió un sistema para que el robot, de servicio del apartamento de Fere, le abriera a él también. Consistente en saber la clave de la cerradura de la puerta de entrada al apartamento y como Fere, descuidadamente, la digitó delante de Al, este la memorizó.) Entonces, encontrarla dormida (dejando entrever su maravilloso cuerpo, medio cubierto, solo con un vaporoso, transparente y muy bello cubre lechos rozado.) Al, se arrodilla junto a la cabecera, contemplándola un buen rato; luego, acercándose bien frente a la cabecera de la cama o, colchón de aire; Alber, le desea los buenos días; y le estrecha amorosamente la mano; a lo cual Fere, sorprendida, le pregunta:

Fere: - ¿Cómo entró? – Él, le contesta al instante que:

Alberto:- Un angelito... igual que tú... bajó del cielo y me abrió. - Y enseguida... (sin esperar respuesta alguna) le estampó un ardiente y suave beso... en su mejilla, y otros muchos en su cuello y en sus hombros de súper-reina; igual que en la parte interna de sus maravillosas rodillas y piernas, luego le besó los pies; en fin, en todas las partes de su cuerpo que estuvieran descubiertos despreocupadamente en ese momento. Besos, que ella aceptó... coquetamente, con inocente gesto. (Pestañeaba en forma afirmativa y por demás receptiva.) Al, le dice suavemente al oído, para que no oiga su hermanita, (de 8 años) que a veces, cuando no se ha ido para el colegio, duerme en la cama gemela de al lado:

Alberto: - Mi vida, como amaneciste. ¿Mi amor durmió? A que hora te acostaste, te pensé mucho, tanto, que soñé contigo, amándote... haciéndote el amor... como todas estas noches. De nuevo te digo que hoy no quiero salir de mi apartamento a la zona social de la Torre, para no verte charlando, muy tomados de la mano, con tu novio... (él... de siempre.) Eso me duele en el alma, no sabes cuanto, me causa daño, me produce celos. -

A lo cual Fere, entre sueños pestañea, como aprobando la decisión de Al, quien nuevamente la besa con ardor... mirando hacia el lecho de su hermanita para ver si todavía duerme, (en la cama – colchón de aire - gemela de al lado) volteada para el otro lado... entonces muy suavemente, pasa su mano por debajo del cubre-lechos, para acariciarle despaciosamente todo ese maravilloso cuerpo casi desnudo; le acaricia (sin tocarla) despaciosamente... con las yemas de los dedos: los senos, la espalda, las nalgas, los muslos, las piernas y los pies (como recordándole... las caricias hechas hace y casi un mes al borde de la piscina; y las hechas en la visita pasada.) Finalmente, le masajea con insistencia el sexo a su amada. Luego al ver que su hermanita permanecía todavía dormida y volteada para el lado contrario; entonces, y como Fere, aceptaba muy quieta... tales caricias, procede a medio destapar muy brevemente y besar toda esa fruta silvestre... ya madura; y obviamente, que también, sus mejillas, muy pero muy cerca de su boca... carnuda tierna de color carmesí.

Y se retira, no sin antes, nuevamente volver a besarle parte, de su esplendoroso cuerpo; principalmente: El cuello, el hombro, el brazo y una rodilla (derechos) que todavía, a pesar de haberla cubierto y Fere, volver a destaparlos; salían desnudos, frescos, fragantes e insinuantes, del transparente y vaporoso cubre lechos rozado, de la cama de su “novia secreta”. Caricias, que ella al parecer ya sentía y aceptaba, coquetamente aparentado por ratos, estar aún dormida, pero con una latente y amorosa incertidumbre y un sentimiento inmenso. Y más, cuando Alberto, demoró sus manos y sus dedos en su sexo... y se lo frotó largamente; hasta que ella, le tomó sus manos, y ayudando a la faena, abrió las piernas y los muslos; y se apretó aún mas el sexo con ellas... exhalando ya... suspiros (muy disimulados) de pasión (eran sus primeros orgasmos de verdad junto con los ya proporcionados por Alber... la noche, inolvidable para ella, de su visita; por lo menos así lo anotó en su diario.) – Fere, era muy apasionada y expresiva. Sin duda la inesperada y cariñosa... visita de Al... le producía un intenso... placer. Pero, todavía, en ese momento, no sabía que hacer. Era que a ella, ese hombre... con cara de Adonis; tan varonil; musculoso y velludo; fuerte, ancho de pectoral; y sobretodo, abultadito de sexo; y además, de contextura atlética... le gustaba mucho... le fascinaban sus 1 Mtr. con 90 Ctrms., de estatura (bien repartidos.) Así lo registró en su diario. Y al tenerlo junto a su cama, justo después de haberlo soñado, así... pero durmiendo... con ella y haciendo el amor: Esto... ya era una muy sorprendente y grata coincidencia. La verdad, Fere... no sabía si estaba soñando o, tal evento... estaba sucediendo de verdad. Estaba aún confundida. – Pero no obstante, todo lo que sucedía entre los dos, estaba en el más complaciente y estricto secreto.

- Alberto, al oído le dice: - Bueno... mi amor, mi Fere... pórtate bien hoy y estudia mucho... no me vayas a defraudar. Te adoro... mi ángel bajado del cielo. Mujer... de mis sueños y de mi vida. Recuérdame y recuerda... las caricias que esta mañana... yo te hice. -

Pero, esa tarde Alber, vio nuevamente... (muy arrimaditos, sus celos lo hicieron ver eso) a Fere y a su “novio” llegando del Colegio. Un terrible conflicto se cierne sobre el alma enamorada de Alber. Fueron tres meses de intensa insistencia, para que fuesen novios (en secreto) y ahora con solo unas semanas de “noviazgo”; pasó lo que pasó; sería como tirar todo al cesto de la basura; al decirle a Fere, que ya no más y que todo terminó entre los dos. Que siguiera... así... pero, con el noviecito... ese, de toda la vida. Al siguiente día... Esa mañana... muy temprano Alber, toca el friso del lado oriental de su alcoba y prende el inmenso T.V. (plano) que adorna el recinto; lo cambia una y otra vez de canal, y lo apaga bruscamente. Desesperadamente se dirige a su biblioteca y llama por el “Tele-video” a la también hermosa prima de Fere (a quien Fere, le presentó en una ocasión... ya como su novio; con quien además, dizque, muy pronto se casaría... esto para sacarla del paseo... por si acaso.) a quien, Ferenixe le tenía mucha confianza:

Alberto: - Hola, que tal... preciosa... te habla Al... resulta que ha pasado algo imprevisto y no puedo más... tu prima Fere, no ha dejado al tal “novio” o, ya de nuevo anda con él. ¿Que hago? Esto me preocupa; para mí la situación es muy grave, vente para mi apartamento y planeamos que hacer. Pero hazlo ya, te lo ruego. Ah... y perdóname por lo temprano que es. -

Al rato, la prima de Fere, presurosa, sale de su apartamento ubicado en el piso 900 y se dirige al de Al; pero, en el ascensor casualmente se halla con el “novio” de Fere, quien, le cuenta la conversación sostenida la noche anterior con Fere, en la que le comunicaba su decisión (la de Fere) de terminar esta vez y para siempre, el noviazgo con él y continuar, solo, con la amistad que se profesan desde chicos. Alberto, ya más tranquilo, al saber la noticia: Se toma a tragos cortos, un bazo de agua y calma su ansiedad. Resuelve, entonces, volver a trabajar en su libro - “Ente-luz”: Sobre - Integración Ciencia-Religión. - Muy próximo a salir para edición. Solo falta darle unos toques y enviarlo al editor por la “Red Internet”; al planeta Tierra.

Al, enamorado, obsesionado de su Fere, intensa, desesperada y locamente; más ahora que ya la ha (medio-probado) acariciado casi toda; además, con esas intensas e inocentes manifestaciones de amor que su Fere, le había permitido, disimulada y coquetamente. Al, ya consideraba, como casi-suya, esa tierna y hermosa “flor silvestre”. Esa deliciosa fruta que ahora... tenía que ser para él; pues, ya solo quedaba penetrarla; para que fuera totalmente suya. Interrumpe bruscamente su tarea y resuelve escribir (para desahogarse) en su computador la siguiente poesía:


Fere, seres como tú...

Cuando tú no estás en mi pensamiento
Te llevo siempre en mi entendimiento.
Porqué, me pregunto a veces sufriendo,
¿Quieres que lo nuestro lo lleve el viento?

Cosas como tú, son para adorarlas.
Se llevan por siempre en la mente,
Y permanecen en uno para siempre,
Sin gastarlas, son para conservarlas.

¿Alargarás con tu indecisión este tormento?
Ayer pude negar que al pensarte miento.
Hoy, sé, que pensándote, vivo un momento.
Era para mí todo... pasión, alegría y tormento. A.G.


Posteriormente, Alber, sobreponiéndose, al recordar los sublimes e intensos recuerdos de las caricias que su Fere adorada, le ha permitido... hasta ese momento. Aquellos en los cuales pudo besarla y acariciarla... apasionadamente, en ese monumental pedestal que constituye sus hombros y su largo cuello; en la columna esbelta que conforma y que remata en su espalda de reina; en sus interminables cabellos negros-carmelitas; en sus tersos brazos; en sus rodillas carnuditas (sin ser gordas); en sus espectaculares paradas y duras nalgas (que además, era lo que tanto y más admiraba, del soberano cuerpazo de Ferenixe); que hacen contraste con su cintura de avispa; y en sus piernas de atleta y experta nadadora; y finalmente, en sus largos... muslos, internamente olorosos a flores... Luego, devolviéndose a sus mejillas de muñeca; y a sus extensos, sedosos y femeninos cabellos y sobretodo; esos besos... (todavía, sin succionarla) dados muy cerca... de su boca... ya casi en su boca... nacarada, sensual, provocativa jugosa y tierna. Tan cerca, que el área besada muy levemente... formaba parte de la mitad de su boca (como una fruta salvaje) de la hermosa Fere; su adorada niña hecha ya mujer... Encuentros amorosos, que a veces, ella le permitía (en sus momentos de amor) ya... hasta llegar besar, la parte interior de sus esplendorosas piernas y muslos (olorosos a flor silvestre) de diosa. ¿O, era que Ferenixe estaba dormida; y no se daba cuenta de nada? Se preguntaba Alberto... a veces, al salir de su aposento; imposible, se contestaba, pues cree (con razón); que a ella, Alber, ya le ha sacado, con los dedos, varios orgasmos. Y además, que en las visitas nocturnas a su apartamento, ya... casi la hace suya; y hasta le hizo el violín una noche.

Otra mañana Alberto, muy temprano (previa llamada telefónica) visita a su adorada; esta vez la encuentra levantada y vestida (recién salida del baño) solamente con una levantadora vaporosa (transparente.) y una toalla envuelta en la cabeza, a lo turbante; y como Fere, no se inmutó por la presencia de Alberto (pues, todo era planeado así... por ella); y como además Fere, le ofreció desayuno; entonces... Al, se quedó mudo de la impresión al verla (casi desnuda, pues debajo de esa levantadora transparente Fere, no tenía nada de nada) y de contemplarla así a su amada. Ante la naturalidad de Fere, Alberto, calmó sus instintos y procedió a acompañar a Fere a desayunar. La sorpresa fue tan grande, que esa mañana no se le ocurrió nada que contarle ni que comentarle a Ferenixe; entonces, ella le preguntó (burlona y coquetamente, pues intuía que lo tenía, no solamente extasiado, sino muy excitado sexualmente, tal y como lo había calculado previamente) el porqué de su silencio, y el no supo que contestarle. Solo se limitó a contemplar ese espectacular cuerpo de diosa; que además se movía con una naturalidad pasmosa.

Después de contemplar... detalladamente, todo ese escultural cuerpo, prácticamente desnudo, mientras Fere arreglaba la cocina (moviéndose y meneándose, así como agachándose en forma provocativa, para que él viera bien, la parte trasera de su sexo; en fin, excitándolo sexualmente); calculando que Fere, ya se iba a vestir, para irse al Colegio. Alberto, decidió despedirse de su amada (pero, ella le pidió que todavía no se fuera); mientras Al, con un fuerte abrazo bien acunadito durante el cual, sitió las puntas, erectas (de sus senos endurecidos) clavarse en su amplio y velludo pectoral. Entonces, Alberto, (parados los dos, al pié de la puerta del apartamento dúplex de Fere); la acarició toda... por encima de la levantadora y luego... se la abrió y se la dejo caer a la alfombra; quedando Fere completamente desnuda. Apretó bien todo su cuerpo al de ella; y la meció con dulzura sin par, por un largo rato. Y Alber, ya... sintiendo calor en su miembro, se lo sacó y tomándolo de la raiz le restregó bien el sexo de Fere, en una especie de violín; luego la levantó tratando de izarla... pero ella... muy tímidamente no separó las piernas; sin embargo Al, la sostuvo un rato más, bien levantada... y la meció amorosamente; tomada con sus poderosas manos, solo de sus maravillosas y voluptuosas nalgas; mientras le confesaba su amor. Ferenixe con lo ojos humedecidos ya... temblorosa de pasión (al sentir... el constante roce... del miembro erecto de su amado, en el umbral de su vagina); le sostenía que ella también lo quería; entonces... muy suave... y muy lentamente... Al, la dejó deslizarse... por todo su cuerpo... (acto que a ella le repercutió en su clítoris, haciéndola enardecer) para cuando ella, al tocar el suelo, recoger la levantadora y temblorosa volver a ponérsela.

A lo cual Alberto, la alzo y la cargó hasta la sala y procedió nuevamente a izarla y a volver a descolgar su levantadora (y dejarla caer nueva y lentamente al suelo, alfombrado, de la majestuosa sala plástica de su vivienda; destapando... una vez más toda... esa flor, que así mostraba, en toda su magnificencia, sus fascinantes pétalos de ámbar) y luego... proceder a besar tiernamente, ese maravilloso cuerpo escultural de diosa; ahora... totalmente desnudo, sin dejar ningún sitio de tan espectacular cuerpo, que no fuese besado. El soberbio espectáculo, era digno de un artista para ser pintado; que fruta tan provocativa y dura; que maravilloso olor el que despedía su cuerpo, así de pie, dejándose tocar y besar; tal como si fuese una estatua de marfil pero, tibia y sonrosada. Que proporciones tan acentuadas; definitivamente, Ferenixe era una mujer fuera de serie. Y cuando Alber, iba a llegar al sexo de Ferenixe; ella lo interrumpió muy tímidamente, diciéndole con ternura, que otro día podría continuar, pero, que en el momento, ella tenía que arreglar el apartamento; luego, vestirse, para irse al Colegio. Pero Al, sin embargo, la recostó sobre el sofá, se desapuntó nuevamente la bragueta y le aplicó el violín a su amada (sin penetrarla); hasta que ella exhalando y suspirando pasión, muy disimuladamente... soltó sus no interrumpidos orgasmos, mientras apretaba los brazos del sofá; y Al, presuroso, tomaba un pañuelo del bolsillo trasero de su pantalón, y envolvía su pene, para derramarse entre el.

Alberto: - Bueno... mi vida y mi dueña... me voy que la pases bien, te adoro... mucho juicio... Ah... recuerda nuestra nueva cita dentro de 8 días en la piscina. Y recuerda mis caricias... eh. -

Por el camino a su apartamento Al, saca la conclusión, de que ya, lo más hace estremecer y enardecer a Ferenixe; y de paso hace quitarle la timidez; es... solo llegando con sus labios directamente a su sexo. Al, definitivamente enamorado... llega a su biblioteca pensando en todo lo que todavía los separa, y le escribe a su amada una poesía... que dice así:



Añoranza...

El hecho querer estar siempre muy cerca de ti,
Como las montañas son con otras... constantes,
Recibir por siempre... la sombra y el calor de ti,
Tal y como los pajaritos en su nido... cantantes.

Así es la alegría que me produce... el solo verte a ti,
Amor, que calma mi ser y la necesidad que siento de ti,
Con solo verte, mirarte y sentirte en forma constante,
Como el agua al mar... así, mi vida, voy siempre a ti..

Y yo quiero siempre estar con este sentimiento por ti,
No lo puedo dejar de experimentar en forma constante,
Solo tú mi Fere apagas la ansiedad por verte... solo a ti,
Ángel mío, dueña mía, perdóname por ser tan constante.

Por esta intensidad que solo tus llenas al acercarme a ti,
Te quiero, así... mi Verónica... por la huella de un beso,
Al decir te quiero... siento de tu amor, la huella de un beso,
Es saber, que por un instante, en esa caricia te di... todo.

Y ya, solo en mi alcoba, de ti... al recordarlo, siento eso,
Aquello... que me permitiste, al acariciarte, en sueños... todo.
Así, soy feliz, al saberte mía... solo por la huella de ese beso,
Porque te quiero, y así, con solo mirarte... te entrego todo.

Desde aquel instante, mi vida, al recordarlo... me embeleso,
Por el momento impactante... al acariciarte de ese modo.
Así aprendí a amarte... al permitirme tú, la huella de un beso,
Suficiente... mi amor... para ya no poder olvidarlo... todo.

Desde entonces, mi amor, no quiere pensar... sino en eso,
Pues no es fácil, cuando ya se ha amado y dado todo.
Luego, ni tú ni yo, nos neguemos entre nosotros eso,
Aquello... que por lo menos para mí lo ha sido... todo.

Y ya... ahora y desde este instante, no negar ni ocultar eso,
Definitivamente, mi vida, nos entregamos... y eso fue todo.
Luego, mi amor, mi Fere del alma, porque hoy negarme eso,
Acaso no sabes que me arrebatas lo que para mí... es todo. A.G.


Los inicios de la guerra.

Si alguna situación emana sentimientos de consideración, es la de ver a un enamorado amando intensamente, sin ser correspondido. O, amar, pero, con sentimientos compartidos. Sin importar si se ha recibido algo o, mucho en este caso; pero, que se sigue compartiendo, ese amor del alma. Que sin llegar a haberla poseído físicamente, pero, que ya le ha dado la impresión de haberlo hecho corporalmente. Que sin haberla besado todavía en la boca y sin haberla penetrado; se la ha amado y se la ha acariciado toda... pero, solo, superficialmente, y con la pasión desenfrenada que brota de un corazón enloquecido. Además, por ella despertado... de una ya larga continencia sexual de 20 años. Pues, él ahora no era mujeriego, solo vivía, para sus hijos, ya casados, residentes en el exterior y para su trabajo del momento: (era escritor) el deporte, enseñar gimnasia rítmica y sicología clínica.

Al, prende de nuevo su T.V; con el fin de escuchar las noticias transitorias. Pues, el mundo sigue su marcha y las noticias internacionales de “La Tierra”, continúan dando en que pensar.




La BBC de Londres, transmite en ese instante lo siguiente:

- En este momento, están por unirse dos continentes “Eurasia”; y las noticias que tenemos, no son nada confortantes. - La China, como aspirante a ser la primera potencia (económica y bélica) internacional, no permite que Inglaterra, sea la sede de la reunión de presidentes, de las naciones que conforman la Unión. Y está decidida, a ir a hasta las últimas consecuencias, si es preciso con tal de no permitir lo que llama “Tenaza Internacional” para debilitar a La China; que en el fondo prefiere ser el líder de la Unión “Eurasia.” (U. E. A.) – Máxime, cuando las radiografías económicas, de otras grandes naciones, revelan líneas similares de factura, determinadas por diferencias entre la primera, la segunda y la tercera, olas económicas. -

Por ejemplo:

- La China, el país más poblado del mundo. De los más 1.600 millones de habitantes con los que cuenta hoy; por lo menos ochocientos son campesinos que viven en el interior del país y que trabajan la tierra de modo muy semejante a como lo hacían antaño, sus abuelos, en condiciones de la más desesperada pobreza. En Kuichou y Anjui, los vientres hinchados de los niños hambrientos, se pueden ver entre las chozas y otros signos de miseria. Esta es la China de la primera ola económica. En cambio, las provincias costeras de China figuran entre los territorios de desarrollo más veloz, en el mundo entero. En la provincia de Kwangtung, repleta de fábricas, se alzan nuevos y deslumbrantes rascacielos y los empresarios (incluyendo a exfuncionarios comunistas) se hallan conectados con la economía global. Cerca, se puede ver a Hong Kong, Taiwán y Singapur que abandonan velozmente la segunda ola económica, para convertirse en economías de tecnología avanzada de la tercera ola económica. Las provincias del litoral, consideran a los llamados tres – Tigres – como modelos de desarrollo, con los que se vinculan sus propias economías locales. Las nuevas elites – algunas afamadas en empresas de la segunda ola económica; basadas en mano de obra barata y otras que ya se instalan a un ritmo frenético de tecnología punta, de la tercera ola económica. – Se muestran optimistas, extremadamente comerciales y agresivamente independientes. Equipadas con aparatos de fax, teléfonos, inalámbricos y coches de lujo, hablando cantones, en ves de mandarín, se relacionan con comunidades chinas desde Vancouver y Los Ángeles a Yakarta, Kuala Lumpur y Manila. Por su estilo de vida y sus propios intereses, tienen más en común, con los chinos de ultramar que con la China continental, de la primera ola económica. -

- Tuercen ya el gesto ante los edictos que les llegan del gobierno central de Pekín. - ¿Cuánto tiempo transcurrirá, hasta que decidan no tolerar la intromisión política de Pekín y se nieguen a contribuir a los fondos rurales o acallar la inquietud agraria? A menos que Pekín les otorgue una completa libertad de acción financiera y política, cabe imaginar a las nuevas elites propugnando la independencia a algo semejante, un paso susceptible de desgarrar a China y de desencadenar una “Guerra Civil”. Dadas las enormes inversiones que se hallan en juego, Japón, Corea, Taiwán y otros países podrían tomar partido y verse arrastrados así, contra su voluntad, a la conflagración que quizá sobreviniera. La perspectiva es reconocidamente una especulación, pero no resulta imposible. La historia abunda en guerras y en rebeliones que parecían improbables... – (Tomado de “Las Guerras del futuro por Alvin y Heidi Toffler. Ed. Plaza y Janes. Pág. 300.)

Y continúa el locutor de la BBC de Londres:

- La economía de la República Popular China es la de más rápido crecimiento en el mundo. - Sus cifras le han demostrado, que por ejemplo: en 2001 creció el 7.3%; en el 2002 el 8.0%; en el 2003 el 9.1% y así sucesivamente. La China contaba en esa época, con una población de 1.293 millones de habitantes; y con un desempleo urbano del 4.3%. Además importaba el 3% de los bienes agrícolas que necesitaba para alimentar su población; lo que demostraba su autosuficiencia. La inflación fue del -07% en el 2001; -0.8% en el 2002 y el 1.2% en el 2003. Las exportaciones totalizaron en el 2003 = 438.3400 millones de dólares. Frente a unas importaciones de 412.800 millones de dólares. Lo que arrojó una balanza favorable de 25.600 millones de dólares. El PIB total de 1.409 billones de dólares; que representó un producto por habitante de 1.090 dólares al año. Sus reservas monetarias alcanzaron los 440.000 millones de dólares; algo así como las segundas después del Japón. Actualmente concentra el 35% del consumo de petróleo; el 42% de la demanda de carbón y el 30% de la producción de acero en el ámbito mundial. La economía de la China fue en esa época la tercera del mundo y en el 2008 fue la segunda y hoy es la primera; desplazando a los EE.UU. Su PBI se duplicó cada 7 años; por ejemplo en el 2003 la producción de acero de la China fue de 220.1 millones de toneladas, frente a la de Japón que fue de 110.5; la de EE. UU., de 90.4; la de Rusia de 62.7 y la de Alemania de 44.8; Y la producción de acero la China crecerá en un 19%; fuera de la producción de otros 16 altos hornos que construyó en el Brasil. - (Tomado de “El Mundo” Pág. 2 A de Rodrigo Sanín Posada. Mayo 26 de 2004)



Descubrir.

El amor duradero, es el amor no correspondido. (William S. Maugham)

De pronto, Al, sé desconcentra de lo que está oyendo y nuevamente piensa en su obsesión: Su Fere, hermosa... su muy bella, atlética y joven amada colegiala. Llegando a la conclusión: de que a esa altura, su amor y su pasión por ella se hace irreversible y el retiro de su vida por causa del “novio”, es imposible. Pero, tal hecho, es considerado osado, por ser ya tarde, para poder olvidarla; Resulta que Fere, se ha hecho indispensable para su vida, se le ha vuelto una idea fija. Por lo tanto, le pide a Dios, que lo ilumine y lo proteja de hacer un disparate. Una vez más, hecha, la consecuente oración... reconfortado espiritualmente, reinicia su próximo “plan”; basado esta vez, en el refrán que dicta: - “No hay mujer que se resista a la perseverancia de un hombre.” - Se determina pues, a resistir el embate sentimental, al enterarse, de las frecuentes visitas del novio de Fere. Alber, Trata de aguantar hasta lo imposible, tal situación, sabiendo el daño que esto le causa. Sabe por experiencia... que tiene que descubrir pronto, el lado flaco del asunto. El cual a la postre, resulta ser él - cariño paternal. - Puesto que Fere... es huérfana de padre. Pero ¿Cómo, utilizar tal hecho a favor y no en contra, de los sentimientos por su amada? ; ¿Cómo, no confundir lo uno con lo otro? Para el efecto, Alber... le escribe a su Fere del alma la siguiente misiva.

Mi amor:

En un día como hoy, caminaré más despacio; descenderé a mi “verdad” y te amarraré con mis brazos y muy fuerte. Por que: - Tu no sabes bien, que es lo que tienes, hasta que lo pierdes. - La verdad, es que yo te quiero y no quiero perderte jamás. Lamentablemente, nunca lo entenderé a tiempo, como suele pasar; cuando se confunden los sentimientos y la verdad se baja de su pedestal. Son palabras que quizás no sea ya tarde para decírtelas. Hoy, solo quiero mirarte y hacerte reír, ya que esto me tranquiliza. Quiero hacerte sentir muy feliz. ¿Pero cómo podré decírtelo y cómo lograrlo? Por eso busco una canción y un verso, para desahogarme y hacerte ver como me siento sin ti. Entonces, te envolveré en mi canción, cuyo primer verso y por la primera vez que lo escuches, o, lo leas, creo, te sentirás contenta.

Resulta pues, que dos pajaritos volaban de rama en rama muy juntos y de árbol en árbol se paseaban, hasta que de pronto, uno de ellos se sintió herido de muerte y le cantó así a su pareja:

La Pareja.

Amor, si me pasa algo, si me voy y te dejo,
Sábelo bien que a pesar de todo yo te quiero.
Y que allí estaré esperándote a través del espejo,
En otra dimensión mi amor, en la que te espero.

Búscame siempre, susurra mi nombre, sin un dejo,
Claro y firme, para oírte, mi vida, así lo espero.
Como los pajaritos, cuando se miran al espejo...
Picotean, buscando su pareja que más quieren. A.G.


Por último, mi Fere del alma, hay sentimientos muy parecidos; es así como el de un padre, se puede confundir con el de un amante; ya que la seguridad que dispensa un padre, es muy parecida a la del amante. Por eso, hay veces que lo uno conlleva a lo otro; por ejemplo, después del matrimonio; se busca al padre en el esposo. Luego, en la amistad que dos personas se profesen, también se puede confundir con la del amante, puesto que el fin, es el mismo, proteger, asistir y ayudar. Mi Fere adorada, pero el deseo de sacrificio del uno por el otro, es inconfundible y este es precisamente el sentimiento que experimento por ti: se llama amor.

Finalmente, con esta esquela muy sincera, lo que quiero, es, hacerte ver, de una vez y por todas, que te amo, por encima de todo.

Tuyo: Alberto



Capítulo II

El amor es, por encima de todo, la donación de uno mismo. (Jean Anouilh.)

La reconquista.

Al, continúa en su lucha interna y desesperada, sabiendo, que en cualquier momento, su gran amor, puede perderse, por culpa del “novio” de Fere; ya que la noche anterior, la visita del muchacho, se prolongó hasta la media noche (Furtivamente Al, expiaba a su Fere. Por medio de un mini-robot especialmente instalado para el caso.)

Desesperado, Al, corrió a la mañana siguiente, muy temprano, entró sigilosamente a la alcoba de su adorada y la halló (sola) todavía... dormida (destapada y sin cubre-lechos, pues este se hallaba en el suelo); al contemplar semejante cuadro: su tremendamente fenomenal cuerpo semidesnudo, acostado, trasluciendo esos senos voluptuosos y bien parado; esa cintura de avispa y esas sensuales nalgas espectaculares de diosa; esas piernas atléticas y sobretodo esos largos y blancos muslos, muy bien contorneados; tal como era toda ella; coronada, además, por una cara de diosa. Ante tal altar al erotismo... Alber, la estuvo observando y detallando un rato, hasta que cayó de arrodillas, muy junto a su lecho y le aplicó un ardiente y prolongado beso en la mejilla (como siempre, muy cerca de la boca, casi en la boca. Al, a pesar de todo, todavía no se atreve a besar a su Fere, directamente en los labios, y menos a succionarlos.) Susurrándole al oído le dijo:

Alberto: - Mi amor, dormiste bien, soñaste conmigo, te acostaste temprano, te quiero y espero que hoy estés muy juiciosa. Yo como siempre... soñé contigo y soñé que nosotros... ya hacíamos el amor. – Percibiendo una tácita aprobación de esa niña-mujer, le aplicó en la mejilla, uno y otro... y otro... ardiente y tierno beso, ya muy cerca de su boca; prácticamente en la mitad de ella. Y otros y otros... besos muy suaves; ya desde ese momento... lamiéndole; su precioso cuello, hombros y espalda desnudos que se asomaban, coquetamente, por la camisa de su mini-pijama; y otros besos más demorados aún, en sus rodillas y piernas; esta vez ya lamiéndole... en la parte interna de sus muslos; besando poro por poro; y resoplando... su quemante aliento muy despacio, pero con insistencia; sobretodo en la parte más íntima, de sus largos muslos, que también, al parecer, querían reclamar, el homenaje del amado. Repitiendo así, lentamente... varias veces, esa operación, muy suavemente... hasta, notar Alberto, que al fin... salía de la boca de su amada, un muy leve jadeo, sobretodo al acercar su boca sobre su pelvis.

Alberto, teniéndola acostada, al acariciarle... por encima del mini pijama... ya directamente el sexo a su amada... sintió al fin ya la humedad... que despedía... y también un aroma deliciosa, como el elixir de los dioses. Alber, se devolvió hacia sus pechos y les aplicó otros tantos, demorados besos, que ya no eran eso; sino que prácticamente ahora; se los lamía y se los chupaba, con más fuerza; todo ese par de esplendorosos y voluminosos senos; para rematar apretándole suavemente con los labios, los ya erectos pezones carmesí, dueños y corona de esas firmes, tersas y arreboladas copas, que constituyen los voluptuosos senos de Ferenixe; ahora, endurecidos por la intensa pasión que le despertaba a Fere; tales caricias íntimas; que jadeante aceptaba gustosa... haciéndose la dormida; pero que por la respiración acelerada; se le advertía una dicha y un goce inmenso, sobretodo, cuando era lamida... y relamida muy cerca de su sexo.

Su Fere... de alma (al fin estaba lista) ya jadeaba con más tono... de anhelante deseo de amor sexual. Entonces Al, la desnudó completamente y bajó directamente a su sexo y resopló por él. Fere... jadeaba fuertemente de placer y de repente... bruscamente, tomo con fuerza la cabeza de Al, por los cabellos y se restregó en círculos su sexo, con la cara de Al, quien reaccionó resoplando con aún más fuerza... esa deliciosa vagina; por unos 20 minutos. Hasta que (ahora sí... quizás de verdad... por las primeras veces); esta vez... Fere... convulsionó de la tremenda pasión y de la excitación al tope; y llorosa... temblorosa... con un leve pero, auditivo y largo Ah.... como desgonzada... soltó la cabeza de Al, y quedó en un intenso estado de sopor. Entonces, Alber, se desapuntó la bragueta y le aplico el violín, por un muy largo rato, hasta notar que ella votaba varios orgasmos más; y él se derramaba dentro de un pañuelo. Por fin Alberto, satisfecho, seguro y embriagado por la fragancia del cuerpo íntimo de su “novia secreta”; y por el aroma de todo ese esplendoroso tesoro; salió sigilosamente del aposento, ahora completamente convencido del amor de su adorada. (En el fondo, esta era la respuesta de Al... por ver a cada rato a Ferenixe con el tal “novio”; Alberto, estaba apresurando los acontecimientos, por el solo hecho, de pensar... en que el muchacho... se la ganara.) Pero Fere le rogó que todavía no se fuera, a lo cual Alber, la volteó y por detrás le hizo sexo anal; y esta vez se derramó bien adentro del cuerpo de Ferenixe.

Alberto:- Bueno... adiós mi niña picarona... no te sigas haciendo la dormida que yo sé que estas despierta. Estudia mucho y si puedes piénsame un poco, y sobretodo, recuerda... todo el día, las caricias... que esta mañana... yo te hice. -

Llegó a su apartamento muy contento y pleno. Satisfecho como el que más y se dispuso a escribirle una carta a su amada, así:

Mi amor:

Ángel mío, mi consentida, niña de mis ojos; dulce ser que me llena de alegría, con el solo hecho de verte y contemplarte y acariciarte. Baja del cielo y dame presto tu mensaje, ya que cada instante que pasa, está por ti, y para mí, lleno de esperanza. Por esta súplica perenne, resuelve pronto, prométeme ser mía... Tú mi vida, calma así mi ansiedad, al saber que mi existencia tiene ya un rumbo fijo. Siembra en mi el amor y el hecho de tu existencia y suelta al viento las campanas, pregonando nuestro amor al viento. Deja que revienten los que quieran; pero nosotros, gocemos un amor tan intenso y puro, como pocos. Tanto, que fue capas de soportarlo todo. Cimentado, además, en las pruebas de la crítica de la gente que se mete en todo, por meterse. Prende, pues, la luz de tu espíritu y deja encender tu amor, por este ser, que te quiere como pocos y que te ama ya con todos los amores. Temo aún que mañana te arrepientas y de lo ya andado, en este amor que apenas nace y reverses hacia tu novio; movida, de pronto, por una mala interpretación, un malentendido, o, por un chisme. Pero, también sé muy bien que tu corazón de niña, es incapaz de algo así.. Luego, acepta únicamente a este ser que te ama y te quiere. Sé, además, que ahora, es el factor tiempo, el que finalmente, entre nosotros lo resuelve todo y que para ello, debe existir la confianza mutua. Pero, sábelo bien que ya te quiero y que ya te amo... con locura, así tú resuelvas descartarme de tu vida. Pero, eso no importa, si ocurre, te seguiré amando y tu recuerdo me seguirá hasta la muerte.

Fue tu deseo de ayuda, recuérdalo... (Jugando Bingo) De favorecer, y dar amistad a este ser que revivió por la sola esperanza de tu amor de niña; dentro de un esplendoroso cuerpo, de mujer hermosa; que con tu espíritu noble, de calidad inmejorable, tal y como una piedra preciosa, lo lograste. Así eres, en mi vida, únicamente tú, y nadie más que tú. Ya lo verás. Luego y finalmente, te reitero que ya solo espero tu decisión, algún día; de prometer ser mía para siempre. Para consagrarte los años que queden de mi vida y poder así, juntos, llenos de paciencia y de confianza mutua, atravesar el mar picado de la vida y no permanecer solo, con una existencia sin esperanza y aún vacía.

Tuyo, siempre: Alberto

Pero, el tiempo inexorablemente pasa y también, desafortunadamente, los acontecimientos. Este amor pretendido y con el tiempo eterno. Que pase lo que pase, no sucumbe, ni lo hará, ante nada, que sin embargo cada día es más fuerte. Es un amor loco; o, Al... un loco por el amor de su Fere, adorada. Esto, fue lo que se conformó en la mente de Al, quien para plasmarlo, le escribe la siguiente poesía:


Ferenixe :

¡Ya más de treinta días de ser novios en secreto!

Gracias...

Gracias Fere del alma, niña adorada, fueron treinta días de dicha
Al saberte mía, mi vida, en secreto intenso, sentido y compartido,
En los cuales, cada día, trajo el afán, por un beso en tu mejilla
Un amor que lucha sin cesar por seguir, y seguir a pesar de todo.

Cada día, lleno de esperanza, alborada de un amor puro y sin fin,
Que floreció, del simple deseo de ayuda y que lucha contra todo,
Que dio como resultado, un amor que solo yo... sé que siento,
Un amor, que tú mi vida, sin darte cuenta, también, ya siente.


Amor sentido cada instante, por encima de todo y contra todo,
Un amor puro, sin besos, tal como lo pediste, que resultó eterno.
Un amor que lo da todo a cambio de nada, un amor verdadero,
Eso fue mi Fere adorada, lo que entre los dos a la postre nació.

Nació mi amor, del deseo de ayuda, nació de la necesidad de amar,
Del latir de un corazón desesperado que pide por quien vivir,
Por eso, gracias mi reina y dueña de este corazón que por ti late,
Así es y así será, aunque yo esté lejos, hasta que deje de latir.

Fue, en el secreto compartido, de dos vidas que se unieron
Por ser el misterio, de un amor eterno y puro como pocos.
Mi Fere adorada, será una llama que ya nadie, ni tú, ni yo
Podrá apagar y arderá por siempre, testificando que existió.

Como fiel testigo de un amor puro, como son pocos los de hoy,
Paladín, de un amor que en estos tiempos ya no existe, ni existirá,
Un amor que se alimenta con la sola intención de un beso,
Busca, en los rincones, la complacencia de ese beso, solo y furtivo.

Un amor en el secreto compartido y expresado en tus mejillas,
Que ya tú sientes y que te estremece el calor de aquel solo beso.
Gracias mi Fere, por haberme permitido la expresión de un beso
Y sentirme el dueño de tu vida, aunque sea por un solo instante.

Solo te pido, ser únicamente yo, dueño de la intención del beso.
Ser yo, quien te ayude a sentir y a expresar tan inmenso cariño,
Vivido y sentido como pocos, por ser diamantino, puro y sincero.
Mi Fere, te juro que ya no podría vivir sin ese amor, así sentido.

Obsesión, amor intenso, como se llame, para mí es amor sincero
Que no puede vivir sin sentirlo así sea en el secreto compartido,
Aunque sea en la distancia que nos separa, o por lo que sea,
Pero que jamás se deja y dejará de sentir en el fondo del alma.

Nuevamente gracias mi Fere del alma Mi niña adorada,
Fueron ya más treinta días de dicha y de sufrimiento
De dicha, al saberte solo tú mía en el secreto compartido,
De sufrimiento, por tus variados dardos que duelen tanto.


Así, cada día fue la esperanza de una vida, mi niña hermosa,
Cada día mi vida, fue la alborada de un amor sin fin, ángel mío.
Un amor que floreció a pesar de todo y que salió de la nada,
Así fue que me enseñaste a quererte y así te querré por siempre.

Pero lo más sorprendente de todo, es que tú también ángel mío,
Y sin darte cuenta, ya me quieres, pero tú no lo sabes mi niña
Y al sospecharlo, mi amor, me hieres para sacarme de tu vida,
Eso yo lo sé, tesoro mío, pero tú, aún no lo has descubierto.

Pero niña de mi vida, mi dueña, es cierto que si esto es así,
No me lesiones tanto por favor, no mates este amor naciente.
Que mi vida, no tiene la culpa de algo por lo que tu quieres
En el fondo de tu alma, vengarte, él no tiene culpa de nada.

Sé que llegué tarde a tu ciudad y a tu vida, pero mi amor
Que le hacemos, si es que ya nadie ni nada pueden hacer,
Sencillamente mi Fere, mi dueña, ya te amo y eso es todo,
Luego, seguir así como vamos es lo mejor para los dos.

Seguir luchando mi amor, contra todo lo que se oponga,
Mi Fere del alma, mis ojitos, niña de mi vida y mi dueña,
Sigamos mi amor, sin hacer caso a nada de lo que digan,
No acabemos nunca, con este amor que es puro y sincero. A.G.



Nuevas formas laborales y de contratación.


Fuerzas como el “electro dinámica”; cambiaron la vida de los Akpalus; en forma rotunda, pues al alternar la energía propulsora; las variabilidades en la dinámica laboral fueron notorias. Los “robots”, generalizados, hacen el trabajo pesado o, peligroso y hasta “sucio”. En la navegación aérea se produce los principales grandes cambios; ya que esta se hace, combinando fuerzas eléctricas de atracción y repulsión (gravedad y magnetismo); operadas mediante una fuerza naturalmente “robotizada”; como origen o, directora; origen de los grandes cambios laborales se basa pues, en la interacción de poderosas fuerzas que producen energía dinámica controlada por computador así:

1. Combinación de fuerzas.
2. Utilización de la electricidad, como principal foco de energía.
3. Dinámica, capaz de producir giros en diferentes ángulos, velocidades y ritmos.
4. Sistemas altamente controlados por computadora.
5. Son fuerzas, que producen más fuerzas; de acuerdo a la necesidad.




La llamada del amor.

La situación, era cada vez más tensa, por la frecuencia y la insistencia del “novio” de Fere, quien, al sentirse desplazado; incrementó las visitas a su novia. Desestabilizando, con ello, sentimentalmente a Alber, quien ya no sabía que hacer, solo Orar y pedirle al Señor, que lo ayudara y que le diera, a su Fere del alma:

Alberto: - Señor... ese muchacho está joven, puede buscarse otra novia, con la facilidad que le proporciona su juventud, es seguro que la encontrará. Pero yo... mi Señor, tú lo sabes ¿Qué puedo hacer? Quiero a mi Fere... dámela... Señor... dámela... te lo pido, te lo ruego. No quiero a otra, solo a esa. – Al, se incorpora y agrega... - Mas... no se haga mi voluntad, sino la tuya. Mi señor y mi Dios. Amén. -

Para colmo de males, al día siguiente, Alber, supo por la hermanita de Fere, que el “novio” estuvo la noche anterior en la alcoba de ellas, viendo TV. Al, lo confirmó, con la grabación de su mini-robot. (Sin embargo Al, no vio nada sospechoso en el comportamiento de los dos. Ni siquiera estaban muy juntos, como suele suceder en estos casos.) Pero, no obstante, Al... no supo que hacer, su perplejidad era absoluta y sin control; se encerró en su biblioteca y se dedicó a escribir... y escribir... para desahogarse. Era tanta la amargura que sentía que todo en su cuerpo le dolía. Ya no le bastaba ni le tranquilizaba nada; era como volver a vivir sin esperanza, ni ilusiones y esto, para Al, era no vivir, era morir en vida. Ya lo sabía de memoria, a lo cual en ocasiones, en esto solo pensaba. Con el corazón, lleno de intensa amargura, Al, le escribió a su Fere... del alma, desoyendo, lo ya oído, de parte de la medio-hermanita menor de Ferenixe. Era como no querer ver, viendo; como no querer saber, sabiendo; o, como, no querer vivir, viviendo. Situación, que ya no solo le aportaba a Al, desdicha y sufrimiento, sino que, sobretodo... le producía soledad; una inmensa soledad que carcome y que hiela la sangre y todo el cuerpo, hasta el alma. Soledad, nunca antes experimentada por corazón alguno y menos por el de Al. Hasta cierto punto, e incluso entonces (a pesar de todo) mimado por la vida y por la suerte.

Todo fue encontrar a Ferenixe para empezar a vivir de nuevo y desde luego que a morir también; porque en el fondo... eso es el amor. Es la ilusión que nace cuando las circunstancias lo enfrentan, a pensar, a recapacitar y averiguar respuestas. Y al transcurrir de los años, de vez en cuando, se ve abocado a realizar un balance... sobre su vida íntima y a sopesar las actitudes y los desafíos realizados durante la vida. Cuando, de pronto, aparece un “ser” (angelical) que por su actitud... lo hace sentir amparado y protegido; o, acompañado, como compartiendo dichas y pesares. ¡En ese momento, ha nacido la esperanza y por lo tanto el amor verdadero!


Entonces, Al, ya locamente enamorado, le escribe así a su amada:

Ferenixe... mi amor eterno:


El poder de un beso en tu mejilla...

¿Es la huella de un beso... capaz de despertar a un volcán?

Tiene la fuerza, la intensidad y el color del azafrán,
Cuando lo recibes con amor, en tu rostro, no importa donde,
La intensidad de un beso... así sea dado con afán,
En la mejilla, muy cerca, de tu boca... el amor esconde,
¿Y fueron tus ojos, humedecidos, testigos de tal beso con afán? A.G.


Son acciones al parecer sutiles, pero que llenan inmensamente de amor cuando este está presente. Se siente en ese Mini-instante, en todo el ser; por el roce de tu piel, por tu mirada complaciente y por tu actitud amorosa al recibirlo; tanto, que hace crecer en mí, el amor por ti, hasta reventar. Y yo, mi amor... por el solo hecho de volver a ver el destello de tus ojos de niña enamorada... yo mi amor... doy mi vida, toda entera y si me toca esperar por ello, lo haré gustoso. Todo, por recibir nuevamente, semejante premio. Porque, eso fue lo que mi corazón sintió, en el momento, de tan inmenso gozo. Que fuiste al fin mía... mi amor, mi Fere del alma. Tus ojos me lo dijeron; al verlos complacientes, casi cómplices y colaboradores de este gran amor que té profeso. Cuanta emoción, encerró para mí aquel instante... fue como para desear otro, otro y otro... miles de esos besos y caricias.

Pero tú mi cielo, no sé como, de pronto, suspendiste todo... aquello que para mí lo es todo. Mi amor, mi vida, gracias por dejarte dar en esos besos y aplicarte caricias, de mí todo... gracias por dejarte amar y amarte de esa forma, tan delicada y tan intensa. Así lo sentí y desde ahora. ¡Gracias, Ferenixe de mi alma! Por no volver a rehuir mi boca. Gracias por tu confianza. Gracias por permitirme la demostración de este amor que ya se creó, entre los dos. Porque, justo y sin darnos cuenta, en ese preciso instante, creo, que nació nuestro amor (secreto) ya compartido y que se desarrollará por esos besos y caricias íntimas que son su alimento. Fue, evidente e irreversible... se leyó, en la niña de tus ojos humedecidos. Y en tu cuerpo tembloroso y humedecido jadeante y en tus suspiros de mujer. Será un recuerdo grato, preciado e inolvidable que conservaré siempre, en lo más íntimo de mi ser. Hasta mi muerte y si es posible después, también.

Luego, a pesar de tu aceptación verbal, realizada al fin hace ya algunas semanas, de ser novios en secreto. Ya solo falta, dejar que pase el tiempo, él lo dirá todo. Ahora el hecho, es que ya somos novios en secreto y esto hace de mi existencia la más bella, intensa y feliz de este mundo. ¡Gracias Dios mío! Por darme al fin a mi amor. A mi Fere del alma. Tu ángel del cielo; que me has dado un regalo, envuelto en un hermoso cuerpo de niña-mujer. Yo Señor, y mi Dios, te sabré corresponder. Lo mismo que a ti, mi. amor. Porque eres el tesoro más grande que he recibido del cielo. Lo reconozco así y lo aprecio en lo que para mi vale; más que mi propia vida.

Por siquiera un nuevo instante de esos, que tú me has permitido, te bajaré las estrellas, si tú así lo quieres. Mi Fere adorada, finalmente te confieso: ¡Haré lo posible y lo imposible, por aunque sea un solo beso de tu boca nacarada! Te lo digo hoy y te lo repetiré siempre.

Feliz como nunca... siempre tuyo: Alberto

Así las cosas; Alber, siempre contaba con el apoyo moral de la prima de Fere, y de otros familiares de su novia (secreta.) La prima de Fere, por ejemplo, basándose en charlas entre mujeres, le contó a Al; que Fere le había dicho que estaba, tratando, de dejar definitivamente al “novio”; pero que este, le insistía (llorando) que no le dejara; y que ella cedía, por pesar, ante tanta presión (sobretodo la de su mamá.) Pero que igualmente, próximamente lo dejaría, para no causarle más sufrimiento a Al, a quien, ya quería; y no pensaba dejar... nunca. Y que, además, y principalmente, porque Al, le ofrecía la seguridad y el cariño del hombre maduro y de verdad, que ella siempre necesitó. Lo anterior, pone de manifiesto (según las palabras de su prima) que la estrategia de Al, para enamorar a su Fere, del alma, estaba funcionando; ya que su amada, estaba entrando por la senda de la protección paternal; que solo Al, le ofrecía. Se estaba realizando el milagro; Fere, a pesar de todo y contra todo, daba la apariencia, de que se estaba enamorando de Al... ya que, a Fere... según palabras de su prima; dizque, hasta ya... le hacían falta sus caricias... su presencia y su compañía (la de Al.) Pero, en cuanto a dejar a su “novio”, le seguía manifestando a su prima; que Al... tenía que armarse de paciencia; que todavía no podía dejarlo.

Ahora, lo único que tranquilizaba a Al... eran las caricias íntimas e intensas que su Fere coquetamente le estaba aceptando. Caricias que eran cada vez más y más íntimas... pues, ya eran sexuales. Hasta que una tarde... en las escaleras (muy poco transitadas) de la “Torre C”. Al... (movido por la supuesta carrera por ella... sostenida con el novio) después de una serie, no interrumpida de caricias... Al, se atrevió (sin calentarla suficiente y previamente) lleno de pasión, amor y hambre sexual... a buscar por debajo de su falda de colegiala, directa y ardientemente el sexo de su Fere adorada; para izarla, correrle los calzones, separarle las piernas y poseerla... pero desafortunadamente, fue rechazado con un rotundo:

Fere: - ¡No, eso... no más! -

Al: - Pero mi amor ¿Tu me amas? - Asintió Al, sintiéndose rechazado; a lo que Fere, le repuso que... sí. Al repreguntó:

Alberto: - ¿Y te Hago falta? - La respuesta volvió a ser un rotundo... sí.”

Sin embargo, esto, en una sola sílaba, salida de una bella y hermosa niña hecha ya mujer, sincera e inocente; para Al, constituyó un acto sublime, glorioso y bello. Al, sabía que aunque no tuviera todavía su sexo; tenía el resto de su esplendoroso cuerpo y que de pronto... lo tendría todo.

Poco después Al, recibe la visita de la prima de Fere, quién le comunica que antes de trasladarse a su casa, Fere, (seguramente arrepentida, por haberlo rechazado en la pretendida caricia... ya directamente a su sexo, y muy seguramente para intentar poseerla) le manifestó, que le dijera a Al, que ya lo amaba, de verdad, que le recordaba mucho; y que le tuviera paciencia con lo del novio. Que ella había reflexionado, y por lo tanto, muy pronto, ella podría ser capaz dejarlo. Que por ahora Al, se contentara con lo que ella, ya le estaba dando... lo cual, para ella, era ya mucho. Y que por lo tanto, desde ya, podía tomarla cundo Al, quisiera, con todo lo demás que él, anhelara, de ella. ¡Que ella... sí ... ya le amaba de verdad! Y estaba dispuesta a demostrárselo, como fuera. Que si lo que él quería era poseerla; que bien podría hacerlo; que aunque era virgen, ya que estaba dispuesta a dárselo.

Entonces Al, vuela al tele-video y llama a su “novia secreta”.

Alberto: – Amor, soy Alberto, que tal, como estas. – Fere: Bien Al, pensándote mucho, por que no has venido, ven que te espero... – Alberto: Hoy no puedo mi amor, estoy muy ocupado, quizá mañana muy temprano, espérame... mi vida y mi ángel bajado del cielo. Mi dueña idolatrada. – Fere: Bueno... será cuando quieras. Si de verdad quieres... pues, ya estoy dispuesta a todo... por ti, hasta a darte mi virginidad. - Y le cuelga, muy sentida por el rechazo; además estaba celosa de su prima.

La mañana siguiente, como siempre, muy... muy temprano, Al, realiza una visita a su Fere, en su alcoba, encontrándola (sola) y todavía dormida. Al penetrar al aposento, contempla un rato su despampanante cuerpo acostado y semi-denudo, esta vez cubierto solamente con su súper-mini-pijama... (sin el cubre-lechos) Que espectáculo tan soberbio... por Dios... Que creación de la naturaleza tan perfecta, estaban viendo sus ojos. Que soberbias curvas, las de esa niña-mujer, que proporcionada era... semejante espectáculo, solo, era digno de los dioses del Olimpo. Viéndola, nuevamente... tendida así, Al, cae de rodillas ante semejante altar al erotismo tan arrollador y suavemente, la acaricia y la besa tiernamente cada vez más y más cerca de la boca que ya entreabierta denotaba su aceptación... y por fin Alberto, la besa en la boca. La besa ardientemente y entrelazan sus lenguas y Al, entonces bebe con sed... todo el líquido bucal que puede de su amor. Acelerando su respiración y el ritmo de su corazón. - Que más se logra pedir a la vida, pensaba Al, mientras la acariciaba... la besaba y la succionaba... esta vez sí... toda. – Luego, al rato... cuando esa niña-mujer, deja advertir cierta cadencia... Al, bajó su boca ardiente de pasión, a su cuello, brazo y piernas semidesnudos que provocativamente trasmitían a la vez un olor celestial, a azucena. Ella, al contacto de tan apasionados besos; entreabre, entonces, sus esplendorosos ojos, que Al, aprovecha para también besarlos tiernamente.

Fere, al sentirlo... tan apasionado, se acomoda mejor (acto, que le da a Al, más seguridad en lo que luego pretende hacer.) Para que Al, pueda estamparle varios... muchos más besos encendidos y apasionados. Besos, al principio, unos casi en la boca; o, ya en la mitad de ella, mordiéndole suavemente el labio inferior de Fere, y otros directamente en los labios, para nuevamente succionarlos muy fuertemente. Y meter y sacar con ritmo su lengua en la boda de Fere. Otros, alternadamente y muy suaves, en las mejillas; en la cara, en sus largos cabellos negros-cafés (mordiéndola con suavidad); en los hombros y en la espalda. Luego... Al, sigue bajando con la boca encendida de pasión, muy despacio; hasta esas esplendorosas piernas, muslos y súper-nalgas. Donde se demora un rato, haciéndole tacto con las yemas de los dedos (energizándola sexualmente.) y sigue aplicándole masajes y caricias; para, luego subir a su boca y entrelazar sus lenguas, con la de su amada, por otro rato; entrando y sacando con ritmo su lengua, en la boca de Fere, por otro largo rato... luego volver a llegar, mientras tanto, con el tacto y con la fuerza magnética de sus dedos; ahora... a esos esplendorosos y largos muslos blancos y tersos; hasta llegar muy cerca de su sexo vaginal.

Caricias que Fere, interrumpe suave y coquetamente, al voltearse, afirmando con la cabeza; cuando Alberto: - entonces (disimulando.) Le comunica que ese día, iría a estar todo el día, trabajando, en su libro; en la biblioteca de su apartamento. Y cuando ve que Fere, apenas si le contesta con un entre cortado, tembloroso y leve: Bueno... Al, renueva con ímpetu... entonces, sus intensos y apasionados besos; y con ellos le recorre palmo a palmo, con suavidad y lentitud, toda la geografía esplendorosa de su cuerpo de niña hecha mujer. Nuevamente baja su cara y la besa y la acaricia, muy despacio, lamiendo ese manjar que constituye el medio de esas torneadas piernas; en sus rodillas, pantorrillas y en sus pies. La recorre... nuevamente lentamente... lamiéndola de arriba hacia abajo y nuevamente de abajo hacia arriba; para culminar ya muy cerca de esa boca jugosa nacarada y tierna; lamiéndole luego ese rostro de ángel. Posteriormente, pasa a lamer y chupar sus senos voluptuosos de verdadera mujer; detectando la tácita aceptación de Ferenixe... Al, le saca el pantalón del pijama, con mucho cuidado (con la habilidad de un mago) y la blusa del pijama de Ferenixe; dejándola completamente desnuda. Luego, sin resistencia alguna... Al, continúa bajando... lentamente, y va ahora... con su rostro, directamente... hacia el sexo vaginal de su amada.

Se pega por un rato con sus labios, a los labios sexuales (o, zona de la vulva) de Ferenixe, y luego... separándole bien los muslos (le abre los pliegues vaginales; y justo en ese instante Al, se da cuenta de que Ferenixe en verdad... si es aún virgen; pues ve que su himen... solo mide ½ Cmtr., de abertura diametral.) Alberto entonces... toma aire y succiona fuertemente su vagina... (como una sanguijuela que ya no la desprende nada) Al, la chupa fuerte y levemente en forma alternada, circular y rítmica; le vibra el clítoris, con los labios y los dientes, por espacio de 20 minutos (rrrr.....); mientras que con las manos le acaricia todo su cuerpo; especialmente, sus senos y pezones; a los que le aplica suaves y medio duros masajes, mientras succiona, nuevamente con su boca, la vagina; y luego con los labios y con la lengua, la lame en círculos, en la vagina, y en el clítoris; alternadamente, luego, vuelve a su clítoris, al cual se pega para chupar y lamer con mucha fuerza. Hasta que Fere... jadeante y gimiendo... llorando... suelta las sábanas, que en ese instante apretaban sus manos; y agarra duro de los cabellos a Alberto, y explota en una serie de (quizás de verdad sus primeros... Ah... y/o, segundos o, terceros; de todas maneras Fere, era la primera vez, que experimentaba tales caricias); orgasmos, seguidos, unos de potros; casi como diez, en un solo minuto y en ese instante; también... a la vez se estremece todo su súper-cuerpo; su pelvis tiembla como una gelatina y con leves sonidos... y quejidos entre cortados de deleite y de pasión. Ferenixe, en ese momento... llora... aún más intensamente, de la pasión... tan vehemente que experimenta; por tal homenaje sexual, hecho profesionalmente por Alberto; mientras su región pélvica vibra, como un terremoto, de la experiencia sexual probada; que Alberto interrumpe (para no dejarla congestionar) con una fuerte palmada en las nalgas de su amada.

Nuevamente después de un rato de descanso sexual... Al, vuelve... a solo chupar por otros 20 minutos el clítoris de su amada. Mientras con sus manos la toma de esas paradas, duras y espectaculares nalgas... hasta que su “novia secreta” nuevamente, convulsiona con estertores anunciadores del orgasmo (o los orgasmos) seguido de otros más; con torrentes de pasión y de convulsión. Tanto, que Fere al culminar... le retira el rostro (que retenía agarrado con fuerza de la cabellera de cabeza de Al) emocionada y jadeante del sopor que sigue a tal acción; se endereza, al salir definitivamente de aquel trance; y besa suavemente en la boca a su Al, en una actitud agradecida, por la dicha y por el homenaje sexual recibido. Al, la deja descansar un rato... para no congestionarla nuevamente; y repite una y otra vez ese beso y lo contesta con otros... muchos más, a la vez que largos y muy succionadores, besos. Nuevamente, entrelazan sus lenguas, para durar así pegados un largo... muy largo rato. Luego... Al, ya no aguanta más, le retira a Fere, la almohada y se la coloca debajo de las nalgas. Luego se saca el pantalón, el pantaloncillo y los tenis y con todo... su grueso y largo miembro erecto; se lo pasa rítmicamente y en círculos por ese súper-cuerpo de mujer; que al pasarlo por entre sus esplendorosos y virginales senos; coloca su pene justo en la mitad de ellos y se lo frota un rato con ellos. Luego lo baja, y se lo pasa especial y finalmente por la vulva de su amada (como tocando violín con su pene.) Hasta hacerla, llena de locura sexual, pedir a Al, que la penetrara; pero él, solo le aplica por encima, en el monte de Venus, nueva y constantemente con movimientos rítmicos, de violín, sobre la entrada del sexo vaginal de Fere (sin penetrarla y evitando que Fere... lo tome de la raíz; y se lo entierre, ella misma, por la vagina.) Hasta que Alberto, se viene por fuera y entonces Ferenixe, temblorosa de pasión, se incorpora, y se lo reclama, para chupar también; con una dulzura indescriptible; se traga hasta la última gota del semen de su amado.

Al, descansa un rato... mientras acaricia suavemente todo el cuerpo a su adorada y se incorpora para vestirse y salir de la la habitación de su “novia secreta”; ya satisfecho, pleno, y embriagado del elixir de la boca de su Fere, y del aroma de la química del líquido de su sexo vaginal... y del tacto sexual, ejercido sobre todo el cuerpo virginal del amor de su vida. Sin embargo, por el pedido insistente de Ferenixe... Alberto... repite tal operación, dos enloquecedoras veces más. En la última... haciendo el 69; ambos se chupan y se descarga en sus respectivas bocas. En el fondo, lo que Fere, ya quería... era que Al, la penetrara. Alber, entre tanto, pensaba, que esa dicha debía ser eterna; y que entonces, debían casarse pronto. Mientras que él disimulando; lúdicamente, la cubría y la descubría con la suavidad del relojero, para llegar nuevamente al sitio, que ya solo los dos entendían y sabían. Pues, únicamente se trataba, no solo, de caricias superficiales; sino de caricias íntimas, profundas y sexuales; por las cuales Al, fue conociendo la plenitud, tanto del olor como, del sabor, del maravilloso cuerpo de su adorada e idolatrada Ferenixe. ( Que Alberto llevará hasta la muerte tales recuerdos.)

Alberto: - Mi amor, tengo que irme, te dejo.. Adiós. – Fere: Pero mi vida... (inquiere) no te vayas, hazlo más... te lo ruego, quiero más. – (Al, le responde) No se puede más... mi cielo, tengo que irme. –

Alber, para complacerla la voltea y le hace el sexo anal, y se derrama bien adentro del espectacular cuerpo de Ferenixe; y luego si se retira del aposento de su amada, para irse para su apartamento ya muy complacido, descasado sexualmente y feliz.

Esa tarde, sin embargo, Al, sabía que Fere, salía a pasear con su “novio”. Y desde entonces, y por eso, Al... se retira de la alcoba de Ferenixe... solo, sabiendo que deja a su adorada, abatida, por las caricias dadas... en las partes más íntimas de su cuerpo de diosa, que estaban desnudos (destapados, como esperándolo) en el momento de su llagada... Y que él y solo él, desnudó completamente, para bebérselo todo por partes; hasta dejarlo sexualmente exhausto; y aún más... exprimidos totalmente sus ovarios. Sin embargo... ahora con mayor razón, Al... seguía enamorado y locamente celoso (al recordar, que estaba inmerso en un triángulo amoroso.) Para desahogarse, le escribe, a su amada, como siempre; y tal como le había prometido, a su Fere adorada... se encierra en la terrible soledad de su biblioteca; para redactarle una carta (que quedará para la posteridad) en los siguientes términos:


Fere de mi corazón:

Hoy, me encuentro muy confundido y espero me ayudes en el siguiente dilema: Si debo continuar una relación entre dos que más parece, entre tres. Te ruego, en el nombre de nuestro amor, me respondas pronto, con quien tú té quedas, con él; o, conmigo, ya que, de ello dependen para mí muchas cosas y diligencias urgentes que tengo que hacer. De lo contrario, si no obtengo una pronta respuesta, daré por entendido, que tu decisión final, fue la de seguir con el ser de tus sueños y con el cual seguramente serás feliz. Con el ser que escogiste para continuar el camino arduo de la vida. Yo por mi parte, te deseo, sinceramente, mucha felicidad y éxito en el futuro. En cuanto a mí, ya lo sabes, moriré sentimentalmente y te esperaré siempre, guardándote el sitio que ganaste en mi corazón. Por duro que sea mi destino, ese será, el de esperar eternamente, tu regreso, tal y como te lo he manifestado, constantemente, en mis pasadas cartas y poemas.

Fere, mi adorada, y cuando, acaso, sientas que el peso de la vida te oprime demasiado, acude siempre a mí, que yo estaré listo a aligerarlo. Hoy, con lágrimas en los ojos (que resultaron, a la postre, inútiles, como todo lo que he hecho por ti.) No te diré adiós, te diré hasta luego, si tú así lo quieres. Te confieso, que dar este paso, para mí no es fácil, como no lo es, renunciar a lo más querido y apreciado que se ha cruzado por mi existencia; ya que aprendí a quererte, y a adorarte, solo a ti, con amor verdadero. Los demás sentimientos, por otras personas, fueron a la postre, pasiones de paso y de momento, por mi vida; que una vez extinguido el fuego, solo cenizas de ello quedaron. Hoy sé, que fue a ti a quien mi corazón esperó siempre, para hacerla mi compañera (si tu así lo quieres) la que muy seguramente me acompañaría en mi muerte; ya que será ésta, las únicas capas de interrumpir, el amor que por ti siento. Mi Ferenixe, del alma, recuerda siempre que yo te amé y con locura, que siempre estaré a tu lado, por distante que esté... Esperando que tú vuelvas a mí, tu mirada, así ya no sea, con esos ojos relucientes de juventud que hoy tienes, ya que para el amor verdadero, no existe el tiempo, murallas, distancias, ni condición alguna.

Mi Fere adorada, no te canso más con esta misiva, tan larga, quizás, como son las despedidas, porque de pronto, esta sea mi última esquela. No tanto, porque así lo quiera, sino, porque esa fue tu decisión, al preferir a tu amor de siempre; a pesar de mis ruegos y de mis lágrimas. Dios quiera y hago votos por que él (tu preferido) te merezca y te aprecie en lo que tú vales, porque con actitudes (como la de anoche, al entrarlo a tu alcoba a ver T. V. y no bajar a jugar “Bingo”, al sitio, en donde yo te esperaba.) Le estas demostrando, la grandeza de tu alma y del amor que le profesas. Ya que la oferta de mi amor, que fue grande verdadera y sincera, no representó para ti nada. Que tú, al despreciarla, no solamente lastimaste un amor intenso; si no que en cambio, también dejaste en mí, un puerto, en el cual, si el mar picado de la vida, te trae, tú serás muy bien recibida. Si es que vivo para entonces y resisto pasar el resto de mi vida sin ti. Mi tesoro y mi niña consentida. Ya no me quedan, ni lágrimas, ni nada más que decirte, mi Fere del alma, por quien lo daría todo gustoso, hasta la vida misma. Hoy, solo sé que te quiero, que te adoro y que te amaré por siempre.

Tuyo eternamente tuyo: Al.



Terminada la carta a Ferenixe Al, se dispone a acostarse, pero antes prende su TV. , para distraerse un rato, mientras le coge el sueño; y lo sintoniza en la Tierra:


En ese momento el locutor decía...

- Pero... los terroristas intercontinentales cada día están adquiriendo más sutileza en su lucha contra la tecnología robótica. Por ejemplo: El caso en el que se utilizó un robot para desarmar una bomba, bajo control a distancia de un operador. Los revolucionarios intercontinentales, fueron capaces de imponerse al control de radio del operador y lograr que el robot se volviera contra él. El operador, a duras penas consiguió escapar a la explosión provocada por su robot. Y prosiguen los vehículos robóticos sin conciencia moral y sin temor a las misiones suicidas. Pueden llegar a ser los terroristas ideales. El empleo de asesinos mecanizados, causaría ciertamente pánico y preocupación entre las víctimas y generaría la publicidad que los terroristas buscan. Es la robótica, controlada por los seres humanos. Pero, y los robots autónomos, comparados con los otros, serían solo semi-semejantes. Hay artefactos, como el misil de crucero (Chino) que una vez lanzado, ya no recibe instrucciones, se halla programado de antemano para actuar por su cuenta. Finalmente son armas autónomas y lo serán aún más. Otra característica de los robots autónomos, es su velocidad. Son capaces de tomar decisiones con una rapidez superior a la humana, clave en la actividad bélica. Pueden intercambiar datos estratégicos en la adopción de decisiones a muy altas velocidades. Pueden enfrentarse con circunstancias inesperadas y superar los escollos. Así pues, que ofrecen más seguridad y velocidad y aún son capaces de aprender a partir de sus propias experiencias. Es más, pueden ser enlazados para constituir sistemas gigantescos por todo el planeta. Lo que en el fondo se busca es que estos vehículos mega-robóticas mortales, es que se comuniquen entre sí, con una especie de conciencia colectiva y/o, semi-telepática. - (Tomado, de “Las guerras del futuro” de Alvin y Heidi Toffler. Pág. 165. Ed. Plaza & Janes.)


Al, vuelve a la carga

Pasado un tiempo... un día... después de ser invitado varias veces por Ferenixe, repentinamente, como todo lo agradable que suele suceder; por sorpresa, Fere, en uno de los ya anunciados y reanudados saludos matutinos de Al, arrodillado ante su lecho (Al, en señal de respeto, no sentó al principio en él; todo lo que le hacía, lo efectuaba desde y en el borde de su cama-colchó de aire; luego, motivado por Fere, se acostaba en ella) saludos, que se habían tornado (solo con cortas interrupciones) muy comunes y que desde luego, debido a la interrupción de las visitas, por parte de Alberto (Alberto, primero que todo, tenía que hacerse desear por Ferenixe; y segundo que todo, tenía que descansar sexualmente; por lo menos cada cinco días, de total abstinencia sexual, para poder manifestar a su amada, tal potencia sexual comprobada); de pronto, fueron aceptados con disimulada sorpresa y cariño. Al sabía que también, él tenía que hacerse invitar por Ferenixe.

Esa mañana, muy temprano (ahora, previa llamada anunciadora) habiéndose ido ya la hermanita de Fere, para el colegio (Fere estudiaba por la tarde); aquellos ardientes besos, dados, por todo ese maravilloso cuerpo de sirena; que desde un tiempo para acá, lo esperaba acostada, desnuda, bañada, perfumada y fresca; fueron más intensos y demorados que nunca; eran como, el preámbulo de la entrega sexual; por lo despaciosos... al recorrer la anatomía de su piel, poro a poro; que trascendía el agradable, inconfundible y embriagador aroma de su sexo; al acariciar y lamer las partes íntimas de sus largos duros y torneados muslos. Así, Fere... era, prácticamente relamida y apretada toda... suavemente; en una urgencia disimulada de exigencia y de entrega. A pesar de todo y con todo, esas caricias íntimas y esos besos, eran aceptados con urgencia esa mañana, más que nunca. Tanto que Al, casi sin preámbulos eróticos llegó directamente, a la ya acostumbrada succión en el sexo vaginal y virginal de su Fere. Pues se había vuelto una deliciosa costumbre y Fere lo esperaba ya lista para la consumación del acto. Acción demorada y repetitiva, hasta denotar, por el jadeo, no uno sino varios orgasmos de su niña hecha mujer. Hasta el punto de ser interrumpido por Fere, para ser besado por ella, en señal de agradecimiento por la acción, profesionalmente, realizada por Al. Quien, después de dejarla descansar sexualmente un rato, mientras la acariciaba suavemente por todo su esplendoroso cuerpo, consintiéndola especialmente, en su frondosa cabellera; en su cintura de sirena y en sus voluptuosas nalgas que tanto el deseaba sexualmente y admiraba. Esa mañana... al pedido expreso de su amada; por última vez, Alberto, la volteó y le hizo sexo anal, derramándose bien adentro del cuerpo de su amada.

Pasados unos 15 minutos; nuevamente, Al, la besa en la boca, succionando y entrelazando sus lenguas por varios y largos minutos, como respondiendo a ese amor apasionado y bello. Metiendo y sacando con ritmo su lengua en la boca de Ferenixe. Acto repetido hasta la mutua saciedad. Pero todavía, sin atreverse, a poseerla (penetrándola por delante, pues aún respetaba su virginidad.) Seguro, algo le decía a Al, que todavía no era el momento, tan esperado. Eso, sería solo cuando su Fere, se peleara con el novio; y se lo insinuara abiertamente, aunque ya lo había hecho. Al, pretendía, no solo eso, sino que le aceptara su palabra de matrimonio; y desde luego que le rogara insistentemente y que lo hiciera, prometiéndole y dando pruebas (como, la de aceptarle un curso Pre-matrimonial) de que después se casarían. Pues, Al, quería asegurarla para siempre; y gozar de su virginidad en la noche de bodas. Mientras tanto, había que esperar con paciencia; sobretodo a que Fere, también le diera pruebas, de que se había peleado definitivamente con su “novio”. Alber, se consolaba internamente, pues lo demás... ese maravilloso y muy terso cuerpo de sirena, con cintura de guitarra; era todo... todo suyo. Después de este, preámbulo amoroso, e inmensamente feliz y pleno Alber, salía del aposento de su amada (siempre, embriagado del cuerpo y del elixir de su adorada.)

Pensando por el camino, y llegando al ascensor... Al, llega a la conclusión de que debe, por táctica, cambiar los planes y aceptar al novio de Fere. - Por aquello, de que sino puedes vencer a tu enemigo, únetele. - Una la tarde... Al, decide entonces juntarse al grupo; formado por Fere, su novio y los amigos de la pareja y esperar la reacción del muchacho. Efectivamente, esa tarde... mientras esperaban la iniciación del “Bingo” en los inmensos y espaciosos salones comunales del Súper-sistema de vivienda nucleario, ubicado en la plataforma de la Súper-torre C. en la cual vivían; Al, se reunió y entremezcló con el grupo de muchachos; en los cuales se encontraban, Fere y su novio, como era su costumbre. Al, se sentó, a propósito, junto, muy junto a Fere; se interesó en la conversación, y se entregó a discernir y a comentar con ellos. De pronto, el novio de Fere... se paró... y se retiró bruscamente del sitio, y no se le volvió a ver, por lo menos en el resto de esa tarde.

Situación que aprovechó Al, para (una vez terminado el “Bingo”) extender su visita a Fere y acompañarla a su apartamento dúplex; sitio que esa noche estaba solo, ya que su familia disfrutaba de un paseo. La visita de Alberto, se realizó esta vez, directamente en la habitación de Ferenixe, para ver TV. Visita, en la que Al, la acostó y la fue desnudando lenta y paulatinamente, como pelando una fruta ya madura; mientras la besaba ardientemente por todas partes del esplendoroso cuerpo que iba descubriendo... así, la desnudó completamente y desde luego él también. Ferenixe, al ver a su “novio secreto” totalmente desnudo... tomó la iniciativa y lo recorrió todo... besándolo, restregando y envolviendo su larga cabellera, en el velludo cuerpo de Alberto; e igualmente, le rasguñaba con suavidad toda su musculatura y le mordía también muy suavemente, cada músculo desarrollado, del gimnástico y poderoso cuerpo de Alberto. Ferenixe con movimientos felinos se restregaba por todo el cuerpo de Al, y así juntos, se volteaban y revolteaban; revolcándose con furia en esa cama-colchón de aire, como dos felinos en celo, devorándose con ligeros mordiscos. Finalmente Ferenixe... se introdujo en su boca... todo... el bien desarrollado miembro de Alberto y comenzó a chupar y a meter y a sacar de su boca, parte del falo de su amado, mientras (por insinuación manual de Alberto) con sus dedos le apretaba suavemente la base del miembro, hasta hacerlo derramar; y tragarse hasta la última gota del semen de su adorado; al mismo tiempo, Alberto, acomodaba su cara entre los muslos de su amada; y también le chupaba el sexo a Fere, mientras con los dedos Al, le mantenía bien abiertos los pliegues de la vagina de su amada; hasta hacerla producir una verdadera cascada de orgasmos. (Alberto, sabía que esa posición - llamada la 69 - era especial para extraer bucal y sincronizadamente al máximo las segregaciones sexuales de los amantes.)

Luego, después de un prudente descanso sexual, Alberto, le vendó los ojos y la esposó con las manos por delante, con sendos pañuelos y le rogó a su adorada que permaneciera muy quieta y concentrada en lo que iba a sentir. Al, apagó la luz de la alcoba de su amor y dio comienzo (siempre, como si fuera la primera vez; procediendo con extrema suavidad y sorpresa) a las caricias íntimas, ardientes, quemantes; y por supuesto también, los besos en las mejillas, cuello, hombros, senos y rodillas; y en esas torneadas y esculturales piernas; no descontando esos maravillosos y perfumados muslos, tanto por su parte exterior como por su parte interior, hasta llegar nuevamente con su boca al sexo de su amada punto final de tal arremetida. Y así, suavemente soplar y resoplar por él, transmitiéndole todo el calor que era capaz. (Mientras Ferenixe, le apretaba con sus dedos, los hombros y la cabeza a Al.) Con una vibración circular, dental y lingual Al, esa noche, se dedicó, solo al clítoris de su amada, y justo allí le aplicó tales vibraciones, que alternaba succionándole también y rítmicamente la vagina. Por unos 20 minutos, hasta detectar el orgasmo; o, los orgasmos de Fere, y seguir así la acción alternativa; hasta conseguir la convulsión acusadora de otros orgasmos... y muchos más. Al, finalizó el acto, dando dos semi-fuertes palmadas, en las maravillosas nalgas de su Fere.

Luego, durante el sopor correspondiente, debido al intenso jadeo que producen los orgasmos; el turno fue para sus pies angelicales (para tranquilizarla) que fueron lamidos por entre los dedos y en las correspondientes plantas. Así fue esa noche, succionado, nuevamente y prácticamente, palmo a palmo, poro por poro todo el espectacular cuerpo de su Fere adorada; para devolverse muy despacio, lamiendo y besando intensamente, ese maravilloso cuerpo y rematar succionado con suma ternura, esos erectos voluminosos y tiernos, pero, firmes senos de su adorada; y mordiendo con suma suavidad y con los labios, los pezones arrebolados de Ferenixe. Luego, le quitó la veda de los ojos a su amada y le desató las manos y pasado un rato, Al sé des-acaloró, y satisfecho y embriagado, salió del aposento. Pero, cuando su amada que se estaba durmiendo o, quizás aparentaba que lo hacía (porque los suspiros, los estertores y sobretodo por que su humedecido y sudoroso cuerpo íntimo, declaraban lo contrario); al sentir que Alberto, se retiraba, Fere, salió de su apasionado sopor; le pidió a Al, más sexo... a lo cual Al, la volteo... y le hizo sexo anal, derramándose... bien adentro del cuerpo de su amada. Ferenixe, después del descaso subsiguiente, se colocó su levantadora y acompañó a Al, a la puerta de su apartamento.

Sitio en el cual, Al... le estampó un último ardoroso y prolongado beso, y otro y otro... en la boca, que Fere entreabría aceptando el intenso intercambio lingual y salival... con pasión; así bebieron los dos, del elixir del amor, por otro largo rato, en señal de despedida. (Ferenixe, salía al otro día, muy temprano para la finca.) Entonces, Fere, bajó al sexo de su amado, le abrió con afán la bragueta y le chupó nuevamente el miembro; con tal asiduidad que Al, ya no aguantó más y loco de pasión le estampó en la boca, una serie in-interrumpida de largos, apretados y sensuales besos... y contra la baranda de la escalera interior del dúplex de la familia de su amada. Fere, en cuestión de segundos, fue violentamente alzada e izada y tomada fuertemente de los muslos; Al, se los abrió... decididamente y luego, sostenida de las nalgas, con sus poderosas manos, Alberto finalmente, la penetró de una. Así fue Fere, poseída (desflorada) por primera vez. Al, sitió en su miembro, en ese momento, el desgarre del himen de su amada; y la fuerte contracción vaginal de su virginal amada; a la vez que el instintivo rechazo de Ferenixe, al enterrarle las uñas en la nuca y en el hombro de Alberto, con un fuerte gemido de dolor, despidiéndose así... para siempre del tesoro de su virginidad. Mientras Al, sin soltarla y penetrándola toda... aún más, (los ya... pocos centímetro de falo, que aún quedaban por fuera de su vagina) la meneaba fuertemente, tomada de las nalgas con las manos de Alberto. En el mismo momento que Al, buscaba la boca de Fere, con su boca, para calmarla. Pues, Freneixe, ahora si lloraba de verdad; y era de dolor, por el fuerte escozor experimentado a la entrada de su vagina. Hasta que pasado el arrebato inicial entrelazaron sus lenguas y así unidos y al fin penetrada Ferenixe, permanecieron así un largo... largo rato. Así, Ferenixe, fue besada y poseída la primera vez por Al. Hasta que Al, sintiendo correr algunas furtivas lágrimas por su cara; la descolgó y la amó con una dulzura sin par, pues entonces (ya pasado el escozor) Ferenixe, ahora, lloraba, pero era de la emoción, por al fin haber sido poseída y desflorada por su hombre; y por el ya pequeño ardor momentáneo que sentía. Pues, ella también sentía, que había hecho suyo, todo suyo... al ser que más admiraba y quería... su Alberto, del alma; a quien se le había entregado toda... sin ninguna retribución, ni desconfianza; pues él representaba, el “amor” de su vida; y a quien gustosa, le había entregado el tesoro de su virginidad.

Luego, siguió otra larga, desesperada y acalorada sesión de tiernos y amorosos besos. Fueron unos besos tan ardientes, como brazas, e inolvidables llenos de pasión y de entrega, que otra vez realizaron, pero esta vez, en la sala del apartamento junto a la chimenea (artificial) todavía prendida. Relación sexual, que Fere inició (después de dormir un rato sobre el pecho de su adorado, que la consolaba como la niña que en realidad... ya no era) ésta vez, bajándole los pantalones y los pantaloncillos, a su amado y montándosele encima a Al. Y así, empezar a moverse, magistralmente, menándose y arqueándose con un ritmo interrumpido. Tal fue la tremenda succión sentida... (debida a la estreches de su vagina, y principalmente a los arqueos de cintura de Fere) que Al, ya no pudo más y la sacó de encima, de su cuerpo; rematando el acto sexual, eyaculándose nuevamente por fuera de la vagina de su amada; que nueva y rápidamente Fere, chupó el miembro de Al, succionándole, lo último que le quedaba, del líquido perlático, del tremendo falo de su amado.

Los reanudados y apasionados besos al rato, fueron como el preludio de otra entrega sexual ya muy próxima que Al, culminó después de un largo rato (Al, sabía demorar, ayudado por el “Yoga” hasta límites insospechados la terminación y la iniciación del acto sexual) de la misma forma que las anteriores veces eyaculando por fuera de la vagina de su Fere del alma. Acto que nuevamente y rápidamente Fere, culminó chupando el miembro, para sacar y tragar lo último que pudiera quedar del semen del miembro de su amado. Finalmente y después de descansar un rato; Al, subió en sus brazos a su extenuada... amada, entre-dormida, hasta su habitación y la acostó. Sin embargo, Fere... se despertó e insistió en que Al, volviera a repetirlo. Entonces Al, la volteó y por detrás la poseyó, haciendo sexo anal, una enloquecedora vez más, eyaculándose del todo, muy adentro de su cuerpo. La cubrió en su lecho, con sabanas frescas que halló en el closet... diciéndole muy quedo al oído:

- Mi amor... ahora, solo espero que nos encontremos en nuestros sueños... Feliz noche mi vida. Te dejo en este beso... un recuerdo de tan deliciosos e inolvidables momentos... que espero sea suficiente... gracias mi amor... por permitirme estas caricias, gracias por regalarme tu virginidad... fue un honor que no merezco, delicia que recordaré siempre y que es y será para mí hasta la muerte... todo. -

Al, ya no cabía de la dicha, se le reventaba el corazón de la emoción. Fueron tres meses desde aquel pacto de amor, coronados ahora con la inmortal diadema del ofrecimiento de su virginidad. Esa noche después de orar y dar gracias al Señor, por todo lo ocurrido; escribió algunas poesías, se dio un duchazo y se durmió plácida y profundamente; como nunca. Pero, a la madrugada, algo lo despertó y como sonámbulo, viendo que el robot espía no funcionó; desesperado, se fue, muy, muy sigilosamente (como un cazador) al apartamento de su Fere adorada, se deslizó hasta su alcoba, tal y como lo hacía siempre, pero esta vez, inexplicablemente: la encontró haciendo el amor con su novio. Muy temprano, al otro día y sin haber podido conciliar el sueño, Al, disimula su tremenda angustia (ni Fere, ni el novio se dieron cuenta de que Al, los había visto haciendo el acto sexual.) Le escribe (para desahogarse) la siguiente nota, muy diplomática a Ferenixe. Nota, que a la postre, resultó ser un resumen de la situación sentimental vivida por los dos, hasta el momento; no sin denotar algo de disimulo por los actos acaecidos la noche anterior; ya que Al, sabía que su hermanita, era la primera en leer las cartas de Al. Se las leía todas trasnochándose en eso. Hasta se las aprendía de memoria, bueno, así son los niños, por esto, tenía que tener mucho cuidado con lo que le escribía:


Ferenixe, mi “novia secreta”:

Ya nuestro “amor secreto”, está llegando a cerca de tres meses; por esto te escribo esta misiva, para hacer un recuento de este amor, para mí único y muy hondo. Gracias cielo mío, por los instantes de alegría dados a mi corazón; gracias por dejarte amar; gracias por esas miradas tiernas que a veces tú me das, gracias por dejarte acariciar y regalarme tu perfume, al recibir esos tiernos y apasionados besos, dados en tus mejillas, y en tu cuerpo, mi dueña hermosa.. Gracias por ser mi novia (en secreto.) Gracias por tanta alegría y consuelo a este ser que aunque no siendo joven, ya te adora más que a nadie en el mundo. En fin gracias por todo... todo lo nuestro.

Pero, mi dueña, eso, que a veces llamas “intenso,” cuando a veces trato de obtener de ti unas caricias; por Dios, si a ti te parece intensa, una actitud así, es por sobretodo, últimamente, y a veces, lo relativamente poco que tú me das, ya que si te pido un beso en la boca, en ese momento, tu té niegues, y a veces, permites todo menos eso. Un amor, es comparable a un recipiente, que como el que a mí me tocó en suerte, y que para ti resultó grande; pero, mi cielo, que se llena con muy poco, y requiere desesperadamente, estar siempre lleno de amor, pero de ese amor fiel; expresado, por lo menos, con una sola y muy pequeña caricia,

Fere, por el calor de aunque sea uno de tus besos, en tu boca dulce, nacarada y tierna, por ese solo beso es que yo vivo. Y esto, debe ocurrir, por lo menos una vez en el día; dado, recibido y sentido de verdad. Y sí,, somos “novios en secreto”, que con una mirada, con una expresión cariñosa, o, por lo menos, amable, y/o, preferible, solo con un tierno y ardiente beso estampado en una de tus mejillas de muñeca adorada. Yo mi vida, la verdad, no persigo de ti, solo tu cuerpo, persigo tu corazón y lo persigo con tenacidad y afán. Pero, lo quiero conquistar para mí solamente y para siempre. Pero, también, (y perdóname) mi corazón está hambriento de esos besos, dados con ternura en tu carita y en todo... tu cuerpo de niña hermosa. Luego, mi niña no me los niegue, son todo, lo que de ti obtengo y con lo que me consuelo. Son mi vida, son mi alimento sentimental; sobre todo son mi esperanza. Mi tesoro, por favor no me los niegues nunca.

Si alguna vez, en tu vida, sentiste la necesidad de ayudar a alguien y ese alguien, según tú me lo has demostrado siempre, al parecer soy yo. Esta vez, mi reina adorada, te ruego lo cumplas, tal y como yo te cumplo, porque tu sabes que por ti yo me muero. Que sin ti, mi vida, ya no es vida. No mates entonces a este amor naciente, matándome a mí sentimentalmente. ¡No huyas de mis besos y caricias! Y sí, mi amor, yo por ti, me he convertido en “limosnero” de amor; de esos besos y caricias necesitadas desesperadamente, por hallar tu carita y tu cuerpo de inocente niña. Criatura mía, bajada del cielo, quiero estamparlos en lo que para mí, es lo único y es tu rostro hermoso y tu cuerpo, solo el tuyo. Nunca el de alguien más. Seré pues, toda la vida, ladrón de tus besos y si por ellos me muero que así sea. Yo mi cielo, como las abejas, necesito el néctar de tu cuerpo. Eres parte vital de mi existencia, tú lo sabes, sin ti me muero. Y ya que puedo hacer. Así, me enamoré de ti, siendo esta situación, hoy, irreversible. Es, esto o, nada y la nada, para mí: es la muerte sentimental; por lo menos por ahora, mientras llega la otra muerte; que así, sería muy pronto; aquella, por la que te deje descansar, este ser “intenso” que te adora; o sea, mientras me llega la hora, única, que es capaz de interrumpir mi amor ardoroso e “intenso” que siento por ti... solo por ti.

He aprendido a amarte así, con todos los problemas causados por (Ese) tu “amor” de siempre. Pero, así es que te tengo, o de lo contrario te pierdo. Entonces, solo un poco de cariño te pido a cambio; solo, tu buena disposición, al recibir las muy cortas y pocas, pero a veces prolongadas caricias que te doy (o que tú, permites que te dé.) Con la esperanza de que algún día, aprendas y te acostumbres a quererme; para entonces, hacerme muy feliz. Puede, que de pronto, estimes que yo sea mayor para ti; pero mi Ferenixe adorada, esta situación es relativa, te quiero con amor del bueno, soy todo tuyo entero y no te comparto en mi corazón con nadie. Vivo por y para ti, mi amor eterno, mi amor del alma. Este ser, te quiere de verdad, como nadie te ha querido, ni te querrá. Esto lo comprobarás, cuando yo, ya me haya ido, Ferenixe de mi corazón, así que cumplidos, ya casi dos meses, de un amor (por lo menos por mí, de verdad sentido.) Es necesario que vivamos este amor siquiera un poco más intensamente, solo un poco. Que de pronto nos entreguemos a él para siempre y del todo. El amor, es solo entre dos, mi vida. No permitamos que muera, muriendo yo con él. Sálvalo y sálvame a mí también. Ayúdame una vez más. ¿Qué, trabajo te cuesta? Hazlo por compasión, si así lo prefiere, pero hazlo ya, mi dueña adorada. No te pongas a ratos tan esquiva a mis caricias, hechas con la ternura que transmite mi corazón de ti enamorado. Sin nada solamente material, como lo es ese amor que dura, solo un tiempo, y que una vez conseguido todo, se evapora como el agua. Es que, mi dueña adorada, yo te quiero, pero, para toda la vida. Es por eso que hoy te vuelvo a rogar que nos casemos.

Porque yo te quiero de verdad, con ternura, con amor puro. Resulta mi dueña, que el amor así sentido, es tan verdadero que aún no estando juntos, se sigue sintiendo en el corazón. Acompaña, gratifica y engrandece a quien así lo siente. Es el único amor que te hace digno y que a los ojos de Dios, inmortaliza. Es el deseo de sacrificio y de ayuda, al ser querido; ese que nunca se olvida, en ningún instante, ni situación alguna. Es el que ofrece mucho a cambio de nada. Es ese amor, el que por ti siento, mi Ferenixe del alma. Es el que me hace doler el pecho de tanto amarte. Ferenixe de mi vida, si por obtener tu amor, lo pierdo todo, solo el hecho de haberte tenido y hecho mía, aunque fuese por un instante, me ha hecho el ser más feliz que sobre la Tierra haya existido. Entonces, no he perdido nada, solo he ganado un instante de tu amor, suficiente, como para llenar a mi corazón por ti sediento. Fue, la esperanza de que tu fueras mía, la que llenó mi vida, y así por ello, he ganado, por la experiencia conseguida al obtener de ti, aunque fuese... una mirada de ti enamorada, una caricia y la intención de un beso. Porque vales para mí esto y muchos más. Cualquier sacrificio por grande que este sea, por intentar obtener tu amor siquiera un instante, me permite ganar la gloria, de haberte tenido en mi corazón, y esta vez, para toda la vida. Así me cueste hasta la vida, la que diera por ti gustoso. Finalmente, solo me resta desear en adelante lo mejor para los dos. Tu amor escondido y/o, tu novio “secreto”, que te quiere de verdad, cada día más, desde el primer instante en el que te vio. Que te esperará, por siempre... Por ahora, además, solo me resta desearte muchos éxitos, en tus relaciones sentimentales... Si, esto fue lo que tú quisiste y escogiste para ti, es todo tuyo, es tu futuro y tu provenir, a lo cual tienes pleno derecho. Que seas feliz y que Dios quiera, que nunca pases, por lo que a mí me tocó pasar, por obtener siquiera, las migajas, de tu amor. ¡Es muy duro!


Ferenixe: Discúlpame, por lo extenso de esta carta, tuyo por siempre, te adora y te espera en la oscuridad de la esperanza.
Alberto

Mellín, Marzo 24 de 2020




El cinturón de asteroides o, Faetón, el V planeta rocoso.

Nota:

- *El azar hizo las distancias; solo el espíritu, puede cambiarlo todo. -

- Localizado en la quinta órbita, a partir del Sol, formaba parte de los planetas (térreos, rocosos) y estaban localizados en las órbitas vitales; o sea, en las cuales es posible la vida. Fue el gran astrónomo alemán Wilhelm Olbers; el primero, quien, en el siglo antepasado, formuló la hipótesis: de que un planeta, que debió de existir hace millones de años, entre Marte y Júpiter, se desintegró, por razones que desconocemos. Efectivamente, se estableció con certeza que, por lo menos el 15% de los asteroides que gravitan entre las órbitas de Marte y de Júpiter; principalmente Ceres; Palas Juno y Vesta; con un promedio de 500 Klmtrs., de diámetro; formaron, un solo cuerpo planetario llamado Faetón. Sea lo que fuere, existen en esa zona, por lo menos unos 2.000 pequeños mini-planetas que, giran, entre Marte y Júpiter; los cuales, junto con una incalculable cantidad de pedruscos cósmicos. - O, asteroides menores; hoy, más conocidos, como el “cinturón de asteroides” (algunos con forma cilíndrica.) Formaron, en un tiempo, parte de un solo planeta, situado en el “sistema solar”, en la zona correspondiente al número 28 de la “Ley de Bode”. - Lo cual, nada impide considerar que, algún día, éste, se pareció a La Tierra. El científico, piensa además que los habitantes de Faetón (los Akpalus), provocaron (seguro, que accidentalmente) una gigantesca reacción termonuclear, en cadena; que se alimentó con el hidrógeno de los océanos y lo volatilizó (al planeta entero) en un final apocalíptico. - Pero, no obstante, la principal sospecha, es que los habitantes del planeta desintegrado, los Akpalus, también, dejaron su huella en los demás planetas (térreos) o, sea, en Venus, Tierra y Marte. La causa también se sospecha: Según la Mitología (por falta de mujeres en Faetón), ocurrió por una guerra interplanetaria, entre los habitantes de estos tres planetas llamados tierras, ubicados en la zona de vida animal, vegetal, humana e inteligente; denominada: La interna, la del medio y la externa. - (Tomado, de apartes comentados y resumidos del libro de Marius Lleget “¿Qué vio la mujer de Lot?” Ed, Círculo de Lectores S.A.)


Los Sumerios.

Nota:

- *La “Mitología Sumeria” dice que: - Los "Anunaki", se traduce literalmente como "Aquellos que del cielo a La Tierra vinieron". - Grupo de viajantes del espacio, que lo encabezaba "Enki", el padre de "Thot", que fue el pionero de los salvadores. Fue "Enki", según "Zechaira y Sitchi" quienes alteraron genéticamente a la humanidad (de 48 a 46 cromosomas); (o, al homo saphiens.); y luego, les enseñaron los secretos divinos de la “Sagrada Geometría Universal”, en su verdadero lenguaje, las matemáticas. -

Curiosamente al respecto, “La Biblia”, nos habla de una raza de líderes superviviente de una hecatombe mundial. La historia de Noé, que repobló La Tierra, con las diferentes razas que hoy existen. También nos relata, del ajuste de edad de vida humana; que de mil años promedio de vida, pasó a los 120 años de hoy. En otras palabras, los primeros seres que poblaron el planeta fueron longevos, altos y muy sabios; luego del “Diluvio Universal”, la situación cambió y el hombre, fue perdonado y condicionado a una vida santa. Cumplida, o no, tal exigencia, la humanidad siempre ha mantenido tal creencia. En unas o, en otras palabras; sabe que debe permanecer con y en Dios, de lo contrario pasará muchas penurias y amarguras. Conformando otra curiosidad, se habla del paso de un estado planetario a otro, lo que puede también significar, el paso de un planeta a otro; ya que la simbología del aparato que, permite tal proeza es un “barco”, que, surca las aguas de arriba; el mismo, utilizado para los viajes interplanetarios, de muchas de las leyendas existentes. Que si la humanidad, es una sola, con un mismo origen, no puede tratarse de otra simbología, solo, con diferente interpretación. Cerrando el vasto espacio de curiosidades, la ciencia-ficción moderna, interpreta las naves interplanetarias del futuro, con alguna forma de “barco”.

Nota:

- *Hoagland, continuando con su asombrosa búsqueda, descubrió que - la "Cara" que hay en Marte (Enki); no era el “Mensaje Celestial" más importante de la región de Cydonia; lo que se ha encontrado, no son mas que "losas", destinadas a atraernos hacia algo muchos más importante: "La Pirámide", simétrica, cuya parte superior muestra la dirección ante la que se orienta; o, a las Pléyades; que Hoagland, denomina la Pirámide * "D y M". , En honor a sus descubridores, Dipietro y Molenar. -



Poemas a Ferenixe :

Ahora, algunos de los poemas de Al, profundamente enamorado, dedicados a su amor del alma, su Fere adorada; escritos la noche (ya la madrugada) antes de propiciarse aquel nefasto despertar, para el corazón de Al, por encontrarla, haciendo el amor con su novio de toda la vida. Era como recibir un tremendo golpe en la cabeza o, una paliza en todo el cuerpo. Su alma, estaba tan lacerada que ya Al, no tenía voluntad para vivir; pues, la visión de ese instante, terminó toda esperanza y todo consuelo; truncándose una vida de amor y de esperanza y tornándose en un intenso y amargo despertar a la vida y a la muerte, o mejor a la muerte en vida:

Te pienso.

Yo siempre te pienso y si... de mí te acuerdas,
Tú mi Vero del alma, el solo hecho de hacerlo,
Solo de saber, mi amor, que de mí te acuerdas,
Obra en mi, como un vaso lleno, sin romperlo.

Que me ata, a ti y a mi vida, con cuerdas,
Que no se rompen, mi amor, con aún quererlo,
Para entender, que aún de mí,, ya no te pierdas,
Y amarte así... toda... toda, mi Vero, sin saberlo.

Porque son tantas las veces... que me enfermas,
De solo pensar que de ese, de tu amor, ya no tenerlo,
Porque sin ti, solo, me refugiaría en las tabernas,
Único aliciente, a una pena por tu amor, al no tenerlo. A.G.

Tú... mujercita.

Ferenixe, mujercita de bellos ojos,
Dime, como no admirarte y no quererte,
Como, no satisfacer tus antojos.

Para eso estoy, para contemplar tus ojos,
Para consentirte mi dueña... para amarte,
Para darte mi vida entera y no despojos.

Y así, será, si logro ser el dueño de tus ojos,
Para darte todo de mí y complacerte,
Luego, acariciarte toda... por manojos. A.G.

Tu mirar.

Tiene mi vida, la fuerza de la ensoñación,
Del mar y del cielo en toda su grandeza,
Que anima, nutre y fortalece al corazón,
Cuando mi amor, me acerca a ti con entereza.

Es cuando entonces, robusteces a mi alma de pasión,
Por estimar, cuán raro aún estoy por tu tristeza,
Que con solo verte y admirarte, desde aquella ocasión,
Fue cuando, supe, que serías mía y con fuerza. A.G.

La Bondad.

La bondad de tu proceder,
Se me parece a la de un ángel,
Aquel que se me supo aparecer,
Ya mi vida, desde el día aquel.

Siempre fue como ayer,
Cuando todo sería de miel,
Porque tú y yo en ese acontecer,
Seríamos felices y sin hiel.

Porque yo te sabré comprender,
Y siempre, sea lo que sea, te seré fiel,
Como lo es, del día el atardecer,
Con un amor muy fuerte, y no de papel. A.G.

Junto a ti.

Junto a ti mi vida, mi alma se llena,
Y mi corazón amor, solo por ti late,
Como todo, lo que corre por mis venas.

Solo tú, al enamorarte, no me apenas,
Porque has sabido quitar de mí la parte,
Esa que me atormenta tanto y es tu pena.

Muero, entonces poco a poco, en esa faena,
Cuando, vuelvo a mirar de ti esa parte,
Que me reclama a gritos, y es tu pena.

Pero, al gozar por un momento del arte,
Que es mi amor, en tu vida, otro tema,
El de amarte de ese modo... al desearte. A.G.

Siempre tuyo.

Como las aves son del cielo,
Yo soy tuyo por siempre,
Y a pesar de mi desvelo,
Yo te amaré por siempre.

Y si mi pensamiento alza vuelo,
Es hacia ti, mi amor... siempre,
Pero, hay veces que me revelo,
Para volver a amarte así, siempre

No niego, que eres mi cielo,
Que fuiste y lo serás por siempre,
Por eso te llevo en mi vuelo,
Hacia la eternidad y por siempre.

Y si algún día, te lo revelo,
Recuerda, que fue por siempre,
Que así te amé y desde el cielo,
Te esperaré y así juntos siempre. A.G.

Te necesito...

Ferenixe, náufrago en la vida yo soy,
Mi amor... sin rumbo y solitario voy,
Desde el día de tu llegada, el rumbo logré,
Fueron tus ojos, mi faro y el rumbo recobré.

Esos tus grandes ojos me dieron la fe,
Pues desde hace mucho tiempo yo te esperé,
Hasta el día en el que, mi preciosa, yo te hallé,
Y ya desde entonces, siento que yo soy.

Que ya solo, por el sendero no voy,
Es la esperanza la que mi alma en ti ve,
Luego, ya la tristeza y la soledad olvidé,
Y ahora, mi vida, contigo yo voy.

Llegaste, cuando ya cansado... yo te esperé,
Cuando, la sola esperanza de tu amor de hoy,
Me ha devuelto a la vida y así yo voy
Con tu cariño y tu presencia, que tanto esperé. A.G.

Eres canción

Tú mi Fere... eres canción, eres poesía,
Eres recuerdo, luz, eres para mí todo,
Eso era desde que fuiste en un beso... mía,
Y así, no poder olvidarlo nunca del todo.

Jamás imaginé mi amor aquel día,
Que iba a suceder y de ese modo,
Como te amé al saber que existías,
Y por ese amor, se descubrió todo.

Y así comenzó todo... en el tiempo, aquel día,
Que con la sola intención de un beso, te di todo,
Para entonces dejar a Cupido, con quién se envía,
Y llega la inspiración, el amor, la pasión y todo.

Aprovechar el momento en el que porfía,
Para escribirte y poder así, contarte todo,
En estas muy sinceras líneas alma mía,
Para que perduren cuando yo ya sea lodo.

Pero lo más bello de todo fue aquel día,
En el que a pesar de todo y contra todo,
con la intención de un beso fuiste mía,
Para, desde entonces, amarte de ese modo. A.G.

Tu llegada.

Tú llegaste a mí para quedarte,
Porque fue para mí todo,
Hasta quedar en mí al separarte,
Y estar siempre así y de ese modo.

Hoy solo estoy, sin dejar de amarte,
Porque eres como respirarlo todo,
Y fue así desde tu llegada, para quedarte,
Siendo desde aquel instante... para mí todo.

Fue todo... para mí al quedarte,
Siempre fue para mí todo.
Pues, ya nunca pude olvidarte,
Y te amé tanto, así... y de ese modo.

Y con el tiempo aprendí a amarte,
A solas... en mi alcoba y a mi modo.
Tanto, que pienso que quedándote,
No hubieras sido... para mí todo. A.G.

Tus Ojos de Niña.

Amo a tus ojos de niña; cuando se te cierran y porfían
Debajo de un diminuto beso estampado en tu mejilla
Porque esto es el amor, es morir mil veces en un solo día
Y otras tantas al quemar todo el pensamiento en un día

Resurrección que es el tormento de la próxima agonía
Es como una fuente de convivencia y de familia
Este amor eterno que promete, crece y se madura
Que hoy en medio de alegrías y dolores sufre y confía. A.G.

Tú, mi verdadero amor.

Mi Fere... no lo había sentido así,
Tan intenso, diamantino y tan puro,
Como este cariño que siento por ti,
Es así, aunque yo sea ya maduro.

Mas hoy te quiero y por ti ya todo sufrí,
Al pensar en perderte cuando más te quiero,
Con cariño puro y de verdad, así lo sentí,
Fue sin advertirlo, que ya eres mía, eso espero.

Me inspiras amor puro, yo ya lo intuí,
Y con amor de verdad, y sin pasión te quiero,
Con ese amor que solo se siente por ti,
Por tus ojos de niña y tus labios carmesí.

Pero hay amor, como te quiero y es a ti,
Desde que ayer té vi, fue lo primero,
Este amor tan grande que siento por ti,
Y así fue, hoy tan puro y sincero.

Tu deseo de ayudar aquel día y fue a mí,
En un “Bingo”, cuando jugabas con esmero,
Fueron de esas cosas que pasan, cuando te vi,
Recuerdas, cuando perdí y me diste de tu dinero.

Fueron esos los detalles que me enamoraron de ti,
Y hoy al recordarlo debo saber que te quiero,
Con sorpresa veo que a quien adoro es a ti,
Aunque el mundo este lleno, solo a ti te quiero. A.G.

Y gracias al fin.

Gracias por haberte conocido,
Por haber llenado así mi vida,
Por darme tu amor y darme tu olvido,
Sin ello no hubieses sido al fin mi vida.

Gracias por permitir con tu olvido,
Lo que nunca esperé en la vida,
Que fue llegar a ser como el olivo,
Fuerte y tenaz en amor y vida.

Gracias hoy te doy por tu olvido,
Siendo tú el amor que esperé en la vida,
Para llenarla de recuerdo amor y olvido,
Pero feliz... por solo esto... mi vida.

Gracias por ser de alguna forma tu preferido,
Y siendo así de ese modo... el primero en tu vida,
Nunca, mi amor, me contentaré con algo parecido,
Solo contigo, mi amada y querida... tú mi vida.

Gracias mil, por haberte conocido,
Hoy sé que fui así... único en tu vida,
Por este amor secreto... por los dos elegido,
Para así, al fin, ya nunca llegar al olvido. A.G.



Insistir y soportar.

El amor, nos enseña todas las virtudes. (Plutarco)

Una vez, ya sabido todo, sobre la verdadera situación de Fere con su novio Al, no desfallece y continúa como si no supiera nada, pues cuando furtivamente los sorprendió, haciendo el acto sexual, ellos no se dieron cuenta. Así las cosas, por aquellos días, el cambio de Fere fue sorprendente, tanto, que llegó el momento de ya no querer recibir las caricias que Al, le prodigaba. Pero Al, esperaba (como un tigre) la oportunidad de actuar y esta, nada que se presentaba. (La verdad: Fere, esa noche – o, madrugada - fue violada por su novio; quien la espiaba y al salir Alberto, del apartamento de Fere; éste, abrió mediante una clave maestra; y se introdujo furtivamente al dormitorio de su “novia”; y la poseyó; segregándose adentro y preñándola en el acto. Seguramente, Fere, lo aceptó; por cuanto creyó que era Al, quien se había devuelto; y al darse cuenta de su error, sacó a puntapiés al intruso y cerró con seguro su habitación.)

Así pasó un tiempo; hasta que una noche, Fere en compañía de su “novio” visitó a Al, quien estaba resfriado (afección que al parecer nunca se acabará.) La sorpresa fue doble Alberto, no sabía que hacer y solamente, se le ocurrió abrir la gaveta de su mesa de noche y mostrarle al “novio” de Fere, el borrador de la novela de ficción “Berenice” que inspirada en Ferenixe... estaba escribiendo. Y ocurrió, otra sorpresa, mejor dos, el “novio” de Fere, no se inmutó siquiera por el contenido del borrador del libro. Solo dijo con ironía, que seguramente, esa novela iría a tener mucho éxito. El muchacho, no entendió que los dos nombres son lo mismo. A lo cual, Al, sorprendido; concluyó acertada y absoluta la seguridad y el dominio que el “novio” tenía sobre Fere; o, creía tener, sobre ella. Pero, Fere, que era una muchacha sorprendente y muy inteligente; calculando el resultado de la visita anterior, resolvió cambiar de actitud con Alberto, y volvió a aceptar sus (disimuladas en público) caricias, inclusive delate de todos. Y hasta, delante del “novio”. Fere, era una mujer de mucho talento, seguridad en sí misma y poseedora de una personalidad muy fuerte; no se iba a doblegar tan fácilmente. Al, descubrió, entonces, otras características (seguramente, que contagiadas de Al) de la personalidad de Fere: Se había vuelto, tremendamente celosa, dominante, caprichosa, orgullosa y egoísta; a lo cual Alberto, resolvió, no volver a hacer caso a esas cuestiones (pues, a lo mejor, él era el único culpable) y dejar que las cosas se desarrollaran solas; que el tiempo, en este asunto, al parecer su mejor aliado; lo resolvería todo. Así, iban ocurriendo los acontecimientos y a Al, ya no le importaba nada; solo, las entregas y las intensas, íntimas y deliciosas caricias que su Fere, le permitía de vez en cuando, en su casa (cuando estaba sola) o, en la casa de Alberto. La otra sorpresa: fue que Alberto, notó cierto repudio de Ferenixe hacia el “novio”.

Desde entonces, Alberto, como un felino que espera a su presa, aguardaba la oportunidad en que Fere y su “novio” se pelearan; pero esta riña nada que llegaba y la situación para Al, se iba poniendo, color de hormiga; tanto, que el “novio” de Fere, resolvió entonces abrazar y acariciar a Ferenixe en público, cosa que antes nunca había pasado. Ya no solamente la abrazaba, sino que la besaba delante de todos. Y Al, seguía en la oscuridad, por el hecho de ser novio de Fere... pero en “secreto” y su papel seguía siendo, como el de un tigre: esconderse, agazaparse y esperar. No sin antes, denotar una cierta repulsión de Fere, a las caricias de su “novio”.



Poco importa

Que tengas otro, eso no me importa,
Por eso, el cómo me llamen al soportar
Que tienes otro, ser tuyo es lo que me importa,
Que nadie se meta, soy yo quien lo soporta.

Solo sé que debo ser yo, el que así se comporta,
Salido de un mundo irreal que solo a mí me importa,
Me conformo con tus migajas, es lo que a mí importa,
Es así mi amor, tal cariño a nadie le importa.

Si soporto que tengas otro, es a mí al que le importa,
A nadie más, que no se metan en lo que solo a mí importa,
Y así te quiero y así te adoro, es lo que importa,
Si me das el cariño que yo quiero, por eso mi ser lo soporta. A.G.

Fere... tú, con ese beso, me enseñaste todo.

A amarte así de ese modo y en secreto,
Privarme de tus labios y besar tus mejillas,
A escondidas, ocultos y en secreto,
Para ya nunca poder olvidar ese secreto.

Siempre en el corredor, a la entrada,
En secreto, yo te doy mi amor en un beso,
Solo en tus mejillas, siempre a la entrada,
Te tengo y te entrego de mí todo... en ese beso.

Por eso siempre allí te espero,
Para ver si me permites ese beso,
Que mi alma siente como si fuese entero,
Y con agonía yo siempre lo espero.

Me muero por esa demostración de amor,
Mi ser anhela y se muere poco a poco,
Hasta que llega el momento del amor,
Con ese encendido beso, dado de a pocos.

Mi vida, mi cielo, por un beso tuyo yo me muero,
Y por ese beso, por esa caricia yo lo olvido todo,
Así con ese beso yo me siento todo entero,
Feliz como nunca y sin saber ya de mí todo.

Como me gustas y como ya te quiero,
Cada día más y más estoy de ti enamorado,
Ya no tiene reversa este amor por ti mi lucero,
Y desde entonces, ese beso, es el que yo prefiero. A.G.


Una noche, después de orar, Al, salió de su apartamento (o, desde ahora, su escondite sentimental) y resolvió hacerse presente, en el apartamento de Fere y visitarla en la zona social del mismo. Pero, Fere (que esa noche, tenía una visita de sus compañeros y compañeras del colegio) no mostró atención alguna por la visita de Al, dando a entender un repentino y completo desinterés por él. A lo cual Al, respondió marchándose muy triste, para refugiarse en su apartamento y no volver a salir de él, en varios días. Suspendiendo, desde luego, las visitas matutinas en su habitación, a su Fere, del alma... el amor de su vida y dedicarse, por completo, a revisar y terminar su novela... “Berenice”; inspirada en Fere. Cuyo tema, de alguna forma le conectaba con su adorada. Al fin de cuentas, ya la había hecho suya (y por la primera vez... ya que él, y solo él... la había desflorado.) Luego, solo tenía que esperar y eso era lo que (por sus años) sabía hacer mejor.

Pero al cabo de unos días de encierro en su biblioteca. Alberto, sorpresivamente fue visitado de nuevo por su adorada Ferenixe; quien volvió a mostrar interés en Al; y desde ese momento... ubicados en el gran sofá de aire de la biblioteca; resurgieron las caricias, desde luego que más ardientes y más intensas que antes; pues la entrega sexual contenida, se reinició con profundas e íntimas caricias, (como nunca) como si fuera la primera vez. Al, después de besarla apasionadamente, le levantó (con los dientes, mientras con las manos le acariciaba las duras puntas sus senos) su falda a cuadros de colegiala que a Al, tanto le despertaba a la pasión; y la besó repetidamente... en las bien torneadas rodillas; al tiempo, que le acariciaba los muslos y luego... bajó palmo a palmo por ese maravilloso altar con cuerpo de guitarra, para colocar su cara... justo, en medio de ese maravilloso par de piernas de su Fere. Subiendo y lamiendo muy despacio... esos voluptuosos y largos muslos; y luego... colocó su boca justo frente a su sexo... ya solo faltaban unos pocos milímetros (distancia, suficiente para respirarle, con resoplidos de pasión) trayecto que además, Al, respetaba; pues, desde que fue rechazado por ella, la última vez; juró que de besarla, nuevamente por allá, sería por que ella y solo ella, se lo insinuara. Acariciándole luego, alternadamente... los senos, por entre la blusa del uniforme, por encima y por debajo del el sostén y de la blusa de colegiala... hasta desapuntarla por completo; subió nuevamente el rostro y le estampó su aliento acalorado, abrasador y quemante... en las puntas de esos exuberantes y voluptuosos pechos, coronados por unos preciosos, arrebolados y ya muy duros pezones de niña hermosa hecha una súper-mujer. Pero, sin embargo, como Ferenixe extrañamente, y a pesar de las estimulantes caricias aplicadas en su cuerpo; ese día, se negó a dejarse desvestir completamente. No obstante Al, no desaprovechó la ocasión de tenerla a solas y en su apartamento; y entonces, la recorrió toda... por encima del uniforme, desde arriba hasta abajo, llenándola de abrasadores besos y de caricias suaves e insinuantes.

La envolvió con ellas y la llenó del aliento caliente de la pasión encendida; por todas las partes erógenas de su cuerpo; sobretodo, después de un largo rato, movido por la repentina actitud receptiva de su Fere adorada; entonces, procedió a desnudarla muy hábilmente y poco a poco imperceptiblemente (esta era la principal magia que Al, dominada.) Luego, de una larga sesión de demorados, estimulantes y apasionados besos en la boca, nacarada sensual y tierna de su “novia secreta” metiendo y sacando con ritmo su lengua en la boca de su amada; mientras, la acariciaba con suaves masajes, en las piernas y en los voluptuosos senos ya desnudos; hasta embriagarse con la miel de su boca y con el aroma... de su cuerpo escultural y bello.

Repentinamente (calculando Al, que ya estaba debidamente excitada) con algún disimulado, lúdico y leve forcejeo Al, bajó directamente hasta el sexo... vaginal de su amada y se lo succionó... esta vez con mucha fuerza, por un largo, muy largo rato. Tanto, que ella emocionada y jadeante... repentinamente le abrió de par en par... todo el portal del sagrario; situación que Al, aprovechó y se lo succionó... una, y otra vez, muchas veces... hasta notar varios orgasmos... que Fere, entonces, desgonzada y jadeante... arqueo sus muslos y teniendo las piernas arriba... ayudada con sus manos, en actitud de completa entrega... se abrió totalmente sus pliegues sexuales y le rogó a Al, que la penetrara; ante lo cual Al, accedió complacido y lo hizo tres veces seguidas... esta vez sí, expeliendo bien adentro... muy adentro, su semen, en la vagina caliente y muy receptiva de su amada. Quien al sentir el fuego... del chorro contenido de su “novio secreto”; Ferenixe, lloraba intensamente de la dicha experimentada, al sentir el calor y el fuerte choque del líquido perlático, en las paredes y en la puerta del útero. Luego, Fere... enloquecida de pasión, se le montó a Al... y sobre él, le hizo la faena que tanto le gustaba a Alberto: con arqueos y remolinos de cintura largos y rítmicos... que le hacían sentir una succión muy fuerte... tan fuerte que Al, después de un rato de tal faena, se le eyacula por cuarta vez, muy adentro de la vagina de su amada. Mientras... a Al, se le salían algunas palabras de la gratificación sexual inmensa experimentada:

Alberto: - Hay... mi amor que delicia, me muero... me muero. Por favor quiero que esto no termine nunca, cásate con migo, te lo ruego... que rico.. Hay... hay... así... así... eso. eso... eso... -

Fere: - Dámelo, déjame que quiero succionártelo, antes de que se te acabe ese el líquido que botas... hum.. Que rico.. que rico... que rico... que rico... -

Pasado un tiempo, al reiniciar las visitas matutinas a Fere, previa advertencia, le esperaba otra sorpresa; su amada, lo aguardaba boca abajo despierta y levantada, cubierta con solo una diminuta y vaporosa pijama, que mostraba provocativamente, su esplendoroso cuerpo, y sus eróticas nalgas paradas firmes y voluptuosas... lo mejor del cuerpo de sirena que ella tenía; lo exhibía así, en toda su magnificencia; era para derrumbar al más fuerte... pero Al, desde luego, muy sorprendido, disimuló su intensa emoción (además Fere, no estaba sola, la acompañaba su abuelita, al parecer su única aliada) y conocedor de las mujeres, calculó que tal actitud, era para que Fere... pudiese, probar y comprobar la clase de amor que Alberto, tanto predicaba profesar hacia ella. Por lo tanto en esa ocasión Al, se contuvo y no la buscó sexualmente. En fin, a la mujer le gusta atraer y que le deseen; que la sorprendan de vez en cuando, con manifestaciones explosivas de cariño, de admiración y de lúdica sorpresa; pero, además, Alberto, también tenía que hacerse desear, devolviendo y aún dejando el acto sexual un tiempo, pues, ya no le quedaban fuerzas sexuales, ya que en cada sesión amorosa, se le iban, por lo menos tres veces los apetitos libidinosos; los que tenía que recuperar, por lo menos, con cinco días de por medio de completa abstinencia carnal. Y tenía razón, tal actitud, era para eso; se lo dijo la prima de Fere, en una de las llamadas telefónicas frecuentes que Alberto, acostumbraba hacer, para enterarse de la situación del “novio” de Fere con ella. También le dijo que Fere, ya le amaba de verdad y que le hacía mucha falta; que por eso... fue que resolvió el día anterior, ir a buscarlo, nuevamente a su apartamento.

De pronto... Al, recibe una llamada de Ferenixe:

- Fere: Ven amor... ven mi vida... te estoy esperando... – Al: Ahora no puedo, solo puedo saludarte un momento, por que estoy muy ocupado. La verdad... estoy de afán, adiós mi amor... Ah... y a propósito Fere... tú... has pensado... cuando nos casamos. ¿Ya tienes la fecha? Tu sabes que te quiero... pero para toda la vida. Piénsalo, mi tesoro y mi vida entera. Yo por mi parte... ya hablé con el Pastor y me dijo que sí, pero que teníamos que hacer un curso prematrimonial. -

La dicha de Al, era completa, por aquel tiempo. No se cambiaba por nadie, estaba seguro del amor de su Fere idolatrada y eso era lo que verdaderamente le interesaba. Al, ya no la espiaba; confiaba en ella ciegamente; ya podía hacer, lo que desde que empezaron el “noviazgo en secreto”, no podía; y era, concentrarse a escribir, tanto, la novela que empezaba titulada “Berenice”. Y/o, (El despertar); como también, terminar de pulir su Libro “Ente luz”, muy próximo a salir a Edición. Ya con los trámites de derechos de autor definidos.

Así, y en adelante... Al, pensaba que aunque viera al novio de Fere, en actitud amorosa con ella, él estaría ya tan seguro del amor de su Fere adorada, que no sufriría tanto como antes; ya que Ferenixe, con una mirada, con un gesto, le comunicaba siempre... que lo amaba; y esto era suficiente para Alberto. Entonces, aunque ahora nuevamente (a petición de Fere, o, mejor de la mamá) fueron suspendidas las visitas matutinas al apartamento de su adorada; lo mismo que las visitas de Fere a su apartamento; igualmente los besos y las caricias en su cuerpo de diosa; o, aunque fuese solo en las mejillas de su Fere del alma (solo por esos días, ya que los familiares de Fere, se encontraban nuevamente instalados en su Apartamento) entonces, esos besos eran aún más escasos que nunca. Pero, que cuando estos se daban, eran repartidos por todo ese cuerpo adorable de sirena; y desde luego que cada vez, como si fuera la primera vez: más ardientes, íntimos e “intensos”.

En esa época ya no le importaba nada a Al. Sino, el hecho, de tan solo tener la oportunidad de estamparle aunque fuera, siquiera un solo beso... aunque fuese uno solo de ellos, uno muy corto... o, sí acaso, dos: Uno en cada mejilla. Y ésta oportunidad, se presentaba en cualquier momento, en cualquier parte: en el ascensor, en las escaleras siempre desiertas y/o, en los corredores y pasillos etc. Ya que, a veces, en segundos... se cumplía, lo que ahora, parecía un rito de amor, el cual era suficiente para el corazón de Al y el de Fere.

Para distraer la mente Al, prende su TV. , lo sintoniza con la Tierra y escucha lo siguiente:


En ese momento el locutor hablaba así:

- A mediados del siglo pasado, Norteamérica gozaba de ser la única economía de la fabricación en serie. Quebrantada por la Segunda Guerra Mundial. Ejercía un monopolio virtual en muchos de los artículos exportables. Desde automóviles a electrodomésticos; maquinaria y otros productos manufacturados. Pero, cuando el Japón y Europa, ayudados por los EE.UU., se recobraron por los desastres de la contienda, llegaron a ser competitivos en unas cuantas líneas de producción. Pero, sólo en la década de los setenta, al empezar a introducirse en forma sistemática métodos de producción por robótica y al transferir numerosas funciones de la era de la producción en serie a economía asiáticas menos desarrolladas; el Japón fue capas de invadir fuertemente a los mercados norteamericanos y europeos, con artículos de precisión de optima calidad, Mientras acumulaba enormes beneficios, Japón invertía en muchos países del Sudeste asiático, estimulando a su vez el desarrollo de éstos. Pero, muy pronto esas naciones, se convirtieron asimismo en exportadores agresivos; haciendo más dura la competencia global. Ahora, desde cuando la zona de China... entró en lisa batalla por los mercados, la cuestión económica se ha puesto al rojo vivo. Agravándose porque estos países a su vez, han reemplazado progresivamente sus fábricas de mano de obra barata, por verdaderas centrales complejas de la eran de la robótica. – (Sacado de las “Guerras del Futuro” por Alvin y Heidi Tofller. Pág. 304. Ed. Plaza & Janes.)

Al apaga su TV. Y se dispone a evocar los últimos acontecimientos ocurridos con su Ferenixe adorada; pero, entra en una modorra y sueña que:

La tomada suavemente del brazo y la conducía por el pasillo de salida del ascensor. Ella con paso rítmico y muy femenino (Vero, manejaba muy bien su falda de estudiante y caminaba como diosa) se dejaba conducir y con el bamboleo de su falda plisada a cuadros, hacía enardecer a Al. Caminaban muy juntos hasta, llegar al final del pasillo. Justo ahí, en ese sitio, volverse para ser besada... su falda se tornaba como una campana, que se lanza al vuelo; anunciando la manifestación del amor intenso que se avecina. Al, luego, la tomaba suavemente de los brazos y la besaba tierna, succionadora y ardorosamente, en la boca; sus lenguas entrelazadas, así, duraban un rato, sorbiéndose, con hambre y sed de sexo; para luego, devolverla hacia su apartamento, con otro ligero giro espectacular. Los gestos, las miradas y los movimientos corporales, cargados en ese momento, de gran amor, feminidad y elegancia que acompañaban tal evento: fueron y serán (junto el acto sexual que acompañó la entrega de su virginidad) el más grato recuerdo que hasta la muerte... Al, tendrá de su adorada Ferenixe.

Otras tardes... en las que Fere no iba al colegio fingiendo estar enferma (dejando encargada del apartamento a su hermanita y que ésta le avisara por el celular, si entraba alguna Tele-llamada, para Fere, acudir a contestarla prontamente) al encontrarse allí y escondidos en la escalera, en uno de los descansos de los pisos impares, muy solitarios (pues, fuera del equipo de robots del aseo, nunca pasaba nadie por allí) ya que solamente se hacía el aseo muy temprano, por las mañanas. (Mas que todo, en la Torre C., los tenía como emergencia, ya que la mayoría de sus ocupantes, trabajaba por fuera del complejo habitacional.) Sentados en el descanso a lo buda... con las piernas entrelazadas y las de Fere, encima de las de Al. Total, como previamente Al, la había desnudado de la cintura para abajo; o, sea, sin pantaleta; y sin el protector compañero de la falda de colegiala. Luego, tapaban sus cuerpos con la amplia capa roja del uniforme del colegio; y así Al, se desapuntaba la bragueta y se sacaba el pene; y penetraba a su adorada, para luego unir sus bocas en un eterno beso. Así duraban toda la tarde unidos en un famélico acto sexual. Durante el cual, mirándose a los ojos: Al, se eyaculaba por lo menos hasta cuatro veces y Fere, producía otros tantos orgasmos, multiplicados por cinco; demostrando la capacidad sexual dispuesta, según la necesidad.

En esta forma, se fue desarrollando este amor extraño que se inició (cuando, se sabía que estaban solos; pues, a veces la familia de Fere, permanecía en el campo; Fere vivía sola, con su hermanita menor; ella también estudiaba pero, en diferente horario) con un solo beso en la boca y otros tantos aplicados en esas preciosas mejillas, en ese cuello de reina; y en esas piernas de nadadora profesional: duras, torneadas y esbeltas. Y/o, con caricias cortas y furtivas por el medio ese par de columnas que sostenían tan delicioso cuerpo; una vez, instalados en la sala del apartamento de Fere, junto a la chimenea (sintética); Al, le levantaba su falda a cuadros y con alguna resistencia instintiva, le introducía su cara, en el medio de los muslos. Al principio, fingía dormir sobre ellos pero disimuladamente le resoplaba con su boca; hasta cuando esos maravillosos largos muslos blancos se encontraran entreabiertos y receptivos; súbitamente, como buscando con ansiedad algo perdido; entonces, esperaba un poco y contenía el aire, subía y bajaba (resoplando muy suavemente) a palmos por ellas (las piernas y los muslos) hasta hallar (con alguna dificultad, debido a la resistencia y al lúdico forcejeo de su amada) finalmente, el gran tesoro buscado... la puerta del sexo de su Fere; entonces, resoplar con toda la fuerza de que era capaz. Luego, así, y de repente, como una flecha, llegar directamente, por encima del calzón negro, resistente y elástico que protegía la vagina de su amada; quien, además, solo, ponía cierta disimulada leve y resistencia; y sobretodo, Alberto, ya solo hallaba una coqueta barrera compuesta por sus manos.

Forcejeaban así... los dos amantes un rato... (juego, que excitaba aún más a Al) pero, Alberto, lograba su fin su cometido, y entonces, le quitaba el ajustado protector negro compañero de la falta a cuadros del uniforme y luego la diminuta pantaleta ya humedecida y Al, con sus brazos fuertes le abría bien los muslos y al fin... se pegaba de la vulva vaginal de su amada y le chupaba larga e insistentemente tal sitio... luego, con la lengua y los dientes, le vibraba... rítmica y alternadamente el clítoris; se lo chupaba y le succionaba con fuerza también la vagina y así, esta maniobra, era repetida por unos 20 minutos; hasta presentir varios orgasmos que se venían en serie; acompañados de estertores, quejidos y jadeos y la fuerte convulsión de su pelvis. Luego de un rato de prudente descanso sexual, Alberto... se devolvía con su cara y subía por el tronco monumental de Ferenixe, y con suaves y prolongadas succiones en sus senos de reina, coronaba unos ya muy duros, y arrebolados pezones; prontamente, Fere, sé desgonzada y satisfecha, la subía cargada al dormitorio de su apartamento dúplex y allí, terminaba de desnudarla.

Luego, Al, se desnudaba y ya acostados, después de dejarla descansar otro largo rato... con el miembro erecto, la recorría suavemente... muy suavemente, por todo el espectacular cuerpo de su amada y posteriormente con los dientes, la mordía muy suavemente y la recorría bucalmente, chupando, como con ventosas, todo ese voluptuoso cuerpo de muñeca, una y otra vez. De arriba debajo de frente y de espaldas, Fere, recibía un masaje energético y erótico, también, desde luego en sus espectaculares nalgas. Hasta que nuevamente, ante ese monumento de diosa, abierto y receptivo, ya con el sagrario de par en par Fere, era montada y poseída nuevamente de verdad; la penetraba con el furor de un adolescente y luego la cubría toda... con su esperma varias veces; hasta quedar sexualmente exhausto. Hasta que Ferenixe con fuertes quejidos acezantes y llorosos, anunciaba anhelosamente sus orgasmos. Con todo eso, era más que suficiente, Alberto, se llenaba, se embriagaba, tanto del fluir de su sexo, como de la miel de su boca; y sobre todo: se fortalecía ese amor intenso y único; grande como ninguno, por ser a pesar de todo “Platónico”.

Sin embargo, al rato, la explosión apasionada de Fere, provocada por la boca de Al, debido a las constantes y rítmicas succiones y a las presiones en su vagina; después de varios orgasmos, se hacía nuevamente manifiesta la pasión de Fere; y siempre, después de varias eyaculaciones de Alberto. Quién le pedía a Al, que la penetrara nuevamente y que se le derramara, bien adentro... (de su apretada, estrecha, estimulante y tremendamente succionadora... vagina.) ; (Fere, era un polvazo inolvidable... reflexionaría Al, después de haberla perdido.) A ferenixe la enloquecía sexualmente dos cosas: Una, cuando sentía el calor del semen de su adorado, estrellarse en su vagina; y otra, cuando sentía el constante roce de la cabeza del pene de Al, en el cuello de su útero. Después de la satisfacción sexual, entrelazaban sus lenguas y sus cuerpos, todavía unidos sexualmente y así, permanecían... largo rato; Al, con movimientos muy leves para no perder su erección; o, para provocarla de nuevo; duraba con Fere, penetrada, hasta 20 minutos y después, si comenzaba de nuevo la ardorosa faena sexual que duraba otros 20 minutos, de una dicha y de un placer indescriptible. Luego, Fere, enardecida por la pasión que le provocaba, la demostrada e inagotable, experiencia sexual de Al; se subía sobre él, y con fuertes movimientos circulares y arqueos rítmicos de cintura; hacía ver a Al, el cielo y las estrellas, del disfrute de tal himeneo, hasta que Al, se venía nuevamente (se sentía como ordeñado, por la fuerza de succión de la vagina de su amada) y Fere en ese preciso instante, todavía penetrada, jadeante y sudorosa le masajeaba muy suavemente la nuca de su amado y le aplicaba unos fuertes besos en la boca, como para que Al, terminara de sacar toda su fuerza sexual contenida. Fere, resultó una muy buena alumna y repetía las lecciones recibidas de su Al... Así sexualmente, estaban hechos, matemáticamente, el uno para el otro y desde luego, que se necesitaban mutuamente. Ya... no podrían vivir separados nunca.

Pero, cuando las circunstancias los separaban por algún tiempo (los familiares de Ferenixe, la cuidaban con exceso) entonces, era tal la situación, que se entendían casi a señas y por telepatía se amaban; era como soñar despiertos; tanto, que aún con solo mirarse fijamente a los ojos, se excitaban. Para ellos, un instante de amor, era como un siglo. Ahora, lo único que preocupaba a Al, era un ligero gemido, salido desde dentro, muy dentro de su amada; por cada furtivo beso recibido de la boca de su amado. Era de dolor, una queja quizá, era de pasión, era de rechazo o, era de entrega. ¿De qué era? Ese imperceptible, pero muy claro ¡Ju! Seguramente, que era la expresión inconsciente, que suelta un ser del cielo, al tratar de evitar, ser acariciado íntimamente y ser besado en la boca. O, era un lamento o, un quejido quizás, por no poder consumar el acto. Y de ser así, pues, ir a buscar un sitio con urgencia (los descansos impares de las escaleras de la Torre C.,) en el cual continuar, e insistir con algún lúdico forcejeo, e incursionar por el sexo de Fere, para por ahí, succionar con fuerza, literalmente toda la química de su cuerpo de diosa. Para Al, lo más delicioso de este mundo, la escencia y el olor genital de su amada, se constituyeron pues y desde entonces, en parte esencial de ese amor loco que Al, recordaría por siempre: - ¡El sexo y la sintética escencia de su Fere adorada! - Concluyeron en el pensamiento, y en sus sueños, las faenas realizadas con su amada ahora y desde ahora... “amante secreta”.

Finalmente, para Alberto, Ferenixe... sería en su vida algo que recordaría gratamente a cada instante... hasta la muerte. Por intermedio de ese acto de amor intenso; Al, sentía a su Fere, entrar dentro, muy dentro, de su ser, por todo el resto del día o, de la semana, según el caso. Por medio de esos besos, dados con calor, en las mejillas; en el cuello; en las preciosas piernas y en las rodillas (carnuditas, rellenitas, sin ser gordas) de su adorada colegiala deportista; recorridas aún por todo su cuerpo... hasta el supremo enardecimiento de la pasión; y luego, repetida tan deliciosa acción, una y varias veces, hasta detectar... el jadear de excitación de su Fere, anhelante... y vibrante por la explosión de sus orgasmos; para rematar, en esos esplendorosos senos que Al, succionaba con pasión por encima y por debajo de la blusa de su uniforme. Y así, Fere... era adorada y energizada sexualmente, una y otra y otra vez hasta que Al, la desvestía, (de la cintura para abajo) para proceder, cobijados por la espaciosa capa roja de su uniforme; a la entrega total. Así la tenía penetrada, a veces, por lo menos 2-3-y hasta 4 horas (toda una tarde); muy cerca y aún muy adentro de su cuerpo; y ya no le haría falta nada más. Ya que en el fondo, ese acto (como una comunión) para él, era la confirmación del amor de su Fere adorada.

El hecho, de buscar juntos con afán, el lugar apropiado para esconderse y realizar tan ardiente y tan sorprendente rito de entrega; especialmente en los desiertos descansos impares de las escaleras de la “Torre C.,” en la cual vivían (al principio sin sexo... por eso tan extraño.) Era a la vez, una práctica y un milagro; era la confirmación de un amor, en el secreto compartido. La complicidad, impuesta por la característica de ese amor clandestino, hacía del hecho, algo más intenso, al realizarlo y al consumarlo. Se diría, que por esa inocencia, al cumplirlo, era aún más delicioso el hecho de operarlo; por todo... ese cuerpo sensual, escultural, firme, esplendoroso, fresco y tierno. ¡Era pues, esa, la gloria, de tener y de poseer ese amor tan extraño!



Mi Ferenixe...

Por el rito, de un beso tuyo.

Fue siempre así, cuando por los pasillos yo te llevé y te besé,
Y cuando por esos pasajes te conduje para amarte así,
Para cuando al llegar al final de aquel sendero, yo te besé,
Cumpliéndose así, un rito de amor inmortal y de frenesí.

Todo fue, conducirte con cariño y suavemente del brazo,
Actitud que tú al caminar, denotabas con gusto y coquetería,
Así fue como creció ese amor, además con un fuerte abrazo,
Hasta sentir tu respiración demostrando que aún porfías.

O fueron tus ojos que brillando al abrirse y al recibir,
Me dijeron que te besara con ardor y siempre así,
Para desde entonces desear constantemente repetirlo así,
Sin dejar nunca, ni permitir dejar, de tu amor sentir,

O fue tu forma de andar al ser llevada para besarte,
O fue la falda plisada y ajustada a tu cuerpo,
Lo que hacían cumplir así con el rito de besarte,
Para sentir... siempre mío, ese tu escultural cuerpo.

Fueron los instantes más sublimes y pletóricos de gloria,
Los que hoy acompañan lo más querido de mi memoria,
Al tenerte así, conformando ese instante en uno muy bello,
Que todavía hoy no quiero dejar de recordar todo aquello.

Desde entonces, mi Fere adorada, ni siquiera suponía,
Que así tus besos y tu amor me embriagaban, solo por ti,
Y ya desde entonces y siempre, solo por ello, te quiero mía,
Sin importarme nada, ni siquiera sufrir, sino solo el amor por ti.

Y también en este acto de amor, fue tu respiración la que al salir
Abrazaban y estrechaban el ardor y la alegría del corazón
Pues al detectar aquella pasión salida con furia y escapar
Para llenarme pletórico de tanta dicha y de tanta adoración

Fue ese rito de amor, cumplido que al caminar y al llegar,
Y al hacerlo y celebrarlo, comenzarte mi amor... así a besar,
Todo acompañado químicamente del aroma de tu cuerpo,
Fue para mí el hecho de poderte besar y sentir toda tu energía.

Y la falda plisada y ajustada a tu cuerpo al desplegarse,
Anunciaba con campanadas de dicha tal evento,
De besarte sin interrupción hasta entregarse,
Fue así mi Ferenixe del alma mi mayor contento. A.G.


Al, ilusionado, hacía planes para la celebración de los quince de su amada, que sería el próximo Octubre 17; o sea, dentro muy pocos meses. Al, quería que fuese especial, y sobretodo, que su Fere, ese día, fuese muy feliz. De pronto, le asaltó un pensamiento: Alberto, hasta ahora se daba cuenta, de que Ferenixe, su niña adorada, solo tenía catorce años; pero si revelaba más de 18 años. ¿Cómo era posible que fuese tan desarrollada? Esa, era la explicación a muchas cosas, que pasaban entre los dos. Y hasta ahora se ponía a pensar en ellas; no se había dado cuenta del asunto. Era tal su amor y tal su obsesión por ella, que no se había detenido a pensar que estaba ejerciendo presión sentimental, sobre una niña. Motivo más que suficiente, para que en el futuro, entendiera y valorara, lo mucho que hasta el momento, ella le había dado. Que le había dado todo... su amor, pero era un amor de niña. Se había dejado besar primero en las mejillas y luego en toda ella; cada vez que él se lo pedía; pero, eran besos y caricias recibidos, por una niña.

Y principalmente, había poseído y desflorado a una niña. Realmente era mucho más de lo que podía esperar; por lo tanto, debía mostrarse muy agradecido, por lo recibido hasta ahora. Debía menguar sus exigencias y comprender que el sacrificio, para ella era muy grande; se estaba comprometiendo, con una persona mayor, casi sin darse cuenta. Por lo tanto su paciencia (la de Al) debía ser muy grande y su tolerancia inmensa, si quería que en el futuro su Fere del alma, le llegase a amar, para toda la vida, como él aspiraba a que lo hiciera. No sabía, si considerarse afortunado o, quizás, un ser que recibe cariño, pero como un padre. Bueno, eso el tiempo lo diría; pero, el comportamiento delicado y comprensivo de Al, debía incrementarse, en las futuras relaciones de los dos... reflexionaba siempre... Alberto.

Durante la soledad del apartamento sencillo de Al, él acostumbraba ver TV., constantemente sintonizado en la Tierra; para distraer su mente de las diferentes preocupaciones que pasaban por su mente inquieta e investigadora; profundamente estudiosa. Veamos lo que escuchó en uno de los programas que acostumbraba atender y ver, al despertarse del letargo acostumbrado, después del almuerzo:



El locutor decía:

- * Pasando a otro tema, estimados televidentes, con mucho gusto paso a comentarles lo que les tenía preparado para hoy: - A veces, en astronomía, es como ir de pesca; en que la paciencia, es una virtud crucial. - Hace unos años, un grupo de astrónomos, enfocó durante 10 días, el Telescopio Espacial-Hubble ; sobre un sector del cielo relativamente vacío, esperando captar la llegada de algún "fotón" errante. El resultado fue lo que se denomina - Campo Profundo de Hubble - : Compuesto por una serie de imágenes (gigantescos - muros - de estrellas muy lejanas) que hicieron, que los científicos del momento, duplicaran y hasta triplicaran, el número calculado de las Galaxias en el Cosmos; a por lo menos, un número mayor de 150.000 mil millones. Número que muy pronto se quedará corto, al descubrirse más y más cuerpos celestes, debido, principalmente, a mejores puntos de observación, ubicados fuera del planeta. Y/o, mejor aún, en planetas sin atmósfera, como son la Luna o, Marte; o, en otros como Venus, el planeta gemelo de la Tierra.- (Tomado de la Revista Discover. Pág. 16., de Dic. 15/98.)

Los investigadores de Hawai han hecho algo parecido, utilizando un nuevo instrumento que puede penetrar el polvo que obscurece a muchos cuerpos celestes. Amy Barger y sus colegas de la Universidad de Hawai, estructuraron imágenes de pequeños sectores del cielo, en el curso de dos semanas. - Descubrieron indicios de una población galáctica nunca antes vista, tantas que en su conjunto brillaban con la misma intensidad que el resto de las conocidas en el espacio.

El equipo instalado en el Telescopio de - James Clerk Maxwell - en Mauna Kea; permite que los astrónomos, realicen una cartografía de áreas celestes en longitudes de ondas, mil veces más extensas que la luz visible. Esto es útil para ubicar galaxias porque, aunque las grandes nubes de polvo esparcen o absorben la luz visible, también transforman la emitida por los conglomerados estelares y la convierten en infrarroja. Pero, resulta que al observar solo dos sectores del cielo, Barger y otro experto, descubrieron tres grandes galaxias ocultas. - Si este número, es típico, del resto del cosmos, y no ve razón para que no lo sea; entonces, se deduce que hay, por lo menos 40 mil millones; de ese tipo de constelaciones, en el firmamento. - Lo que es más, emiten, cien veces más energía, que las constelaciones que hoy conocemos. Esta rara luminosidad; podría tener su origen, en conflagraciones desatadas durante la formación de estrellas. -

La científica Barger, además, quisiera apuntar su telescopio, a esos cuerpos; para detectar la luz visible proveniente de ellas; con lo cual, podría determinar, su distancia y su edad. El problema, es que hoy, es muy poca la luz visible que nos puede llegar. Si resultaran ser muy viejas (las estrellas) lo cual, es una buena posibilidad; ello significaría, que los astrónomos, tendrían que "reconsiderar", no solo, el número actual de las estrellas. Y/o, cuerpos que hay en el firmamento, sino, también, su historia. Finalmente, se plantea, pues, la existencia de otros “Universos” en cadena, o, compuestos; de formas infinitas, en el tiempo y en el espacio y muy diferentes, unos de otros (Universos.) Suponiendo, entonces, un ordenamiento efectuado por un “Dios” Extra-universal y Supra-poderoso, tal y como lo describe “La Biblia”. (Tomado, de la Revista Discover. Pág. 16 de Dic. 15/98.)



El tire y él afloje de Ferenixe.


Nota del autor::

* - Reconstruir parte de ésta historia; se hace necesario, para explicar como se puede cambiar tanto, de la noche a la mañana. -

Pero, todo... todo... podía pasar, dentro de la relación de la pareja, menos el hecho de negarse Ferenixe a ir a alguna parte alejada o, escondida (principalmente a los descansos impares de las desiertas escaleras de la Torre C.,) y poner su carita de ángel, y ese cuerpo de sirena, para recibir el o, los besos apasionados y las íntimas caricias de Alberto y allí, ser izada y poseída; esto ya era el colmo de la desatención; un casi imperdonable sacrilegio al amor. Y así pasó, una noche, en el gran Salón de Juegos del Súper-conjunto habitacional. Resultó, que poco después de jugar al “Bingo”; y cuando este juego, se terminó. Antes de regresar a la zona de vivienda; a la entrada del ascensor; Fere, al pedido de Al, por un beso, y una tácita invitación (a señas) a ser acariciada y desde luego poseída; Fere se excusó alegando en voz muy baja, no estar dispuesta para ello. Pero, en ese justo instante, llegó el “novio” de siempre de Fere, y este, sí que le acomodó, (dispuesta o no) dos fuertes besos, uno en el cuello y otro en la mejilla. Que de milagro, no le puso un tercer beso en la boca. Alberto, se alejó disgustado, herido, triste y vencido del escenario. No sin antes denotar un cierto recelo de Fere, hacia las caricias de su “novio”. Alberto, creyendo que aquello representaba, una despedida que en ese momento, Ferenixe no captó; o, si lo hizo, no lo demostró. Ya que, como otras tantas veces (cuando de pronto, en el momento, no temía ser espiada por su madre) al suceder algo parecido, ella, lo llamaba aparte (a Alberto) inmediatamente (seguro, que por lástima) delante del “novio”; o, no, para explicarle y sobretodo, para pedirle que tuviese paciencia, por lo ocurrido.

Él tire y afloje, de Ferenixe duró unas semanas más; alargando la agonía sentimental de Al. Unas veces Fere, pensaba decirle a Al, la verdad de lo que en realidad le había pasado con su “novio” (que él sí la había violado de verdad) y sobre la presión a que estaba siendo sometida por sus familiares y sobre todo contarle a Alberto, en el peligro que él (sin saberlo) se encontraba de ser acusado de algo muy malo y muy grave. Otras veces pensaba dejar las cosas como estaban. No estaba segura de que hacer. Era que también, ella sentía pesar por Al (sin duda, ya le amaba...) Además y principalmente, debido a las peleas (amenazas) con su “novio”, por causa de Al, y a la fuerte presión de su madre; se estaba acentuando tal resistencia, pero que a la vez, eran muy cortas; se entendían pronto y se contentaban. Así las cosas, Al, solo tenía que saber esperar y dejar pasar los acontecimientos. Pero, la gran incógnita era: Si Al, se retiraba de Fere a esperar a que ella lo llamara a su casa; para así, Alber, poder poner condiciones, y volver con ella. Pero, esto, era lo más arriesgado que Alberto, podía hacer y sin duda, lo más sensato. Si Fere se peleaba con su “novio”, que fuera por causas extrañas a Alber; quien, no se debía mezclar en tal asunto sentimental, debido a posibles consecuencias en el futuro. Y la dichosa pelea, no llegaba, entre tanto, Al, cansado de esperar, lo que no obtenía, se hizo (o, tuvo) amigo del “novio” de toda la vida de Ferenixe. Completando así el trío sentimental, que tanto Alberto, temía. Además el tal novio de Fere; la tenía chantajeada; pues, la amenazaba con contar lo que vió; durante la última visita nocturna de Alberto, al apartamento de Ferenixe. Que los vio entrar solos y permanecer hasta la madrugada en su casa; suficiente, como para causar demasiados perjuicios a la pareja.

Y el tiempo pasaba y pasaba... desesperado Al, no aguantó más la espera por una visita de su amada, y una mañana cualquiera, regresó al hábito de visitar muy temprano (calculando que su hermanita ya se había ido para el colegio) a su “novia secreta”; ahora, nueva y directamente a su alcoba. Sorpresivamente; volvió a ser bien recibido y aceptado. Comenzaron (después de un corto tiempo, de volver a ejercer tal práctica) esos besos apasionados, abrasadores (quemantes) y tiernos, e íntimas caricias y arrebatadoras entregas; tanto, que fueron capaces de transmitir el amor intenso y verdadero que sentían; fueron tantas y tantas... esas íntimas caricias que Al, salía del recinto nuevamente embriagado y satisfecho de ellas (por la miel de su boca y la transpiración de su cuerpo perfumado y sobretodo, por la escencia química del sexo de su Fere) y desde luego que entonces, muy... muy feliz. Eso era lo que él en el fondo anhelaba, cariño de verdad; o, amor apasionado y a la vez muy tierno. Al, descubrió, esa misma mañana, que su Fere adorada, las sentía, tanto o, más que él; y que también, a ella, esas caricias profundas e íntimas, le penetraban hasta el fondo del alma y aún de su cuerpo; tanto, que a veces Ferenixe, sudaba jadeante de la emoción; hasta, que una vez se le desmayó... y Al, tuvo que reanimarla y darle agua. Al, descubrió también que su Ferenixe ya le amaba de verdad; confirmando la realización del milagro pedido al Señor. Comprendió, que el secreto, consistía en tenerle mucha paciencia y darse cuenta, de que estaba acariciando íntimamente y besando los cabellos, el rostro y todo el cuerpo de una niña y sobretodo poseyendo sexualmente el cuerpo, de una niña, con complexión de mujer hermosa; y todo a escondidas de sus familiares más cercanos; de ahí el temor de Ferenixe, de que su amor, Alber, fuese a ser perjudicado por sus familiares, especialmente por su novio, apoyado por su (también muy hermosa y joven) madre.

Alberto, llega a su apartamento; para descansar y relajar su espíritu, prende su TV., y se interesa en el siguiente comentario sobre su amado planeta Tierra:



El locutor en ese momento decía así:

- Resulta que, al empezar el pasado (Siglo XX); la gente creía que el tiempo era absoluto; que cada suceso, se podía registrar de una manera única y por un número, sacado del mismo tiempo; así, todos los relojes cronometrados a una, conformaban los intervalos medidores de los hechos. Pero, con el descubrimiento magistral de que: “La velocidad y la luz, son los mismos para el observador, y en forma independiente del movimiento”; fue, lo que condujo a la teoría de la “relatividad”; teniendo, además, que dudar, de que, el tiempo, era absoluto y único. Lo cual llevó, al hombre, a considerarlo (al tiempo) de una forma personal; no distinguiendo, desde ya, el pasado y el futuro, en el y tiempo físico; tornándolo, entonces, como una misma cosa (un eterno presente.) - Ya, entonces, desde aquella coyuntura, no habría más, un antes y un después; solo, que todo, se tornó relativo, al “yo” y a los demás sujetos, actuantes sobre los hechos dados. – Luego, todas las partículas pueden avanzar o retroceder, por igual, en el tiempo físico; por lo que entonces y desde ya, no debemos, considerar su curso en un solo sentido: Es decir, del pasado hacia el futuro. El espacio, se encuentra en todas partes, en forma simultánea y sus cálculos, Espacio-tiempo, son exactos, en el tiempo y con sus mismas cualidades. Son, de una misma dimensión y conjuntamente, forman parte de las cuatro dimensiones más conocidas. - Entonces – Ínter-dimensionalmente - podríamos agregar que para ellos (los extraterrestres) no somos su presente, sino su pasado y que para nosotros, ellos (los extraterrestres) son nuestro futuro. En otras palabras, todas las intervenciones esotéricas e iluminaciones; nos vienen del futuro, pues para ellos, nosotros somos su pasado. - (Tomado de apartes del libro “Profecías insólitas de Sylvie Simon. Ed, Círculo de Lectores S.A. Pág. 13.)



Re-despertar:

Pero, suspendidas nuevamente, las visitas matutinas de Alberto (a petición de Fere, por exigencia de su madre y por las amenazas del “novio”, sobre, implicar a Alberto, en la maternidad – ahora confirmada - de Ferenixe) a la alcoba de su amada; y por lo tanto, también las visitas de Fere, al apartamento de Alber; además, otro gran problema: (Pensaba Alberto) Fere, nada que dejaba al “novio”; ya que éste, la presionada constantemente, para que fuese dura... e indiferente... con Alber. Hasta el punto, de pasar varios días, sin Alber, poder “besar” y sobretodo, acariciar y poseer íntimamente a su Fere adorada. Y así, con el paso del tiempo... Al, se moría por besar y acariciar íntimamente y hacerle el amor, a su Fere del alma. Pero, nada que Fere cedía; ni se dejaba propiciar tal embestida intensa, amorosa apasionada y tierna. Ya Alberto, pensaba que había perdido tal posibilidad; pero sabía también, que tenía que aguantarse; o, de lo contrario, la perdería para siempre. Al, para no ser intenso (como decía Fere, que él era) aguantaba como un hombre, tal impulso; hasta que se olvidó (o, acostumbró) de buscar la oportunidad para conseguir, besar, acariciar y poseer íntima y sexualmente a su adorada.

Tal actitud, hacía aparecer a Alberto, como el mejor de los amigos de Fere. No, como el “novio secreto” que en realidad era (o, ahora, pensaba que era.) Pero, así es la vida de un enamorado de verdad; tiene que aguantar y aguantar... hasta que su amada, se acuerde de su existencia y le complazca, en sus requerimientos amorosos; ella, sabe que lo tiene, y de pronto, sorpresivamente, le da, de lo que tanto él quiere. Se lo da, como premio; o, como un ajuste de cuentas amorosas; o, finalmente, se lo da para no perderlo, porque en el fondo lo necesita. A la mujer le gusta probar a su “amante”... hasta el punto de la desesperación, solo para estar segura de su amor; entonces, nada le agrada, si lo uno o, si lo otro. Malo, si sí; y malo, si no. ¡Palo porque bogas, y palo porque no bogas! En fin, así son las mujeres; pero a ricas, que si son. (Pensaba Alberto, con inmenso cariño, desesperación y en el fondo... un agradecimiento profundo.)



Tú mi Ferenixe...

Tú mi Fere, con ojos de muñeca encantadora,
Bella moña hecha mujercita que mi alma añora,
Dime amor, hasta cuando mi ser te espera,
Pues, en el secreto y escondido desespero.

Tú llegaste para mí solo y en la aurora,
Del rescate de mi soledad, eres la autora,
Y a veces o siempre te ríes de mí por tesonero,
Termina pues, lo que iniciaste o desespero.

Niña mía que entre tus juguetes me atesoras,
Y al considerarme tuyo, me haces lo que otrora,
Hacías con tus muñecos al no dejarlos enteros,
Los destruías sin compasión... por eso te quiero.

Niña de mis sueños y mi amor sé pronto mi señora,
Acompaña el resto de mis días, tú mi seductora,
No sigas rompiéndome el corazón, déjalo entero,
Que ya pronto seré el esclavo tuyo, por tesonero.

Niña de mi corazón, sé mía con un beso y ahora,
No alargues más el camino a lo que mi ser añora,
Sé buena y hazme caso, tú la niña que más quiero,
No me dejes más en el rincón de tu canastero.

No me archives tú mi niña, ven y sácame ahora,
No me dejes, mi vida, en la oscuridad de la aurora,
Hasta que salga por completo el Sol, yo te espero,
Allí donde me dejaste, solo tú, lo que más quiero.

Pero feliz de ser algo en tu vida, niña que mi ser añora,
Nuca olvides sacarme del escondite, pues estoy en mora,
Acuérdate de mí, tú mi ser y mi dueña, tú mi Fere,
Me dejaste ser tu secreto, hasta que yo desespere.

No cambies tan de pronto y sé mi señora,
Trueca conmigo, te lo ruego y hazlo ahora,
O de pronto, ya no dejas nada, por que desespero,
Tú mi Ferenixe, porque será que tanto te quiero.

Cielo mío, mi Fere adorada, tú mi alma ensoñadora,
Acuérdate de mí, estoy en tu juguetería amañada,
Ven mi amor y juega con migo, estoy en tu canastero,
Pues, tu silencio es mortal, para lo que yo más espero.

Ven y sácame de allí, donde me dejaste otrora,
Acuérdate de mí, niña hermosa y encantadora,
Trátame... como el oso de peluche de tu juguetero,
Y háblame antes de mandarme al peluquero.

Deja por lo menos a tus ojos verme ahora,
Esos ojos bellos que por ellos mi alma añora,
No mires más hacia abajo porque desespero,
Solo ver la luz de esos ojos es lo que más quiero.

No olvides que tú iniciaste todo... eres su autora,
Rompe ya tu silencio mi amor, pero hazlo ahora,
De lo contrario, sufriré por ti... lo que más quiero,
Si no es pronto... me salgo y trago tu cuerpo entero. A.G.



Volver...

Nota:

- El amor, es la base del universo; es como la energía “oscura” (pues, no se ve; y no posee átomos, pero está ahí; y/o, es el 70% del universo conocido) que lo compone y complementa; por lo tanto, lo que se haga con él, debe regocijar al alma de quien lo realice. Y lo que se efectúe sin él; debe apesadumbrar y apenar a quien; o, a quienes lo realicen. (Otro, de los grandes pensamientos de la Faetonita... Ferenixe.) Así, quien no iba a amar, a tan sabia criatura. Que de paso, adoraba, como a su único Dios; ese tipo de energía; que está en todas partes. Principio y fin del todo; y animadora del universo. Para ellos, muy común; para los terrícolas (cosmología pura, apenas detectable por la radio-astronomía); aún no descubierta y confirmada oficial y científicamente; pues, resulta, que una de las “radio-fotografías”; mostró lo que era el universo, después del “gran estallido” que lo formó; y en la cual se encuentra espacios vacíos; aparentemente, pero, que están ocupados, por ese tipo de energía. Además se cree que existe energía oscura positiva; y energía oscura negativa; y que al unirse explota. Siendo la misma, la causa misteriosa, del porqué el universo se halla en expansión, a tan alta velocidad y en aumento constante y sobre todo, tan aceleradamente. (Según el efecto Dopler.) Éticamente, otra interpretación del bien y del mal. (*Solo “La Biblia”, la menciona, en el Génesis 1:1.) -

Una tarde, a continuación, al despedirse de Al, como cosa sorprendente, Fere le puso la mejilla y la boca entreabierta a Al, para que éste la besara. Y Alber, la besó tiernamente como nunca. – Alberto, le manifestó que ya estaba harto de tanto carameleo, con lo del “novio”; que si Fere, quería algo con él (Al); debía por lo menos, asegurarle, que pronto dejaría definitivamente al tal “novio” ese; y que igualmente, pronto se casarían. (Al y Fere.) - A lo cual, Ferenixe se comprometió a seguir en adelante, a todo lo que a Alberto le dijera. El movimiento de los ojos; la expresión de su boca; el cabello revoloteando su cara; la manifestación felina; y sobre todo... el olor de su cuerpo; hacían excitar sexual e inexplicablemente a Alberto; pues, así la veía, adorable, exquisita y muy femenina. Entonces, Alberto le contestó que si lo que le manifestaba, era cierto, que salieran un rato en su “Autoing”; a pasear al campo; aprovechando, esa esplendorosa tarde. Fere, aceptó; y se quedaron de encontrar en la sótano de la Torre C., nivel cuarto donde Al, lo estacionaba. Fere, lucía fenomenal, una larga y muy fuerte pañoleta de vivos colores. Salieron pues, hasta un amplio terreno cultivado con margaritas y girasoles; que crecían prolíficamente hasta unos 0,90 Ctmrs. Fere, al verse libre partió a correr, hasta ser alcanzada por Al, y allí comenzar el forcejeo... (A Ferenixe, - como a toda mujer - le gustaba, sentirse forzada sexualmente, por el ser que ama) Alberto, comenzó por descalzarla; luego, quitarle el pantalón; y/o, el “bluejeams” y la blusa; y la dejaba correr otro trayecto en solo pantaleta, sostén y su pañoleta; a la vez que él también se iba desvistiendo, entre ese matorral; y al ser alcanzada (gracias, al ataque de risa, de la atlética Ferenixe) Alberto, la terminó de desvestir – solo dejándole la pañoleta, pues ella, no quiso dejársela quitar - ; y así, muertos de la riza; esa tarde Al, la poseyó dos felices veces seguidas; una de ellas, debajo de un frondoso árbol; del cual, usando la larga pañoleta; Ferenixe (mientras su amado, boca arriba esperaba sorprendido lo que pasaría); se apoyó y/o, colgó de una rama y dando vueltas y más vueltas; ya conectada sexualmente a su amante; subiendo las piernas, se soltó para experimentar (por los giros como de licuadora) el más intenso de los contactos carnales; en una demostración, de otra de las formas faetonitas, de hacer el amor; en un acto que dejó exhausto a Alberto y muy complacida a Ferenixe (curiosamente, muy utilizada por los campesinos del Irán. Sitio en el cual, al perecer - según la mitología - llegó la especie humana faetonita, la primera vez a la Tierra. En otra interpretación del poblamiento, por seres humanos, al planeta.)

Y mientras durmieron un rato, entrelazados sus cuerpos (desnudos) y sus bocas; al despertar... nuevamente a correr se dijo... al ser alcanzada Ferenixce, lloraba de la risa (sino fuera por eso – la verdad - Alber, no lograba alcanzarla nunca) y así, Fere, fue poseída nuevamente por otras dos enloquecedoras veces seguidas. Luego de descansar sexualmente; Ferenixe, nuevamente, ató (a otra de las ramas – más alta - del árbol, debajo del cual durmieron) su pañoleta protectora de su espesa cabellera, del aire del Autoing descubierto de Al; luego, Fere, otras vez, se la pasó por debajo de sus brazos y se colocó encima del cuerpo de su amante; quien boca arriba contemplaba el cuerpo fenomenal de Fere; y cuando hubo la erección esperada; Fere, se enterró el pene de Al, levantó sus piernas y comenzó a dar vueltas, ayudada por sus pies; y cuando la pañueleta estuvo bien enroscada, se soltó; movimiento giratorio, que hizo ver más estrellas de dicha a Al; tanto que al terminarse las vueltas; y repetirlas varias veces; ya Al, se había derramado nuevamente; al no poder aguantar, tal tremenda succión, incrementada por los giros, esta vez, como de una verdadera aspiradora. El trabajo siguiente, esa muy soleada tarde; fue encontrar parte de la ropa, en ese vasto campo de margaritas y girasoles; para, regresar satisfechos sexual, sentimental y emocionalmente; tomar el Autoing y llegar abrazados a la Torre C., del conjunto “Residencial Nucleario”; en el que vivían. No sin antes, parar por el camino, para comer frutas con crema. Luego, despedirse con un fuerte beso y separarse... quien sabe hasta cuando; para vivir... ya solo de los recuerdos sexuales experimentados – varias veces - ese día.

Otra mañana (como a los ocho); Ferenixe, sorpresivamente, visita a Alberto... (Fere... apenas consideraba que no era espiada, se volaba al apartamento de su adorado...) reanudándose así y por fin, los hasta ahora esporádicos, tiernos y apasionados besos y caricias íntimas en el resto de su escultural cuerpo; pues, estos se repitieron aquellas tarde varias veces: En los largos cabellos; en la boca; en las mejillas; en el cuello; en los senos; en los tersos brazos y hombros; en sus rodillas de oro y en las piernas torneadas; en sus largos y blancos muslos; y después de un leve forcejeo instintivo... Al, bajó al sexo vaginal de su amada; hasta que al fin, detectó la humedad y el aroma de tan delicioso sitio (Al, calculó que su Fere del alma ya estaba lista para ser poseída); se devolvió, luego, muy despacio, recorriendo de nuevo el resto de tan voluptuoso cuerpo. Para por último poseerla por dos acaloradas y apasionadas veces seguidas, sin sacar el miembro. - Esto era como para recordarlo siempre... hasta la muerte. - Esa boca nacarada, sensual, jugosa y tierna, que se dejaba besar larga y prologadamente; como nadie hasta el momento lo había hecho. Era como para volver y volver a comenzar, besándola y besándola... y sobretodo succionando esos maravillosos y muy duros senos; y resoplando muy suave y acaloradamente, quizás, por entre las manos guardianas de su sexo. (Fere, siempre ponía una resistencia instintiva, para ser poseída.) Pero, que se podía hacer; para Al, esa actitud significaba mucho. Era todo para él. – Pensaba Al, mientras acariciaba y saboreaba esa fruta deliciosa que desde ya... era suya... toda suya y que podía poseer cuando y cuanto él quisiera.

Pero, como Alberto no sabía nada sobre la verdadera situación de Ferenixe con el “novio”. Y esto, a pesar de que Fere, a veces, había días en los que ya no le miraba a los ojos, ni le sostenía la mirada, como lo hacía antes (Fere...al perder la confianza de su madre, ahora... era espiada constantemente); para Al, era elocuente... que la estaba perdiendo. Y así, continuaron algún tiempo, más como amigos que como “novios en secreto”; viéndose poco y manifestando ese cariño, también, en muy en pocas y muy cortas oportunidades. La seriedad desplegada por Fere, hacia todo lo concerniente con Al; y al trato directo con este, era otro síntoma preocupante, para esa relación, aparentemente moribunda; ya era concluyente... que el amor de los dos se estaba enfriando cada día más, por culpa y de pronto, para provecho de los dos. De ese amor desesperado puro y tierno que existió, desde luego, más sentido por Al... que por Fere; ya parecía que no quedaba ni la sombra. (Pensaba Alberto, sin saber que Ferenixe había quedado esperando, al ser violada por el “novio”; y que éste, le echaba la culpa a su amante Alberto, sí... así, tan duramente, se lo manifestaba.) Entonces, Ferenixe... solo se dedicó (pensaba Alberto, que como hacen los arácnidos hembras con sus machos) a envolverlo, tenerlo, sentirlo, gozarlo y sacrificarlo. Además, sucedió algo todavía más preocupante: Ferenixe, estaba sintiendo una especie de “repudio”, hacia Alberto (el horror... la tragedia...); pues, ya le fastidiaba, hasta la Colonia que éste usaba.

Un día Alber, seguramente para establecer de una vez por todas, la política a seguir... en el futuro, con su Ferenixe adorada; con relación, al raro, comportamiento de su amada; resuelve, concertar con ella una especie de tregua; y redefinir, el comportamiento de los dos, en el porvenir. Para bien o, para mal, en cuanto a su relación sentimental; Al, tenía que saber, nuevamente, a que atenerse. Para el efecto, y sobretodo para establecer una nueva etapa en la vida de los dos, como pareja de enamorados (en el secreto compartido.) Al, le escribió la siguiente nota:

Ferenixe, mi “novia en secreto”:

Debido, a que según tú misma me has manifestado; que muy pocas veces lees mis cartas (por largas) y además, y sobretodo, a que tengo que tomar próximamente, importantes disposiciones, a cerca de mi vida. Tengo que molestarte y rogarte que nuevamente renovemos nuestro pacto de “amor en secreto”, con el fin de saber, cómo exactamente estamos actuando en la vida. Si lo estamos haciendo en serio o por llevarnos la idea. Si nuestro proceder tiene futuro o si por el contrario estamos perdiendo el tiempo. Luego, mi Fere adorada, sé que (por ser una deportista consumada) no te gusta leer y supongo que tampoco escribir; pero hoy te ruego, una corta respuesta al resumen de mis amables y cariñosos poemas y además a mis cartas, que en el fondo han sido manifestaciones de amor, quejas y peticiones. Ahora, considerando, que yo siempre he cumplido en la mejor forma posible a mi promesa de quererte y comportarme como tal; te suplico que hoy hagas lo mismo y te apersones del papel aceptado libremente por ti, de ser mi “novia en secreto”; ya que con pena, he visto que por ejemplo: tu comportamiento de hoy, no es consecuente con tu aceptación voluntaria de ayer. Té manifiesto además que la toma de decisiones, para nada, afectará tu libertad, la cual nunca será perjudicada. Ni aún, si algún día nos casamos.

Por lo tanto mi cielo, yo te imploro des contestación por escrito a esta misiva, respondiendo afirmativa o negativamente, las siguientes preguntas; y solo, si tu quieres, puedes ampliar, por aparte, las respuestas:

1. Ferenixe, quieres, si o no, continuar siendo mi “novia en secreto”. Si así lo quieres, que sea con todas las consecuencias que esto implica.
2. Quieres, si o no, que siga viviendo cerca de ti, o, prefieres que sea lejos.
3. Quieres, si o no, continuar recibiendo mis besos y caricias íntimas en la forma como ha venido ocurriendo.
4. Quieres, si o no, continuar viéndome y sosteniendo una amistad aparente y/o, un amor, en el secreto compartido.
5. Si así lo quieres, que sea con todas las consecuencias que esto implica.
6. Te comprometes, si o no, a actuar en consecuencia, siendo por lo menos, amable y cariñosa conmigo, permitiendo que te visite de cuando en cuando y/o, te acompañe esporádicamente al Colegio, desde y hasta, una cuadra más allá del puente.
7. Si así lo quieres, que sea con todas las consecuencias que esto implica.

Gracias mi vida, te aseguro que de ser positivas la mayoría de tus respuestas, las tendré en cuenta, respetaré y seguiré al pié de la letra. En la seguridad, de que nunca te arrepentirás de la toma de decisiones que hoy hagas.

Tuyo eternamente, tu “novio secreto”: Alberto


La carta anterior, desde luego que fue contestada por Ferenixe, en forma positiva. Suceso que proporcionó a Al, una alegría y una seguridad, indescriptibles. De suceso en suceso, las cosas se iban desarrollando (y mejorando) en la vida de los dos excepcionales enamorados. Ya se idolatraban y se veían más frecuentemente. (Casi todos los días, Fere, ahora, visitaba a Alberto, antes de irse para el Colegio y a veces – para hacer sus tareas - después de clases. Fere, al ver a Alberto en solo pantaloneta, se excitaba, pues era su cuerpo musculoso; lo que más le agradaba, fuera de su muy bien dotado sexo. Entonces también para excitar, a Alberto , se subía a la escalera de la biblioteca - para buscar algo – y aprovechar para mostrarle sus espectaculares piernas y sus largos, muy blancos y gruesos muslos atléticos de colegiala, o sea, con solo las medias blancas, a veces sin nada mas que la falda del uniforme, oportunidad que Al, aprovechaba, para sacarle fotos... muchas fotos; que guardaría celosamente, como un trofeo, en su caja fuerte.) Así, los – largos - ratos dedicados a las caricias; eran más intensos e íntimos, que nunca. Hasta que Alber, le llegó nuevamente y sin oposición alguna, a succionar sus senos y sobre todo, que iba directamente, al sexo a su amada.

Acto que desde el momento en que Fere, se lo permitió; se constituyó, como en un delicioso vicio; tan necesario para Al, como la comida. Alber, ya no visitaba a Fere; pues, sucedía lo contrario. Y, en esas repetidas visitas de Fere, a Al; éste aprovechaba, para primero (entre largos besos, contra la puerta, ya cerrada, del mini apartamento de Al; sin dejarla entrar primero); quitarle la gran capa roja del uniforme; y después de besarla intensa y largamente; pasar a su biblioteca y recostarla en un espacioso sofá de cuero; y empezar muy lentamente a acalorarla; mejor, a despertar poco a poco, en su cuerpo, la pasión sexual; estampándole otros prolongados besos; entrelazando sus lenguas por otro largo... largo rato. Luego, meter y sacar con ritmo, la lengua entre la boca de su Fere. Mientras ella, le apretaba (casi rasguñándole) sus pectorales y sus trapecios, al igual que sus fuertes brazos y antebrazos; en fin cada músculo de su cuerpo, era también besado y acariciado con pasión por la ardiente Ferenixe.

Posteriormente... sintiéndola excitada y muy mojada; y... ya con poca resistencia, pasar a desapuntarle su blusa blanca, y el sostén; subirle la falda plisada, a cuadros rojos, del uniforme; quitarle el protector negro; y la delgada pantaleta (o, sea, semi-desnudarla de la cintura para abajo, dejándole solo la falda de colegiala... que así... lo excitaba todavía más) y acariciar... todo... parte, por parte, su esplendoroso cuerpo de reina... con suaves, constantes y energizantes masajes sexuales; primero y luego... vencida toda resistencia, demostrada, por la flojedad de sus muslos; y por que estos ya se le abrían solos (sin voluntad); entonces, al notar a Ferenixe, como desgonzada de la ansiedad sexual; entonces y solo entonces... sí, proceder a separarle bien, y a abrirle bien sus pliegues sexuales – labios bulbares, mayores y menores - y succionarle con toda la fuerza... de que era capas; ya directamente, su sexo vaginal; luego, de tragar sus jugos sexuales; pasar a lamer su clítoris – como a una fresa - con la lengua y con los dientes frontales, en forma muy, muy suave, rítmica y vibratoria (pronunciando seguida y constantemente, la consonante erre; como el ruido de un carro) acción que alternaba, con una muy, muy fuerte succión vaginal, para tragar del líquido de los dioses... su jugo sexual, adicional; hasta sentirla jadear, casi llorar de la emoción; entonces, Fere, ya muy, muy humedecida y temblorosa, casi congestionada; Alberto, pasar solo así, (ya lista, muy humedecida y muy caliente) a poseerla, penetrándola de una; en una faena muy profesional. Es como cuando el toro pasa a la pica, para desangrarse y no morir de la rabia.

Poseerla, no una, sino varias veces; introduciéndole su miembro viril bien erecto, con fuerza o, con suavidad, con violentos y con muy suaves movimientos de cintura y continuos meneos circulatorios, haciendo de tal himeneo, algo así como una danza; luego, con sus cuerpos entrelazados y el de ella totalmente penetrado; descansar un poco, para continuar de nuevo tal relación repetida varias veces; hasta la mutua saciedad sexual; hasta ya no poder hacerlo más. Sin embargo... todavía volvían a permanecer con sus bocas unidas y sus lenguas entrelazadas, por muy largo tiempo; para volver a repetirlo por última vez. (Al, tomaba diariamente -Extract LiquidPanax Ginseng- fuera de su constante práctica del yoga; que le proporcionaba dureza y longevidad sexual.) Luego Al, viéndola ya reposada y tranquila, la vestía (el mismo, como si fuese una muñeca) y la acompañaba a la puerta del mini-apartamento; donde, la despedía con otro largo muy largo beso.



El Futuro faetonita.

*Nota:

No hay que tener miedo, de la pobreza, ni del destierro, ni de la cárcel, ni de la muerte... De lo que sí, hay que tener miedo, es del propio miedo. Epíteto.

Sin embrago, en los momentos de catástrofe inminente; en cuestión de segundos; naves más pequeñas, izarán a todos los seres humanos que existan (en ese momento) sobre el planeta Faetón. (miles de millones; por lo menos dos) tendrán dificultades para resistir, las altas presiones de los rayos arriba aludidos. Estos rayos (el azul y el rayo rosa); expuestos, sobre toda la superficie del planeta; a la vez, son como “imanes eléctricos”; que puestos sobre “Faetón”; recogen todo lo (espiritualmente) adaptado; pero, los no adaptados, sencillamente, no suben; en otras palabras no (o, no pueden, por no poseer altísimas vibraciones de amor) son atraídos por las naves. En este caso, además de tener que quedarse, unos serán destruidos (desintegrados) al instante; por las altas presiones a que fueron sometidos. Sin contar, la catástrofe, que en ese momento, les está rodeando. Luego de ser izados por las naves (de menor magnitud), la parte (tercera) de la humanidad que haya sido succionada; o, izada, será llevada a las gigantescas “Naves Nodrizas”; donde habitarán por un tiempo.

En forma general: Están construidas, con materiales electrostáticos y termos-táticos; sobre una base de aislantes anticorrosivos; de tal manera, que en ellas, nada se deshace; además, son insonoras y prácticamente levitan; finalmente, por algunos instantes, son invisibles; o, sea que ínter-dimensionan; y sus movimientos en el aire, no guardan los cánones de la aeronáutica común; prácticamente poseen un “vuelo” propio. Sus colores, varían de acuerdo a tres principales polaridades; que hacen girar, (durante su traslado) su campo magnético vertiginosamente. Estos colores (principalmente: Del azul, rojo y amarillo; al negro y blanco) se ven; porque, sus altas frecuencias “ionizan” la atmósfera, produciendo a la vez una intensa iluminación. Así, cuando empieza la aceleración del campo magnético de la nave, ésta se torna roja; y al ir aumentando su aceleración, la nave, se envuelve en un color verde, amarillo, blanco, azul, anaranjado, violeta y ultravioleta y luego (al ojo humano) se vuelve invisible. Otra característica en estas “naves”; es que ellas, no viajan, solo se *sitúan; se ínter-dimensionan. De tal forma, que si (en su raudo “vuelo”) nosotros pudiéramos seguirlas; llegaría un instante, en que ellas, se desaparecerían de nuestra vista.

Nota:

*Aquí, recordemos (en Gen. 2:15) que Dios, toma a Adán y lo pone en el “Paraíso de las Delicias”.

Para orientarse, en el firmamento, utilizan las líneas matemáticas de cada planeta (La Tierra, por ejemplo, tiene 1.270 líneas magnéticas por Ctm²); De tal manera, que cuando están en la Tierra; ubican el sentido de su polaridad y el campo de fuerza de atracción y de repulsión; según la dirección en que deseen viajar. Una nave de éstas, funciona con un sistema de propulsión magnético; usando adecuadamente la polaridad (para ellos, positiva = Kum; negativa = Kenio.); mediante mecanismos específicos, cambian la polaridad en el momento debido, ejerciendo una fuerza, del tipo Kenio, contraria a la fuerza Kum. Entonces la nave se suspende en el aire, de manera ingrávida. Para elevarse, se agrega mayor intensidad a la energía Kenio; siendo rechazada por la energía gravitatoria del planeta visitado; haciendo elevar a la nave.

Las naves nodrizas. Ya han llegado a la tierra, provenientes de galaxias muy lejanas; algunas de ellas (las naves) diseñadas y construidas en nuestro propio “sistema solar”; Son como grandes ciudades, de hasta 20 millones de seres; tienen la forma de un gran edificio (torre delgada; o, de cigarro) de 2.5 Klmtrs.; de largo. Tienen varios compartimientos, destacándose el de entrada; en donde poseen, una zona inmunológica; de análisis metabólico y otros procesos de acostumbramiento al nuevo ambiente, con altos niveles de frecuencia vibratoria. Luego de este comportamiento de (sellado) y ya dentro de la nave propiamente dicha; hay grandes corredores (con ventilación renovable) que conducen a espacios definidos. En la zona central de las naves, se ubica la zona de mando. Otros, de los aparatos de interés, son los separadores acústicos y térmicos; así como las zonas de mantenimiento, de proceso de alimentos, recreación y estudio.

En la parte superior de las naves, se encuentra lo que se llama “casquete reticular”; por el cual, la nave se adapta a todo tipo de vibraciones y de presiones exteriores. En la plataforma superior, se encuentran los llamados niveles y conexos de mando; conectados a las zonas de servicios generales; en donde se hallan los garajes de las naves exploradoras; o de defensa (platillos.) En esta misma zona, se encuentra el anillo de enlace; que permite el desplazamiento (más rápido) de la nave; ya que esta se puede dividir en dos (de 40 pisos c/u.) Pues, en realidad; se trata, de naves construidas por compartimientos (hasta 10); independientes que se puede unir; para formar una sola nave (en sus viajes intergalácticos); que integrada, generalmente (como un satélite) se queda en la parte exterior del planeta visitado; pero, que sin embargo, puede entrar en él (como sería, en el caso de la “Gran Evacuación” que se avecina.) Luego se encuentra la plataforma de servicios principales y en la parte inferior la plataforma de servicios secundarios (en donde, están las áreas de mantenimiento y de combustible.) Además la nave, tiene un campo de protección basándose en rayos cósmicos, procesados eléctricamente; que le brindan un campo de protección (generalmente, contra meteoritos) en sus “vuelos” intergalácticos.



La seguridad.

Entonces Alberto, después de tan deliciosa visita; ya muy tranquilo y descansado sexualmente, se apoltrona en su biblioteca y prende su TV., y se propone a ver el siguiente programa de la Tierra; relacionado con el futuro, el cual, le llama poderosamente la atención; casualmente por ser originado en la época en que el amor de su vida Fere... nació en Faetón.


El locutor lo presentaba así:


Así como los griegos de la antigüedad, acudían al oráculo de "Delfos", para conocer el futuro: - Nosotros también tenemos oráculos, fundamentados en el conocimiento, en la informática y la sistémica, en el poder de la información y principalmente, en la estadística. Isaac Asimov, Carl Sagan, John Naisbith y Alvin Tofler; se han valido de estas herramientas, para acercarnos al futuro, en toda su complejidad. - Los cambios del mundo nos tienen verdaderamente perplejos, pero aún así; los cambios que vendrán, serán aún mucho más fascinantes; de esto, podemos estar seguros. Ya que, se aproxima, un verdadero cambio de poder en toda la dimensión humana; lo nunca antes visto, será visible muy pronto. – Entonces (los salvos, los transformados) del conocimiento, pasarán al cognocimiento de las cosas de Dios; lo cual, los sacará de la obscuridad espiritual. Entonces y solo entonces, sí que veremos (y/o, volveremos a ver) la “Luz Espiritual”.

Los años inmediatos, en el siglo pasado; y los efectuados hasta el 2006; o sea, hace catorce años; vieron el nacimiento de grandes inventos para la vida diaria. - Los aviones de pasajeros, más ahorrativos en combustible, más rápidos, silenciosos y confortables. Hoy con viajes directos intercontinentales. La fibra óptica revolucionará, la telefonía; los micro-conductores con pleno desarrollo, el video teléfono se popularizará; la cibernética inteligente, la robótica y la informática, iniciarán su período de difusión plena; Las ciencias biogenéticas, casi harán milagros; los climas podrán ser predecibles, con máximo acertamiento, gracias a los satélites. Los ciegos verán y los sordos oirán, los mudos hablarán, los paralíticos andarán; gracias a la nueva era tecnológica. Los robots serán muy diferentes a los que soñaron nuestros abuelos; el poder del conocimiento avanzará en un siglo, el doble que en toda la historia humana. - Las traslaciones, no tripuladas, realizadas en grandes naves espaciales y además, las sondas espaciales, cambiarán a la Astronomía y aún, a la Radioastronomía. El desarrollo de la “teoría cuántica” mediante súper-aceleradores de materia; harán posible, un sin número de inventos materiales, hoy asombrosos, mañana muy comunes. -

Se harán, pues, proezas científicas, con la ayuda de aparatos de tecnología muy avanzada. - El Radiotelescopio, instalado en Puerto Rico, aumentará la visión del hombre, frente al espacio exterior; la robótica industrial, se ha desarrollado más en el Japón que en ninguna otra parte del mundo. Sin embargo, las fábricas totalmente robotizadas, no serán todavía la tendencia universal; por motivos económicos. Solo fue hasta finales del Siglo XX; que la robótica llegó a sus momentos culminantes, como factor esencial de la producción; los plásticos continuarán ganando a los metales, los procesos de producción industrial masiva; el vidrio continuará siendo insustituible en ciertas áreas, aún a pesar de que este Siglo XXI, seguirá siendo, el siglo del plástico y sus derivados. La robótica en el Japón interviene en el 34% del proceso industrial; pero, en el ámbito mundial, no es superior al 16%; y, en los países pobres menor al 10%. Habrá ciudades fabriles que, ya no contaminarán a la atmósfera. La Luna, será fuente de riquezas minerales explotables; para el 2080; o, al final del presente siglo; en el cual dominarán las fábricas, con edificios inteligentes y no contaminantes con el CO2, para evitar seguir con el calentamiento global de la atmósfera terrestre. -

- La “Usonía” del Arquitecto F. Ll. Wright, será un hecho, debido a las Broadacre Citys diseminadas hoy por todos los EE.UU. Cumpliéndose asió, el sueño del genio americano, de unir el campo con la ciudad, mediante construcciones de altas (torres) espaciadas C/u., por varios kilómetros de follaje, donde se realizarán las actividades agropecuarias.

Gracias a nuevos materiales de construcción, basados en aceros carbonados que como “bulbos”, se entrelazan y forman una estructura muy resistente y liviana. Ancladas (estas “torres”) en epicentros C/u., formadas por núcleos, de más de 500 pisos, utilizarán sus bases, para el funcionamiento del comercio, zonas sociales y demás necesidades colectivas; dejando solo para residir y descansar, a los pisos altos de cada “torre” hermética e inteligente que funcionará con aire acondicionado. Circundando, los sistemas nuclearios de construcción, con redes viales de cinco carriles por sentido y mallas de alta seguridad, mediante garitas instaladas por todo el recorrido vial que circunvalarán cada sistema. Sistema que se repetirá cada 25 Klmtrs. , Sucesivamente y en forma concéntrica, formado, con el tiempo, verdaderos enjambres, en lo que se constituirá: “En las modernas Ciudades-estado”. - La ciencia médica, está claro, que también sufrirá avances espectaculares, en el área de los transplantes; - La cirugía láser; la tomografía y la radiología, en general. Y la “máxima educación”, incluirá, sobre todo, nuevas técnicas revolucionarias, en la modalidad didáctica; ésta, tenderá a hacerse más especializada y privada. Ocurrirá, también, la “medicina espacial”, y ésta, revolucionará la vida del hombre. - Luego, con el estudio y desarrollo de la “física cuántica”; el cerebro humano, será muy conocido, aún, hasta límites inesperados, para la teoría científica. Posteriormente, es muy seguro, que ocurrirá: la inevitable “Era de la Mente”, en la que, solo, los seres transformados, sobrevivirán y se dedicarán en lo exclusivo, a las cuestiones del pensamiento avanzado, hasta llegar a la Ínter-dimensional, como lo hicieron, otros seres que nos precedieron y que hoy se encuentran en el futuro. (*Algunos apartes, tomados del “Maravilloso Siglo XXI” de Juan Cruz Ramírez Ed. Iberoamericana.)


La gran sorpresa,

Y, sucedió de todo... lo habido y por haber; ya que, Ferenixe, resultó embarazada, pero, supuestamente, de su novio. (Así se lo manifestó a su prima.) Suceso que constituía la tapa de todo lo ocurrido y por ocurrir.

La impactante noticia al principio Al, no la pudo asimilar y se dedicó a tomar trago y a hundirse en su pena; creyendo ya perdida a su Ferenixe adorada.

La siguiente poesía lo dice todo:


Ferenixe... Ferenix... Fere... Fe...

Y hoy lo sé, que tú mi Fere de niña... amada,
Y hoy lo sé, que tú mi Fere de mujer... deseada,
Y hoy lo sé, que tú mi Fere de madre... adorada,
Y lo sé, que mañana como abuela... idolatrada.

Será que té ya perdí... en esta vida y a pesar de todo,
Ferenixe, te perdí a pesar del amor que pude, yo te di,
Desde que te hallé, no me imaginé, acaso llegué tarde a ti,
Pero, cómo es que haya pasado todo... así y de ese modo.

Siempre has sido y tú lo serás mi Fere... mi inspiración,
Desde el día en el que te vi, tú mi Fere... tú mi adoración,
Pero a pesar de todo tú mi Fere... tú mi fuente de expresión,
Te transformaste tú mi Fere... en mi sin explicación.

Hoy yo quiero asimilar que ya no puedo amarte así,
Hoy sin embargo yo quiero saber el porqué todo fue así,
Hoy yo quiero saber el cómo amarte ahora y siempre a vos,
Hoy yo quiero saber porqué tú ya no eres una sino dos.

Pero... conformarme ya me tocó, sino morir,
Para entender, que tengo ya que vivir sin ti,
Es una ley de la vida que siendo de otro tú,
Tengo que respetarlo, así me vaya yo a morir.

Pero mi Fere... cómo es que no te puedo ya tener,
Si nunca te he tenido mi vida... vaya yo a saber,
Pero si fue todo en mi imaginación... que se vaya,
Y para siempre... de una vez... o voy a enloquecer. A.G.


Y de pronto, para colmo de males, otra vez, volvieron a enfriarse las cosas, con Fere, así continuó esta relación por un tiempo, en el cual, los dos ya “amantes” en el secreto compartido, parecían, entre ellos, como amigos. Hasta el punto, de que, al no repetirse la frecuencia de los besos y caricias; sobretodo, aquellas aplicadas directamente en el sexo erógeno de su amada... de comportamiento exótico. Desde entonces solo, ya de vez en cuando, mientras esporádicamente se encontraban en el “Gran Salón de Juegos”; su saludo, consistía en un pequeño roce de las manos de Al, en las mejillas de su adorada Ferenixe. Y eso era todo... Hasta tal punto de que a veces cuando ella (extrañamente) le demoraba con sus manos, la mano de Al, en sus mejillas, Al, sorprendido las quitaba presuroso. Al, ya no sabia como proceder con su adorada. La amaba más que nunca, pero no se atrevía siquiera, a buscar con su boca, aunque fuese únicamente, las mejillas de su Fere. Se estaba volviendo un amor sentido, casi que de lejos, telepático y netamente “Platónico”. Lo que verdaderamente mantenía este amor, eran las miradas y sonrisas amorosas (coquetas) de su Fere... adorada.

Y además, de vez en cuando, Ferenixe le permitía a Al, que se le sentara muy junto, cuando ella se encontraba jugando al “Bingo”; (si, estaba segura de que no era espiada; pues, Fere en el fondo, ahora estaba protegiendo a Alberto.) Circunstancia que Al, aprovechaba para arrimarse bien y muy pegadito a ella... muy pegadito, al cuerpo de su Fere adorada; hecho que era aceptado coquetamente por su amada; Todo, acompañado por ligeros roces de piel, miradas enamoradas y suaves caricias, de Al, en los cachetes encendidos y a ratos humedecidos pero siempre receptivos de Ferenixe. Lo cual, constituía la prueba de que el amor de verdad, solo requiere de dos personas que se amen, así sea de lejos, pero, que se amen intensamente y con paciencia; debido a las circunstancias adversas o no, pero así sentidas y así vividas. No era para extrañarse, entonces, que un amor así, se desarrolle como pueda, y de que éste, no se detiene ante nada; sino que sigue y sigue, sin cesar y sin pasmarse, y mucho menos, acabarse. Esto, por el contrario, es lo que lo hace fuerte y capaz de vencer a todas las pruebas que se le pongan por delante. Esa noche Al, le regaló una copia del seriado de las última poesías inspiradas en ella... el amor de su vida. Para ser aplicado en su nueva novela “Berenice” Acto, que Fere, agradece halagada y con suma... dulzura.


Ferenixe...

Tus ojos de niña

Tu mi Fere, que será lo que tienes al mirar,
Cuando dejas a tus ojos siquiera parpadear,
De lejos o de cerca, como trasciende tu mirar,
Es que se siente la fuerza de ese, tu mirar.

Soy tu esclavo, por la forma de mirar, de tus ojos,
Porque mi amor, son tan bellos y como crecen al mirar,
Pues, es la fuerza del amor expresado en esos ojos,
Que me pierdo y desfallezco... solo por ese, tu mirar.

Detrás de esas pestañas mi vida, se te escapa,
El amor que trasciende desde muy hondo,
Por la fuerza de tu mirar que atrapa,
Todo por el camino y hasta el fondo.

Es la intensidad del amor sentido que al mirar,
Desde muy en el fondo de tu corazón se te escapa,
También la energía que trasciende de tus ojos al mirar,
Y mi ser atento y listo al sentirla... es así como la atrapa.

Y me devuelve la alegría a mi alma en pena,
Por esos tu ojos que irradian fuerza a mi corazón,
Con solo verlos me hacen olvidar mi pena,
Que derriten y trastornan todo mi armazón.

Y sé, que tú le sabes, que dominas el arte de mirar,
Para hacerme mi amor, así tu esclavo... solo tuyo,
Pero, alegre y necesitado de tu forma de mirar,
Y así te busco y te hallo, para estar al lado tuyo.

Y cuando los dejas, tú mirar... me llenan y cautivan,
Para jamás soltarme y así, hacerme el recluso de tu mirar,
Los dejas traslucir tu amor... y es a mí a quien quieren mirar,
Al final del sendero, me atrapan esos ojos tuyos al mirar.

Desespero, cuando hoy escondido y sin tu mirar
Solo en la separación a mi alma ya le toca escapar
Y concertar una cita con la tuya para podernos amar
Ya que solo de lejos puedo verte y con esto a mi alma consolar

Me has condenado a la distancia para desde allí poderte amar
Ya no puedo ni siquiera poder tu rostro con mis manos rozar
Un castigo que me das por el solo hecho de a tu semblante adorar
Y si no tienes compasión... por lo menos rompe el hechizo de tu mirar

Soy tuyo y tú también lo sabes ya, pero a ti no me dejas ni mirar
Tu carita de ángel y tus ojos de muñeca que a los míos vas a eclipsar
Entonces, mi amor, porqué tanta frialdad esquivándote a mi mirar
No dando paso a mis caricias, las cuales, hasta ya te van a fastidiar

Solo y sin razón, a los rincones me has empujado, ya sin tu mirar
En la oscuridad de tu ausencia mi amor, me has olvidado ya
Solo sin ti, siento que te he perdido y no lo puedo soportar
Entonces recurro a soñar contigo, lo que hoy no me puedes prohibir

Madrugo a buscarte en la distancia y mi corazón no te puede hallar
Te amo de día, de noche, te amo a todas horas sin poderte ya mirar
Y salgo de mí, cuando al final del sendero, te logro mirar
Cruel destino tú a mi alma das, por el solo hecho de amarte sin cesar.

Mi adorada, que hice de malo que ya no quieres ni a tus ojos dejar mirar
Recurro a ti por los rincones, a ver si me das la limosna de tu mirar
Pero a veces, solo recibo de ti una mirada, de quien se siente fastidiar
Mi Fere... del alma... ¿Por qué tanto castigo y con tanta crueldad? A.G.


Pero, hasta que pasó: Un día Al, creyó, no aguantar más los desplantes que le propinaba su Fere, adorada... Los dardos de Fere, llenos de veneno y los desprecios hacia Al, fueron tantos, que ya del amor entre ellos, solo quedó algo, como un recuerdo... La risa de Ferenixe que a Al, a veces le parecía hasta burlona, hizo ver imposible, un cambio en ella. Fueron ineficaces sus cartas, versos y misivas, todo resultó en vano (ya... Fere.. dizque: no los leía siquiera... solo lo hacía su hermanita de 9 años; quien además los guardaba entre sus juguetes. Por lo menos eso fue lo que le hizo creer la niña, seguramente motivada por la madre.) Pudo más la sinrazón que la razón. El dominio de lo carnal sobre lo espiritual. Ganó, finalmente, al parecer, el “novio” de toda la vida de Fere. Además, como si todo fuese poco; la tormenta sentimental se desencadenó, con el hecho, de conocerse la noticia de que Ferenixe, esperaba un hijo de su “novio”. Tenía tres meses de embarazo cuando se descubrió todo ( y tal hecho, sí era cierto, había que estudiarlo detenidamente por confuso.)

Pero, antes que todo y a pesar de todo... como lo primero para la vida de Al, era el amor de su Ferenixe adorada; Al, le escribió la siguiente carta (como siempre, muy diplomática y disimulada):


Ferenixe, mi “novia en secreto”; primero que todo, yo te ruego leer esta carta hasta el final, ya veras porque:

Ya nuestro amor (secreto) contra viento y marea, llegó a más de tres meses (90 días y/o un cuarto de año) Por esto te escribo esta misiva, para hacer un recuento de este amor (secreto) intenso (para mí único) diferente y muy hondo. Gracias cielo mío, por los instantes de alegría dados a mi corazón; gracias por dejarte amar; gracias por esas miradas tiernas que a veces tú me diste, gracias por dejarte acariciar y por regalarme esos tiernos besos, dados en tus mejillas, y en tu boca y en todo tu ser, mi dueña hermosa... Gracias por ser mi novia (en secreto.) Gracias por tanta alegría y consuelo a este tu esclavo que aunque no siendo joven, te quiso, te quiere y te querrá, más que a nadie en el mundo. Pero, mi dueña, eso, que últimamente y a veces, llamaste ser “intenso,” cuando traté de obtener de ti una caricia; por favor, si a ti te pareció intensa, una actitud así, es por (sobretodo, y de unos días para acá) lo muy poco que tú me das. Fere mía, niña de mi corazón, mi amor (secreto) es comparable a un recipiente, que como el que a mí me tocó en suerte (que para ti resultó grande.) Se llena con muy poco, pero requiere, desesperadamente, estar siempre lleno de amor y de cariño; expresado, aunque sea con una sola y muy pequeña caricia, por lo menos una vez en el día; dada, recibida y sentida de verdad, y/o, manifestado con una esquela:


“Novios en secreto”.

Es muchas veces el estado preferido,
De los enamorados de verdad,
Lejos mi vida, del mundanal ruido,
Los chismes, cuentos y maldad.

Por ello, mi vida, soy feliz de lo ocurrido,
Pues, sé lo intenso de este amor de verdad,
Que se manifiesta así, sin aún haberse ido,
Y es capas de aguantar a toda tempestad.

El amor secreto despierta lo aguerrido,
De un corazón luchando con sinceridad,
Cada gesto, cada palabra es y ha sido,
Partido de un amor secreto y sin maldad.

Son gestos y miradas, lo más querido,
Ahora, cuando así se siente de verdad,
Porque, éste amor, es como pocos, sufrido,
Pero que aún así,, se es, feliz y de verdad.

Mas, no se arrepiente nunca de lo sucedido,
No dejando pasar este amor del secreto por piedad,
Al silencio, que mata todo, sin aún haberse ido,
Porque, es preferible ya el dulce secreto compartido.

Acostumbra, mi vida, a quien lo ha sufrido,
Pero aún hace falta, se extraña y sin saciedad,
Llena la imaginación del ser que lo ha sentido,
Hasta hacer realidad tanta espontaneidad.

Sufriendo, por quien aún no se ha ido,
Por sentirlo así, mi amor, y de verdad,
Hasta reventar mi Fere, por lo sufrido,
Y así, no obstante, realizarlo sin maldad.

Sin otro camino que el secreto compartido,
El amor secreto se acrecienta de verdad,
Y ya entonces todo sentimiento es preferido,
Porque tal acción no conoce la soledad.

Tuyo en la distancia.

Es sentirte lejos, pero cerca de ti mi vida,
Y es mejor mil veces, a no sentirte nunca,
Por la crueldad que acompañó tu ida,
Ya sin sentir por mí el amor nunca.

Es que no puedo ya dejar de amarte mi vida,
Ya sé que no puedo olvidarte nunca,
Soy tuyo y tú lo sabes mi dueña... mi vida,
Y lo ignoras sin piedad, no sentida nunca.

Es mi amor por ti hoy más fuerte que mi vida,
Y a pesar de todo mi Fere, no te dejaré nunca,
Yo mi amor, sin ti mi vida, ya no tengo vida,
Prefiero morir, desfallecer a dejarte nunca.

Hoy, así este amor me cause dolor y mi ida,
Yo prefiero, sentirlo que olvidarlo nunca,
Por lo maravilloso que es sentirlo mi vida,
Representada en ti, para no olvidarte nunca.

Pero aún cómplices del gran secreto, mi vida,
De este amor sentido en silencio y sin acabar nunca,
Es aún mejor que renunciar a ti, por una situación pérfida
Y vivir sin el secreto de esta ilusión que mi alma busca.

Y al citarte mi dueña, en mis sueños, tú mi vida,
Te aseguro que nos encontraremos allí sin temor,
Amor onírico, allí, te encuentro a ti mi vida,
Todas mis noches. Y poder amarte como nunca.


Así, que fuimos “novios en secreto”, que con una mirada, con una expresión cariñosa, o, por lo menos, con una amable carta, y/o, preferible, con un tierno y ardiente beso, estampado aunque sea en una de tus mejillas o, en tu boca de muñeca hermosa. Yo mi vida, la verdad, no persigo de ti, solo tu cuerpo ; persigo tu corazón y lo persigo con tenacidad y afán. Lo quiero conquistar. Pero, también mi corazón (perdóname) está hambriento de esos besos, dados con ternura en tu carita y en tu cuerpo de niña hermosa... porque fueron con cariño de verdad. Y está (lo confieso) sediento de cariño ardiente y de poseer para siempre una persona a quien expresarlo... Luego, mi niña preciosa, porqué negarlo, esas caricias íntimas, fueron todo, lo que de ti obtuve y un consuelo para mí, más de lo deseado y merecido. Fueron mi vida, y mi alimento sentimental; y sobre todo, fueron mi esperanza y mi fantasía. Mi tesoro, yo no entiendo el porqué algunas veces me los niegas. Si alguna vez, en tu vida, sentiste la necesidad de ayudar a alguien y ese alguien, según me lo demostraste siempre, al parecer, fui yo. Pero, tú (a veces) no cumples con ese muy sagrado rito de amor, o, si lo haces, es de mala gana y con una actitud de rechazo y peor aún de fastidio. Esto mi Fere adorada, a pesar de saber y estar segura de que por ti yo me muero. A pesar de saber que con esas caricias, me estabas dando ánimo e ilusión para soportarlo todo. Que sin ti, mi vida, ya no es vida. Matando entonces (al rechazarme) a este amor naciente, y matándome a mí (sentimentalmente.) Y sí, mi amor, yo por ti, me convertí en “limosnero” de amor; de esos besos y caricias necesitadas desesperadamente, para hallar tu carita y tu cuerpo inocentes. Criatura mía... y así... reventándome de amor y de pasión, estamparlos amorosa y ardorosamente en tu rostro y en tu cuerpo hermosos; estamparlos en el tuyo, solo en el tuyo (yo no busco, ni buscaré jamás, otra.) Eres tú, o no será nadie más. Quien, desde ahora y en el futuro, ocupa y ocupará mi corazón. Seré pues, toda la vida, ladrón de tus besos y si por ellos me muero, que así sea. Yo te necesito, como las abejas al néctar de las flores. Yo necesito el néctar y el aroma de tu cuerpo. Tú has sido, desde el momento en el que te conocí, parte vital de mi existencia. Y tú sabes, que definitivamente, sin ti me muero. Y ya que puedo hacer, así, me enamoré de ti; siendo esta situación, hoy, ya irreversible (así es la vida, uno se enamora, no de quien debe, por ser la persona adecuada, sino simplemente, lo hace, sin saber porqué ni cómo.) Ahora, es, esto (tu amor) o nada y la nada, para mí: es la muerte sentimental; por lo menos por ahora, mientras llega la otra muerte; aquella, por la que te deje descansar, este ser “intenso” que te adora; o sea, mientras me llega la hora, única, que es capaz de interrumpir mi amor y mi pasión por ti.

Mi dueña hermosa, aprendí a amarte así, (con todos los problemas causados por tu “amor” de siempre.) Pero, así es que te tengo, o, de lo contrario te pierdo. Entonces, hoy solo te pido un poco de cariño, solo, tu buena disposición, al recibir las actualmente, muy cortas y muy pocas caricias que te doy (o que tú, ahora permites que te dé.) Con la esperanza de que algún día, aprendieras y te acostumbraras a quererme; para entonces, hacerme muy feliz. Puede, que de pronto, estimes que yo sea mayor para ti; pero mi Ferenixe adorada, esta situación, es relativa, porque te quiero con amor del bueno, soy todo tuyo entero y no te comparto, ni te compartiré en mi corazón, con nadie. Vivo por y para ti, mi amor. Fui para ti un ser, que te quiso de verdad; como nadie te ha querido, ni te querrá. Esto lo comprobarás, cuando yo, ya me haya ido. Ferenixe de mi corazón, así que ya cumplidos más de 90 días de un amor diferente (por lo menos, por mí, de verdad sentido.) Es necesario que vivamos este amor, mientras me marcho, siquiera un poco más intensamente, solo un poco. Y ya al estar este ser “intenso”, como tú me llamas, al estar muy lejos, déjame expresártelo, por lo menos por escrito. Pero por favor léeme. ¿Es esto mucho pedir? El amor, es entre dos, mi vida. No permitas que muera, muriendo sentimentalmente yo con él, sálvalo y sálvame a mí también. Ayúdame una vez más. ¿Qué trabajo te cuesta? Hazlo por compasión, si así lo prefieres, pero hazlo, tú mi dueña. No te pongas esquiva a mis caricias; ahora (después de todo por lo que hemos pasado) hechas hoy imaginariamente, y próximamente, solo si tu quieres, aunque sea por carta. Con la ternura que transmite mi corazón de ti enamorado; luego, contéstalas y sobre todo te ruego: léelas. Será un amor, sin nada material, como es el que más dura. No como el amor carnal, que dura solo un tiempo, que no es constante y fiel y que sobretodo, una vez conseguido todo lo carnal, se evapora como el agua.

Es que, mi dueña, yo te quiero, pero, para todo el resto que me queda ya de vida, que de pronto, sea corto y así, no te ponga más pereque; por ser (según tú) muy intenso. Ni tampoco, te dé más pereza (son tus dardos.) Porque yo te quiero, de verdad, con un amor distinto, con ternura y con amor puro (y sí, mi amor, descuida que ya pronto, se te acabará tu pereza al verme, simplemente, porque ya no me verás más.) Resulta mi dueña, que el amor así sentido, entre los dos, es tan verdadero que aún no estando juntos, y próximamente ya muy lejos el uno del otro, se sigue sintiendo en el corazón hasta que duele el pecho. Acompaña, gratifica y engrandece a quien así lo siente. Es el único amor que te hace digno y que a los ojos de Dios, inmortaliza. Es el deseo de sacrificio y de ayuda, al ser querido; ese que nunca se olvida, en ningún instante, ni situación alguna. Es el que ofrece mucho a cambio de nada. Es esa clase de amor, que por ti siento, solo por ti, mi Ferenixe del alma. ¡Es ese amor, que me hace doler el corazón, de tanto amar! Porque, te amo despierto, te amo dormido, te amo a todas horas; y ya solo sé que te amo; próximamente será en la distancia, sin retribución alguna. Ya ni siquiera, entonces, por el simple roce de tu piel, o, detrás de un beso en tus mejillas, en tu boca y en todo tu cuerpo. Así, sencillamente, te amo. Es por eso, que ayer te lo transmití, con la sencillez de un ligero roce, en alguna parte de tu cuerpo; con esa ardorosa energía pura, salida de mi alma de ti enamorada; y así, inexplicablemente, a veces temes aceptarla. Pero mi Fere, en adelante, de pronto, solo por escrito; déjala entrar en tu cuerpo, no la rehuyas; es el alimento del que se nutren los corazones verdaderamente enamorados. De esto la historia literaria, tú lo sabes, está llena. Lo demás, es sexo, de ese pasajero, vulgar y fatuo, que desde luego no es constante y que requiere estar cambiando de pareja. ¡No, eso no es lo que persigo de ti! Aunque puedo, desde luego, sentirlo y como es natural, me abstengo de percibir esa clase de amor, por respeto a Dios y a tu Ser, que es el que me inspira tal sentimiento puro. Tú mi Fere, eres y has sido la fuente de este amor que experimento por ti, solo por ti mi Ferenixe adorada. Es que, para mí, los seres como tú, son para quererlos y amarlos con la fuerza del amor puro. Y el amor puro, no se expresa de otra forma, sino con una fuerza y un cariño igualmente puro. Eso fue, además, lo que me provocaron tus ojos angelicales y tiernos de niña enamorada. Así quiero irme, con ese recuerdo tuyo, sin expresiones de rechazo ni de pereza y/o, de fastidio. Y así (amorosamente) como quiero, tenerte en mi memoria para siempre.

Lágrimas

Son lágrimas, aquellas que brotan
Por ti mi amor y mi alma silente
Son las que persisten al brotar
Lágrimas de dolor y celos insuficientes
Salen por tu indiferencia así al brotar

Aquellas que se vierten por este amor intenso
Que hieren a mi alma enamorada y doliente
Cuando tú con otro andas de la mano y de frente
Sin importarte nada, este mi dolor intenso
Así lo siento, aunque solo tú no mientes

Será por tu corazón ingrato, por no saber
Ignorar que por ti yo muero y a mi alma matas
Es precisamente cuando te paseas sin yo saber
Ignorando mi llanto por tu ausencia tú tardas
Y luego, sales con el otro que tienes en tú haber

Son el único alto y caro precio de este amor
Que por ti siento y que me mata con dolor
Pero que solo pasa cuando me hace feliz
Lo hace intensamente, de verdad y con amor
Así soy, desde el instante en el que te vi mi amor. A.G.


Es más, (Ferenixe) mi vida, si por obtener tu amor, por un solo instante, lo perdiera todo, solo el hecho de haberte tenido, aunque fuese por ese instante, me has hecho y en efecto lo hizo, el ser más feliz que sobre la Tierra haya existido. Entonces, no perdí nada, solo gané un instante de tu amor; suficiente, como para llenar a mi corazón por ti sediento. Fue, la esperanza de que tu fueras para siempre mía, esa que llenó mi vida, y así por ello he ganado, por la experiencia conseguida, al obtener de ti, aunque fuese por un instante, tan solo, una mirada de ti enamorada, una caricia y la intención de un beso. Porque vales para mí esto y muchos más. Cualquier sacrificio por grande que este sea, por intentar obtener tu amor siquiera por un instante, me permitió ganar para mí, la gloria, de haberte tenido en mi corazón y esta vez, para toda mi existencia. Así me cueste hasta la vida, la que diera por ti, gustoso.

Ahora, solo me resta, desear en adelante lo mejor para los dos. Tu amor escondido; o, tu “novio secreto”, y próximamente en la distancia. Tu amor guardado que te quiere de verdad, cada día más, desde el primer instante en el que te vi; porque la verdad, tú me gustaste, mucho, pero mucho, cuando te conocí. (Lo recuerdas jugando Bingo.) Y después, así te amé, y fue tal aquel impacto amoroso que te esperaré, por siempre. Además, hoy solo me resta desearte muchos éxitos, en tus otras relaciones sentimentales. Si, ello fue lo que tú quisiste y escogiste para ti. Es todo tuyo, es tu futuro y tu provenir, a lo cual tienes pleno derecho. Que seas feliz y que Dios quiera, nunca, pero nunca, pases, por lo que a mí me tocó pasar, para poder amarte, y demostrártelo, aunque fuese por un instante. Es muy duro, pero, así te quiero y a pesar de todo ya no se puede hacer nada para evitarlo. Porque te confieso, que ya lo he intentado, pero todo ha sido en vano. El estar en otros brazos, solo me produjo más deseo de ti. Tu perfume, tu química, me enloquece y me hace falta, tanto que ya no podría vivir sin ti, aunque fuese teniéndote en la oscuridad y en la distancia, pero teniéndote. Es ya que hoy solo vivo, por el solo hecho de saber que te tengo. Y claro que me hace falta verte, aunque sea de lejos, pero con esto me conformo, con saber que todavía te tengo y tendré. Y a propósito, te lo ruego, regálame un retrato tuyo, para llevarlo en mi alma eternamente. Finalmente, discúlpame, por lo extenso de esta carta (que será la última, sí tú así lo prefieres.)

Tuyo por siempre, te adora y estará eternamente, en la oscuridad de la esperanza y en la distancia que al parecer ya nos separará y que al juzgar, será cada día más grande: Alberto.

Mellín, Mayo 23 de 2020

P.D. 1.- Ferenixe : novia mía (en secreto.)

Niña mía, olvidaba decirte que en adelante para no cansarte tanto, para no ser tan intenso; mis cartas, se limitarán a fechas tales como los once de cada mes; en la cual cumplimos meses de habernos hecho novios (en secreto.) Solo te pido entonces, tengas paciencia, por largas que resulten, pues cada mes es mucho lo que tengo para comentarte. Tu sabes, que escribir, es uno de los medios que tengo para estar en contacto directo contigo y lo debo aprovechar. Luego, como me gustaría que tú hicieras lo mismo y me escribieras aunque fueran unas pocas líneas. Muy pronto te enviaré mi nueva dirección. Es más, si no contestas (mis cartas) pensaré, que ya no quieres nada, absolutamente nada de mí. Además, mi Fere del alma, si tú, por alguna circunstancia ya no quieres continuar más, con esta relación secreta, házmelo saber y lo prefiero por escrito. De lo contrario asumiré que prefieres continuar conmigo; así, la lucha sea ardua, con el fin de que algún día, cuando tú hayas triunfado en la vida y hayas aprendido a diferenciar las clases de amor existentes. Harás, entonces, en tu corazón un lugar para el amor mío y así, lo nuestro triunfará y nos casaremos, para ser al fin los dos muy felices. Dios quiera, que no tengas que padecer y sufrir en la vida, para al fin reconocerlo; coronando entonces, un amor intenso y arduo como pocos. Yo por mi parte, aguantaré hasta donde Dios me lo permita. Porque, te juro que no fue fácil verte (besando) con otro y sobretodo, saber (próximamente, a la distancia) que eres de otro. Que tus besos y caricias son de otro. Hoy, ya solo sé (tú, me lo hiciste ver, con tu actitud.) Que la distancia me hará fuerte en tal situación y eso (la distancia) será lo único que al parecer nos separará y te aseguro que será mucha. Pero hoy, sin embargo, solo tienes que insinuarlo y reversaré las decisiones que de lo contrario (al quedarme) me volverían loco de amor por ti, al ver que sin remedio no soy correspondido; ya que tus desplantes, tus desprecios y tus dardos venenosos de ahora, son insoportables algunas veces, para este amor puro y sincero que poco a poco estas matando.

Aunque, todo absolutamente todo, hasta ahora, te lo he soportado, menos la indiferencia tuya a mis caricias (y próximamente a la ausencia de tus cartas.) Porque, por ellas, tú sabes muy bien mi corazón es que late. Igualmente... sí hoy, tu indiferencia cariñosa; y próximamente expresada por escrito, se hace una costumbre (como hoy ya está sucediendo, al vernos.) Igual asumiré que ya no quieres de mi nada, que sobro y que debo, así me muera, dejarte sola con tu destino y con tu amor de siempre... No sin desearte que seas muy feliz. Pero, al retirarme dejarte muy claro que lo hago, debido a la fuerte presión que la situación impone, pero que te esperaré toda mi vida (aunque esté muy lejos) con la esperanza de serte, por lo menos útil cuando lo necesites; y cuando ya estés sola; entonces, si tú lo quieres y si yo estoy vivo, nos casaremos (por poder) y así, te amaré espiritual y carnalmente, por el resto que me quede de vida.

P.D. 2.- Mi Fere adorada:

Por este mes, solo me resta comentarte lo feliz que me has hecho, a pesar de los momentos de indiferencia y de soledad, al esperar que siquiera me regalaras un instante de tu vida, solo para mí. Por favor otórgame en el futuro, más tiempo, y ahora, próximamente, por escrito (cada mes.) Para estar en la distancia los dos juntos y departir las cosas triviales de la vida, porque esa es la vida. Está compuesta por esos detalles que quisiera compartir contigo. En adelante, solo a través de cartas. Pero hoy por favor mi vida, tú no sigas dándome las migajas de tus momentos y vivencias, dame algo más de ti. Aún cuando, sé que mi papel, es el de ser tu “Novio Secreto”, creo merecer, por lo menos la intención y el calor de tus caricias; así sean furtivas, escasas, y aún de papel; pero sentidas de verdad por ti. Y/o, en el futuro, por medio de una Carta de Amor. No quiero más, expresiones de desinterés, aburrimiento e indiferencia y de fastidio, como cuando a veces, solo besaba ardientemente tus mejillas, o tu cuello, hombros, manos y/o en tus adorables brazos, o, tus largos y sedosos cabellos. En fin, todo tu cuerpo. Yo mi Vero adorada, en ese momento, en ese mini instante, lo estaba haciendo, con amor y mi cuerpo estaba atento a tus expresiones; tanto de aceptación como de rechazo. Por lo tanto, las detectaba al instante y sufría, si eran negativas. Siendo mi gozo, indescriptible, cuando detectaba que tú mi Fere del alma, las sentías y las aceptabas... ¿Mi vida, que te cuesta tolerarlas hoy en vivo y próximamente por escrito, si me quieres, aunque sea un poco? ; ¿Es acaso, que es mucho pedir? Mi “amor secreto”, y sí, yo estoy loco por ti; por eso, perdóname, si a veces fui intenso, pero comprende que tus momentos eran a veces tan pocos, que yo los sentía intensamente y que por esto, todo mi ser, se estremecía, al solo contacto de tu piel, y/o, al rozarte... Por eso, te pido me perdones y comprendas mi proceder al besarte, al acariciarte, al tocarte; al poseerte en las oportunidades que me diste, para poder realizar (ese rito diario) el amor intenso, ese que siento por ti, y te lo juro, solo por ti. A veces me pregunto: ¿Si esta (ser tú, la única) no fuese la causa de todo?


Ferenixe :

Sesenta días de ser novios en secreto.

Gracias mi Fere del alma, mi Fere adorada, sesenta días de dicha
Al saberte en secreto mía, en un secreto intenso, sentido y compartido
En los cuales, cada día, trajo el afán, de un beso dado en tus mejillas
Un amor así, que lucha sin cesar por seguir, y seguir a pesar de todo.

Cada día, lleno de esperanza, fue alborada de un amor puro, sin fin
Que floreció, del simple deseo de ayuda y que lucha contra todo
Que dio como resultado, un amor intenso que yo sé que siento
Un amor, que tú mi vida, sin darte cuenta, también ya tú sientes.

Amor secreto, cada instante, por encima de todo, contra todo
Amor puro, sin besos, tal como lo pediste, y que resultó eterno.
Un amor que lo da todo a cambio de nada, un amor verdadero
Eso fue mi Fere adorada, lo que entre los dos a la postre nació.

Nació del deseo de ayuda y de cariño, nació de la necesidad de amar
Nació del intenso latir del corazón desesperado que pide por quien vivir
Por eso, gracias mi reina y dueña de este corazón que por ti late
Así es y así será, aunque yo esté lejos. Y así será hasta que deje de latir.

Y fue, en el secreto compartido, de dos vidas que se unieron
Por el secreto, de un amor eterno y puro y sincero como pocos
Así que, mi Vero adorada, será una llama que ya nadie, ni tú, ni yo
Podrá apagar, por que arderá por siempre, testificando que existió.

Como fiel testigo de un amor puro y sincero, como pocos los de hoy día
Paladín de un amor que en estos días ya no existe, ni existirá ya nunca
Un amor que se alimenta en escondrijos, con la intención de un beso
Y busca, en los rincones, la satisfacción del cumplir de ese solo beso.

Un amor, en el secreto compartido, sentido y expresado en tus mejillas
Que ya lo sientes y siempre te estremeces por calor de aquel solo beso
Gracias mi Fere, por haberme permitido la sola expresión de un beso
Sentirme así el dueño de tu vida, aunque sea por un instante.

Solo te pido, ser únicamente yo, el dueño de la intención del beso.
Ser yo quien te ayude a sentir y a expresar tan inmenso cariño
Vivido y sentido como pocos, por ser tan puro y tan sincero
Mi Fere, te juro que ya no podría vivir sin tu amor, así sentido.

Obsesión, amor intenso, como se llame, para mí es amor sincero
Que no puede ya vivir sin sentirlo aunque sea en secreto
Aunque sea en la distancia que nos separa, o por lo que sea
Pero que jamás se deja y dejará de sentir en el fondo del alma. A.G.


Tú mi Ferenixe:

Tú mi Fere, con ojos de muñeca encantadora,
Bella moña hecha mujercita que mi alma añora,
Cuéntame, dime hasta cuando mi ser te espera,
Pues solo y en el secreto escondido desespero.

Tú mi amor, llegaste para mí en la aurora,
Del rescate de mi soledad eres la autora,
Y a veces te ríes y te burlas de mí por tesonero,
Termina pues mi Fere, lo que iniciaste o desespero.

Niña mía que entre tus juguetes me atesoras,
Y al considerarme tuyo, me haces lo que otrora,
Hacías con tus juguetes al no dejarlos enteros,
Los destruías sin compasión, por eso más te quiero.

Niña de mis sueños y mi dueña, sé pronto mi señora,
Acompaña el resto de mis días, tú mi seductora,
No sigas rompiéndome el corazón, déjalo entero,
Que ya muy pronto seré esclavo tuyo por tesonero.

Niña de mi corazón, sé mía con un beso ahora,
No alargues más el camino a lo que mi ser añora,
Sé buena y hazme caso, tú la niña que más quiero,
No me dejes más en el rincón de tu canastero.

No me archives tú mi niña, ven y sácame ahora,
No me dejes más en la oscuridad de la aurora,
Hasta que salga por completo el Sol, yo te espero,
Allí donde me dejaste, siempre tú lo que más quiero.

Pero feliz de ser algo en tu vida, niña que mi ser añora,
Nuca olvides de sacarme del escondite, pues estoy en mora,
Acuérdate siempre de mí, tú mi ser y mi dueña, tú mi Fere,
Allí donde me dejaste, por ser tu secreto, yo desespero.

No cambies tan de pronto y sé mi señora,
Trueca conmigo, te lo ruego y hazlo ahora,
O de pronto, ya no dejas nada, por que desespero,
Tú mi Fere... porque será que tanto te quiero.

Cielo mío, mi Fere adorada, tú mi alma ensoñadora,
Acuérdate de mí que estoy en tu juguetería amañada,
Ven y juega con migo que estoy en tu canastero,
Pues, tu silencio es mortal, para lo que yo espero.

Ven y sácame de allí, donde me dejaste otrora,
Acuérdate de mí, niña hermosa y encantadora,
Trátame si quieres como peluche de tu juguetero,
Y háblame antes de mandarme al peluquero.

Deja por lo menos a tus ojos verme ahora,
Es tan bellos que por ellos mi alma añora,
No mires más hacia abajo porque desespero,
Solo ver la luz de esos ojos es lo que más quiero.

No olvides que tú iniciaste todo... eres su autora,
Rompe ya tu silencio mi amor y hazlo ahora,
De lo contrario, sufriré por ti, lo que más quiero,
Que de pronto, se sale y traga tu cuerpo entero. A.G.

Mi Fere adorada, recibe ahora, esta misiva y por favor léela dos veces; ya que es, o puede ser, una despedida; (si así tú lo quieres) luego, despreocúpate ya no recibirás otras de mi parte. Esta, será entonces la última. Que Dios te bendiga y te guarde. Gracias por todo, tú mi vida y mi tesoro. Han sido ya 90 días de dicha... y sufrimiento, pero así es la vida, que le vamos a hacer. El destino hoy nos fue adverso, y solo por eso, te repito que no busco ni buscaré otra. Yo no tengo afán, te esperaré. Porque sé que estamos destinados, ya en el futuro, el uno para el otro; circunstancia que la vida nos dirá, si fue así. Hoy no lo sabemos ni tu ni yo, pero, mañana, se puede confirmar esta profecía (pedida además, en oración.) Hoy, solo me resta, desearte muchos éxitos en tu vida y que corones tus estudios, para que seas la persona que todos quisiéramos que fueses. Adiós, y/o, hasta luego, esto depende de ti, mi amor; cuídate mucho, y que seas muy feliz...

3. - P.D.

Ferenixe: muy pronto, si quieres y resuelves escribirme, sería un acto que me llenaría de alegría, al saber que no aré en el desierto, ni sembré en el mar, solo que los tiempos fueron diferentes, pero que los protagonistas, si fueron esos, los correctos. Tus cartas serán para mí la esperanza de toda una vida o, lo que me quede de ella. Y recuerda siempre que cuando quieras mirar hacia atrás, en el transcurso de tu vida, yo allí estaré, esperándote para consolarte (o para felicitarte.) Que no estarás nunca sola, ya que siempre, siempre tú me tendrás ( en las buenas y en las malas) así yo esté ya muy lejos. Que el amor que me inspiraste fue puro y por lo tanto eterno. Por último, quiero manifestarte que la decisión de irme lejos de ti, no fue fácil y que hoy, creo fue lo mejor para los dos, por lo menos, para darnos una tregua y así, saber sí, de verdad nos queremos el uno al otro, como para casarnos y ser así, y solo así, muy, pero muy felices. Ya que si alguna vez aceptaste ser mi “novia en secreto”, no fue para otra cosa que para conocernos mejor, con miras al futuro compartido entre los dos. De esto estoy seguro, por tu personalidad, por tus deseos de triunfar y tu lucha por salir adelante, lo cual es muy meritorio en una niña de tu edad. Que ya piensa en serio sobre su porvenir. Por lo cual te felicito, recordando que esto será definitivo, en el desarrollo de tu personalidad y de tu ser, frentero y decidido. Por tu carácter fuerte, tu don de mando y tu decisión de triunfo en la vida, pase lo que pase... Y sea lo que sea... Así te vi, así te conocí y así me enamoré de ti.

P.D. 4

Mi Fere de alma, resumiendo, es mi deseo que tú seas muy feliz, quiero además que no me olvides; y hoy, sobretodo, quiero que me tengas siempre en cuenta, en tus decisiones y sobre todo que siempre pienses que estoy y estaré siempre a tu lado, para aconsejarte, consolarte y si tu quieres para amarte. Que ahora, el poco tiempo que nos queda, para estar juntos, lo pasemos bien, sin desprecios, ni expresiones de aburrimiento y de pereza y mucho menos de fastidio. Ya que deseo, de ti, llevar el mejor de los recuerdos, al haberte conocido y sobretodo, que lo disfrutemos, hasta el último minuto; claro que, como tú dices, sin ser intenso. Mi vida y mi dueña, quiero además, llevar la mejor de las imágenes de ti, para guardarlas en mi corazón y recordarlas eternamente. Perdóname por los desfases de comportamiento sostenidos por mí, al salirme de casillas; que no fueron pocos, y además, te agradezco mucho, él haberlos soportado con paciencia; otra característica de tu personalidad avasalladora y tierna a la vez. Te agradezco, toda tu bondad y comprensión, demostrada, con este ser que te amó, te ama y te amará siempre; quien, de pronto, no tiene la culpa de ser así; ya que fui un consentido de la vida, que llegó tarde a la tuya; pero que me supiste siempre soportar, con dulzura y que pacientemente, también, me supiste poner en mi lugar, casi en una forma didáctica. Hoy ya lo veo todo más claro, una vez considerada la verdad y solo, al ver él sin remedio de las cosas. Ya no hay más que hacer, sino, conformarme, con lo de ti obtenido (que fue mucho...) y saber que gracias a Dios todavía te tengo y ojalá que así sea por siempre. Yo por mi parte de esto estoy seguro, además que tu me tuviste, me tienes y me tendrás, todo lo que me quede de vida.



Tú mi vida

Tú mi vida, vida que sin ti no es vida,
Cómo hacer para que vuelva a ser,
Tú mi vida, vida que contigo es vida,
Cómo te amo y como goza hoy todo mi ser.

Porque yo soy tuyo, solo tuyo,
Y ya, de nadie más volveré a ser,
Sábelo bien mi en flor capullo,
Tú mi amada, mi adorada y mi ser.

Ya nunca, nunca seré de otra,
Solo tú ocupas y ocupará mi ser,
Jamás nadie entrará a la costra,
De las heridas por ti dejadas en mi ser.

Ferenixe, tú mi bien amada y mi adorada,
Llegaste a mí, para quedarte en mi ser,
Y ya nunca saldrás de mí, aunque yo sea nada,
Porque cosas como tú, han llenado todo mi ser.

No podré jamás recuperarme de las heridas,
Dejadas por ti, en mi alma y en todo mi ser,
Cuando no te tengo, mi vida es muy sufrida,
Sé que no aguantará vivir sin ti, tú mi ser.

Tu indiferencia

Es tu indiferencia, a veces sentida hacia mí,
Lo que me mata y es tu falta de cariño,
Pero mi amor, es que me acostumbré a ti,
Y sufro, y sufro por ti,, como un niño.

Jamás pensé en lo que me embarqué,
Que fuera así con todo este sufrir,
Tampoco imaginé el gozo que experimenté,
El día en el que por fin te supe descubrir.

Y luego cuando tu mejilla con amor besé,
Solo ese día sé que suspendió mi sufrir,
Para ya nunca con otra volver, eso yo lo sé,
Ahora quiero... tus instantes... volver a vivir.

Desde ese primer instante cuando te rocé,
Al sentarte junto a mí y al “Bingo” jugar,
Cuando esa noche tú perdiste, yo por ti aposté,
Y cuando tú ganaste, me diste dinero para jugar.

Fueron esos, los primeros instantes de nuestro amor,
Vividos mi dueña, solo intensamente y hoy al recordar,
Aquellos... que tú seguramente, recuerdas sin amor,
Pero, que sabes que te sentí mía... al intentarte besar.

Morir lentamente.

Amarte así, es morir lentamente,
Mientras mi vida, con otro tú estés,
Y alargo mi agonía un instante,
Cuando la mejilla te beso do estés.

Así soy tuyo y así te quiero lo bastante,
Como para preferir morir cuando tu no estas,
Desde que la lluvia llegó, fue en un instante,
Que mis penas lavó, allí do tu estás.

Porque soy tuyo y morir prefiero lentamente,
A perderte mi amor y ya no saber tú do estas,
Te sigo y seguiré por toda mi vida do estés,
No, no puedo ya olvidarte y me muero si no estas.

Y tiemblo y vibro cuando te tengo delante,
Así no me explico tu proceder cuando tú estas,
Solo sé que te amo y que gozo cuando tú estas,
Pero cuando te vas quedo pensando, do tú estas.

Y sufro y sufro, solo por ti eternamente,
Sin dejar de pensarte ni un solo instante,
Obsesión mi vida que me lleva do tú esté,
O a la eterna gloria de amarte do estés.


Mellín, Mayo 21 de 2020

Ferenixe... tú mi Fere... hoy nuestro amor en el secreto compartido... cumple más de 100 días (casi cuatro meses y medio; o, casi medio año.) Es tan fuerte que hasta el momento, lo ha superado todo. Que dicha, para nuestros corazones, es este “noviazgo en el secreto” compartido (Platónico.) Ha vencido así, la barrera de los seis meses; o, de 1/2 año. A pesar de la incomprensión y de las críticas de la gente, que no sabe nada sobre nuestros gozos; o, aún, angustias, vividas, para guardarlo, protegerlo y superarlo.


Supervivencia...

En la barrera del tiempo, y los sueños, no existe hoy un amor así como el nuestro,
Saciado, por el espacio infinito, no existirá jamás, un amor como el nuestro.
Ni a través de valles y llanuras; porque ha resistido todo lo habido y por haber,
Y desde el gran desierto, somos por lo tanto, los amantes que nunca podrá haber.


Un amor puro y sincero que solo vive ahora, de la expresión al máximo y que así se transmite, casi telepáticamente. Así nos amamos mi Fere del alma y mi dueña hermosa. El ser consecuente con la realidad de nuestro amor... en el secreto, que nació de la necesidad de amar y ser amado y sobre todo del cariño, en el secreto compartido. Que ama solo con la imaginación e intensamente, a cambio de nada; que se contenta con una mirada, furtiva pero honda; dada y recibida con la fuerza del corazón enamorado y desde luego, asombrado, de que tal cariño puro y sincero, así, y solo así, se haya superado. Porque, cuando nuestros ojos se miran, mi Fere adorada, transmiten ese amor y por ellos se va toda la savia de la vida; por la sola intención de un beso, todo... pasa de un cuerpo a otro, como una llamarada de amor sincero, en el secreto compartido. Son flechas cargadas de amor, mi vida; las que al vernos de cuando en cuando, se acrecientan y disparan, con la constancia nuestros amantes corazones. Comunicando el destino intenso de nuestras vidas... que pide a gritos, amarnos así hasta la muerte. Es que mi Fere del alma, nuestro encuentro espiritual, no fue fortuito, fue eterno y por el resto de nuestras vidas. Es el empujar de nuestros sentimientos, por encima de nuestra existencia y de nuestros actos; que solo con nuestros corazones así enamorados, vertimos hacia el amor intenso y en el secreto compartido, todo... lo que somos capaces. Comulgando a veces, con el rito, de la sola intención de un beso, en y por los rincones; y con la complicidad e intensidad, del amor, así explotado y brotado, como un volcán, al viento tempestuoso de nuestros sentimientos. Mi amor, además, hoy, quiero reiterarte que desde ya, estoy solo, en este mundo; para amarte, protegerte y asistirte, en la medida de mis posibilidades, y que haré el mayor de los esfuerzos, para que así sea. Que pase lo que pase, sea lo que sea, nuestro amor, seguirá adelante, ya que no está supeditado a nada, ni a nadie; que vive por si mismo y se regenera solo; hoy más que nunca, cuando tú mi Fere... idolatrada, ya hoy no eres una... sino dos.

Tuyo, tu “novio en secreto” (hoy sin besos ni caricias... en la cruel distancia) que aún así, te adora:

Alberto.

Al, finalmente, al ver agotadas todas las posibilidades para alcanzar el amor definitivo de su Fere adorada; se encerró en la soledad de su apartamento, en la soledad de su biblioteca y de su vida. (Alberto, entonces, comenzó a pedir por el video–teléfono, sus avituallas.) Nunca más se le volvió a ver. Ya no salió más de su apartamento, ahora convertido, en “escondite sentimental”, situado, en los últimos pisos de una de las torres que conforma el Súper-sistema nucleario de vivienda, denominado “La Playa.” Súper-torre C. de 120 pisos del sector central del anillo principal de la Súper-ciudad de Mellín, del País, Colbia. Integrante del Grupo del Súper-continente Sur Americano. GSA.


Fere... querer verte.

Es que ni yo mismo sé el porqué te quiero,
Pero a pesar de todo y con todo... yo te quiero,
Con un gran amor... nunca por mí así sentido,
Uno que no pide nada y que ya de él nada espero.

Pasa y pasa el tiempo y solo así te sigo queriendo,
Sin importarme ya nada, la gente, los tuyos... nada,
Y ya sé que te quiero... y que por ello... sigo muriendo,
Pero que al verte revivo y que por eso voy a tu morada.

Sé también mi vida, que mi mayor ilusión diaria... es verte,
Y mirarte, sentirte y amarte así... aunque sea por un momento,
Tejiendo instante, tras instante, una intensa ilusión al verte,
Una que me hace tanta falta y que consuela este mi tormento.

Y ya que le vamos a hacer mi vida, si es así como te quiero,
Es tan grande este sentimiento que tiemblo por perderte,
Lo que sería mi fin, lo sabes muy bien, mi Fere... eso espero
Adorarte así... quererte así... y por siempre... querer verte.



Volver

Pero, por cosas extrañas de la vida, la existencia de los enamorados, no es siempre de amargura y a veces, deja espacio para la dicha. Ya que hubo en esta relación algo así como una tregua; Fere, volvió a visitar a Alberto en su apartamento, reanudándose los tiernos y prolongados besos, en las mejillas y en el cuello de la amada y se reiniciaron las miradas enamoradas. Los besos y las caricias íntimas y eróticas, y sin dejar de relacionarse sexualmente haciendo el coito, varias veces, ya como dos amantes de verdad.

Ferenixe:

Ya ves que a pesar de todo y por encima de todo; hoy cumplimos 180 días; seis meses y/o, ½ año; haciendo de lo imposible un milagro; el de haberte conocido y el de que tú mi vida, te hayas dejado por mi amar. Realizando así un amor puro y sincero como pocos; para dar esperanza a un corazón por ti enamorado hasta la locura. Dando rienda suelta a la fantasía y a la imaginación sensible y dichosa, por ser así de esa forma, tu preferido. No importando nada, ni siquiera lo que piense la gente, solo los dos, tú y yo en este mundo. Y duré (tres meses) la mitad del lapso de tiempo que hoy cumplimos para sacarte un sí, para ser “novios en secreto”. ¿Lo recuerdas? Hoy cuando nuevamente te has vuelto amorosa y tierna conmigo... Hoy cuando tus miradas reflejan el amor que tanto necesito de ti... Hoy cuando nuevamente, te dejas acariciar y besar en las mejillas y en todo tu ser, hasta tu entrega final. Reviviendo aquellos primeros instantes de amor, ofrecidos por mí al comenzar esta relación. He vuelto ilusionado a saber que aún tengo una esperanza para vivir por ti mi Fere adorada... (solo por ti.)

Tuyo: Alberto


Mi Fere...

Tú mi esperanza.

Has hecho de mi vida una esperanza,
Cuando ya cansado por ella andaba.
Y fue verte para que como una lanza,
Querer unirme solo a ti, mi bien amada.

Entonces te pienso y vivo para quererte,
Tú mi Fere, mi adoración y mi consuelo.
Es amarte así, por la gloria de tenerte,
Eso eres tú y solo tú... mi vida y mi cielo.

Gracias ni vida por dejarte amar,
Fueron días de dicha contenida.
La que brotó como el agua del mar,
por saberte mía, tú mi consentida,

Mas... sí mi amor, hoy sé que me quieres,
Y que mi dueña... sé que te hago falta.
Y así, me doy cuenta de que me prefieres,
Por que cuando no me vez... tú me atas. A.G.


Fue, algo así como una pausa, lo que sucedió entre Ferenixe y Alberto, ya que estos enamorados, desde que nuevamente empezaron a manifestarse y a corresponderse. Tanto, que ya no les importaba que los vieran entendiéndose con manifestaciones de amor. Las miradas y las sutiles caricias, surgieron como habían empezado; repentinamente, tan intensas y cariñosas como se quisiera que fuesen, por parte de los dos “amantes secretos”. Igualmente, por esta época, pasaron cosas sorprendentes, en la vida de los dos enamorados, como, por ejemplo: Las visitas de Ferenixe al apartamento sencillo de Alberto, se tornaron, de repente, más largas, comunes y frecuentes; igualmente que los besos y las caricias íntimas y la entrega sexual entre ellos, repetida una y hasta cuatro veces, en cada visita; ya como amantes verdaderos, tiernos, asiduos y sublimes. Era lógico... ya se amaban (platónicamente) y muy intensamente, realizándose el milagro, de un amor, supuestamente imposible y secreto.

Al aproximarse la fecha del cumpleaños de Ferenixe. Al, le escribe la siguiente poesía:



Ferenixe... en tus quince Octubres:

Eres Ferenixe cual pétalos de flor silvestre,
Quince adornos que engalanan a tu ser.
Y hoy en este día, espero que te lo demuestre,
Pues, estamos dichosos por acompañar a tu ser.

Porque en un día como hoy... fueron las flores,
Y en este tu día... además fueron las ilusiones.
Sabemos todos que hoy té llenas de colores,
Para alegrar y adornar por ti todas las visiones.

Así Fere.. que los cumplas muy feliz,
Que vivas mucho tiempo con bonanza.
Hoy te rodeamos y deseamos verte muy feliz,
Y que recojas lo bueno y lo mejor de tu labranza.

Cantan y danzan en este tu día... tus acuarelas,
Reales como tú y las cosas que se te parecen.
Porque las cosas como tú... son para verlas,
y guardarlas como tesoros que poco aparecen.

Que te acompañen la dicha y la felicidad,
Y que nunca te falte la amistad y el amor.
Ese que todos te brindamos con facilidad,
Por tu forma de ser... grata y llena de amor.

Eres adorable y buena como la gloria,
Como la gloria... de tenerte y de conocerte.
Felices hoy te lo decimos y tu memoria,
Guardaremos como un tesoro al conocerte.

Suelten campanas al viento por avisos anunciados,
De que hoy cumples en tu vida... quince años.
Que además, tú Ferenixe... ya no era una sino dos,
A nombre de tus seres queridos: ¡Feliz cumpleaños! A.G.

Sorpresivamente Alberto, recibe (a manera de renovación del convenio sentimental y secreto, hecho entre los dos) una corta esquela de Ferenixe en la cual, le da a entender lo que le sucedió con el “novio”; acompañada de una fotografía (ver en la portada); con motivo de haber cumplido nueve meses (3/4 año) de la realización, de la tácita aceptación; o, del hecho de “pactar” el amor, en el secreto compartido. Nota, aunque muy breve pero, muy diciente, sobre la ambigua situación sentimental entre los dos amantes; ya que todavía para Alberto, no estaba claro lo del embarazo de Ferenixe y menos claro aún, el hecho de que ella hubiese tenido relaciones sexuales, la misma noche, en la cual, él la desfloró. Fue una cuestión de principios, que Alberto nunca entendió y que calló, por el amor tan intenso, que le profesaba, a Ferenixe; amor, que desde luego, era capaz de perdonarlo todo. Alber, nunca supo; ni se preocupó por saber la verdad de lo ocurrido a Ferenixe ; a él solo le bastaba, por cruel que esto fuese, lo que vio esa noche; y lo que vio, fue a los dos “novios” desnudos, haciendo el amor. Igualmente Fere, lo intuyó así y por esa razón, nunca quiso, ni autorizó a nadie, a que Alberto supiera la verdad. La verdad sola, estaba donde el corazón de ambos quisiese que estuviera. Además, ella siempre consideró el caso, como una violación, y por ello, al principio estuvo desilusiona de todo y de todos, hasta de la vida misma (algo muy raro en una faetoniana); definitivamente, todo se prende en esta vida:





Mellín, Septiembre 10 de 2020

Alberto:

Hola... como estás... espero que bien. El motivo de esta muy corta nota, es para decirte que te quiero... mucho... mucho y además para agradecerte el apoyo que me has ofrecido, en el estado prenatal en el que yo me encuentro. Alberto, en estos nueve meses que llevamos, supuestamente de “novios en secreto,”. O “amantes secretos”, diría yo; son pocas las palabras, pero estas... vienen del corazón y con mucho... mucho cariño. Alberto, yo de verdad sí te quiero... mucho, no sabes cuanto y nuevamente... gracias por tu amor. Alberto: mi amor, yo nunca te diré adiós... siempre, solo te diré hasta luego. Alberto: aunque las apariencias digan lo contrario, tú y solo tú, has sido el primero y el único hombre de mi vida. Tú sabes porqué..


Bueno chao...
Ate. Ferenixe.

P.D.

Alberto, recibe ésta fotografía, que me tomaron en la finca, para ti, guárdala en tú corazón, como yo te he guardado y guardaré para siempre en el mío. Sea este el recuerdo perdurable de nuestro muy loco amor... pero, que será el único para mí. Recuérdame siempre como la mujer que más te amó en la vida, que lo dio todo por ti... sin importar nada. Que fue únicamente tuya... hasta que tú y solo tú... lo quisiste. Siempre. Pero siempre tuya... hasta la muerte:

Siempre... Siempre... Siempre... Tuya... Ferenixe.





Hasta que llegó el tan esperado momento, el de la llegada del hijo de Fere. Un soleado 9 de Diciembre a las siete de la mañana, curiosamente, justo a los doce meses, de ocurrido el pacto sentimental entre los dos; de ser novios en el secreto compartido; en un amor shakespeareano. Y justo a los nueve meses de Al, haberla desflorado. Nació pues, un precioso bebé, rozadito, con los ojos hermosos de la madre. Que desde luego cautivó el corazón de Al, quien ya solo utilizaba los momentos de visita: de y a, su Fere... para alzar al niño y acariciarlo. Pero, sin embargo, Al, seguía insistiendo a su Fere del alma, con escritos y poemas. Y más, ahora que sabía que Fere, había roto toda relación con el “novio”. Ya nunca (pensaba... Al) dejaría de hacerlo, escribirle poemas y más poemas a su amada, era su descarga sentimental y suplía en parte, la falta que le hacía; la entrega y las caricias íntimas del amor más intenso y más grande de toda su vida... su Fere del alma: Estaba por encima de todo y resistía todas las pruebas habidas y por haber.

Una vez cumplida la llamada cuarentena (pos-natal.) Fere, una tarde, ya no pudo más y llena de pasión, se le entregó nuevamente a su adorado Alber. Fue una esplendorosa tarde, en la cuál, Fere, dejó de ir al Colegio y toda esa tarde fue para su Al. Fere, después de los saludos cariñosos y apasionados de siempre; mientras Alberto preparaba algo de beber y de comer en la cocina; entró y se instaló directamente en la cama de Al, se desnudó (dejándose únicamente la falda de colegiala) y le abrió las piernas insinuantemente; y Alberto, emocionado y contenido sexualmente por mucho tiempo... soltó la charola; y se desnudó en segundos y la penetró al fin, nuevamente. Todo comenzó cuando Al, al ver ese espectáculo tan cargado de erotismo: una diosa acostada en su lecho, con las piernas separadas como pidiendo algo. Al... entonces, dejándole puesta su falda de colegiala; empezó a besarla, lentamente muy lentamente por todo ese cuerpo de diosa. Por su esplendorosa espalda, sus nalgas de película (eran esplendorosas, eróticas y tremendamente voluptuosas paradas y firmes; en fin, lo más hermoso del cuerpo de Fere, que contrastaban con su cintura de avispa, ahora, un poco más crecidita, pues a pesar de haber tenido un hijo; salvo algunas pequeñas estrías, no se le notaba mucho... tal evento.)

Después del fugas primer encuentro sexual; Al, la besó por entre sus firmes y largas piernas de nadadora profesional. Alber, ahora, (como loco, por la pasión contenida) bajaba y subía su rostro; y con su boca resoplaba su acalorado aliento; por toda la monumental geografía del cuerpo de Ferenixe; aplicándole vibraciones linguales y ventosas con su boca; parte por parte, poro por poro; luego subió la cara y le besó y acarició sus voluptuosos senos (ya no los pezones; pues, estos estaban protegidos, con una especie de tela absorbente.) Luego, por la pasión contenida e indescriptible... bajo nuevamente con su lengua lista; por todo el cuerpo... le besó y le lamió los pies; y así... fue subiendo... a las pantorrillas; a las rodillas; a los muslos, tal y como lo hacia siempre que ella se lo permitía, al principio con forcejeos, cuando comenzó todo. Alberto procediendo, esta vez, rápidamente; le succionó fuertemente todo el cuerpo, incluyendo su zona erógena y sexual. Para finalmente... pasar a su vagina y absorber directa y muy fuertemente, de ese... para él, elíxir de los dioses; y luego aplicar vibraciones linguales en su clítoris. Hasta cuando Fere, jadeante y enloquecida por la pasión, ya no pudo más: Se quitó la falda de colegiala... y la tiró lejos... para quedar completamente desnuda y también como enloquecida; en segundos, se le trepó a Alberto... y ella misma, cogido de la raíz, se enterró (los 25 ctmrs., del grueso y bien desarrollado) el pene de Al, en su vagina diciendo:

Ferenixe – Ahora sí... lo quiero todo, mi amor.. Cómo me haces de falta. Todo por favor... déjamelo allá... ya... no aguantaba más, todo... ya... así, así, así... -Fere, era pasiva por naturaleza, pero en ese momento, esa tarde... al rato de sentir la lengua de Al por su sexo, se volvió activa y tomó parte en el acto sexual. Se movió, se arqueó, se meció, y se meneó en círculos. Hasta que Alberto... debido seguro, a la continencia sexual obligada por las circunstancias, y a la ahora más fuerte succión... de la vagina de su amada; que justo en esa posición, y con esos movimientos: la tremenda succión, se incrementó en un cien por cien; Alber, olvidando en ese instante, todo lo aprendido en su vida, en materia sexual; al sentirse prácticamente como ordeñado, en cada rítmico arqueo del cuerpo de Ferenixe, que ya casi le partía el pene; no aguantó más y se derramó bien adentro de su adorada Ferenixe; quien al sentir el muy fuerte chorro caliente y contenido del semen, del miembro de Alberto; en la entrada de su útero; se descargó... en una serie no interrumpida de orgasmos, que como hembra en celo, y también contenida, fueron esta vez acompañados de locos llantos, fuertes gemidos y jadeos... no interrumpidos de pasión; casi gritos de exasperación e histeria sexual; pletórica de fuerte estertores; fue como una entrega sexual de locos de atar. Estaba escrito... que los dos, habían nacido. el uno para el otro, pues empataban muy bien en todo. Esta tarde, hasta todo el planeta Faetón tembló; y la cama de Alberto se rompió.

Dentro de un buen rato... (de descanso, se bañaron con agua bien caliente) Alberto, nuevamente la arremetió sexualmente; ahora en el sofá de la biblioteca; le correspondió (dominando... ya su cuerpo) envolviéndola con su complexión atlética, para una vez culminado su acto de succión bucal; y sentir que su amada ya había soltado otros cuantos orgasmos; entonces sí, penetrarla nuevamente con fuertes movimientos rítmicos alternados, de lado a lado y en círculo, unas veces rápidas, otras despacio, muy despacio; y/o, suavemente; hasta que sitió; o, advirtió, que su adorada, soltaba más y más orgasmos, a la vez que lloraba y gemía; entonces sí... él en ese preciso instante... se eyaculó por dentro, muy adentro de la vagina de su amada; sintiendo en ese instante una fuerte, muy, muy fuerte... succión, emanada del cuerpo fenomenal de su Ferenixe del alma... succión enloquecedora y grata, que literalmente, exprimió todo el resto... del semen de su amado. Y en aquel momento de delicia y de intensa pasión; su Fere jadeante, de pasión, al sentir nuevamente el chorro de semen caliente del órgano de su Al... en la entrada de su útero, entonces, agradecida y quejándose, besaba, chupaba, apretaba y rasguñaba la fuerte zona pectoral de su amante; y lloraba finalmente de la alegría emocional que percibió; durante ese nuevo, largo y bien demorado acto sexual, que la dejaba exprimida, agotada.

Al rato lo volvieron... y lo volvieron a repetir, una y otra vez... Tal era la continencia, la dicha y la necesidad que sentían el uno por el otro. Era tal el hambre y el deseo sexuales de los dos; que a pesar de ya varios desfogues; unas veces él se ubicaba encima de Fere, y otras ella; que a la vez se movía como mecedora y como licuadora; arqueaba y arqueaba... con ritmo su cintura, alternativamente, unas veces despacio y otras rápido, como demostrando la lección aprendida de Al, quien sentía, como que le partían el miembro de la raíz; y quien, también lo hacía, cuando se encontraba encima, conectado sexualmente a ella. Mientras Al, le besa los senos, y se los acariciaba muy suavemente (o, amasaba lentamente); ella, le ayudaba, haciendo presión sobre las manos de Al; hasta que brotó con fuerza un chorro de leche (del que Al, tomó con respeto cariño y pasión) con la cual alimentaba a su hijo (o al hijo de los dos, nunca se supo.) Fue tal la locura sexual, que Al, nunca se imaginó que aquel ser faetonita, tan angelical, se portara en la cama (o, en el sofá) de esa forma. Hasta que Al, se venía... (eyaculaba) sentía tal succión (por los arqueos de la cintura de Fere) que le parecía, como una ilusión y una ficción (prácticamente como un ordeño, en toda la extensión de su largo pene; desde la raíz hasta la punta) producto de la tremenda fuerza (increíble, a pesar de haber tenido un hijo, se incremento su fuerza vaginal) del sexo y del cuerpo de su adorada. ¡No en vano Alberto, la había cultivado, esperado y aguantado tanto! Curiosamente, Ferenixe, pues, quedó como estrenando vagina, después de parir a su hijo.

Desde ese instante, dejaron de ser “novios” en secreto, para pasar a ser “amantes” en secreto. Y desde entonces, lo repetían puntual y regularizadamente (ya... solo una vez o, dos veces por semana) generalmente, cada tercer día; pues, Ferenixe se volvió una asidua visitante de su ya “amante secreto”. No era Al, quien visitaba a Fere, sino Fere, la que visitaba a su Al. a veces, quedándose a dormir con él. Que cosas y que vueltas que da la vida; pensaba Al, gratamente; sintiéndose descansado sexual y sentimentalmente. Que más le podía pedir a la vida, Alber, sabía que no le faltaba, nada, desde esa ocasión; que en adelante lo tenía todo, para que más. Solo y desde entonces Al, quería como nunca el matrimonio, con su “amante secreta”; sino que Fere, se rehusaba, diciéndole que ella era muy joven... para esas cosas, y tenía razón. Fere, era una niña, de solo, casi 16 años; habría que esperar, por lo menos... (dos años más) a sus a sus 18 años.

Con motivo de llegar ya, ese gran amor al año, Al... le escribe una nota simple, con un solo verso que comienza así:


Mi siempre idolatrada Ferenixe :


Un año...

Sí un año de tu respuesta: Un, si quiero...
Recuerdas: Ser tu “novia” en secreto
Y no he podido ni soñar en lo que espero
Mi amor, un año que fue como un reto

Y fue por tu indiferencia amorosa
La que hay veces que me invita
Y otras... cual “Ninfa” mentirosa
Que repeles a mi alma ardorosa

Un año mi Fere... de intensa lucha
Por vencer el miedo a perderte
Aceptando así esa intensa lucha
Y tu lástima... a lo que puedo ofrecerte

Pero mi amor por ti sigue creciendo
A pesar de todo lo que nos pase
Yo sigo firme en esto... que por ti siento
Me lastima... pero así espero conmigo te cases

Y sí mi Fere... hoy después de un año
Sigo esperando que pueda... poco a poco
Obtenerte... y con ello... tu amor y un ruego
El de tenerte así y nunca... nunca perderte. A.G.




Entre suspiros, miradas de cariño, entregas amorosas y locamente apasionadas, pasaba el tiempo. El bebé de Fere, crecía y crecía; era, como ver transcurrir la vida, volando y pletórica de dicha; por estar ese amor (Platónico) bien correspondido. Ya que como Fere y el “novio” se habían peleado del todo; la suavidad del carácter de Fere, era otra de sus incógnitas ya superadas y de solo recuerdo. Al pelearse definitivamente Fere, con su “novio”, todo fue color rosa, como en los cuentos y novelas que terminan bien. Resulta que además, durante una verbena, en la zonal social de la “Torre C”., en la que vivían ellos; se ganaron en un concurso de baile, un viaje con todo pago a la costa; en la cual estuvieron 5 deliciosos e inolvidables días. Evento para el cual Al, no olvidó empacar sus aditamentos eléctricos que aún conservaba, para estimular y ayudar al erotismo. Al, por la vida marital y mística con su esposa de hacía ya más de 25 años; y quizás por eso perderla, había obtenido experiencia y leído sobre sexología. Para (ayudado por el yoga) volverse todo un experto en el acto sexual, cuando la situación así lo requiriese. Además habían sido más de 20 años de completa abstinencia; que Al, había soportado, dedicado a sus hijos con infinita paciencia. Y desde luego, a quemar energía, en el deporte y en el Gimnasio.


Capítulo III

En materia de amor, demasiado es todavía poco. (Pierre A.C. de Beaumarchais.)




La Guerra. (Antecedentes)

El diario “The Times” de Londres, publicó un resumen de la situación:

- “1. Al finalizar la Gran Guerra pasada 1939-1945; surgieron dos superpotencias: Estados Unidos y la Unión Soviética. Al concluir la guerra del 1985 había, de nuevo dos Súper-potencias: Estados Unidos y la esfera de prosperidad compartida Chino-japonesa. Pero la diferencia en esta ocasión residía en el hecho de que Europa no se interpuso entre una y otra. 2. Estados Unidos y el binomio económico China-Japón, quedarían al frente, teniendo entre ellos el Océano Pacífico. Para cada uno de ellos, la cuenca del Pacífico adquiriría mayor importancia que la del Atlántico. 3. La versión más extrema de este aislacionismo naciente de Súper-potencias del Pacífico, ya fue expresada en el conocido “Memorándum de Schneider”, formulado por el general norteamericano Art Schneider, quien, se sintió profundamente disgustado, cuando el presidente norteamericano, permitió que los instintos políticos y los temores de los europeos retardaran la invasión de Alemania Oriental en 1985, acción que Schneider abrigó la esperanza de que su propio grupo de ejércitos, fuera la avanzada de la invasión del territorio enemigo”. Más tarde afirmó: - De aquí en adelante, deberíamos dejar que los europeos y los africanos se consuman en sus guerras tribales. No valdrá la vida de un solo soldado norteamericano, el evitar que ocurran esos conflictos, sobretodo, desde que estallaron las bombas en Birmingham y Minsk; han dado la prueba de que no todo el mundo quedará contaminado por una explosión aislada de artefactos nucleares. Ahora, resulta muy posible para China-Japón y Estados Unidos, establecer desde lejos una cuarentena de los países más débiles; en el caso, de que hagan sus guerras nucleares entre sí, basta sólo hacerles la advertencia de que cualquier país que lance armas atómicas, recibirá, de nosotros, una bomba de neutrones que haremos estallar mediante proyectiles balísticos directamente en sus respectivos palacios presidenciales. 4. Es por tanto importante para nosotros en el EEC procurar que la Europa que tratamos de reconstruir mediante un acuerdo de paz, no tenga propensión a caer en el riesgo de “guerras tribales”. 5. El resto de Europa, tanto al este como al oeste, vivirá en continuo temor, si las dos Alemania se reunifican, como en efecto sucedió. Porque, constituyeron entre dos una potencia europea demasiado dominante. Es por lo tanto importante que cada una de las dos Alemania sea miembro de la EEC y queden unidas en el seno de la EEC en el mismo grado en que está vinculada Francia Occidental, pero que esa unión no vaya más allá. 6. El mismo postulado tiene validez para todos los estados que antes formaron parte del bloque comunista, inclusive los estados europeos de lo que antes fue la Unión Soviética. La EEC necesita ahora extender sus límites en la forma en que en el pasado llegó a imaginarlo Charles de Gaulle. La Comunidad Económica Europea (Hoy la C. E.) debería convertirse en una Europa que se extendiera desde el Atlántico hasta los Urales. -

- Mucha gente estaba segura de que el futuro centro del mundo estaría en la esfera de la prosperidad compartida del binomio China-Japón (que incluiría Australia.) Japón se convirtió rápidamente en el país con más adelantada tecnología. China cuenta con la más numerosa fuerza laboral alfabetizada y como esta masa trabajadora está aún sujeta a salarios relativamente bajos en comparación con su talento y su empuje empresarial, posee por lo tanto la máxima capacidad de crecimiento económico a corto plazo. Australia y las islas situadas al norte de este continente se contarán entre los lugares más agradables para vivir en la época del trabajo mediante la telecomunicación. -

- La segunda gran zona importante del mundo, estaba constituida por las naciones del continente americano. El principal efecto económico de la guerra y la reconstrucción de la posguerra, había sido, como en 1941-1945; acabar con la desocupación y el subempleo. Había habido prosperidad también en América Latina y habían sido derrotados los regímenes comunistas de la región del Caribe. Fue tan popular abogar por el comunismo estilo soviético en el área del Caribe, en estos años postreros de la década de los años 1980; como lo fue abogar por el nazismo en los países continentales de Europa a fines de los años 1940; por lo menos durante un tiempo las actividades de los guerrilleros urbanos en los países de América parecieron estar declinando. - (Tomado de “La tercera Guerra Mundial del General Australiano Sir John Hackett. Edinal Ltda.)



Así las cosas, la China atacó Atómicamente las principales ciudades del mundo Occidental, obteniendo de ello una sorprendente respuesta inmediata y autónoma de rendición incondicional de los respectivos presidentes de las naciones afectadas. El mundo, entonces, ya no quería retaliaciones, ni venganzas, solo quería la paz a toda costa.

Los Akpalus.

Nota:

Esta civilización se salió de su planeta (Faetón); a conquistar el resto de los planetas de la Galaxia, entre ellos, el planeta Tierra; pues se constituyó, en la primer civilización llegada o, evacuada aquí; para enseñarnos el lenguaje universalmente divino, que es el de las matemáticas.

Desarrollaron entre tantas técnicas (como desarrollar súper-bebés; capaces de hacer cálculos más rápido que sus propias calculadoras; de memorizar, tanto sus mejores melodías y obras maestras; como toda su historia y su ciencia; de hacer – copiar - las mejores obras maestras de la pintura y de la música); además forma una muy especial de construcción, que llamaron: “Sistema de construcción en contexto bulbar; o. alveolar”; La que les permitió, finalmente, salir de su planeta (Faetón) a conquistar la Galaxia. Creían en un solo Dios (muy singular); pues, se trataba de una energía que llamaron “Energía Anímica”; que conforma más del 70% del Universo; que está en todas partes, y que lo anima a continuar con su destino. Que, así como anima al Universo; anima a todo lo viviente. Es una energía invisible, indetectable e inmaterial. Igualmente, descubrieron el “Orgón”; elemento cósmico que obra en el organismo “vivo”; como una energía biológica, que reacciona en el ser social y lo anima a hacer amistad. Pero, esa energía cósmica, también alienta la libido; procurando (si no se la controla) quemar el cerebro. Por ello, la quemaban con deporte y gimnasia. Finalmente, como sus adelantos fueron tantos y tantos; que entonces habría que hacer todo un volumen para describirlos; evoquemos este: Inventaron las luces estroboscopias (no focalizadas); capaces de iluminar grandes y aún pequeños espacios, con una misma intensidad; además, ahorradores de energía. Pero la mejor de sus hazañas fue la de poder lograr la ínter-dimensión; la trasfiguración y la auto-transportación.



Boda en Faetón...

Con el tiempo, Ferenixe y Alberto, como regalo de bodas y de despedida, pues los recién casados resolvieron Ínter-dimensionar, al planeta Tierra. Fueron invitados por el gobierno central, faetonita, a visitar otros planetas del “Sistema Solar”; entre ellos Marte; a lo cual, Alberto, como buen terrícola e hijo de periodista, a su llegada a Faetón escribió y lo publicó, una vez trascendió en el Espacio-tiempo; con su esposa; Frenixe, a su planeta de origen:


El re-encuentro.

El amor es eterno en tanto dura. (Henri F. De Régnier)


Durante el ataque nuclear simultáneo, en el Espacio-tiempo: Tanto en Faetón; como en la Tierra”; fueron afectadas las principales ciudades capitales del mundo Occidental, del V planeta “Faetón”. Entre ellas: Mellín de Colbia. Alber, sufrió quemaduras muy graves y recibió radiación, pero se salvó milagrosamente, quedando incapacitado y sin sentido por espacio de cinco años. En aquel mundo de faetonitas; donde interactuaban, imantadas figuras, de materiales más duros que el acero. Faetón, hoy el “Cinturón de Asteroides”; de la quinta órbita más alejada del Sol.

Pero, un día en el “Espacio-tiempo” de esta novela de ficción: Alber, recuperó el sentido, al oír y luego ver, una voz muy especial de mujer dueña de unos ojos, desde luego ya no tan brillantes, pero que le recordaron a su niña; su muy amada Fere. Su Ferenixe del alma. Y en efecto, era ella, su enfermera de cabecera, quien lo había estado cuidando como “enfermera” profesional, desde hacía un año, que se había de graduado. El destino los había unido nuevamente. Gracias al intenso recuerdo de Ferenixe, en la mente de Alberto; éste perdió el sentido, pero conservó sus órganos, como dormido en un prolongado “sueño llamado Ferenixse”. Fere, se encontraba reluciente, más hermosa que nunca. Desde que conoció la tragedia que envolvía a su adorado Al; Ferenixe, permaneció desde entonces a su lado día y noche. Además, solo por esta circunstancia, ella se dedicó a estudiar enfermería. Muy sorprendido y agradecido Al, inmediatamente recuperó el sentido, incursionó en la vida de Fere. Milagrosamente ilesa del bombardeo (pues, Ínter-dimensionando estaba de paseo, con su hermanita, en la finca de su abuelita y su madre) unos días antes, del funesto bombardeo. Fere, como ya sabemos, había tenido un hermoso niño, llamado también Alberto, como segundo nombre ya que el primero fue Hair (como su abuelo materno.) Y además, cosa sorprendente: Fere, también tenía una preciosa niña llamada Verónica de los Ángeles; curiosamente muy parecida a su amado Alber. Y en efecto, era de Al; pues, Fere, quedó nuevamente embarazada, después de aquellos locos, tormentosos, explosivos, adorables e, inolvidables encuentros, llenos de amor, pasión y sexo...

Fere, ya no era la niña de sus sueños; con casi 25 años; era la mujer espectacular de su vida, estaba aún más hermosa... e igual o, aún más que su cuarentona y también muy hermosa madre (la de Fere) quien lo cuidaba, mientras Fere, estaba estudiando primero y después trabajando. Entonces Al, quedó nuevamente impactado por aquella visión, que para él era, como siempre... bajada del cielo. Su impecable uniforme: blanco y corto; sus medias y zapatos blancos; su capa azul con el escudo del centro hospitalario para el cual trabajaba; la hacían ver como la reina que en realidad era; coronada con una “Toca” blanca, adornada con cinta azul y una pequeña cruz roja. Al, fue rehabilitado y reconstruido por la ciencia médica faetonita; era otro: buen mozo, representaba mucho menos años, de los que realmente tenía. El amor, fue inmediato; al fin, Ferenixe y Alberto se casaron ya en la Tierra y vivieron los siete... (Ferenixe y Alberto; Hair Alberto y Verónica de los Ángeles) muy felices, por muchos... muchos años. Además de la madre, la hermanita y la abuelita de Ferenixe; quienes también Ínter-dimensionaron, al tercer planeta; nuestra amada Tierra.


Marte, el planeta rojo. ¿Será el planeta, del “Edén” de nuestro origen?

Marte, se acerca (a la Tierra) cada 60 mil años (o, sea, a solo 5 millones de Klmtrs.; un millón de Klmtrs., menos de la distancia promedio) fecha, lapso (o, espacio de tiempo) muy importante en la “mitología”. Pues, además, esta dice, que sus habitantes (antes de desaparecer) nos visitaron, hace (precisamente) más o, menos, 60 mil años y fundaron, lo que sería el antiguo Imperio Egipcio. Además, según la “mitología sumeria” (que proclama, la existencia de una antigua civilización marciana, que viajó al planeta “La Tierra Central”... - nuestro planeta) - ; Esta sería la respuesta, al interrogante planteado por las huellas halladas sobre supuestas antiguas súper-civilizaciones ocurridas en “La Tierra” (s); (o, en las 4 tierras rocosas, de la franja de vida del sistema, o sea, en su orden con respecto a la lejanía del Sol: La de la emanación; creación; formación y activación, o sea, Venus, Tierra, Marte y Faetón – hoy, en el tiempo de “La Tierra” - el “Cinturón de Asteroides”) hace un millón de años. Es expuesta allí, con lujo de detalles. Asimismo, los hipotéticos, sobre repentinos hundimientos gigantescos de la corteza terrestre, debido a desplazamientos de las capas intercontinentales; de los cuales el “Mar Muerto”, es un reflejo de la consecuente destrucción... de Súper-ciudades; como fueron: Sodoma y Gomorra (ciudades – curiosamente - cercanas a los depósitos de petróleo más grandes del mundo.) Ocasionando, otra rareza más, a la red de ellas, sobre la muy segura supremacía extraterrena, de nuestro origen: Solo entonces, basta pensar, en que el mismo Creador, lo es (energía extra-terrenal.) El mismo, repentino, desarrollo craneal humano, sugiere (como reza “La Biblia”, en el Génesis) una intervención sobrenatural. Igualmente, las pirámides de Egipto; la Esfinge y otras asombrosas construcciones pétreas, tanto, terrestres, como submarinas, halladas (y por hallar) nos presenta, en su construcción, una ingeniería muy avanzada para la fecha, con la cual se explica su aparición.

Así pues, el planeta rojo (Marte) nos deleita la imaginación, al sus violentos huracanes y tormentas de arena, destapar y volver a tapar, las huellas de una gran súper-civilización marciana del pasado. Es así como, nuestro planeta “La Tierra Central”; y nuestra memoria genética, nos revela, Súper-capacidades y Súper-estructuras; sentidas, soñadas y hasta construidas, en el remoto pasado, quizás... no tan relativamente lejano. De igual forma, el planeta Marte, presenta, entre sus características curiosas; la muy escasa o, ninguna tenencia de campo magnético; además, similitudes e identidades, muy parecidas a las de “La Tierra” Igualmente, averiguamos, la posible existencia de agua (interna); y la explicación, a la captura de dos satélites (¿artificiales y huecos?) Fobos y Deinos; de los que, su circunvolución marciana, conforma círculos, casi perfectos; lo que constituye un misterio que la humanidad, averiguará en el presente “Siglo XXI.”; de nuestra era.


Una vez, halladas algunas respuestas...

Teóricamente, el producto o, el arquetipo hallado en el planeta marciano, tiene otra connotación; y es, la de ser la consecuencia de una "inteligencia", capaz de transportarse (Ínter-estelarmente.) Lo cual, hace suponer que tal y como ocurre en “La Tierra”; con las semillas de las plantas, que vientos atmosféricos, las llevan por todo el planeta; así mismo (en aquel tiempo) pasaría en el espacio, con los "vientos cósmicos”; que estos, a su vez, lo repitieron con la "inteligencia". – Porque, evidentemente, no se trata de que solo seamos (por nuestro tamaño físico) una pesadilla "parasitaria" del gigantesco universo y que, entonces, seamos, una parte mínima de una máxima extensión. – Así pues, nuestra semilla (la de la vida y luego, la de la vida inteligente) viajaría dentro de “asteroides” mensajeros y portadores de mundos mejores. Además, impulsada por los vientos solares, debidos a sus desfogues cíclicos. - Luego, nuestro "ente", relaciona (trasciende y une) al pasado, con el presente y con el futuro; es la relación vida y muerte, la que nos da la misma conciencia del universo; un hacer y un rehacer; un nacer y un renacer; un movimiento y un reposo. - Ya que además, todo... nos viene del futuro; siendo... nosotros el mismo, pasado. - Sin embargo, hay indicios, de que seres inteligentes de otros mundos, que viajan a "súper-velocidades" (en Megas y Gigas... Klmtrs./Seg.) que oscilan entre el millón y los 1.000 mil millones de Klmtrs./Seg. , por entre unos "tubos" llamados, "Agujeros Negros Expansivos"; con las cuales (las súper-velocidades) el tiempo, prácticamente desaparece. - Se para (por su estrecha relación con la luz, y por su velocidad con relación a la distancia a vencer) en la inmensidad de los "macro-cosmos", pero, se acelera en los "micro-cosmos"; posibilitando así, además, el paso "Ínter-dimensional". - Y que, igualmente, el tiempo, a esas súper velocidades, trasciende del pasado al futuro y viceversa. (Ver, teoría de Einstein. 1879-1955)

Que el "universo, a su vez, tenga *voluntad propia"; sería una posibilidad, que se manifiesta a los astrónomos, en sus continuas observaciones, comparadas, del "Cosmos"; en el cual, el hecho de ser finito, impulsa, la infinitud de su creador. – Sería, "como el cerebro" humano, que se guía por impulsos eléctricos" (generados electro-químicamente); igual, sucedería en el universo, ya que "vientos cósmicos" lo irrigan continuamente; procurando así, quizás, una parte de su razonamiento; o sea, el mismo de "Dios." - *Nota: Como dice Stephen William Hawking (1942), matemático y físico británico, en su "Historia del Tiempo".

Porque, una cosa es una *raza "Natural-local" y otra; una *raza con un "Ser" trascendental, capaz de trasladarse y establecerse, de y en, un planeta, a otro; o, de un sitio a otro (“en un abrir y cerrar de ojos”.) Y otra cosa, es un "Ente", capaz de hacerlo por sus propios medios; entonces, se podrá, "re-pensar"; que una forma, es la naturaleza "humana" y otra la naturaleza "divina”; fuerza; o, energía, que logra "uni-dimensionarse" y alcanzar tales proezas; luego, lo uno, sería el complemento, de lo otro, que "trasciende"; o, que viaja por el universo, tanto dimensional, como inter-dimensionalmente. Ubicando, desde luego, lo divino, en los planos superiores o, en las altas dimensiones, que solo se alcanzará, cuando seamos transformados, en seres de luz. (Apo22-14.)


Canción de fondo (propuesta) para la novela Ferenixe...

Alberto :

Me muero por suplicarte: que tú no te vayas mi vida,
Me muero por escucharte, decir las cosas que nunca digas,
Mas me callo y te marchas,
Mantengo la esperanza de ser capas algún día,
De no esconder las heridas que me duelen
Al pensar que te voy queriendo cada día un poco más;
Cuanto tiempo vamos a esperar.
Me muero por abrasarte,
Y que me abraces tan fuerte.
Me muero por divertirte
Y que me beses cuando despierte
Acomodado en tu pecho hasta que el sol aparezca
Me voy perdiendo en tu aroma,
Me voy perdiendo en tus labios,
Que se acercan susurrando,
Palabras que llegan ha este pobre corazón,
Voy sintiendo el fuego en mi interior.

CORO :

Me muero por conocerte
Saber que es lo que piensas,
Abrir todas tus puertas
Y vencer esas tormentas
Que nos quieran abatir,
Sembrar en tus ojos mi mirada,
Cantar contigo al Alba;
Besarnos hasta desgastarnos nuestros labios,
Y ver en tu rostro cada día,
Crecer esa semilla;
Crear, soñar, dejar todo surgir
Apartando el miedo a sufrir.

Ferenixe:

Me muero por explicarte,
Lo que pasa por mi mente,
Me muero por entregarte,
Y seguir siendo capas de sorprenderte,
Sentir cada día, ese flechazo al verte,
Que más dará lo que digan,
Que más dará lo que piensan,
Si estoy loca es cosa mía,
Y ahora vuelvo a mirar el mundo a mi favor,
Vuelvo a verte ya la luz del sol.

CORO2.BIS


FIN
Un sueño llamado Ferenixe...